Los proclamadores del Reino informan
Los que buscan la verdad responden a la testificación informal
LA Biblia nos dice que los que son mansos como ovejas responden a la voz del Pastor Excelente. (Juan 10:27.) Así ha sucedido en muchos países, entre ellos Gran Bretaña.
◻ Por ejemplo, en 1988, precisamente antes de las Navidades, Pamela, una testigo de Jehová, contestó el teléfono de la oficina donde trabajaba y habló con un vendedor de la misma compañía en otra parte de Inglaterra. Cuando ya terminaba la conversación telefónica, él preguntó: “¿Está lista para las Navidades?”. Pamela dijo: “¡No!”. “¿No cree que está un poco atrasada?”, preguntó el vendedor. “Yo no celebro la Navidad”, contestó Pamela. Aquello le pareció extraño al hombre, quien le preguntó por qué. Pamela le dijo que era testigo de Jehová, y pasó a explicarle que en la Biblia no había ningún mandato de celebrar la fecha del nacimiento de Jesús y, además, que Jesús no había nacido el 25 de diciembre. Por otra parte, la Navidad era originalmente una celebración pagana. El vendedor dijo que todo aquello le parecía muy interesante.
Tres meses después Pamela contestó el teléfono, y la persona que llamaba dijo: “¿Recuerda que antes de las Navidades usted me habló de ellas y me dijo que no las celebraba? ¡Pues he hallado la verdad!”. Era el mismo hombre, y explicó que dos semanas después de la Navidad dos Testigos lo visitaron en su hogar. Él los invitó a entrar y empezó a recibir lecciones bíblicas. Relató que había progresado rápidamente en sus estudios. Le dijo a la muchacha con quien vivía que la vida que llevaban no agradaba a Jehová, así que se separaron, y ahora ambos asistían a las reuniones del Salón del Reino.
A fines del año aquellas dos personas fueron aceptadas como publicadores no bautizados, y a principios de 1990 se casaron. Después ambas se bautizaron. ¡Un excelente resultado de la breve testificación informal por teléfono!
◻ Jehová bendijo a otra hermana de Inglaterra que dio testimonio informal. Cuando un vendedor de seguros fue a su casa, la hermana le preguntó si quería que se le garantizara buena salud, felicidad y vida eterna. Él dijo que sí, y le preguntó de qué póliza de seguros hablaba. Cuando, con la Biblia, se le mostró la promesa divina de vida eterna en un Paraíso en la Tierra, aceptó un ejemplar del libro Usted puede vivir para siempre en el paraíso en la Tierra y lo leyó todo en una noche. Cuando volvió a visitar a la hermana, le dijo que la información era maravillosa... ¡que solo quisiera tener fe para creer en ella! La hermana le explicó que tenía que estudiar la Biblia y asistir a las reuniones del Salón del Reino. Se hicieron arreglos para que estudiara la Biblia, y empezó a asistir a las reuniones. En el otoño de aquel mismo año se bautizó. Tan solo un año después se casó con la hija de la hermana que le había testificado originalmente. “¡Así que mediante la testificación informal —dice la hermana— conseguí tanto un hermano como un yerno!”
Es un hecho que los que buscan la verdad responden cuando se les comunican las verdades bíblicas mediante la testificación informal. Como dijo Jesús, sus ovejas escuchan su voz.