conocimiento bíblico, disfrutan de buena asociación y de viajar.

28. Explique Proverbios 19:17: “El que está mostrándole favor al de condición humilde le está prestando a Jehová, y Él le pagará de vuelta su trato.”

²⁸ Usted llega a tener muchos asociados en la congregación cristiana que espiritualmente son “hermanos y hermanas.” Como dijo el apóstol Pablo, ‘no muchos sabios según la carne, no muchos poderosos, no muchos de nacimiento noble’ están entre ellos. (1 Cor. 1:26-29) Pero ricos o pobres, son de corazón humilde, como lo fue Jesús. Además, usted encuentra otros en el mundo que están en una condición entristecida debido a la angustia creciente en la Tierra. Estos también son de condición humilde. Al esforzarse usted por hacerles bien, Jehová ve su bondad. El escritor sabio nos dice: “El que está mostrándole favor al de condición humilde le está prestando a Jehová, y Él le pagará de vuelta su trato.” (Pro. 19:17) Aunque el de condición humilde quizás no pueda pagar de vuelta de manera alguna, Jehová considera el bien que se hizo como algo que lo obliga a Él a pagar de vuelta, y lo hace generosamente.

29. ¿En qué pensamientos debe meditar una persona, en cuanto a lo que está haciendo con su vida?

²⁹ Bueno pues, ¿qué está usted haciendo con su vida? o, ¿cómo quiere usted que resulte su vida? ¿Aprecia usted tener vida aun al grado que disfruta de ella ahora? ¿Está usted dispuesto a hacer un esfuerzo razonable por aprender acerca de las provisiones y requisitos de Dios para la vida eterna? Si es así, ¿está usted dispuesto entonces a continuar en el derrotero correcto, conservando su espiritualidad por medio de estudiar la Biblia, asociarse con regularidad con los que están sirviendo a Dios y participar con ellos en declarar las buenas nuevas del reino de Dios? ¿Está usted dispuesto a dedicar su vida a Jehová Dios, viviendo con devoción de toda alma a él? Si así es, Jehová Dios y su Hijo lo amarán a usted, así como lo amarán todos los que sirven a Dios, y le ayudarán a usted a encaminarse en la senda y permanecer en el derrotero que lleva a la vida eterna.

¿Está usted mirando atentamente hacia la herencia?

“Entonces dirá el rey a los de su derecha: ‘Vengan, ustedes han sido bendecidos por mi Padre, hereden el reino preparado para ustedes desde la fundación del mundo.’”—Mat. 25:34.

1-3. (a) ¿Por qué es la herencia que tenemos la oportunidad de esperar con deleite más importante que el dinero o la propiedad? (b) ¿Qué herencias muestra la Biblia que les esperan a los que sirven a Dios?

¿SABE usted que hay una herencia que usted puede esperar con deleite? No una herencia de simple dinero, la cual puede venir acompañada de dificultad. No la clase de herencia que a menudo hace que los parientes se hagan enemigos. No, más bien, esta herencia es una en la que todos los herederos en perspectiva tratan de ayudarse mutuamente para obtenerla plenamente.

² Los apóstoles de Jesucristo a menudo hablaban de la herencia que les esperaba a los hermanos espirituales de este Hijo de Dios... una herencia en los cielos con Cristo. Estos han de participar en la regencia de su reino. Como corregentes, su herencia incluye los dones de la incorrupción y la inmortalidad.—1 Cor. 6:9, 10; 15:50; Efe. 1:14; 1 Ped. 1:4.

³ Luego hay una herencia que les espera a otros. En una de sus ilustraciones Jesús habló de los que mostrarían bondad amorosa a sus hermanos espirituales, los herederos celestiales. Dijo a estas personas de corazón bondadoso: “Hereden el reino preparado para ustedes desde la fundación del mundo.” Declaró que esto significaría vida eterna para ellos. Esta herencia no sería como la de los herederos celestiales, sino que sería la de participar en el dominio terrestre que habrá de ser regido por el reino de Cristo durante su reinado de mil años.—Mat. 25:34, 46; Rev. 20:4, 6.

4, 5. ¿Cuál es el sentido de la palabra griega traducida “hereden” en la Biblia?

⁴ La palabra griega que usa la Biblia para “hereden” es kleronomeo. En el uso susodicho no se refiere a algo que uno recibe como derecho simplemente debido a relación, como un hijo que recibe una herencia de su padre. Más bien, significa algo que se da como galardón, un don otorgado debido a las cosas que se hacen por tener fe en la provisión de Jehová por medio de Jesucristo.

⁵ Todos los que se han acercado a Jehová Dios sobre la base del sacrificio de Jesucristo y que llevan vidas dedicadas tienen la perspectiva de esta herencia. ¡Qué excelente perspectiva a la cual esperar con deleite! Es una herencia con la cual no se puede comparar ninguna herencia terrestre de parte de los padres.

LOS QUE MIRARON SIGLOS ADELANTE

6-8. (a) Describa cómo los hombres fieles de la antigüedad consideraban la herencia. (b) ¿Dónde y cuándo esperaban recibir la herencia estos hombres?

⁶ ¿Qué aguantaría usted para recibir la herencia, el galardón de la vida eterna? El apóstol Pablo describe la manera en que hombres fieles de la antigüedad, a siglos de distancia de la herencia, la consideraban. De Abrahán, escribe: “Por fe Abrahán . . . obedeció saliendo a un lugar . . . aunque no sabía adónde iba. . . . Porque esperaba la ciudad [el Reino] que tiene fundamentos verdaderos, cuyo edificador y hacedor es Dios.” “Por fe . . . ofreció, por decirlo así, a Isaac.”—Heb. 11:8-10, 17.

⁷ De otro hombre que estimó la herencia piadosa sobre todas las otras cosas, Pablo dice: “Por fe Moisés, ya crecido, rehusó ser llamado hijo de la hija de Faraón, escogiendo ser maltratado con el pueblo de Dios más bien que disfrutar temporalmente del pecado, . . . porque miraba atentamente hacia el pago del galardón.”—Heb. 11:23-26.

⁸ Estos hombres, y muchos otros como ellos, eran celosos, no de una herencia terrestre en este sistema de cosas, sino de una herencia en el nuevo orden de Dios. Pablo dice: “No consiguieron el cumplimiento de las promesas, pero las vieron desde lejos y las acogieron . . . Por lo tanto Dios no se avergüenza de ellos, de ser invocado como Dios de ellos, porque les tiene lista una ciudad [el Reino].”—Heb. 11:13-16.

9. Aunque los testigos de Jehová están más cerca de recibir el galardón que lo que estaban aquellos hombres fieles de la antigüedad, ¿están más seguros de recibirlo?

⁹ Todos los que son testigos de Jehová saben que adelante está la maravillosa herencia, el galardón, y todos desean recibirla. De hecho, no es preciso mirar muy adelante... ya estamos en el umbral. Pero ¿hay peligro de que uno pudiera despreciar la herencia, desdeñarla y perderla? Sí. Se requiere atención constante para mantener en el lugar apropiado el amor de la herencia, porque no solo tiene que estar en nuestra mente sino también en nuestro corazón. Para que cada uno de nosotros se examine, será bueno repasar un relato bíblico que enfatiza la importancia de la herencia. Es el registro de los hermanos gemelos Jacob y Esaú.

10. ¿Qué herencia de gran valor poseía Isaac?

¹⁰ Irrumpimos en el relato cuando los muchachos crecían. Ambos fueron criados por su padre Isaac y su madre Rebeca de tal modo que supieran acerca de la “descendencia” prometida que bendeciría a todas las familias de la Tierra. (Gén. 3:15) Ambos sabían que a su abuelo Abrahán se le había dicho que la “descendencia” vendría por medio de su linaje, por medio de Isaac, y que la bendición de Dios había estado sobre su padre Isaac. (Gén. 21:12;