BIBLIOTECA EN LÍNEA Watchtower
Watchtower
BIBLIOTECA EN LÍNEA
Español
  • BIBLIA
  • PUBLICACIONES
  • REUNIONES
  • ¿Cuán seguro está su dinero?
    ¡Despertad! 1982 | 22 de marzo
    • en común: la necesidad, cada vez mayor, de tener dinero. Algunas están dispuestas a trabajar horas adicionales para ganarlo. Pero una cantidad creciente de ellas no está dispuesta a hacerlo; de modo que roban. Y no son solo los delincuentes empedernidos y los desempleados los que hacen esto; hoy día muchos negocios descubren que la mayoría de los robos de los que ellos son víctimas los cometen sus propios empleados, muchos de los cuales ocupan puestos de responsabilidad.

      Menos seguro

      El significado de todo esto es que su dinero está menos seguro hoy día. Pero esto no es sorprendente, puesto que la profecía bíblica predijo que en los “últimos días” de este sistema de cosas habría “tiempos críticos, difíciles de manejar.” (2 Timoteo 3:1) Por eso, no cuente con un cambio favorable en estas tendencias. No hay mucha posibilidad de que su dinero esté más a salvo en el futuro. Al contrario, a medida que este sistema va en dirección a su fin, es posible que rija mayor inseguridad económica.

      Entretanto, le conviene a usted ser realista en cuanto a su modo de vivir y sus gastos. No viva por encima de sus posibilidades. Si es necesario, pase sin algunas cosas, más bien que contraer muchas deudas con todos los problemas que esto conlleva. Cuando se le haga necesario recurrir al crédito, empléelo prudentemente. Y enseñe a sus hijos, tanto por instrucción como por ejemplo, el valor del dinero y la necesidad de conservarlo.

      Además, evite la trampa de tratar de trabajar más y más horas, o de tener dos trabajos, a fin de mantener una norma de vida más elevada. Aunque ese trabajo adicional puede ayudarle a compensar por lo que le quita la inflación “ladrona,” le robará el tiempo vital que usted necesita para cuidar de las responsabilidades que usted tiene para con su Creador y su familia. Solo Dios, en su nuevo orden, puede resolver los problemas económicos de la humanidad. Y él ciertamente hará esto. Por eso, dentro de poco las actuales incertidumbres de la vida serán para siempre cosas del pasado cuando la “nueva tierra” de Dios se haga una realidad.—2 Pedro 3:13; Revelación 21:1.

  • Un hombre y la inflación
    ¡Despertad! 1982 | 22 de marzo
    • Un hombre y la inflación

      Temblando y sudando a causa del nerviosismo, un jornalero mal vestido abrió sobre el escritorio del alcalde de Votorantim, Brasil, un bulto envuelto en paños que trajo consigo. Vació sobre el escritorio varios paquetes de dinero en billetes y unas 300 monedas, y le rogó al alcalde que le guardara el dinero en un lugar seguro. Tal era la antigüedad de los billetes, que éstos estaban pegados unos a otros, y las monedas databan de 1938 en adelante. Benedito Antunes da Silva entonces relató su historia al alcalde asombrado.

      Según el periódico “O Estado da São Paulo,” la madre de Benedito había sido la “banquera” de la familia por más de 40 años y guardaba el dinero bajo llave en un baúl. En el transcurso de los años agregó dinero con regularidad a la fortuna de la familia, de modo que se acumularon más de 170.000 cruzeiros. Pero a Benedito le asustó la idea de tener tanto dinero almacenado en su choza de barro y temía que alguien lo asaltara. Por eso acudió al alcalde y pidió que le guardara el dinero. El alcalde entonces llamó a la policía y ésta vino y corroboró lo que el alcalde temía: ¡la “fortuna” no tenía ningún valor en absoluto! Todos los billetes y las monedas irían a parar entre los cruzeiros “antiguos,” que hacía años habían dejado de circular.

      El jornalero perplejo, que para entonces estaba llorando, se enteró de que si se hubiese utilizado el dinero cuando estaba en circulación, en vez de tenerlo guardado, pudieran haberse comprado 17 casas de clase media, cuyo valor actual podría representar una verdadera fortuna. En lugar de eso, Benedito salió tristemente de la oficina con 500 cruzeiros ($6,00, E.U.A.) en su bolsillo, que le había dado el compasivo investigador policíaco. ¡He aquí otra víctima de la inflación!

Publicaciones en español (1950-2025)
Cerrar sesión
Iniciar sesión
  • Español
  • Compartir
  • Configuración
  • Copyright © 2025 Watch Tower Bible and Tract Society of Pennsylvania
  • Condiciones de uso
  • Política de privacidad
  • Configuración de privacidad
  • JW.ORG
  • Iniciar sesión
Compartir