Hitler no los pudo detener

Cuando Hitler ordenó que se acabara con los testigos de Jehová, estalló una gran persecución en Austria. Muchos terminaron en prisión, otros fueron perseguidos por la Gestapo y algunos fueron ejecutados. Lea el emocionante relato sobre la integridad que mantuvieron los cristianos durante ese turbulento período de la historia. Pida su ejemplar del Anuario de los testigos de Jehová para 1989.

En el Anuario también se incluyen los relatos históricos de la actividad de los testigos de Jehová en Barbados y Ecuador, así como un informe actualizado de su obra en todo el mundo.

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