Díganle a la gente “hasta que las ciudades queden desoladas, por falta de habitantes”
¿POR qué han llegado a ser los testigos de Jehová cada día más prominentes y activos desde 1918? ¿Quién los comisionó y les dió su mensaje? ¿Cumple su actividad con su propósito o debe ser clasificada como un fracaso? ¿Cuánto tiempo tienen que seguir testificando?
Lo que hace que los testigos de Jehová sean cada día más prominentes es que su mensaje es tan diferente al de todos los demás que profesan ser cristianos. Los testigos de Jehová, igual que los demás, en un tiempo se hallaban contaminados con los errores que distinguieron la gran apostasía predicha por el apóstol Pablo. (2 Tes. 2:3) Pero, porque eran fieles a la verdad de la Biblia, Dios purificó su mensaje así como limpió los labios de su profeta Isaías.—Pro. 4:18; Isa. 6:6, 7.
Debido a esa purificación los testigos de Jehová tienen un mensaje llamativo, intransigente, puro y libre del temor del hombre, de tradiciones religiosas y filosofías humanas y de la adoración de criaturas. Y este mensaje los enciende con celo de modo que al oír la llamada de Jehová: “¿A quién enviaré? ¿y quién irá por nosotros?” con anhelo responden: “¡Aquí estoy yo; envíame a mí!” (Isa. 6:8) Sin primero preguntar si éstos han recibido instrucción en algún seminario o si son solteros, Jehová Dios acepta sus servicios y los envía. Tienen el debido conocimiento de Jehová Dios y de sus propósitos y el deseo de decírselo a otros.
¿Están los testigos de Jehová convirtiendo al mundo? No, ni siquiera tratan de hacerlo. No es ése el propósito de su actividad. Su propósito es amonestar a los inicuos e indicar a los amantes de la justicia el lugar de seguridad, y están cumpliendo ese propósito. El comprometer su mensaje con el fin de ser bien recibidos no cumpliría la profecía, porque Jehová predijo que su mensaje sería rechazado.—Isa. 6:9, 10.
Si no tienen que seguir testificando hasta que todo el mundo sea convertido, entonces ¿hasta cuándo? Jehová contesta por medio de su profeta Isaías: “Hasta que las ciudades queden desoladas, por falta de habitantes; y las casas, por no haber hombre en ellas; y la tierra venga a ser una desolación completa; y Jehová haya alejado los hombres; y los lugares abandonados sean muchos en medio de la tierra.”—Isa. 6:11, 12.
Se ve, pues, que sin fijar cierta fecha, Jehová fija los límites prácticos de la obra que sus testigos tienen que hacer entre la gente de la cristiandad, hasta que esté completamente desolada. Esa desolación se realizará por los diez “cuernos” de la bestia, los cuales se dirigirán, contra el sistema prostituto de religión babilónica de la cristiandad, arruinándolo. Todos sus sistemas religiosos serán afectados, ninguno escapará. Sus adherentes serán tomados cautivos o destruídos por los elementos mundanos que luchan contra la religión y contra el reino de Dios, haciendo así que la religión organizada quede completamente desolada, lo cual marcará el principio del Armagedón.—Apo. 17:16-18.
Pero, a pesar de tales condiciones en la cristiandad, los testigos de Jehová seguirán proclamando el mensaje del Reino y declarando el “día de la venganza de nuestro Dios”. Seguirán haciéndolo hasta que Cristo Jesús, el principal Ejecutor de Jehová, destruya a todos los elementos impíos, tanto al religioso como al político, social y comercial en la “guerra del gran día de Dios el Todopoderoso”, así completamente vindicando la soberanía universal de Jehová.
Por eso, ustedes que son testigos cristianos de Jehová, ¡no se relajen en sus esfuerzos, no se cansen de hacer bien, sino amonesten a los inicuos y consuelen a los hombres de buena voluntad “hasta que las ciudades queden desoladas, por falta de habitantes”!