Alista todos los países donde han estado predicando durante el año pasado y muestra la cantidad de publicadores o proclamadores individuales de las buenas nuevas que han participado en esta obra. También muestra cuántos publicadores “precursores” hay, es decir, individuos que dedican por lo menos 100 horas cada mes a predicar y enseñar el mensaje de la Biblia a personas que todavía no son Testigos. Usted también hallará en el cuadro la cantidad de personas que se bautizaron este año pasado, el tiempo que se empleó en la obra evangelizante, la cantidad de revisitas que se hicieron y la cantidad en promedio de los estudios bíblicos de seis meses que se condujeron. Todo este trabajo se hace voluntariamente; los que participan en él aprecian el privilegio de hacerlo y disfrutan de ello.

21. (a) ¿El ejemplo de quién seguimos en nuestra manera de predicar? (b) ¿Cómo puede la gente sacar provecho del mensaje que le llevamos?

²¹ Cuando los testigos de Jehová llamen a su puerta, por favor escuche lo que digan. Le están trayendo a usted el mensaje más importante del mundo... el mensaje de Dios para la humanidad hoy día. Recuerde que Jesús, en su actividad de predicar, fue directamente a la gente, dándoles así un ejemplo a sus seguidores, el ejemplo que siguen hoy día los testigos de Jehová. El discípulo cristiano Lucas, hablando de Jesús, dijo: “Iba viajando de ciudad en ciudad y de aldea en aldea, predicando y declarando las buenas nuevas del reino de Dios. Y con él iban los doce.” (Luc. 8:1) Los testigos cristianos de Jehová están caminando en los pasos de Jesucristo. Ahora, con por lo menos 2.021.432 personas que participan en la obra, se podrá llegar a muchas ciudades y aldeas durante este año de servicio y es probable que haya muchas personas más que emprendan esta misma actividad cristiana. Por favor escúcheles cuando visiten su casa, porque esto le ayudara a usted a “asirse firmemente de la vida que lo es realmente.”—1 Tim. 6:19.

22. ¿Cuál es nuestro objetivo al tener consideraciones bíblicas con la gente que está dispuesta a escuchar?

²² En estos tiempos muy angustiosos es importante que uno dirija su mente a la Palabra de Dios y la estudie. Si usted dice que le tiene aprecio a las cosas de Dios, muestre ese aprecio por medio de leer y estudiar la Biblia. A los testigos de Jehová les dará gusto sentarse con usted y señalar las respuestas que la Biblia da a los problemas con los cuales usted se encara como individuo y a los que se enfrenta la humanidad en conjunto. Entonces usted puede tomar su propia decisión, basada en lo que usted ha visto en su propio ejemplar de la Biblia, en cuanto a si el mensaje que ellos presentan es o no la verdad. Si usted ve que realmente está en armonía con la Palabra de Dios, entonces créalo y demuestre que usted mismo es un seguidor genuino del Hijo de Dios, Jesucristo. Esperamos que, con el tiempo, usted también, con aprecio cordial, diga a Jehová: “Tú eres mi refugio y mi plaza fuerte, mi Dios, en quien de veras confiaré.”—Sal. 91:2.

Lo que más vale vencer

◆ “El que es tardo para la cólera es mejor que un hombre poderoso, y el que domina su espíritu que el que toma una ciudad.” (Pro. 16:32) La veracidad de este proverbio bíblico ha sido ilustrada vez tras vez a lo largo de la historia. Ha habido muchos gobernantes que vencieron naciones, pero que fueron esclavos de sus propias pasiones o genio. Alejandro Magno fue un individuo de esta índole. Aunque venció imperios, estuvo esclavizado a una cólera incontrolable. Una vez en un arranque de cólera mató a su mejor amigo, al que profesaba amar más que a todos los demás.

La sabiduría que está detrás de este proverbio resalta tanto que muchas naciones han formado proverbios semejantes. Uno de ellos dice: “Es más héroe el que se ha vencido a sí mismo que el que ha tomado la ciudad más fortificada.”