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  • Se buscan: mentes de autómata para hoy
    La Atalaya 1955 | 15 de junio
    • Se buscan: mentes de autómata para hoy

      DIOS no creó al hombre con mente de autómata. Pero las masas hoy en día a menudo se portan como si tuvieran mente de autómata. ¿Por qué? Por causa del temor. En los países comunistas hay temor de la muerte. En el Occidente hay temor de los comunistas y temor de perder el prestigio. Donde hay temor la gente busca la tranquilidad que le proviene del conformarse. Lo que resulta es la mente mecánica. Si a las mentes desconformes no se les considera como “riesgos a la seguridad,” por lo menos se les somete a desaprobación popular que siempre va aumentando. Recientemente ha aparecido en las noticias el nombre del Dr. Albert Einstein, el hombre que quizás más profundamente haya atisbado en los secretos del universo que cualquier hombre de nuestro día. Por mucho tiempo el Dr. Einstein fué por unanimidad un héroe brillante. Pero particularmente una reciente declaración del Dr. Einstein desagradó la mente del público; no obstante ésta suministró a las personas pensadoras un comentario triste acerca de lo que se llama el “mundo libre.”

      Dijo el Dr. Einstein: “Si yo fuera joven otra vez y tuviera que decidir cómo ganar la vida, yo no procuraría ser científico ni erudito ni maestro. Más bien escogería ser plomero o buhonero en la esperanza de encontrar ese grado modesto de independencia que todavía es posible tener en medio de las circunstancias actuales.”—El Times de Nueva York, 10 de noviembre de 1954.

      Muchos otros hombres de mente penetrante han señalado al peligro que yace en la tiranía de las mentes automáticas. El presidente James R. Killian, hijo, del Instituto de Tecnología de Massachusetts, recientemente deploró “lo que a veces parece ser una preocupación por procedimientos y reglas de seguridad a costo del progreso científico.” El presidente de la Academia Nacional de Ciencias, Detlev W. Bronk, declaró que “la explotación del temor y el mal entendimiento por los que buscan fines egoístas o nocivos está creando un medio ambiente que no es adecuado para el fomento de la ciencia.” Acerca de este mismo punto la Times Magazine de Nueva York del 25 de abril de 1954 comentó: “No debe distinguirse contra el científico y ‘encerrarlo, enjaularlo, confinarlo.’ Especialmente no debe hacerse esto al científico. Si se le hace, quizás no prospere.”

      Pero el asunto envolvía más que sólo el que los científicos no prosperaran. Declaró el comité ejecutivo de la Confederación de Científicos Americanos: “El peligro yace en que se desanime a hombres de mente independiente, incluyendo a muchos científicos, en cuanto a prestar sus talentos al gobierno.” (Science News Letter del 12 de junio de 1954) Y el matemático John von Neumann, del Instituto de Prínceton para Estudio Avanzado, quien fué nombrado recientemente para servir en la Comisión de Energía Atómica, declaró: “Muchísimas personas que tienen alguna mancha insignificante en su pasado lejano no saben si pueden correr el riesgo de entrar en trabajo delicado.” El Dr. von Neumann admitió que el sistema de seguridad como se aplica ahora bien podría resultar “en el control del pensamiento.”—Time del 1 de noviembre de 1954.

      Manifestando que el presente sistema de seguridad en realidad producía resultados dañinos, el Dr. Vannevar Bush, presidente de la Institución Carnegie de Wáshington, dijo en la Science News Letter del 6 de noviembre de 1954: “Hace una semana yo conocí a un hombre que era miembro del comité científico que asesora al Consejo de Seguridad, y él me dijo: ‘Pues, casi hemos dejado de trabajar. Es absolutamente imposible lograr algo en este medio ambiente.’ Ahora ésa es la clase de respuesta que obtendría de tres de cada cuatro científicos hoy en día. . . . El hecho básico es que este país ha estado pasando por una ola de histeria. Cuando la gente tiene temor hace cosas raras. Una de sus reacciones inmediatas es una tendencia a abandonar sus libertades.”

      De manera que los científicos no están solos en su situación apremiante. Como lo indicó el Dr. Einstein, los eruditos y maestros se dan cuenta de que el pitón de la conformidad está ahogando la libertad de ellos. Así es que no todas las declaraciones que exponen la condición en que se halla al presente la libertad mental las han hecho científicos. Escritores, maestros, abogados, diplomáticos y otros intelectuales han protestado ante la demanda persistente de que haya mentes automáticas. Adlai Stevenson recientemente declaró: “Aun la conformidad—el control de los pensamientos—ha reaparecido en nuestro país justamente cuando exhortamos al mundo a que se mantenga firme en contra de las tiranías del fascismo soviético. Y parece que estamos en más peligro hoy día de la explotación de la mente que de la del cuerpo, de hacernos autómatas mentales más bien que esclavos económicos.”—Look del 16 de noviembre de 1954.

      Esta es la edad del temor. Como lo expresó Harold E. Talbott, secretario de las fuerzas aéreas, estamos “viviendo en un medio ambiente de amenaza que no tiene precedente en la historia de la humanidad.” (Times de Nueva York, 12 de noviembre de 1954) Este temor sin precedente ha producido la edad de la conformidad, la edad del control de los pensamientos, la edad de las mentes automáticas. El hombre está sobrecogido de un temor que entorpece de tal manera su mente que él ni siquiera se atreve a tratar de despertar las mentes automáticas. En su libro reciente An Almanac of Liberty, el juez William O. Douglas de la Corte Suprema de los Estados Unidos de América dijo: “Los que se declaran en contra de la neurosis que nos ha sobrecogido en medio del siglo veinte arriesgan mucho. Pero si permanecen en silencio son indignos de su herencia. . . . Si unas cuantas mentes enfermas pueden transferir su psicosis a la entera comunidad, cualquier persona fácilmente puede llegar a ser víctima de la calumnia y de las mentiras que han resultado del moderno esfuerzo por buscar y eliminar la herejía.”

      ¿Por qué está el mundo tan enfermo que aun el “mundo libre” se esclaviza en una tiranía de histeria, temor y mentes de autómata? Porque una mente enferma sobrehumana, Satanás el Diablo, desvía a toda la tierra. Este es un hecho que se oculta de la gente. Pero está claro en la Biblia: “Satanás, el cual está desviando a toda la tierra habitada.” De modo que no solamente los países comunistas, sino toda la tierra, está bajo la influencia malvada de este espíritu maestro inicuo. Los que estiman su vida tienen que despertar sus facultades mentales. Este es el tiempo para pensamiento claro, no para apatía. El apóstol Pedro escribió: “Estoy despertando sus facultades de pensamiento claro.” Y ¿qué es lo que el pensamiento claro revela? Esto: se ha acercado un nuevo mundo.—Apo. 12:9; 2 Ped. 3:1, NM.

      Jesús predijo para los últimos días del mundo de Satanás la señal de que los hombres ‘se desmayarían debido al temor.’ Hombres que se “desmayan debido al temor” fácilmente llegan a ser mentes automáticas. Los verdaderos cristianos despertarán su mente y verán que el fin de esta edad del temor y del control de los pensamientos está cerca. La gran guerra del Armagedón amenaza desatarse. En esta guerra Cristo el Rey borrará de la existencia a Satanás y sus hordas de mentes automáticas. Un nuevo gobierno dominará la tierra. Será un solo gobierno para toda la gente. El rey de ese nuevo mundo, Cristo Jesús, no permitirá que el temor o mentes de autómata estropeen la paz de una tierra paradisíaca.—Luc. 21:26, NM.

  • ¿Cómo viene Cristo la segunda vez?
    La Atalaya 1955 | 15 de junio
    • ¿Cómo viene Cristo la segunda vez?

      Cristo Jesús prometió que él vendría otra vez. El hecho de que muchos han quedado desilusionados en cuanto a su vuelta no prueba que él nunca vendrá, sino sencillamente que ellos carecieron de entendimiento. ¿Cómo volverá Cristo? y ¿cuándo? y ¿por qué?

      LOS apóstoles de Cristo confiadamente esperaban que él volviera, que viniera una segunda vez. Por eso fué que le preguntaron: “¿Qué será la señal de su presencia y de la consumación del sistema de cosas?” Aunque los cristianos profesos están generalmente de acuerdo en que Cristo volverá, difieren mucho en cuanto a su concepción de cómo volverá.—Mat. 24:3, NM.

      Esto se destacó en la reunión del Concilio Mundial de Iglesias que se verificó en Evanston, Illinois, durante la última quincena de agosto de 1954. Al dar consideración al tema de la reunión, “Cristo—la esperanza del mundo,” algunos insistieron en que Cristo volvería literalmente, en el mismo cuerpo humano que él tenía mientras estuvo en la tierra, tiempo en el cual él destruiría a los inicuos y salvaría a sus seguidores. Otros sostenían que Cristo viene mediante el que los hombres apliquen los principios cristianos a sus problemas de enfermedad, hambre, esclavitud y otros semejantes. ¿Qué dice la Biblia en cuanto a cómo Cristo volverá?

      Para poder apreciar la verdad respecto a cómo Cristo vuelve tenemos que apreciar primero cómo él vino la primera vez y por qué vino de la manera que lo hizo. Vino de una manera singular, porque él había tenido existencia prehumana. El testimonio bíblico es inequívoco en cuanto a esto. Dijo él: “Ningún hombre ha subido al cielo sino el que descendió del cielo” “Antes que Abrahán viniera a la existencia, yo he sido.” “Padre, glorifícame al lado tuyo con la gloria que tenía al lado tuyo antes que el mundo existiera.”—Juan 3:13; 8:58; 17:5, NM.

      Mientras estuvo en la tierra Jesús no era parte humano y parte espíritu. No, “se despojó a sí mismo y tomó la forma de un esclavo y vino a estar en la semejanza de los hombres.” Él no se vistió de carne, más bien “la Palabra vino a ser carne,” según se nos dice; él “fué producido de una mujer.”—Fili. 2:7; Juan 1:14; Gál. 4:4, NM.

      Y ¿por qué vino a ser carne la Palabra? Ante todo, para que él pudiera predicar la verdad a la humanidad. Él dijo que vino con el propósito de predicar y dijo a Pilato: “Con este propósito he nacido y con este propósito he venido yo

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