Capítulo 16
La manera de acercarse a Dios
1. ¿Qué similitudes se observan en muchas religiones?
MIENTRAS visitaba cierto país oriental, a una turista la asombraron los ritos que vio en un templo budista. Aunque las imágenes no eran ni de María ni de Cristo, muchos de aquellos ritos se parecían a los de su propia religión en su país de origen. Por ejemplo, observó que utilizaban rosarios y recitaban oraciones. Otras personas también han percibido estas similitudes. Los devotos se acercan a Dios o a los objetos de su devoción de maneras extraordinariamente similares en Oriente y Occidente.
2. ¿Cómo se ha definido la oración, y por qué oran muchas personas?
2 Muchos tratan de acercarse a Dios particularmente orándole. Se ha definido la oración como “súplica, deprecación o ruego que se hace a Dios, a los dioses o a los santos. Elevación de la mente a Dios para alabarle, pedir su ayuda o darle gracias por sus beneficios”. (Gran Enciclopedia Larousse.) Pero hay personas que cuando oran a Dios solo piensan en los beneficios que pueden obtener. Por ejemplo, un hombre preguntó en cierta ocasión a un testigo de Jehová: “Si usted ora por mí, ¿se solucionarán mis problemas familiares, laborales y de salud?”. Al parecer, aquel hombre pensaba que sí; no obstante, muchas personas oran y descubren que sus problemas continúan. Por eso cabe la pregunta: ‘¿Por qué deberíamos acercarnos a Dios?’.
POR QUÉ ACERCARSE A DIOS
3. ¿A quién debemos dirigir nuestras oraciones, y por qué?
3 La oración no es un rito vacío de significado ni simplemente un medio para conseguir algo. Una de las razones principales para orar a Dios es cimentar una relación estrecha con él. Por eso debemos dirigir nuestras oraciones al propio Jehová Dios. “Jehová está cerca de todos los que lo invocan”, dijo el salmista David. (Salmo 145:18.) Jehová nos invita a forjar una relación pacífica con él. (Isaías 1:18.) Los que responden a esta invitación concuerdan con el salmista que dijo: “En cuanto a mí, el acercarme a Dios es bueno para mí”. ¿Por qué? Porque los que se acercan a Jehová Dios consiguen verdadera felicidad y paz interior. (Salmo 73:28.)
4, 5. a) ¿Por qué es importante orar a Dios? b) ¿Qué clase de relación podemos cultivar con Dios mediante la oración?
4 ¿Por qué orar a Dios para que nos ayude si él ‘sabe lo que necesitamos antes de que se lo pidamos’? (Mateo 6:8; Salmo 139:4.) Al orar mostramos que tenemos fe en Dios y que lo consideramos la fuente de “toda dádiva buena y todo don perfecto”. (Santiago 1:17; Hebreos 11:6.) Jehová se complace en nuestras oraciones. (Proverbios 15:8.) Él se alegra de oír nuestras expresivas palabras de aprecio y alabanza, tal como un padre se regocija cuando oye pronunciar a su hijo pequeño palabras sinceras de gratitud. (Salmo 119:108.) Cuando existe una buena relación entre padre e hijo, existe también una comunicación afectuosa. El niño que se siente amado desea hablar con su padre. Lo mismo sucede en nuestra relación con Dios. Si apreciamos de veras lo que estamos aprendiendo de Jehová y el amor que él nos muestra, sentiremos un gran deseo de comunicarnos con él en oración. (1 Juan 4:16-18.)
5 Al dirigirnos al Dios Altísimo, debemos hacerlo con respeto, pero no tenemos que preocuparnos demasiado por las palabras concretas que utilicemos. (Hebreos 4:16.) Siempre tenemos acceso a Jehová. ¡Y qué privilegio el nuestro de poder ‘derramar nuestro corazón’ ante Dios en oración! (Salmo 62:8.) El aprecio a Jehová conduce a una relación afectuosa con él, como la del fiel Abrahán, a quien se consideró amigo de Dios. (Santiago 2:23.) Ahora bien, cuando nos dirijamos al Señor Soberano del universo, es necesario cumplir con los requisitos que él estipula para orarle.
REQUISITOS PARA ACERCARSE A DIOS
6, 7. Aunque Dios no exige ningún pago para oír nuestras oraciones, ¿qué requiere de nosotros cuando oramos?
6 ¿Hace falta dinero para dirigirse a Dios? Muchas personas pagan a sacerdotes para que oren por ellas. Hasta hay quienes creen que el grado de atención que Dios preste a sus oraciones dependerá de la cuantía de su donación. Sin embargo, la Palabra de Dios no dice que se nos exija ninguna ofrenda monetaria para dirigirnos a Jehová en oración. Podemos recibir sus provisiones espirituales y las bendiciones de relacionarnos con él en oración sin costo alguno. (Isaías 55:1, 2.)
7 ¿Qué se requiere entonces? Algo indispensable es tener la actitud de corazón apropiada. (2 Crónicas 6:29, 30; Proverbios 15:11.) En nuestro corazón debemos tener fe en que Jehová Dios es el “Oidor de la oración” y el “remunerador de los que le buscan solícitamente”. (Salmo 65:2; Hebreos 11:6.) También debemos ser humildes de corazón. (2 Reyes 22:19; Salmo 51:17.) En una de sus ilustraciones, Jesucristo habló de un recaudador de impuestos que se dirigió a Dios con una actitud de corazón humilde, y dijo que este hombre había probado ser más justo que cierto fariseo arrogante. (Lucas 18:10-14.) Al dirigirnos a Dios en oración, recordemos que “todo el que es orgulloso de corazón es cosa detestable a Jehová”. (Proverbios 16:5.)
8. Si deseamos que Dios conteste nuestras oraciones, ¿de qué tenemos que limpiarnos?
8 Si deseamos que Dios conteste nuestras oraciones, tenemos que limpiarnos de la conducta pecaminosa. Tras animar a sus lectores a acercarse a Dios, el discípulo Santiago añadió: “Límpiense las manos, pecadores, y purifiquen su corazón, indecisos”. (Santiago 4:8.) Hasta los que han obrado mal pueden forjar una relación pacífica con Jehová si se arrepienten de sus acciones y abandonan su forma de vivir anterior. (Proverbios 28:13.) No podemos esperar que Jehová nos escuche si tan solo aparentamos haber limpiado nuestra vida. “Los ojos de Jehová están sobre los justos, y sus oídos están hacia su ruego; pero el rostro de Jehová está contra los que hacen cosas malas”, dice la Palabra de Dios. (1 Pedro 3:12.)
9. ¿Por medio de quién debemos dirigirnos a Jehová Dios, y por qué?
9 La Biblia declara: “No hay en la tierra hombre justo que siga haciendo el bien y no peque”. (Eclesiastés 7:20.) Por lo tanto, cabría preguntarse: ‘¿Cómo podemos entonces dirigirnos a Jehová Dios?’. La Biblia contesta: “Si alguno comete un pecado, tenemos un ayudante para con el Padre, a Jesucristo, uno que es justo”. (1 Juan 2:1.) Aunque somos pecadores, podemos dirigirnos a Dios con franqueza de expresión mediante Jesucristo, quien dio su vida en rescate por nosotros. (Mateo 20:28.) Él es el único conducto por el que podemos dirigirnos a Jehová Dios. (Juan 14:6.) No debemos dar por sentado el valor del sacrificio de rescate de Jesús y practicar deliberadamente el pecado. (Hebreos 10:26.) No obstante, si hacemos todo lo posible por abstenernos de hacer lo malo y aun así erramos algunas veces, podemos arrepentirnos y pedir perdón a Dios. Si nos dirigimos a él con humildad de corazón, él nos oirá. (Lucas 11:4.)
OPORTUNIDADES DE HABLAR CON DIOS
10. En lo que respecta a la oración, ¿cómo podemos imitar a Jesús, y cuáles son algunas ocasiones en las que es propio orar a Dios en privado?
10 Jesucristo tenía en gran estima su relación con Jehová. Por ello, encontraba tiempo para hablar con Dios privadamente en oración. (Marcos 1:35; Lucas 22:40-46.) Hacemos bien en imitar el ejemplo de Jesús y orar a Dios con regularidad. (Romanos 12:12.) Es propio empezar el día con una oración y dar gracias a Jehová por las actividades del día antes de acostarnos. Procure dirigirse a Dios también durante el día, “en toda ocasión”. (Efesios 6:18.) Podemos orar incluso en silencio en nuestro corazón, pues sabemos que Jehová puede oírnos. Hablar con Dios en privado nos ayuda a consolidar nuestra relación con él, y las oraciones diarias contribuyen a que nos acerquemos mucho más a él.
11. a) ¿Por qué deberían orar juntas las familias? b) ¿Qué significado tiene el que usted diga “amén” al final de una oración?
11 Jehová también escucha las oraciones que se ofrecen en favor de grupos de personas. (1 Reyes 8:22-53.) Podemos acercarnos a Dios como familia dirigidos por el cabeza de la casa. Esto fortalece el vínculo familiar; además, cuando los jovencitos oyen a sus padres orar humildemente, Jehová llega a ser muy real para ellos. ¿Qué debemos hacer cuando alguien ora en representación de otros, como por ejemplo, en una reunión de los testigos de Jehová? Si nos encontramos en el auditorio, debemos escuchar atentamente para que al final de la oración podamos decir sin reservas “amén”, que significa “así sea”. (1 Corintios 14:16.)
ORACIONES QUE JEHOVÁ OYE
12. a) ¿Por qué no contesta Dios algunas oraciones? b) ¿Por qué no debemos concentrarnos únicamente en nuestras necesidades particulares cuando oramos?
12 A algunas personas quizás les parezca que Dios no contesta sus oraciones aun cuando le oran por medio de Cristo. Sin embargo, el apóstol Juan dijo: “No importa qué sea lo que pidamos conforme a [la] voluntad [de Dios], él nos oye”. (1 Juan 5:14.) Por consiguiente, lo que pidamos debe estar en conformidad con la voluntad de Dios. Puesto que él se interesa por nuestro bienestar espiritual, cualquier situación que afecte nuestra espiritualidad constituye un tema apropiado para orar. Debemos resistir la tentación de concentrarnos únicamente en las necesidades físicas. Por ejemplo, aunque está bien pedir a Dios que nos dé fortaleza y buen juicio para afrontar la enfermedad, los problemas de salud no deberían eclipsar los intereses espirituales. (Salmo 41:1-3.) Cierta cristiana se dio cuenta de que estaba demasiado preocupada por su salud, y le pidió a Jehová que la ayudara a ver su enfermedad de modo equilibrado. Como resultado, sus problemas de salud dejaron de acaparar su interés y empezó a notar que recibía un ‘poder más allá de lo normal’. (2 Corintios 4:7.) Su deseo de ayudar a otros en sentido espiritual se intensificó, y llegó a ser proclamadora del Reino de tiempo completo.
13. Según se indica en Mateo 6:9-13, ¿cuáles son algunos asuntos adecuados que podemos incluir en nuestras oraciones?
13 ¿Qué podemos incluir en nuestras oraciones para que Jehová se complazca en oírlas? Jesucristo enseñó a sus discípulos a orar. En la oración modelo, recogida en Mateo 6:9-13, dio una muestra de asuntos adecuados sobre los cuales orar. ¿Qué debería recibir más importancia en nuestras oraciones? El nombre de Jehová Dios y su Reino deben tener la máxima prioridad. Es apropiado pedir que se nos satisfagan las necesidades materiales. También es importante pedir perdón por los pecados y que se nos libre de las tentaciones del inicuo, Satanás el Diablo. No obstante, Jesús no quería que recitáramos esta oración ni que la repitiéramos vez tras vez sin pensar en su significado. (Mateo 6:7.) Si un niño utilizara siempre las mismas palabras cuando hablara con su padre, ¿qué clase de relación tendría con él?
14. Aparte de peticiones, ¿qué otras oraciones deberíamos ofrecer?
14 Además de peticiones y súplicas sinceras, deberíamos ofrecer oraciones de alabanza y de acción de gracias. (Salmo 34:1; 92:1; 1 Tesalonicenses 5:18.) También podemos orar por otros. Las oraciones en favor de nuestros hermanos y hermanas espirituales que son objeto de persecución o sufren de otras maneras manifiestan nuestro interés en ellos, y Jehová se complace en oírnos expresarlo. (Lucas 22:32; Juan 17:20; 1 Tesalonicenses 5:25.) Por ello, el apóstol Pablo escribió: “No se inquieten por cosa alguna, sino que en todo, por oración y ruego junto con acción de gracias, dense a conocer sus peticiones a Dios; y la paz de Dios que supera a todo pensamiento guardará sus corazones y sus facultades mentales mediante Cristo Jesús”. (Filipenses 4:6, 7.)
PERSEVERE EN LA ORACIÓN
15. ¿Qué debemos recordar si nos parece que nuestras oraciones no reciben respuesta?
15 Aunque usted está adquiriendo conocimiento de Dios, quizás le parezca que sus oraciones a veces no reciben respuesta. Puede que Dios no considere que sea el momento debido para contestar cierta oración en concreto. (Eclesiastés 3:1-9.) Jehová puede permitir que una situación continúe por un tiempo, pero sí contesta las oraciones, y sabe cuándo es el mejor momento para hacerlo. (2 Corintios 12:7-9.)
16. ¿Por qué debemos persistir en la oración, y cómo puede esto influir en nuestra relación con Dios?
16 La persistencia en la oración revela nuestro interés sincero en lo que le decimos a Dios. (Lucas 18:1-8.) Por ejemplo, quizás le pidamos a Jehová que nos ayude a vencer cierta debilidad. Si perseveramos en la oración y obramos en armonía con nuestras peticiones, le demostramos que somos sinceros. Debemos ser específicos y honrados siempre que pedimos algo. Y es muy importante orar con fervor cuando experimentamos alguna tentación. (Mateo 6:13.) Si continuamos orando a la vez que tratamos de controlar nuestros impulsos pecaminosos, percibiremos la ayuda de Jehová. Nuestra fe aumentará y nuestra relación con él se estrechará más. (1 Corintios 10:13; Filipenses 4:13.)
17. ¿Cómo nos beneficiará tener siempre presente la oración al servir a Dios?
17 Al tener siempre presente la oración en nuestro servicio sagrado a Jehová Dios, nos daremos cuenta de que no le servimos gracias a nuestras propias fuerzas. Es él quien nos da la fortaleza. (1 Corintios 4:7.) Reconocer este hecho nos ayudará a ser humildes y enriquecerá nuestra relación con Dios. (1 Pedro 5:5, 6.) Sí, tenemos buenas razones para perseverar en la oración. Nuestras oraciones sinceras y el preciado conocimiento de cómo acercarnos a nuestro amoroso Padre celestial hará que nuestra vida sea verdaderamente feliz.
LA COMUNICACIÓN CON JEHOVÁ NO ES UNILATERAL
18. ¿Cómo podemos escuchar a Dios?
18 Si queremos que Dios oiga nuestras oraciones, debemos escuchar lo que él dice. (Zacarías 7:13.) Dios ya no envía sus mensajes mediante profetas inspirados por él, ni mucho menos utiliza medios espiritistas. (Deuteronomio 18:10-12.) No obstante, podemos escuchar a Dios estudiando su Palabra, la Biblia. (Romanos 15:4; 2 Timoteo 3:16, 17.) Tal como quizás necesitamos adquirir el gusto por ciertos alimentos físicos que son buenos para nosotros, se nos anima a que cultivemos “el anhelo por la leche no adulterada que pertenece a la palabra”. Tome el gusto al alimento espiritual leyendo la Palabra de Dios todos los días. (1 Pedro 2:2, 3; Hechos 17:11.)
19. ¿Qué beneficio obtendrá usted de meditar sobre lo que lee en la Biblia?
19 Medite sobre lo que lee en la Biblia. (Salmo 1:1-3; 77:11, 12.) Esto significa reflexionar en ello. Podría asemejarse a digerir el alimento. Usted puede digerir el alimento espiritual relacionando lo que está leyendo con lo que ya sabe. Analice cómo influye la información en su vida, o reflexione en lo que revela acerca de las cualidades y las obras de Jehová. De modo que, mediante el estudio personal, usted puede aprovecharse del alimento espiritual que Jehová suministra. Esto le acercará a él y le ayudará a enfrentarse a los problemas cotidianos.
20. ¿Cómo nos ayuda a acercarnos a Dios la asistencia a las reuniones cristianas?
20 Otra manera de acercarse a Dios es escuchando la enseñanza de su Palabra que se imparte en las reuniones cristianas, tal como los israelitas escuchaban con atención cuando se reunían para oír la lectura pública de la Ley de Dios. Los instructores de aquel tiempo ponían significado a su lectura de la Ley, ayudando así al auditorio a entender lo que oía y a desear ponerlo en práctica. Esto producía gran regocijo. (Nehemías 8:8, 12.) De modo que adquiera la costumbre de asistir a las reuniones de los testigos de Jehová. (Hebreos 10:24, 25.) Esto le ayudará a entender y luego aplicar el conocimiento de Dios en su vida y le traerá felicidad. Siendo parte de la hermandad cristiana mundial, le resultará más fácil permanecer cerca de Jehová. Y, como veremos, dentro del pueblo de Dios podrá hallar seguridad verdadera.
COMPRUEBE SU CONOCIMIENTO
¿Por qué hay que acercarse a Dios?
¿Cuáles son algunos de los requisitos para acercarse a Dios?
¿Qué puede incluir usted en sus oraciones?
¿Por qué debe perseverar en la oración?
¿Cómo puede escuchar a Jehová hoy día?
[Ilustración a toda plana de la página 157]