para que su Hijo comprara a la familia humana. Hay muchos que rehusarán reconocerse como esclavos y venir a quedar bajo este precio de compra y que escogerán ir por su propio camino, pero ese camino de ellos, que es el camino de “este mundo,” resultará en su muerte.—Juan 3:16; 1 Juan 2:17, NM.

21. ¿Qué obligaciones trae el escoger servir a Jehová?

²¹ “La memoria del justo será bendita; pero el nombre de los inicuos se podrirá.” (Pro. 10:7) Los que rechazan el rescate morirán eternamente y por eso serán aniquilados, de modo que nunca tengan existencia alguna. Así como Jehová Dios registró por medio de su profeta Jeremías: “Dormirán un sueño perpetuo, y no despertarán más, dice el Rey; Jehová de los Ejércitos es su nombre.” (Jer. 51:57) Todas las personas que han dedicado su vida al servicio de Jehová Dios tienen que comprender que el ser cristiano es una cosa seria; y, como lo expresó Moisés: “No debes tomar el nombre de Jehová tu Dios de manera indigna, porque Jehová no dejará impune al que tome su nombre de manera indigna.” (Éxo. 20:7, NM) Uno no debe pensar que porque se ha dedicado a Jehová Dios y se bautizó en agua, ahora Dios está obligado a hacer todo para él. Dios ciertamente cumplirá su parte del acuerdo en cuanto a bendecirlo y cuidar de uno; pero el esclavo, que dice que dará devoción exclusiva a Jehová Dios, también tiene que cumplir su parte del arreglo. Tiene que mostrar que es un esclavo, y un esclavo obediente del Gobernante Soberano. La vida de uno depende de su adoración verdadera, genuina, y ‘el Padre está buscando tal clase de adoración,’ porque él es “un Dios que exige devoción exclusiva.”

‘Mi carga es liviana’

1. ¿Qué piensan los que apoyan la cristiandad del hacerse uno seguidor de las pisadas de Jesús?

LA MAYOR parte de la gente del mundo sigue el proceder en que se encuentra la menor oposición, y sigue el camino de la gran mayoría, el cual lleva al pecado y con el tiempo a la muerte y aniquilación. Algunos piensan que el ser cristiano es una tarea muy difícil, y mayor que la que pueden soportar en este mundo inicuo. A muchos no les molesta ser “cristianos,” así llamados, de la cristiandad, donde pueden practicar todos los desenfrenos, participando en las concupiscencias de la carne como la cristiandad lo aprueba; y creen que están procediendo bien. Pero el ser cristiano verdadero, uno que anda en las pisadas de Cristo Jesús, se considera en la mente de la mayor parte de la gente como una cosa difícil de hacerse. Pero, ¿cómo podemos armonizar la tarea supuestamente difícil de ser cristiano con la expresión de Cristo Jesús, quien dijo: “Mi carga [es] liviana”? Veamos qué dijo Jesús: “Vengan a mí, todos ustedes los que se afanan y están cargados, y yo los refrescaré. Tomen mi yugo sobre ustedes y háganse mis discípulos, porque soy de genio apacible y humilde de corazón, y hallarán refrigerio para su alma. Porque mi yugo es suave y mi carga liviana.”—Mat. 11:28-30, NM.

2, 3. (a) ¿Qué requiere Jehová de sus siervos dedicados? (b) ¿Cómo obró de acuerdo con ese requisito Jesús mismo e hizo arreglos para que otros lo hicieran?

² ¿Qué es, exactamente, lo que requiere Jehová Dios que hagamos nosotros como cristianos? Al examinar las Escrituras hallamos que la primera cosa es predicar el mensaje del Reino Triunfante por todo el mundo para dar un testimonio a todas las naciones. Toda la gente puede hablar en alguna lengua y expresar sus sentimientos y sus pensamientos. Y si uno tiene un verdadero y profundo sentimiento de devoción a Jehová Dios y tiene la mente de Jehová según se expresa en su Palabra, entonces predicará buenas nuevas a otros. Esto en sí mismo ciertamente no es una tarea difícil. A los del género humano que han estado afanándose y esclavizándose en la organización del Diablo y se han hecho esclavos de ella Jesús los invita a dejar su condición agobiada y a venir a él y ser refrescados. Jesús no pide que tome usted el yugo sobre usted mismo y haga todo el trabajo solo. La traducción marginal de esta expresión “Tomen mi yugo” dice: “Métanse bajo mi yugo conmigo.” En otras palabras, tiren de la misma carga y hagan la misma cosa que Jesús hizo cuando estuvo sobre la tierra. Su trabajo asignado fué el de predicar a las ovejas perdidas de Israel y ponerlas en línea para las bendiciones del Reino de Dios. No sólo Jesús mismo hizo dicha predicación, sino que envió a sus discípulos a las aldeas a predicar las buenas nuevas del Reino. Quiso que aprendieran los propósitos de Jehová a los pies de él y luego que los contaran en toda ocasión.

³ Al leer la vida de Cristo en los cuatro evangelios hallamos que Cristo fué una persona de genio apacible, humilde de corazón; y todos los que vinieron a él hallaron refrigerio para su alma. Los enfermos, al ser sanados, estaban ansiosos de decir lo que había pasado; y a sus seguidores inmediatos la única responsabilidad que les impuso fué el predicar, conversar con otros y llevarles consuelo. Él les dijo que fueran de casa en casa, de aldea en aldea, de ciudad en ciudad, de país en país. Y este gran trabajo de expansión de ir a los no judíos de país en país comenzó siete años después que Jesús comenzó su predicación. Ante todo el mensaje había de dirigirse a los judíos para darles plena oportunidad de oír el mensaje divino; y este mensaje fué presentado de una manera muy sencilla, simplemente mediante un programa de hablar. Ciertamente ese yugo era suave. No era una carga pesada que se colocara sobre alguien.

4. ¿Dónde surge la dificultad en ser predicador cristiano?

⁴ Bueno, ¿dónde surge la dificultad en ser cristiano? De seguro que la predicación no es lo que es difícil. Es la oposición que el Diablo levanta contra los que son de genio apacible y humildes de corazón y hacen la obra que Jesús ha asignado que hagan los cristianos. Jesús nos advirtió que la oposición sería intensa, pero que la obra que daba a los cristianos para que la hicieran sería liviana. No sería una carga pesada, más pesada de lo que pudieran aguantar. En su sermón del monte Jesús dijo: “Felices son los de corazón puro, puesto que ellos verán a Dios. Felices son los pacíficos, puesto que ellos serán llamados ‘hijos de Dios’. Felices son los que han sido perseguidos por causa de la justicia, puesto que el reino de los cielos les pertenece a ellos. Felices son ustedes cuando la gente los vitupera y los persigue y mentirosamente dice toda clase de cosas inicuas contra ustedes por mi causa. Regocíjense y salten de gozo, puesto que su galardón es grande en los cielos; porque de esa manera persiguieron a los profetas antes de ustedes.”—Mat. 5:8-12, NM.

5, 6. (a) ¿Quiénes son ahora los opositores de los que predican el mensaje del Reino de Jehová? (b) ¿Desde qué punto de vista ven esa oposición esos predicadores?

⁵ Jesús, describiendo las condiciones que existirían en la tierra en estos últimos días cuando estas buenas nuevas del