La primera asamblea internacional de los testigos de Jehová en Rusia

SAN PETERSBURGO (Rusia) es muy conocida por lo que los residentes de aquella zona denominan “noches blancas”, un período de aproximadamente tres semanas durante junio cuando no llega a anochecer por completo. Pero las fechas del 26 al 28 de junio de 1992 fueron especiales por otra razón.

Durante aquellos días, los testigos de Jehová celebraron una asamblea que dirigió la atención, no a la luz literal que bañaba la ciudad de San Petersburgo durante todo el día, sino a la luz espiritual que reflejan los cristianos verdaderos. De ahí que el tema de la asamblea fuera: “Portadores de Luz”.

Esta fue la primera asamblea internacional de los Testigos en la anterior Unión Soviética. Los asistentes procedían de unos 30 países de todo el mundo, entre ellos Alemania, Canadá, Dinamarca, Estados Unidos, Finlandia, Gran Bretaña, Italia, Japón, Noruega, Países Bajos, Suecia y Suiza.

Además, unos 29.000 Testigos de la anterior Unión Soviética estuvieron presentes. Algunos venían de Estonia, Georgia, Letonia, Lituania, Moldavia y Ucrania. La concurrencia fue extraordinaria teniendo en cuenta que Rusia pasaba por ajustes económicos muy difíciles. Fue sobresaliente la presencia de rusos que viajaron unos 8.000 kilómetros desde Vladivostok y otros lugares situados en la costa oriental de Rusia.

El mayor grupo extranjero vino de la cercana Finlandia, con más de 10.000 representantes. El estadio se dividió en dos secciones, en una estaban los que hablaban ruso, y en la otra los que hablaban finlandés, cada una con su propia plataforma desde donde se presentaba el programa.

Preparativos

El lugar de asamblea fue el estadio Kirov, construido hace cuarenta y dos años en la isla de Krestovsky, a solo unos cuantos kilómetros del centro de San Petersburgo. Es el segundo estadio en tamaño de la anterior Unión Soviética, con capacidad para 60.000 personas. Al fondo se pueden ver las aguas del río Neva al desembocar en el golfo de Finlandia.

Sin embargo, el estadio necesitaba reparaciones. Se limpiaron las cañerías de las alcantarillas y se construyeron más letrinas. Se pintaron unos 30 kilómetros de hileras de gradas en el estadio. Además, se podaron los arbustos alrededor del estadio y se cortó el césped, un trabajo que tomó varias semanas.

Viaje y alojamientos

Se había invitado a unos 17.000 Testigos extranjeros, así que los preparativos del viaje y de los alojamientos resultó ser una tarea monumental. Las autoridades rusas cooperaron muy bien no solo en los diferentes consulados, sino también en puntos de la frontera y en el aeropuerto internacional de San Petersburgo.

Se concertaron plazas con 32 hoteles para alojar a la mayoría de los 17.000 visitantes extranjeros. Los 29.000 asambleístas de las diferentes zonas de la anterior Unión Soviética fueron alojados en 132 escuelas y guarderías. Todos ellos también necesitaban transporte diario hasta el lugar de asamblea, para lo cual se alquilaron unos 390 autobuses.

Muchos de los visitantes extranjeros pudieron comer en los hoteles. Sin embargo, varios meses antes de la asamblea, las autoridades de San Petersburgo expresaron su preocupación en cuanto a cómo se podría alimentar a los miles de visitantes que vendrían de diferentes partes de la anterior Unión Soviética. Declararon que no habría suficiente alimento en la ciudad y que los Testigos tendrían que traerlo.

Y eso es exactamente lo que hicieron. Varias sucursales de la Sociedad Watch Tower enviaron cargamentos grandes de alimento. Tan solo la sucursal finlandesa envió 200 toneladas de alimento para la asamblea. Además, la mayoría de los asambleístas extranjeros trajeron paquetes pequeños con latas de carne, frutos secos, nueces, pan y otros alimentos básicos. El último día de la asamblea se distribuyeron entre los visitantes de la anterior Unión Soviética cajas de comestibles que se trajeron al estadio en camiones, para que los hermanos tuvieran alimentos en el viaje de vuelta a casa.

Campaña publicitaria a gran escala

San Petersburgo es la segunda entre las ciudades más grandes de Rusia, con unos cinco millones de habitantes. Por primera vez en la historia, se autorizó a los testigos de Jehová de Rusia para lanzar una campaña de publicidad a gran escala.

Esta campaña sin precedentes comenzó varias semanas antes de la asamblea. Se entregaron aproximadamente un millón de hojas sueltas impresas en ruso. En el anverso de la hoja había una invitación al discurso público que se iba a celebrar el sábado por la tarde. En el reverso, había una descripción del programa del domingo. Además, se distribuyeron casi 750.000 ejemplares del tratado ¿Qué creen los testigos de Jehová? entre los habitantes de San Petersburgo. Esto les puso en contacto con las enseñanzas de los Testigos.

La mayoría de los asambleístas llegaron a San Petersburgo de uno a cuatro días antes de la asamblea. Durante aquellos días, miles de ellos distribuyeron hojas sueltas por las calles y ofrecieron tratados y otra literatura en ruso. Además, en las calles más concurridas del centro de la ciudad se colocaron carteles de unos tres metros de altura y un metro y medio de anchura, con una invitación a todo color para el discurso público tanto en la portada como en el reverso. Algunos se colocaron justo a la entrada de las estaciones del metro más concurridas.

El programa

Por fin llegó el primer día de la asamblea, con una asistencia de más de 45.000 personas. Se modificó el programa en beneficio de los muchos asistentes que no hablaban ni ruso ni finlandés. Por ejemplo, varios discursos se dieron en inglés y se tradujeron al ruso y al finlandés. Siete miembros del Cuerpo Gobernante de los Testigos de Jehová pronunciaron algunos de estos discursos.

Cada día de la asamblea hubo informes y experiencias de otros países, que destacaron cómo Jehová está bendiciendo la obra de predicar en esos lugares. Estos informes, junto con muchas experiencias, también se pronunciaron en inglés y se tradujeron al ruso y al finlandés.

El discurso público para la sección rusa trató sobre una pregunta que preocupa hoy a muchos rusos. El título era “¿De veras se interesa Dios por nosotros?”. Al concluir el discurso los asambleístas se alegraron de recibir el nuevo folleto ¿De veras se interesa Dios por nosotros? en ruso y finlandés.

El cancionero que utilizan los testigos de Jehová en sus reuniones todavía no está disponible en ruso. Por eso la Sociedad Watch Tower preparó un folleto especial que contenía la letra de todos los cánticos que iban a cantarse durante la asamblea. Los visitantes rusos obtuvieron sus ejemplares personales a la entrada del estadio. Resultó emocionante escuchar a 46.000 personas de unos 30 países diferentes cantar alabanzas a Jehová Dios en sus idiomas respectivos, entre ellos el ruso.

La teoría de la evolución se enseña desde hace décadas en muchas partes del mundo, incluidos los territorios de la anterior Unión Soviética. Los testigos de Jehová de esos países están más preparados ahora para exponer las falacias de esta teoría y difundir la verdad acerca del Creador de la vida. Al final de la sesión del domingo por la mañana los concurrentes se sintieron muy emocionados cuando un miembro del Cuerpo Gobernante presentó el libro La vida... ¿cómo se presentó aquí? ¿Por evolución, o por creación? en ruso. A todos los presentes se les regaló un ejemplar del libro.

Se informó de antemano a los delegados extranjeros que muchos de los Testigos de Rusia no tienen Biblias. Por eso se trajeron como regalo centenares de Biblias en ruso. Las Biblias fueron recogidas en un lugar específico para llevarlas más tarde a las congregaciones de testigos de Jehová y distribuirlas entre los que necesitaran un ejemplar.

¡Estaban asombrados!

El sábado, durante la mañana y las primeras horas de la tarde, llegó un flujo constante de visitantes no Testigos al estadio. Sentían curiosidad y querían ver con sus propios ojos lo que estaba sucediendo. Muchos estaban asombrados. La mayoría de ellos nunca había oído hablar de los testigos de Jehová antes de recibir una invitación al discurso público. Algunos supieron de la asamblea al escuchar las noticias por la televisión. La asistencia máxima a la asamblea fue de 46.214 personas.

Una joven que pertenece a la Iglesia ortodoxa rusa comentó: “Estoy muy impresionada con los Testigos. Son personas pacíficas, amables y respetables”. Otro visitante dijo: “Esperamos que los testigos de Jehová celebren muchas asambleas más aquí en San Petersburgo”. Un sargento mayor de la policía rusa, o milicia, que fue asignado a trabajar en el lugar de asamblea declaró que fue “emocionante estar aquí en la asamblea”.

Un funcionario local comentó que ‘algunos consideran a los testigos de Jehová una especie de secta clandestina que actúa en la oscuridad y maltrata a sus hijos y se maltrata a sí misma. Pero yo veo personas normales, sonrientes, incluso mejores que muchas de las personas que conozco. Son pacíficos y tranquilos, y se aman mucho unos a otros’. Añadió: “No comprendo por qué las personas dicen esas mentiras acerca de ustedes”.

El sábado por la tarde algunos opositores intentaron perturbar la asamblea. Llevaban grandes carteles con acusaciones falsas en contra de los Testigos. Cuando la muchedumbre de alborotadores creció y se volvió más ruidosa, la policía convocó a las fuerzas de apoyo para que protegieran a los asambleístas. Los alborotadores no consiguieron traspasar las puertas de entrada. Al final del día simplemente se marcharon, frustrados.

Uno de los asistentes a la asamblea que vio lo que estaba sucediendo quedó impresionado principalmente por el espíritu de cooperación de la milicia. “Me asombra ver que la milicia se esfuerza por protegernos. Hace solo un par de años a los testigos de Jehová se nos consideraba enemigos del Estado, y sin embargo ahora la milicia nos está protegiendo.” Un oficial de la milicia expresó con franqueza sus sentimientos cuando dijo a unos cuantos hermanos: “No queremos que tengan miedo de nosotros. Estamos aquí para protegerlos y asegurarnos de que todo va bien”.

Todo fue bien. Incluso el clima fue ideal. El cielo estuvo despejado y la temperatura fue agradable durante todos los días de la asamblea.

Miles de personas se bautizan

Para muchos el acontecimiento principal de la asamblea fue el bautismo de miles de personas. Una congregación de San Petersburgo, que tiene 254 publicadores, informó que 108 se habían bautizado en la asamblea. Es difícil expresar con palabras la emoción que sintieron los presentes al ver levantarse a 3.256 personas que estaban listas para bautizarse. El orador hizo dos preguntas relativas a su dedicación a Jehová, y ellas contestaron con un estruendoso “da” (sí).

Después de hacer una oración, las mujeres y los hombres que se iban a bautizar se dirigieron hacia sus respectivos vestuarios. A medida que centenares de ellos abandonaban el estadio, intercambiaban saludos con el auditorio agitando las manos.

Muchos de los asistentes lloraron de gozo. Otros aplaudieron de forma intermitente durante más de cuarenta y cinco minutos. Un finlandés no pudo reprimir su emoción y comenzó a llorar. Él explica: “En 1943 fui reclutado por el ejército finlandés para pelear contra los rusos. Fue una guerra terrible. Y ahora, en esta asamblea, vi a miles de rusos dedicar su vida a Jehová. Cuando vi a algunos de ellos en sillas de ruedas y a otros cojeando, lloré y me pregunté: ‘¿Serán también veteranos de la guerra? ¿Habrán sido heridos por soldados finlandeses?’. Quizás Jehová me permita ahora ayudar a mis hermanos rusos”.

¿Agradecieron los hermanos rusos la provisión de Jehová de estos tres días de fiesta espiritual preparados para ellos, esta primera gran asamblea en San Petersburgo? Cuando el último orador se acercaba a la conclusión de su discurso, dijo: “Sobre todo le agradecemos a Jehová Dios esta maravillosa asamblea”. El auditorio se levantó y aplaudió entusiásticamente durante más de cinco minutos. ¡Fue una ovación puesta en pie a Jehová!

Jehová Dios, la Fuente de luz, está respaldando a los miles de portadores de luz que viven en países que anteriormente eran parte de la Unión Soviética. Después de más de setenta años de restricciones y persecución, ahora ha quedado claro que Jehová ha estado cumpliendo constantemente su promesa de Isaías 60:22, donde dice: “El pequeño mismo llegará a ser mil, y el chico una nación poderosa. Yo mismo, Jehová, lo aceleraré a su propio tiempo”.

[Fotografía en la página 24]

Carteles anunciaban la asamblea

[Fotografías en la página 25]

Una asambleísta rusa recibe su propio ejemplar de la Biblia

Se utilizaron folletos especiales con los cánticos

[Fotografías en la página 26]

Una multitud impresionante de 3.256 personas se bautizó

[Recuadro/Tabla en la página 27]

Otras asambleas

El verano pasado se celebraron seis asambleas por toda la anterior Unión Soviética. Asistieron un total de 91.673 personas y se bautizaron 8.562, lo cual significa que el 9,3% de los asistentes se bautizó en estas asambleas. El porcentaje habría sido mayor si no hubiera habido unos 17.000 delegados extranjeros presentes en la asamblea internacional de San Petersburgo.

El periódico Visoki Zamok, publicado en Lviva comentó: “La bondad y la sinceridad han reinado en el estadio durante los tres días de la asamblea. A pesar de la gran cantidad de asistentes, los terrenos están todavía tan limpios como antes de la asamblea. Por todas partes se ha visto un orden y una paz ejemplares”.

Ahora que los testigos de Jehová disfrutan de libertad para adorar a Dios abiertamente en la anterior Unión Soviética, muchas personas de esos territorios tienen la oportunidad de comprobar por sí mismos qué clase de personas son de verdad los Testigos. El periódico ruso Krasnoyarskii Komsomolets declaró: “Son personas atractivas, muy afables y completamente apolíticas; fomentan la diligencia, no el correr tras el ‘dinero fácil’”.

[Tabla]

Asambleas en la anterior Unión Soviética

FECHA CIUDAD ASISTENCIA MÁXIMA BAUTISMO

26-28 de junio San Petersburgo (Rusia) 46.214 3.256

10-12 de julio Lvov (Ucrania) 15.011 1.326

Alma-Ata (Kazakistán) 6.605 829

17-19 de julio Harkov (Ucrania) 17.425 2.577

24-26 de julio Irkutsk (Siberia) 5.051 536

Tallinn (Estonia) 1.367 38

TOTAL 91.673 8.562

[Nota a pie de página]