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¿Por qué hay tanto odio?¡Despertad! 1984 | 22 de junio
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recurran a terribles actos de violencia. Sí, a menudo hay agravios legítimos que añaden leña al fuego. Pero al ver la desesperación, el estado desesperanzado y la agonía de un sinnúmero de víctimas del prejuicio y la violencia que resultan del odio, tal vez usted pregunte en desconsuelo: ‘¿Por qué? ¿Por qué hay tanto odio? ¿Será posible eliminarlo? ¿Estará el mundo algún día libre del odio?’.
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¡Hay esperanza para las víctimas del odio!¡Despertad! 1984 | 22 de junio
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¡Hay esperanza para las víctimas del odio!
EL ODIO sí será eliminado de todo el mundo. Pero antes de ver cómo se realizará esto, tenemos que saber 1) las causas del odio, y 2) lo que se necesita para eliminarlo.
Por supuesto, la palabra “odio” se usa con frecuencia. Un niñito hace un gesto de disgusto y declara: “¡Odio el aceite de hígado de bacalao!”. Usted quizás no lo culpe. Pero obviamente no estamos hablando de esta clase de odio.
El odio que causa las contiendas y el dolor del día moderno proviene de una hostilidad intensa que a menudo es maliciosa. Puede ser una enemistad constante para con cierta gente o pueblo. Tal odio es como fuego consumidor. Cuando se descontrola puede ser mortífero, como muy bien lo sabemos.
¿Qué lo causa?
En primer lugar, la manera como a veces se enseña la historia a los jóvenes puede influir en el entero punto de vista de ellos respecto a ciertas naciones y pueblos. Hay que admitir que las influencias del hogar contribuyen a ello. Los niños difícilmente pueden pasar por alto las declaraciones despectivas referentes a otra raza u otro pueblo. Pues, ¡mire cómo algunos irlandeses consideran a los ingleses, y viceversa!
Los propagandistas tienen culpa también. Sea usted joven o anciano, lo que usted oye puede influir en su manera de pensar. Por ejemplo, cuando alguien escucha cierta propaganda política, puede llegar a odiar a ciertas personas debido a que algún astuto manipulador de la mente las estereotipa incorrectamente. ¡Cuán a menudo sucede esto en tiempo de guerra! En cuanto a esto, J. A. C. Brown escribió lo siguiente en Techniques of Persuasion: “Bastante a menudo, como en la propaganda de guerra, la persona sencillamente trata de despertar fuertes sentimientos de odio [...] en contra de otro grupo”. ¿Cuáles son los efectos de tal propaganda? Brown dice que “no solo resulta en un odio exagerado del enemigo, sino que alivia nuestro propio sentido de culpabilidad cuando nosotros también nos comportamos de manera brutal”.
Puede que a usted le vengan a la mente otras causas del odio. Pero, como otras personas razonables, usted se interesa mucho más en lo que se puede hacer para eliminar esta causa de tanto sufrimiento. Entonces, ¿qué hay en cuanto a esto?
¿Qué se puede hacer al respecto?
Por supuesto, usted no puede cambiar por sí solo el mundo. Pero tal vez piense que la religión podría ejercer una influencia excelente en contra de las diferentes clases de odio. Pues bien, piense en esto por un momento. En muchos casos, ¿no se ha promovido el odio debido al fanatismo religioso? Por lo menos se puede ver que las religiones del mundo no han tenido mucho éxito en vencer esta plaga que azota a la sociedad humana. Solo considere los bandos de diferentes creencias religiosas que están guerreando en el Líbano e Irlanda del Norte. Es interesante notar lo que Jonathan Swift, escritor del siglo XVIII, declaró: “Tenemos
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