Ponderando las noticias
La “calamidad” de los cristianos
El hecho de que ciertos grupos religiosos han estado reflexionando más seriamente respecto a la cuestión de las armas nucleares se refleja en las siguientes declaraciones que aparecieron en la revista The Christian Century: “Los cristianos primitivos no sirvieron en las fuerzas armadas. Roland Bainton hace notar que ‘desde fines del período del Nuevo Testamento hasta la década de los años 170-180 A.C. no hay evidencia alguna de que haya habido cristianos en el ejército’. [...] Fue solo gradualmente que los cristianos dejaron de oponerse al servicio militar [...] Una vez que Agustín apoyó la ‘guerra justa’ a manera de autorizar la participación de los cristianos en actividades militares, la ‘guerra justa’ pronto llegó a ser cualquier guerra en la que el gobierno de ellos estuviera envuelto”.
El artículo pasa a exponer el verdadero punto en cuestión para los cristianos: “¿Puede alguien imaginarse seriamente a Jesús lanzando granadas de mano a sus enemigos, usando una ametralladora, manipulando un lanzallamas, haciendo caer bombas nucleares o lanzando un proyectil balístico intercontinental que matara o lesionara a miles de madres y niños? [...] Si Jesús no podía hacer eso y permanecer fiel a su personalidad, entonces ¿cómo podemos hacerlo nosotros y permanecer fieles a él?”. ¿Cómo ha afectado esto a la cristiandad? El escritor del Christian Century expresa su opinión como sigue:
“La perversión del cristianismo tocante a este punto crítico [debido a la idea de una ‘guerra justa’] que propuso Agustín fue la más grande calamidad que le haya ocurrido a la fe. Ha costado a los cristianos un sinfín de oportunidades de dar testimonio acerca de su principio ético central: ama a tus enemigos y obra el bien para con los que te desprecian. Tal vez haya perjudicado la evangelización cristiana tanto como cualquier otra cosa que haya ocurrido en cualquier otro tiempo”. Claro, este estigma no ha “perjudicado” la evangelización en pro de Cristo que efectúan los testigos de Jehová, puesto que en todas las naciones ellos resultan “fieles a él” con relación a este asunto. (Compare con 1 Pedro 2:21.)
‘Prosigan con la cirugía’
“Ya es tiempo de que los médicos [...] pongan fin a la desafortunada hostilidad que aún existe en algunas zonas” respecto a las intervenciones quirúrgicas sin el uso de sangre efectuadas en los testigos de Jehová, declaró un artículo de fondo contribuido al Canadian Medical Association Journal. “Muchos médicos ya lo han hecho, para su propio mérito.” No obstante, la publicación también hace notar: “Sigue habiendo casos en que cirujanos usan sangre ‘a hurtadillas’ después que el paciente ha sido anestesiado... lo cual difícilmente puede considerarse una práctica admirable”.
Y aunque el escritor del artículo está “convencido de que la experiencia y la tecnología avanzada ahora permiten que [los cirujanos] atiendan con éxito a los Testigos, sin insistir en suministrar transfusiones de sangre”, él pasa a preguntar: “¿Por qué, entonces, continúan las controversias del pasado, que han resultado en publicidad indeseable para los médicos y para los testigos de Jehová?”. Se citó la opinión de cierto anestesista: “Algunos cirujanos pierden tiempo arguyendo con los parientes del paciente respecto al asunto de la transfusión de sangre en vez de reemplazar los fluidos que se han perdido [...], proseguir con la operación y hacer cesar la hemorragia”.
Estos comentarios ciertamente hacen resaltar lo prudente que es dar un informe completo a los médicos por adelantado respecto a asuntos que tengan que ver con algún tratamiento controversial. “La mente discernidora busca conocimiento”, dice Proverbios 15:14 (The New English Bible). Por lo tanto, se debe proporcionar de antemano la información necesaria a los médicos para que, al tratar a sus pacientes, tomen en consideración las necesidades tanto espirituales como físicas de éstos. (Proverbios 22:3.)
Una nueva partícula y la creación
Basándose en pruebas recopiladas por la Organización Europea para la Investigación Nuclear (OEIN), los científicos creen que quizás hayan descubierto una partícula subatómica que se ha estado buscando desde hace mucho tiempo. Por medio de provocar choques a gran velocidad entre protones y sus contrarios de antimateria (antiprotones), los científicos lograron producir la nueva “partícula-W”, cuya ‘masa es ochenta veces mayor que la de cualquiera de los dos protones que la produjeron’, informa el Globe and Mail de Toronto. ‘La diferencia (el exceso de masa) se debe a la tremenda cantidad de energía que se utiliza para acelerar los protones y antiprotones antes que ocurra el choque’.
Esta masa adicional podría tener significado para las personas que creen en un Creador, pues por fracción de segundo, de acuerdo con el artículo, ‘la energía se transforma en masa’. Como la Fuente de una “abundancia de energía dinámica”, Jehová Dios tiene el derecho de señalar al universo y preguntar al hombre insignificante: “¿Quién ha creado estas cosas?”, pues Él sabe que la respuesta es obvia. (Isaías 40:26.)