Se combaten acusaciones falsas en Francia
RECIENTEMENTE los testigos de Jehová de Francia fueron objeto de un aluvión de acusaciones falsas. Aprovechando los trágicos acontecimientos acaecidos en Europa y Japón en los que estaban implicadas algunas sectas religiosas, los medios de comunicación difundieron información tergiversada sobre los Testigos. Se les representó equivocadamente como una de las sectas más extendidas y peligrosas.
Los testigos de Jehová intentaron aclarar el equívoco publicando un tratado que respondía a preguntas como: ¿Quiénes son los testigos de Jehová? ¿Son cristianos? ¿Aceptan tratamiento médico? ¿Por qué van de casa en casa? ¿Cómo se financia su obra? ¿Cómo benefician los testigos de Jehová a la comunidad?
Este informativo tratado en francés llevaba por título: Lo que usted debe saber acerca de los testigos de Jehová. Se organizó una campaña para hacérselo llegar a la mayor cantidad de personas posible. Desde el 13 de mayo hasta el 9 de junio de 1996 se distribuyeron más de nueve millones de estos impresos.
El tratado impresionó a muchas personas, incluso a algunas autoridades. “Las críticas dirigidas contra los testigos de Jehová me indignan profundamente —escribió un parlamentario regional después de leer el tratado—. He comprobado una y otra vez el cariz filantrópico y altruista de su obra.” En respuesta al tratado, un parlamentario europeo escribió: “La mayoría de la gente sabe distinguir muy bien entre el grupo cristiano al que ustedes pertenecen y las sectas peligrosas”.
En Bretaña un Testigo ofreció el tratado a un sacerdote, que lo aceptó sin vacilación. “Les encomio por lo que hacen”, dijo el sacerdote. Además añadió: “Animo a mis feligreses a que los inviten a sus hogares y les ofrezcan una taza de café. Pueden decir a los que encuentren que han estado en mi casa. También deseo expresarles que me gusta leer sus publicaciones”.
Después de recibir el tratado, un protestante de Alsacia escribió a la Sociedad Watch Tower y pidió un estudio bíblico. “Habiendo perdido toda confianza en mi parroquia —escribió—, procuro comenzar de nuevo mi vida espiritual.” A pesar de las acusaciones falsas que en ocasiones se levantan contra los testigos de Jehová de Francia, como de hecho pasa en todo el mundo, ellos siguen ayudando a la gente a adquirir el conocimiento exacto de los propósitos de Dios que ofrece la Biblia. (2 Timoteo 3:16, 17.)