-
Aves en vuelo¡Despertad! 1979 | 8 de abril
-
-
variedades de aves tienen que duplicar su peso usual antes de poder hacer tal viaje.
Efectos de las corrientes termales y diferentes velocidades del viento
Las aves también pueden valerse de las corrientes termales. Tal corriente comienza como una columna de aire caliente ascendente y la socava el aire más frío. Al ascender rápidamente, la corriente termal es como una gran burbuja de aire caliente. A medida que las corrientes termales ascienden, aves como las gaviotas y los halcones ascienden con ellas. La más espectacular de todas las aves migratorias europeas, la cigüeña blanca, se vale de estas corrientes termales al principio de su largo viaje hacia el sur. Partiendo de España, Holanda o la región del río Rin, el ave remonta estas corrientes termales hasta una gran altura antes de planear en dirección al suroeste, hacia el Estrecho de Gibraltar y a través de África.
Como otras aves, la cigüeña se remonta antes de comenzar a planear. Los ornitólogos describen el planeo como la forma más simple de vuelo. Es menos complicado que el vuelo remado o el vuelo cernido, y ahorra energía. Sin duda usted ha observado que las golondrinas planean de un lado a otro, y que solo necesitan unas pocas aletadas vigorosas para volar prolongada y elegantemente. Muchas aves se valen del vuelo de planeo antes de aterrizar, entre las cuales se destacan el ganso silvestre y los pelícanos que vuelan en formación.
La más eficaz de todas las aves planeadoras, sin embargo, es el albatros. El albatros errante, por ejemplo, pasa nueve meses del año volando en el hemisferio meridional. En su vuelo de planeo, estas aves utilizan la diferencia de velocidad entre los vientos en la superficie del océano y los que están a 15 metros sobre la superficie. Puesto que la resistencia de fricción de las olas del océano no las afecta, las corrientes de aire más altas son más fuertes y rápidas, y le permiten al albatros cobrar velocidad. Entonces, al hallarse en las corrientes de aire más lentas, el ave, que viaja a gran velocidad, es impulsada hacia arriba.
Colibríes que vuelan alto
Puesto que la habilidad de volar alto se ha notado entre muchas aves grandes, pudiera parecer extraño el hecho de que se han avistado algunas variedades de colibríes volando a una altura de 4.900 metros. Esta pequeña criatura es una de las pocas aves que puede volar hacia atrás momentáneamente. Asombrosa, también, es la velocidad de su aleteo. No parece posible que el picaflor de garganta granate que se encuentra en los Estados Unidos y el Canadá pueda dar de 50 a 70 aletadas por segundo. ¡Sí, por segundo! Ponga esto en contraste con el aleteo del pelícano, que necesita batir sus alas solo 1,3 veces por segundo para mantenerse en vuelo.
Es obvio que uno preguntará cómo le es posible al pequeño colibrí tener suficiente energía para alcanzar 4.900 metros de altura. Pero la respuesta es bastante sencilla. Los colibríes avistados a esa altura estaban en la vecindad de la nieve perpetua de los Andes ecuatorianos, montañas que tienen de 2.400 metros a 6.000 metros de altura. Puesto que se sabe que estas aves en particular viven en lo alto de los Andes, reciben un buen comienzo para alcanzar una gran altitud al volar.
‘Moradoras de las alturas’
Por lo tanto es comprensible que se observe a otras ‘moradoras de las alturas’ volando alto. Entre éstas se encuentra el cóndor andino, un ave gigante de más o menos el tamaño del cóndor de California, que está en su ambiente en las cumbres más altas de los Andes. Así es que, no sorprende que se haya visto estas aves volando con aparente facilidad en el aire ralo a una altura de unos 2.040 metros sobre un pico andino de 3.950 metros de altura.
Es posible que la mayor altura registrada alcanzada por las aves de vuelo haya sido la lograda hace alguno años por una bandada de gansos que en su migración cruzaba sobre los altos Himalayas. En ese entonces los científicos estaban fotografiando el Sol sobre la India cuando vieron a los gansos volando en formación de V al nivel del monte Everest aproximadamente 8.800 metros de altura.
¿Qué hay en cuanto al ave de sir Edmund Hillary y su guía vieron volar a gran altura? Ninguno de los hombres pudo identificarla. Quizás haya sido esa ave parecida a buitre que se conoce como el quebrantahuesos. De vez en cuando se han visto quebrantahuesos volando a alturas que varían entre los 7.300 y los 7.600 metros en la zona del monte Everest.
¿Podrían tales aves, los gansos que vuelan a grandes alturas, los cóndores y tal vez los quebrantahuesos, volar más alto si fuera necesario? ¡Es muy posible que podrían!
-
-
“Harmatán”¡Despertad! 1979 | 8 de abril
-
-
“Harmatán”
POR EL CORRESPONSAL DE “¡DESPERTAD!” EN LA COSTA DE MARFIL
“¡¡¡CRAC!!!” El sonido venía de la habitación de al lado. Sorprendido, miré a mi alrededor nerviosamente. Pero ninguna otra persona parecía haberlo notado.
“¿Qué —eh— qué fue eso?” le pregunté a mi compañero.
Sin casi levantar la vista de la mesa, respondió: “harmatán,” mientras continuaba revolviendo su café.
En ese entonces yo acababa de llegar a la Costa de Marfil como misionero de los testigos de Jehová. Despertada mi curiosidad, me asomé por la ventana. El cielo, cubierto con una neblina a través de la cual el sol brillaba con el color de la sangre, lucía amenazador.
“Está oscureciendo un poco temprano, ¿verdad?” pregunté un poco preocupado. “¿Será que viene un tifón o algo parecido?”
“¿Eso? Oh, eso solo es harmatán,” contestó mi huésped sin perturbarse. Entonces pasó un dedo por la barandilla del balcón, y me mostró el polvo rojo en la yema de su dedo, estornudó violentamente y dijo: “Y eso también es harmatán.”
Quizás usted pregunte, como hice yo: “¿Qué es harmatán?” Los residentes de aquí le contestarán que es un viento caliente y seco, muy cargado de polvo. Se origina en las candentes arenas del Sáhara y sopla hacia el sur y el oeste a través del África occidental. Por lo general se desarrolla en diciembre, enero o febrero y dura por unos cuantos días o por varias semanas.
¿Qué lo causa?
Se sabe que en el Sáhara las temperaturas alcanzan los 54 grados centígrados a la sombra. Por una profundidad de varios centímetros, la temperatura de la arena puede pasar de los 93 grados centígrados. El aire caliente generado
-