BIBLIOTECA EN LÍNEA Watchtower
Watchtower
BIBLIOTECA EN LÍNEA
español
  • BIBLIA
  • PUBLICACIONES
  • REUNIONES
  • ad págs. 1266-1267
  • Papiro

No hay ningún video disponible para este elemento seleccionado.

Lo sentimos, hubo un error al cargar el video.

  • Papiro
  • Ayuda para entender la Biblia
  • Información relacionada
  • Papiro
    Perspicacia para comprender las Escrituras, volumen 2
  • El papiro—precursor del papel
    La Atalaya. Anunciando el Reino de Jehová 1963
  • ¿Lo sabía?
    La Atalaya. Anunciando el Reino de Jehová (estudio) 2021
  • Papel
    Perspicacia para comprender las Escrituras, volumen 2
Ver más
Ayuda para entender la Biblia
ad págs. 1266-1267

PAPIRO

Planta acuática grande perteneciente a la familia de las ciperáceas. Tiene un tallo o tronco triangular que se estrecha hacia la punta, crece en aguas poco profundas hasta una altura de 2 a 5 m. y termina en un penacho de panículas finas parecidas a hierba. El nombre se aplica asimismo al material hecho de papiro que se usaba en la manufactura de diversos artículos, como el utilizado para la escritura, y también a algunos manuscritos específicos hechos de papiro.

Esta planta crece en aguas estancadas o marismas poco profundas y a lo largo de las orillas de los ríos de aguas mansas, como el Bajo Nilo, donde en otro tiempo abundaba (en la actualidad casi se ha extinguido). Bildad le preguntó a Job: “¿Crecerá y se hará alto el papiro sin un lugar pantanoso?”. (Job 8:11; Isa. 35:7.)

El papiro era un artículo muy valioso en el antiguo Egipto, donde, al parecer, ya se usaba como material de escritura ya en los días de Abrahán. Con el tiempo, la manufactura del papiro llegó a ser una de las principales industrias de Egipto, aunque de esta planta se obtenían otros numerosos productos. Por ejemplo: los tallos se usaban para hacer sandalias, cajas, velas, barcos, cestas y esteras; el rizoma leñoso se masticaba por su jugo de sabor dulce parecido al regaliz; la médula se hervía y se comía; y cuando había escasez de leña, los tallos más bajos se secaban y se usaban como combustible.

Los tallos de la planta flotan en el agua, razón por la cual, para evitar la muerte de Moisés cuando nació, su madre lo colocó en un “arca de papiro” revestida de betún y pez. (Éxo. 2:3.) También fueron hechas de papiro embarcaciones de mayor tamaño que sirvieron para viajar distancias más largas. Estas embarcaciones se construían con haces de tallos de papiro atados juntos. Aunque se estrechaban por los extremos, la parte central era lo suficientemente ancha como para que los pasajeros pudieran estar de pie. (Isa. 18:2.)

Cuando los egipcios preparaban papiro como material de escritura, seguían un proceso bastante sencillo. Al recoger los tallos, la parte gruesa y medulosa que crecía bajo la superficie del agua era especialmente apreciada, pues esta aportaba la materia prima más ancha y blanca. Se les quitaba la corteza exterior, cortando los corazones medulosos en trozos convenientes de 40 a 46 cm. de longitud. Después, la médula celular se cortaba en tiras anchas pero muy delgadas. Estas se colocaban verticalmente sobre una superficie lisa de modo que se traslapasen ligeramente. Después de aplicar una fina capa de cola, se ponía horizontalmente otra capa de tiras de papiro sobre las verticales. Las capas se batían con mazos hasta convertirlas en una lámina unificada. Posteriormente, una vez secadas al sol, las hojas se recortaban al tamaño deseado, con frecuencia en forma rectangular de unos 20 por 25 cm. Finalmente, se alisaban y pulían con piedra pómez, conchas o marfil. Con este proceso se producía un material de escritura de alguna durabilidad, flexible y casi blanco, disponible en muchos tamaños y calidades. Por lo general, se escogía para escribir el lado que tenía las tiras horizontales, aunque a veces se usaba el reverso para terminar un escrito. Las juntas de las tiras servían para guiar la mano del escritor mientras escribía con una pluma de caña y un fluido hecho de cola, hollín y agua.

El papiro tenía una desventaja importante como material de escritura: no era muy duradero. Se deterioraba en el ambiente húmedo y se hacía muy quebradizo cuando se almacenaba en un ambiente excesivamente seco. Hasta el siglo XVIII E.C. se supuso que todos los antiguos manuscritos bíblicos en papiro habían desaparecido. Sin embargo, en 1778 se descubrieron papiros bíblicos en la antigua Faiyum, Egipto. Desde entonces se han hecho más descubrimientos, tanto en Egipto como alrededor del mar Muerto, lugares con un clima moderadamente seco, muy necesario para la conservación de los papiros. Algunos de los papiros bíblicos hallados en estos lugares datan hasta del segundo o primer siglo antes de la era común. (Véase MANUSCRITOS DE LA BIBLIA.)

    Publicaciones en español (1950-2025)
    Cerrar sesión
    Iniciar sesión
    • español
    • Compartir
    • Configuración
    • Copyright © 2025 Watch Tower Bible and Tract Society of Pennsylvania
    • Condiciones de uso
    • Política de privacidad
    • Configuración de privacidad
    • JW.ORG
    • Iniciar sesión
    Compartir