Por qué la juventud no se obliga

HOY día la juventud es objeto de mucha censura. Pero bien puede preguntarse si el modo de ser de la juventud moderna no será sencillamente la cosecha de lo que sus padres han sembrado.

Se ve que algunos jóvenes piensan que eso es lo que sucede, juzgando por lo que se publicó en The Mirror News de Los Ángeles el 11 de enero de 1958. Fué el informe de una resolución adoptada por unos 3,400 jóvenes metodistas, que representaban mil colegios. Respondieron a la acusación de que la juventud de hoy pertenece a una “generación que a nada se obliga,” diciendo en su resolución:

“La iglesia no nos ha llamado a su Señor o a su misión de modo lo suficientemente claro como para excitar en nosotros respuesta. . . . A nosotros los estudiantes se nos ha condenado como la ‘generación que a nada se obliga.’ Admitimos la verdad de la designación, pero protestamos la implicación de que no nos obligamos porque hemos elegido hacerlo así o por indiferencia. Al contrario, en nuestra mayoría estamos profundamente preocupados acerca del poco obligarse entre nosotros y muchos de nosotros en realidad estamos buscando la causa a la cual ofrecer lealtad incondicional.”

En su resolución dijeron que la misma iglesia que les increpaba por el poco obligarse “es el mayor obstáculo al obligarse . . . y es una causa primaria de disuasión. Tal vez seamos callados y apartados, pero no se nos descarría fácilmente. La iglesia en su condición actual no es, al parecer nuestro, digna de nuestra vida.”

En verdad, ¿cómo se puede inspirar a la juventud a obligarse para con Dios cuando ve a sus líderes religiosos siguiendo un derrotero de materialismo, mezclándose en la política y estando confusos e inciertos respecto a lo que es la religión verdadera? Como predijo la Biblia, los líderes religiosos se han apartado de la fe.—Jer. 5:31, Mod; 1 Tim. 4:l.

Sin embargo, hoy en día hay un grupo de cristianos que llena los requisitos bíblicos. Es digno de que den el paso de obligarse los jóvenes si tan sólo están dispuestos a pagar el precio, ‘vender todo lo que tienen y seguir el ejemplo de Cristo Jesús.’ Si estos jóvenes están honradamente “buscando la causa a la cual ofrecer lealtad incondicional,” tarde o temprano ellos llegarán a tratar con este grupo de cristianos. El ayudarlos a hacerlo es una de las razones por las cuales se publica esta revista.