De nuestros lectores

Emociones negativas Soy una muchacha de 12 años, y quiero decirles que me gustó mucho la serie de artículos “Usted puede superar las emociones negativas” (8 de octubre de 1992). He tenido conflictos con mis amigos y compañeros de clase, y todo era debido a mi manera negativa de ver las cosas. Los artículos me han enseñado a tener un punto de vista más positivo.

A. C., Italia

Como llevo dos años siguiendo un tratamiento para una serie de problemas emocionales y hormonales, sé por experiencia que sus sugerencias dan buenos resultados. Hace un par de días sufrí una recaída y quise darme por vencida. Pero mi paciente esposo me recomendó que leyera de nuevo los artículos. Encontré en ellos todo el ánimo que podría desear y obtuve la fuerza de voluntad para volver a intentarlo.

J. L., Inglaterra

Padres que avergüenzan a los suyos Gracias por el artículo “Los jóvenes preguntan... ¿Qué puedo hacer si la conducta de mis padres me avergüenza?” (22 de octubre de 1992). Me animó mucho. Hace poco mi padre me prohibió asistir a las reuniones cristianas. No obstante, su artículo me ayudó a comprender que no soy la única que se encuentra en esta situación y que puedo contar con la ayuda de Jehová.

K. L. R., Francia

Mi padre es cristiano, pero está inactivo. Mi madre está expulsada de la congregación y se opone a la verdad. En cierta ocasión no quiso darme de comer durante más de treinta y seis horas porque había salido a predicar. También me pegó. A veces la situación espiritual de mis padres me hace llorar. Por eso, no pueden imaginarse lo mucho que me animó su artículo y cuánto fortaleció mi fe. Estoy resuelto a adherirme a los principios bíblicos.

E. J., Nigeria

Mi padre también está expulsado y varios de mis hermanos han sido censurados o expulsados. Hay quienes me han tachado de ser como ellos, pero ya estoy casada y acabo de terminar mi primer año de evangelizadora de tiempo completo. Es cierto, podemos demostrar que somos diferentes.

D. R., Estados Unidos

Observando el mundo Gracias por publicar las breves noticias de la sección “Observando el mundo”. Como siempre he tenido una vida muy protegida y sin complicaciones, tengo que recordarme a mí misma continuamente que estos son de veras los últimos días. “Observando el mundo” me ha ayudado mucho a convencerme de la maldad y la degradación que hay en este viejo mundo. Por favor, sigan publicando con regularidad esa sección.

M. G., Estados Unidos

Una carta a los padres Con el artículo “Una carta a mamá y papá” (8 de octubre de 1992) se me saltaron las lágrimas. Me hizo ver lo difícil que tuvo que ser para mis padres criar a sus ocho hijos. Así que a mis 42 años les he escrito una carta de agradecimiento a mamá y papá.

J. D., Estados Unidos

Me resultó muy penoso leer ese artículo porque mis padres no me dieron ninguna de las cosas que mencionó el autor de la carta. Pero al releerlo me di cuenta de lo mucho que Jehová, nuestro Padre celestial, ha hecho por mí y por tantas otras personas. Me ha enseñado lo que es amor y me ha disciplinado cuando lo he necesitado. Así me ha liberado de algún modo de la dolorosa niñez que viví.

C. A., Estados Unidos