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Alborozándose en Jehová a pesar de las penalidades de Har-MagedónLa Atalaya 1974 | 15 de febrero
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los humanos alrededor del globo terráqueo. Será la mayor guerra en toda la experiencia humana. Será necesariamente así, porque será una guerra de todos los gobernantes políticos de toda la Tierra habitada contra el mayor Guerrero de toda la existencia, Dios el Todopoderoso. Bueno, pues, ya que de seguro vendrá entonces seria penalidad sobre todo el género humano, ¿será posible que alguien en la Tierra se alboroce en Har-Magedón? ¿Qué razón podría haber entonces para que alguien entre el género humano se alborozara? ¿De qué ayuda y beneficio será el que alguien se alboroce en Har-Magedón? El Libro sagrado que es la fuente del nombre Har-Magedón suministra las únicas respuestas a estas preguntas.
5. (a) ¿Qué profeta del siglo séptimo a. de la E.C. también tuvo una visión de esa guerra, y qué significa su nombre? (b) ¿Cómo indica Habacuc 3:1 que él se interesaba en la música sagrada?
5 Siete siglos antes que el profeta cristiano Juan diera el nombre del campo de batalla de la venidera guerra universal, Har-Magedón, hubo un profeta hebreo que dio una descripción de esa misma guerra. Su nombre hebreo era Habacuc, que significa “Abrazo (de amor),” o, “Abrazo ardiente.” Terminó de escribir su conmovedora profecía alrededor del año 628 antes de nuestra era común. Estaba interesado en la música sagrada. Esto se indica en el Hab. capítulo 3 tercero y último del libro de su profecía, que está en forma de una lírica, un poema al que habría de ponérsele música. El versículo de apertura de este capítulo Hab. 3:1 sugiere fúnebres acordes de música, como los de las endechas, diciendo: “La oración de Habacuc el profeta en endechas”; o, como dice la Biblia de Jerusalén: “en el tono de las lamentaciones.” Otras traducciones bíblicas dan aquí la palabra hebrea para “endechas,” y dicen: “sobre Sigionot,” o, “conforme a cantos, o, tonos,” o, conforme al margen de la Biblia Authorized Version: “conforme a cantos, o, tonos variables.” (Valera Revisada; An American Translation; Authorized Version) The New American Bible dice: “Con un tono dolorido.”
6. (a) ¿Qué sugiere además el cierre de Habacuc 3:19 en cuanto al profeta? (b) ¿Qué edificio tenía presente sin duda, y por qué?
6 El capítulo termina con otra referencia musical, al decir: “Al director sobre mis instrumentos de cuerda.” (Hab. 3:19; Byington; AT) Otras traducciones vierten el término hebreo para “director” como “maestro del coro” y “Conductor.” (Regina; Jerusalem Bible; Jewish Publication Society) La traducción de Moffatt dice: “De la colección del maestro del coro.” Estas referencias musicales les han sugerido a algunos que Habacuc era miembro del coro del templo en Jerusalén y por consiguiente era levita. Por lo menos, al terminar su oración lírica, el profeta Habacuc se la entregó al director musical en el templo para que le compusiera una melodía adecuada. Sin duda el profeta Habacuc tenía presente al templo, pues, inmediatamente antes de su oración lírica, dice: “Pero Jehová está en su santo templo. ¡Guarde silencio delante de él, toda la tierra!”—Hab. 2:20.
7. ¿Cuál era el templo a que se hace referencia en Habacuc 2:20?
7 Probablemente el templo en Jerusalén era el que Habacuc tenía presente, pero la referencia verdadera es al templo espiritual celestial de Jehová, que Él edificó, y no el rey Salomón de Jerusalén. Fue en el Santísimo de este templo espiritual donde Jesús el Mesías entró después de su resurrección de entre los muertos y su ascensión al cielo en el año 33 de nuestra era común.—Heb. 8:2; 9:23, 24.
8, 9. ¿Dónde sitúan las Santas Escrituras el cumplimiento de la oración profética de Habacuc, y por qué?
8 A medida que estudiamos la oración lírica de Habacuc, podemos apreciar por qué pidió tonos doloridos o melodía semejante a endecha para ella. No vivió para ver contestada su oración profética. Las Escrituras Griegas Cristianas citan de la profecía de Habacuc y sitúan su cumplimiento final en el futuro, en nuestra propia generación. Es por eso que estamos interesados en ella. Nuestra fe en la inspiración de la profecía y su certeza nos lleva a esperar su cumplimiento en nuestra generación. El libro de Hebreos, escrito a los hebreos cristianizados alrededor del año 61 de nuestra era común, cita de la profecía de Habacuc, capítulo dos, versículos tres y cuatro, y dice:
9 “Ustedes tienen necesidad de perseverancia, para que, después que hayan hecho la voluntad de Dios, reciban el cumplimiento de la promesa. Porque aún ‘un poquito de tiempo,’ y ‘el que viene llegará y no tardará.’ ‘Pero mi justo vivirá a causa de la fe,’ y, ‘si se retrae, mi alma no se complace en él.’ Ahora bien, nosotros no somos de la clase que se retrae para destrucción, sino de la clase que tiene fe que resulta en conservar viva el alma.”—Heb. 10:36-39.
UNA “ORACIÓN” ¿PARA QUIÉN, PARA QUÉ?
10. (a) Aunque habla en primera persona, ¿de qué manera hablaba Habacuc? (b) Por lo tanto, ¿cómo podría ser contestada la oración a favor de aquella por la cual oró?
10 En su oración profética, Habacuc habla en primera persona, usando los pronombres yo, mi, mí. Sin embargo, en realidad, está hablando representativamente. Representa a la nación de su pueblo, el pueblo del reino de Judá con Jerusalén como su capital. Esto es evidente del Hab. capítulo tres, versículos trece a dieciséis, donde leemos: “Y saliste para la salvación de tu pueblo, para salvar a tu ungido. . . . Con sus propias varas traspasaste la cabeza de sus guerreros cuando se movieron tempestuosamente para esparcirme. . . . y en mi situación estuve agitado, para esperar calladamente el día de angustia.” De modo que aquel que habría de ser esparcido por un ejército de guerreros bajo un caudillo militar no era Habacuc mismo, sino la nación de la cual el profeta Habacuc era miembro. De modo que la respuesta a la oración de Habacuc podría venir después que él mismo estuviese muerto, y sin embargo vendría sobre la nación que esperaba calladamente por la cual él oró.
11. ¿Qué puede decirse en cuanto a si se cumplió o no la oración de Habacuc sobre los israelitas en 607 a. de la E.C., o en 539 a. de la E.C., o en 70 E.C., y en 1967 E.C.?
11 En el año 607 antes de nuestra era común la ciudad de Jerusalén y su templo fueron destruidos por los ejércitos de Babilonia, pero en aquel tiempo no hubo respuesta a la oración de Habacuc. Tampoco en el año 539 a. de la E.C., cuando la poderosamente amurallada ciudad de Babilonia en el río Éufrates cayó ante los ejércitos victoriosos de los medos y los persas bajo el rey persa, Ciro el Grande. La ciudad de Jerusalén que fue reedificada después de eso, de 537 a. de la E.C. en adelante, sufrió una destrucción y su templo reedificado junto con ella. Eso fue en el año 70 de nuestra era común, a manos de las legiones militares de Roma bajo el general Tito. Y sin embargo no hubo respuesta a la oración profética de Habacuc en aquel tiempo. Los romanos edificaron una nueva ciudad en el sitio de la ciudad demolida de Jerusalén. Aun hasta el estallido de la I Guerra Mundial en el año 1914 aquella ciudad continuó bajo gobernantes no judíos o gentiles. La captura de la antigua ciudad amurallada de Jerusalén por los israelíes en la guerra de seis días del 5 al 10 de junio de 1967, no fue la respuesta a la oración de Habacuc. Nada semejante a lo que se describe en el capítulo tres de Habacuc les sucedió entonces o desde entonces a los israelíes.
12, 13. (a) ¿Sobre quiénes, entonces, habrá de cumplirse la oración de Habacuc? (b) ¿Qué llama a éstos el hebreo cristianizado Pablo?
12 A la luz de los hechos es evidente que la oración profética de Habacuc no habrá de tener un cumplimiento sobre la República política de Israel ni sobre el movimiento sionista ni los israelitas naturales que son ciudadanos de los diversos países gentiles alrededor de todo el globo terráqueo. Hay una razón para esto. Se reveló a los hebreos cristianizados del primer siglo E.C. que la profecía de Habacuc debe tener su cumplimiento a favor de los seguidores fieles de Jesús el Mesías. Estos discípulos verdaderos de él fueron ungidos con el espíritu santo de Jehová Dios en el año 33 E.C. y después de ese año, y así éstos constituyen un Israel espiritual de Dios. Son israelitas espirituales, judíos espirituales. (Rom. 2:28, 29) Haciendo referencia a este Israel espiritual, el hebreo cristianizado, el apóstol Pablo, escribió a los cristianos en la provincia de Galacia:
13 “Jamás suceda que yo me jacte, salvo en el madero de tormento de nuestro Señor Jesucristo, por medio de quien el mundo ha sido fijado en un madero para mí y yo para el mundo. Porque ni la circuncisión es nada, ni la incircuncisión, sino una nueva creación es algo. Y a todos los que hayan de andar ordenadamente por esta regla de conducta, sobre ellos sea paz y misericordia, sí, sobre el Israel de Dios.”—Gál. 6:14-16; Regina, Latinoamericana, Revised Standard Version.
14. (a) ¿Qué ha de decirse en cuanto a si la cristiandad es el “Israel de Dios” o no? (b) ¿Cómo corresponden en cuanto a su experiencia los israelitas espirituales del primer siglo y los de hoy?
14 En los días cuando el apóstol Pablo escribió esas palabras, no existía la cristiandad, de modo que Pablo no estaba llamando a la cristiandad el “Israel de Dios.” Apenas tres siglos después sí llegó a existir la cristiandad, en los días del emperador romano Constantino el Grande, el Pontífice Máximo pagano, y aun hasta ahora la cristiandad no ha demostrado ser el Israel espiritual de Dios, bendecido con “paz y misericordia.” Tanto la I Guerra Mundial como la II Guerra Mundial estallaron en la cristiandad, y las naciones que entonces no se mostraron misericordia unas a otras fueron en su mayor parte naciones de la cristiandad. Los cristianos fieles del primer siglo a quienes el apóstol Pablo llamó “el Israel de Dios” llegaron a estar bajo persecución por el Imperio Romano. Correspondientemente, el resto sobreviviente de ese Israel espiritual de Dios que estaba viviendo en el tiempo de la I y II Guerras Mundiales llegó a sufrir persecución de parte de las naciones en guerra de la cristiandad. ¿Por qué? Porque estos israelitas espirituales, ungidos con el espíritu santo de Dios, trataban de “andar ordenadamente por esta regla de conducta,” rehusando participar activamente en derramar sangre con las naciones de la cristiandad.
15. ¿De quiénes se compone este resto del Israel espiritual desde 1914 E.C., y cómo habrían de ser identificados?
15 ¿De quiénes se componía ese resto de israelitas espirituales ungidos con espíritu santo de Jehová Dios? Los hechos de la historia los identifican. Eran aquellos acerca de quienes Jesucristo dijo en su profecía sobre la “conclusión del sistema de cosas”: “Entonces los entregarán a ustedes a tribulación y los matarán, y serán objetos de odio de parte de todas las naciones por causa de mi nombre.” (Mat. 24:9) Esos cristianos ungidos con espíritu sobre quienes tuvieron su cumplimiento esas palabras proféticas desde 1914 E.C. eran los fieles estudiantes de la Biblia que se conocen como testigos cristianos de Jehová. Su posición neutral semejante a Cristo para con la política nacional, revoluciones y guerras internacionales se conoce bien en todo el mundo, y ha concentrado en ellos el odio y la persecución de parte de la cristiandad y también de parte de naciones que no constituyen parte de la cristiandad. Sin embargo, Jehová su Dios los ama. Por decirlo así, están en su ‘abrazo amoroso,’ un hecho que se sugiere en el nombre del profeta, Habacuc.
16, 17. (a) ¿Por qué es muy apremiante que el resto del Israel espiritual adopte la oración de Habacuc? (b) ¿Por qué fue apropiado que Habacuc diera instrucciones al “director” para que le pusiera tonos de endecha a la oración?
16 Hoy estos israelitas espirituales adoptan la oración profética de Habacuc, y esperan sobre ellos mismos su cumplimiento como respuesta de Jehová, de quien son testigos ungidos con espíritu. Hay razón muy apremiante para que ellos ofrezcan esa oración a Dios. A la luz de las profecías bíblicas y la situación que se está desarrollando a través de la Tierra, ellos esperan que en breve, dentro de esta generación, la “tribulación grande” dé alcance a la cristiandad y a todo el resto de este sistema de cosas y llegue a su mayor intensidad en la “guerra del gran día de Dios el Todopoderoso” en Har-Magedón. Se dan cuenta de que esto significará gran penalidad para ellos y para todos los que se ponen de parte del resto ungido con espíritu y llegan a ser sus compañeros leales en el sufrimiento. Ya hay una “grande muchedumbre” de estos compañeros temerosos de Dios, que son como extranjeros o ‘residentes forasteros’ dentro de las puertas del Israel espiritual. (Rev. 7:9, 10, 14; Éxo. 20:10; Mat. 24:21, 22) Por lo tanto fue muy adecuado que el profeta Habacuc diera instrucciones al “director” musical del templo en Jerusalén para que compusiera los tonos sombríos de una endechaa para estas palabras de apertura:
17 “Oh Jehová, he oído el informe acerca de ti. He quedado con miedo, oh Jehová, de tu actividad.”—Hab. 3:2.
NATURALMENTE “CON MIEDO” ANTE “ACTIVIDAD” SOBRENATURAL
18. ¿Cómo oyó Habacuc el “informe” acerca de Jehová, y cómo oye el resto del Israel espiritual el “informe”?
18 Como el profeta israelita Habacuc, el resto ungido con espíritu de israelitas espirituales hoy día ha oído el informe acerca de este Dios de la Santa Biblia, cuyo nombre es Jehová. Para el tiempo de la profecía de Habacuc, se había escrito la mayor parte de las Escrituras Hebreas inspiradas, y a través de las páginas de éstas había “oído el informe” acerca de Jehová. Hoy el resto de israelitas espirituales tiene todas las Escrituras Hebreas inspiradas, y, además de ellas, todos los veintisiete libros de las Escrituras Griegas inspiradas. Por un estudio diligente de todas estas Sagradas Escrituras el resto ungido con espíritu ha “oído el informe,” el informe conforme a los hechos, acerca del Dios de Habacuc, Jehová. Es un informe imponente de lo que realmente tuvo lugar debido a Jehová Dios.
19, 20. (a) ¿Cómo ve el resto ungido, igual que Habacuc, la actividad antigua de Jehová? (b) ¿Qué efecto debería tener el “informe” de esa actividad divina sobre el resto ungido?
19 Por medio del “informe” bíblico el profeta Habacuc vio a su Dios Jehová en acción. Así mismo, el resto ungido de hoy, trazando un cuadro mental de la “actividad” de Jehová según se describe en el “informe” bíblico, también lo han visto a Él en acción. Si hubieran estado personalmente en escena en aquel entonces para ser testigos presenciales de la actividad de Jehová, habrían “quedado con miedo,” tal como Habacuc dijo que él estaba tan solo con el informe. Piense, por favor, en la actividad de Jehová en el año 1513 a. de la E.C., cuando libertó a los antepasados esclavizados de Habacuc en Egipto y luego destruyó a los carros y jinetes de Faraón de Egipto a medida que perseguían enloquecidamente a los israelitas que huían a través del lecho seco del mar Rojo.
20 Piense, también, en la demostración que inspira temor que Jehová dio en el monte Sinaí en Arabia cuando declaró los Diez Mandamientos a los israelitas acampados. Piense, además, en la actividad que desplegó milagrosamente a favor de su pueblo escogido durante los cuarenta años que vagaron en el desierto peligroso y cómo, al fin de esos cuarenta años, hizo que este pueblo migratorio pasara por el río Jordán cuando estaba crecido y entrara en la Tierra Prometida, en 1473 a. de la E.C. Piense aún más en la actividad de Jehová durante los siglos cuando levantó a los jueces para que obraran como libertadores de su pueblo oprimido. Sí, piense en cuando, no mucho tiempo antes del tiempo de Habacuc, Jehová usó a su ángel celestial para exterminar a 185.000 invasores asirios en una sola noche y libró a Jerusalén de que la capturara el rey asirio Senaquerib que desafió a Dios. Si tratamos de visualizar toda esta actividad de parte de este Dios Todopoderoso Jehová, no debe tener otro efecto sino el de hacer que quedemos con miedo. Habacuc confesó que tenía miedo.
21, 22. (a) ¿Por qué había necesidad de recordar ese “informe” que inspira temor, tanto en el caso de Habacuc como en el caso del resto ungido? (b) Por eso, ahora es el tiempo para que el resto adopte ¿qué ferviente oración de Habacuc por acción?
21 ¿Por qué, sin embargo, asustarse uno mismo? ¿Por qué recordar ese “informe” que inspira temor? Había necesidad de hacerlo a medida que Habacuc miraba adelante proféticamente hacia el futuro y previó un ataque internacional sobre los adoradores verdaderos de Jehová. Para el resto ungido de hoy hay necesidad de proceder de igual manera, porque ahora este resto sabe que se está acercando el tiempo de ese ataque internacional de parte de los enemigos de Jehová. ¡Ahora es tiempo de creer que este Dios de tal “actividad” antigua no está muerto y depender de ello! Por causa del resto ungido y sus compañeros leales es preciso que él esté vivo e igual de activo. De modo que es hora de que ellos adopten la oración ferviente de Habacuc y digan:
22 “¡En medio de los años, oh hazla entrar en vida! En medio de los años, quieras darla a conocer. Durante la agitación, de mostrar misericordia quieras acordarte.”—Hab. 3:2.
23, 24. (a) ¿Para que qué ‘entrara en vida’ en medio de los años estaba orando así Habacuc? (b) ¿La “agitación” de quién era en este caso y contra quién, y de qué manera había de recordarse el mostrar misericordia?
23 ¿Por qué estaba orando aquí Habacuc mientras hablaba proféticamente por el resto ungido de hoy día? Era para que Jehová Dios repitiera su actividad, la reavivara, la hiciera revivir, en el transcurso de los años, en el tiempo crítico durante esos años. Que vuelva Él a dar a conocer su actividad a favor de sus adoradores en peligro. Hay razón para que Jehová esté agitado de modo que actúe. Si su agitación es debido a su resto ungido y la “grande muchedumbre” de compañeros leales por motivo de algunas faltas de parte de ellos, quiera Él acordarse benignamente de mostrarles misericordia por causa de su santo nombre. Pero si Su agitación es contra los perseguidores y atacantes de sus adoradores, entonces, durante la acción que su agitación lo mueve a emprender contra estos enemigos arrogantes, que se acuerde de mostrar misericordia al resto y a la “grande muchedumbre” de compañeros en su angustia. Que no permita que la “tribulación grande” resulte en la muerte de ellos. Que cumpla la profecía de su Hijo Jesucristo en cuanto a la “tribulación grande”:
24 “Porque habrá entonces tribulación grande como la cual no ha sucedido una desde el principio del mundo hasta ahora, no, ni volverá a suceder. De hecho, a menos que se acortaran aquellos días, ninguna carne se salvaría; mas por causa de los escogidos serán acortados aquellos días.” (Mat. 24:21, 22) “De hecho, a menos que Jehová hubiese acortado los días, ninguna carne se salvaría. Mas por causa de los escogidos que él ha escogido él ha acortado los días.”—Mar. 13:20, NM; The Christian’s Bible—New Testament, por George N. LeFevre (1928), que también usa el nombre Jehová aquí.
¡DIOS EN MARCHA!
25, 26. (a) ¿Desde qué dos lugares históricos describe Habacuc entonces que Dios está marchando? (b) ¿Cuáles eran los rasgos de esas dos localidades?
25 Después que el profeta Habacuc ora para que Jehová haga entrar en vida de nuevo su actividad de la antigüedad en los años venideros, entonces Habacuc describe la clase de actividad por la cual ora, diciendo: “Dios mismo procedió a venir desde Temán, aun un Santo desde el monte Parán. Sela. Su dignidad cubrió los cielos; y con su alabanza la tierra quedó llena. En cuanto a su resplandor, llegó a ser justamente como la luz. Tenía dos rayos que salían de su mano, y allí estaba el esconderse de su fuerza. Delante de él la peste seguía yendo, y la fiebre ardiente salía a sus pies.”—Hab. 3:3-5.
26 Aquí Habacuc menciona por nombre dos lugares históricos del Oriente Medio, a saber, Temán y el monte Parán. Temán estaba asociada con la tierra de Edom. Edom (que significa “Rojo”) fue el apodo que se le dio al nieto de Abrahán, Esaú, después de haber vendido su primogenitura abrahámica a su hermano gemelo Jacob por un poco de potaje rojo para satisfacer su hambre furiosa. (Gén. 25:27-34) Parán era una región desértica montañosa que yacía al norte del monte Sinaí. En esta región desértica vagó la nación migratoria de Israel por unos treinta y ocho años antes de invadir la Tierra Prometida. (Núm. 10:11, 12; Deu. 2:14) La tierra de Edom yacía al nordeste de ésta, entre el golfo de Akaba y el mar Muerto. El “Camino del Rey” pasaba por Edom. En cuanto a Temán (que significa “meridional”), había un descendiente de Edom (Esaú) llamado Temán, y el lugar que llevaba el nombre de Temán pudo haber sido una ciudad edomita. Pero las autoridades judías la sitúan al nordeste de Edom. Pero fue desde Temán que “Dios mismo procedió a venir” cuando condujo a su pueblo escogido a la Tierra Prometida.
27, 28. (a) ¿Cómo siguieron avanzando los israelitas migratorios a pesar de enemigos y pueblos hostiles? (b) ¿Cómo concuerdan las referencias de Moisés con las de Habacuc en cuanto al punto de partida de la marcha de Israel?
27 Debido a la desaprobación y oposición de los edomitas, la nación migratoria de Israel no usó el Camino del Rey a través de la tierra de Edom, sino que probablemente haya pasado hacia el norte a lo largo de la frontera oriental de Edom y alrededor de Moab hacia el mar Muerto. (Núm. 20:14-21) Así, los enemigos y la gente hostil junto a la línea de marcha no detuvo a los israelitas al avanzar desde la región montañosa de Parán, pasando por Temán, en dirección a la Tierra Prometida. El profeta Moisés era el caudillo visible de la nación en marcha, y su descripción concuerda con la de Habacuc en cuanto al punto meridional de partida para los israelitas que avanzaban. Dentro de dos meses antes que los israelitas atravesaran el río Jordán para entrar en la Tierra Prometida, él empezó su bendición sobre Israel diciendo:
28 “Jehová... desde Sinaí vino, y fulguró desde Seir [ocupado por los edomitas] sobre ellos. Resplandeció desde la región montañosa de Parán, y con él estaban santas miríadas, a su diestra guerreros que pertenecen a ellas. También le abrigaba cariño a su pueblo; todos los santos de éste están en tu mano.”—Deu. 33:1-3.
29. ¿Cómo fue Jehová delante de su pueblo en marcha, y qué clase de registro hizo para sí mismo?
29 Por supuesto, Jehová Dios no se apareció visiblemente a la cabeza de las columnas en marcha de los israelitas. Sin embargo, aunque permaneció invisible al ojo humano, sí se hizo un registro digno de alabanza como Caudillo invisible de ellos. También, la representación visible de Él, a saber, la columna de nube de día y la columna de fuego de noche, iban delante de ellos.—Éxo. 13:21, 22; Núm. 14:14; Deu. 31:15.
30. Después de décadas en oscuridad, ¿cómo fueron sacados de nuevo a la luz los israelitas?
30 Cuando, en el año 1474 a. de la E.C., Jehová finalmente mudó a su pueblo sin hogar de la región montañosa de Parán con la Tierra Prometida como su destino, las naciones gentiles estuvieron enteradas de ello. Era como una luz brillante que les hacía manifiestas las cosas. Era evidencia de que Dios mismo con dignidad estaba en marcha. Por décadas los de su pueblo habían estado en oscuridad en el desierto de la península de Sinaí, y ahora fueron sacados a la luz. Era la poderosa “mano” de Jehová la que se veía en acción. Era como si rayos dobles de luz salieran de su “mano,” despidiendo luz en ambas direcciones, en ambos lados. Fuerza está escondida en la mano de Jehová. La luz procedente de allí es una luz fuerte. Las naciones enemigas no pueden oscurecerla ni dejar de ver su gloria.—Hab. 3:4.
31, 32. (a) ¿Cómo se cumple Habacuc 3:5 en cuanto a peste y fiebre ardiente? (b) ¿Cómo, en las llanuras de Moab, demostró Jehová su habilidad para hacer esto?
31 Concerniente al “tiempo del fin,” que a historia demuestra que comenzó en el año 1914 E.C. marcado por la I Guerra Mundial, Jesús profetizó que, no solo habría guerra internacional, sino que también habría terremotos, hambres y pestes. (Mat. 24:3, 7, 8; Luc. 21:10, 11; Dan. 12:4) Aquellas pestes fueron producidas por las condiciones insalubres creadas por el género humano inmoral y afligido por la guerra. Pero, cuando, en el futuro cercano, Jehová marche a la “guerra del gran día de Dios el Todopoderoso” en Har-Magedón, acarreará la muerte sobre muchos de sus enemigos por el medio no violento, silencioso de ejecución: la peste.
32 Entonces será peligroso, fatal, interponerse en la línea de marcha de Jehová hacia la victoria, porque delante de sus pasos enviará la peste y detrás de sus talones dejará víctimas que sufran de fiebre ardiente mortífera. Como dijo Habacuc 3:5 de Jehová que se aproximaba: “Delante de él la peste seguía yendo, y la fiebre ardiente salía a sus pies.” Él ilustró su habilidad para hacer esto durante los días finales de Moisés, cuando Jehová derribó en la muerte a 24.000 israelitas inmorales sobre las llanuras de Moab al otro lado del río de la Tierra Prometida, porque quebrantaron sus mandamientos y cometieron fornicación con paganas y se pusieron a adorar al dios falso, Baal de Peor.—Núm. 25:1-9.
NACIONES HABRÁN DE SOBRECOGERSE
33. Antes de proceder contra las fuerzas enemigas en Har-Magedón, ¿qué hará Jehová, según se sugiere en Habacuc 3:6?
33 Conforme a la manera en que Jehová ha obrado hace mucho en determinadas circunstancias, él examinará el campo de batalla de Har-Magedón y tomará nota del despliegue de las líneas de batalla del enemigo. De modo que la oración semejante a endecha de Habacuc continúa diciendo: “Se detuvo, para sacudir la tierra. Vio, y entonces hizo que las naciones saltaran. Y las montañas eternas quedaron hechas pedazos; las colinas indefinidamente duraderas se inclinaron. Los andares de mucho tiempo atrás son suyos. Debajo de lo que es perjudicial vi las tiendas de Cusán. Las telas para tiendas de la tierra de Madián empezaron a agitarse.”—Hab. 3:6, 7.
34. (a) ¿Cómo será sacudida la Tierra por el detenerse Jehová? (b) ¿Cómo saltarán las naciones cuando ‘vea’ Jehová?
34 Jehová no se apresura impulsiva y atropelladamente a nada. Toma su posición y dirige su atención a la situación que requiere acción, para ver que tiene a sus enemigos exactamente donde los quiere, habiéndose expuesto ellos plenamente en cuanto a sus intenciones. El que tome su posición, listo para acción, produce una conmoción en la “tierra” figurativa que yace delante de él; causa, por decirlo así, un terremoto en la organización terrestre del enemigo. Cuando se hace evidente que de veras es Jehová quien se ha acercado y está delante de ellos, la organización terrestre es sacudida completamente antes de caer en ruinas. Cuando las naciones al fin se dan cuenta de que Jehová Dios el Todopoderoso las ‘ve’ y que él está dándoles su atención, realmente se sobrecogen. Despertando ahora a la verdadera condición de los asuntos, saltan, no de gozo, sino con una sacudida, en un estallido de agitación. Serán como los cocheros y jinetes egipcios, que, cuando se atascaron en medio del mar Rojo, vieron la verdadera causa de su dificultad y se pusieron a clamar: “Huyamos de contacto alguno con Israel, porque Jehová ciertamente pelea por ellos contra los egipcios.”—Éxo. 14:25.
35. (a) ¿Qué les sucederá a las organizaciones, como montañas y colinas, en la línea de marcha de Jehová? (b) ¿De qué manera serán los “andares de mucho tiempo atrás” los de Jehová en ese entonces?
35 A ninguna organización terrestre, aunque sea imponentemente alta como una montaña, se le permitirá que obstruya la marcha de Jehová al triunfo. Todas las organizaciones semejantes a montañas, aunque parezcan ser eternas por la edad, serán hechas pedazos. Otras organizaciones terrestres menos prominentes, cuya capacidad para perdurar parecía ser indefinidamente duradera, como la de las colinas, tendrán que inclinarse en derrota, dejando que Jehová marche adelante, hollándolas. Sus maneras de andar en Har-Magedón serán como sus “andares de mucho tiempo atrás,” solo que en una escala grandemente magnificada. Lo que Él hizo en la antigüedad puede hacerlo hoy. Hará entrar en vida de nuevo su actividad de tiempos antiguos.
36. (a) ¿Qué se ilustra por las tiendas de Cusán que sienten perjuicio y las telas para tiendas de Madián que son agitadas? (b) Estas no se hallan entre ¿qué pueblo que se alboroza?
36 Lo que el Dios de Habacuc hace al avanzar irresistiblemente aterroriza a todos los que oyen el informe de ello, pues éstos no son amigables a Jehová ni a su pueblo escogido. Como una ilustración de éstos, Habacuc usa a los moradores de tiendas de Cusán y de la tierra de Madián, territorios estrechamente relacionados o vecinos. Aunque la tierra de Madián yacía al este del golfo de Akaba y no estaba en la línea directa de marcha de los israelitas en camino a la Tierra Prometida, no obstante los madianitas estaban agitados, por decirlo así hasta las telas de tiendas reflejaban la agitación de sus moradores. El profeta Habacuc vio “lo que es perjudicial” sobre las tiendas de Cusán. Los moradores de las tiendas pensaron que el pasar Jehová con su pueblo redimido no significaba ningún bien para los de Cusán. Los sentimientos de presión y tensión que los afligían los perjudicaban, les dolían, los mantenían en suspenso. Ciertamente no será bueno estar entre los que estén afligidos de sentimientos dolorosos y agitación por el informe de los movimientos hacia adelante de Jehová en Har-Magedón. Ellos no se hallan entre los que se alborozan en Jehová en dichas circunstancias, aunque estén envueltas penalidades.
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¿Por qué alborozarse a pesar de penalidades personales?La Atalaya 1974 | 15 de febrero
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¿Por qué alborozarse a pesar de penalidades personales?
1, 2. (a) ¿Qué se les llama a los que pueden alborozarse en Har-Magedón? (b) ¿Qué despliegue de poder sobrehumano para con las aguas efectuado por Jehová describe entonces Habacuc?
BENDITOS son los que puedan alborozarse en Har-Magedón a pesar de penalidades personales que entonces les sobrevendrán. Finalmente Habacuc manifiesta la razón de tal alborozo al llevar adelante su oración profética. Todavía describiendo las hazañas de Jehová Dios al entrar en la “guerra del gran día de Dios el Todopoderoso” en Har-Magedón, dice el profeta:
2 “¿Es contra los ríos, oh Jehová, es contra los ríos que tu cólera se ha enardecido, o es tu furor contra el mar? Porque fuiste montado sobre tus caballos; tus carros eran salvación. En su desnudez tu arco llega a estar descubierto. Los juramentos de las tribus son la cosa dicha. Sela. Con ríos procediste a hender la tierra. Montañas te vieron; llegaron a estar con dolores fuertes. Una tronada de aguas pasó a través. La profundidad acuosa dio su sonido. En lo alto sus manos alzó. El sol —la luna— se pararon, en la morada elevada allá. Como luz tus propias flechas siguieron yendo. El relámpago de tu lanza sirvió para resplandor.”—Hab. 3:8-11.
3. ¿Cómo demostró Jehová, en los años 1513 y 1473 a. de la E.C., que cosas como un mar y un río no le son obstáculo a Él?
3 No solo obstáculos semejantes a montañas no detienen a Jehová en su marcha, sino tampoco cosas que aparentemente no se pueden atravesar como ríos y mares. En el año 1513 a. de la E.C. el mar Rojo aprendió ese hecho, cuando Jehová dividió sus aguas de este a oeste a fin de hacer pasar a su pueblo liberado hasta ponerse a salvo en el litoral de la península de Sinaí. En el año 1473 a. de E.C. se le enseñó el mismo hecho al crecido río Jordán cuando Dios el Todopoderoso cortó su corriente inundadora desde el norte y secó el cauce para que su pueblo bajo el general Josué atravesara y entrara por fin en la Tierra Prometida. Ante tal trato de las aguas obstructoras, el profeta bien pudo preguntar si la ira y el furor eran contra los ríos y el mar. Mientras que Faraón de Egipto y sus jinetes y carros fueron tragados al intentar atravesar el mar Rojo, Jehová y sus ejércitos celestiales, cabalgando, por decirlo así, en caballos de guerra, se zambullen y se abren paso vigorosamente a través de cualquier cosa como ríos y mar que aparentemente bloquean el paso. ¡Sus carros simbólicos, en vez de conducir a sus conductores a un sepulcro acuoso, llevan a los que van montados a salvación, a victoria!
4. ¿Cómo puede hender Dios la Tierra con ríos y hacer que la profundidad acuosa alce en alto sus “manos”?
4 ¡Cuán fortalecedor de la fe es esto para el resto ungido de Jehová de israelitas espirituales hoy día, que, como las tribus del Israel de la antigüedad, están bajo juramentos a Él, por medio del nuevo pacto con Él mediado por su Hijo Jesucristo! Saben que las inundaciones repentinas y violentas están a disposición del Creador para hender la Tierra e inundar a los enemigos, como en los días del juez Barac y la profetisa Débora. Las aguas de los cielos arriba pueden caer copiosamente en una tronada. En contraste con las aguas que caen de arriba, se puede hacer que las aguas de la profundidad debajo de la tierra salgan en forma de géiseres o se lancen en chorro hacia arriba, como si la profundidad estuviera alzando en alto sus manos para desempeñar un papel en la destrucción de los enemigos.—Hab. 3:9, 10.
5. ¿Cómo describe Habacuc 3:11 las brillantes armas de guerra de Jehová?
5 Mientras las montañas se retuercen como si estuvieran con dolores fuertes, Jehová se exhibe como guerrero con armas de guerra sobrehumanas. Sus dardos alados de muerte y su medio de propulsarlos no son simples flechas y arco de hechura humana. No se dejarán cubiertos, ocultos, como si estuvieran en una cubierta para arco y una aljaba. Truenos rugientes y rayos crepitantes se hallan en su arsenal divino. Al relampaguear los medios de muerte de Dios para sus enemigos la luz será tan intensa de día y de noche, que el Sol y la Luna naturales, por decirlo así, sentirán que no se les necesita para iluminación. Será como si ‘se pararan,’ no funcionando como portadores de luz, sino dejando que los proyectiles radiantes de Jehová hagan una exhibición espectacular de poder iluminador. Para acrecentar el espectáculo imponente de veloces proyectiles relampagueantes de destrucción, otra arma de Jehová, más grande, como lanza, será enviada con suma rapidez por el aire y aumentará el brillo con sus relampagueos. ¡Imagínese el efecto mental de tal acción bélica sobre los enemigos de Jehová y de su pueblo!
PARA LA SALVACIÓN DE QUIÉNES SE HACE LA GUERRA
6. ¿Qué advertencia deben tomar las naciones en cuanto a los que serán salvados en Har-Magedón?
6 Que las naciones de la Tierra sean apercibidas. Los mismísimos a quienes ya por décadas han hecho los “objetos de odio de parte de todas las naciones” son aquellos a quienes Jehová salvará en Har-Magedón, mientras que las naciones mismas sufren por odiar a aquellos a quienes Él ama. Bajo inspiración, el profeta Habacuc aclara esto, al seguir diciendo: “Con denunciación fuiste marchando por la tierra. En cólera fuiste trillando las naciones. Y saliste para la salvación de tu pueblo, para salvar a tu ungido. Destrozaste al cabeza de la casa del inicuo. Hubo un poner al descubierto el fundamento, hasta el mismo cuello. Sela.”—Hab. 3:12, 13; Mat. 24:9.
7, 8. (a) ¿Después de qué gran acontecimiento religioso tendrá lugar esta salvación? (b) ¿Para preservar qué en la Tierra efectuará Jehová esta salvación, y cómo tratará él a las naciones?
7 Por lo tanto los adoradores de Jehová Dios pueden tener confianza en que Él vendrá a su ayuda en Har-Magedón. Ellos son los que estarán bajo ataque de parte de todas las naciones mundanas. Como muestra el libro de Revelación, capítulos diecisiete a diecinueve, esto será después de la sorprendente destrucción de la prostituta internacional, Babilonia la Grande, el imperio mundial de religión falsa, incluso la cristiandad. Los adoradores de Jehová que han salido de esclavitud en ese imperio religioso babilónico, serán preservados a través de la destrucción de la cristiandad y de todo el resto de Babilonia la Grande.
8 Las naciones irreligiosas que habrán efectuado esta destrucción se concentrarán entonces en tratar de exterminar de la Tierra la adoración pura del único Dios vivo y verdadero, Jehová. Para no permitir que las naciones impías tengan éxito en esto, Jehová tendrá que salir para la salvación de ‘su pueblo.’ De modo que en “denunciación” de la naciones malintencionadas marchará por la Tierra y encolerizadamente trillará a las naciones, batiéndolas bajo los pies como grano en una era.
9, 10. ¿Quién es el “ungido” a quien Jehová sale a salvar?
9 El “ungido” a quien Jehová sale a salvar no es su Hijo glorificado, Jesús el Mesías o Ungido. Revelación 17:14 y Rev. 19:11-16 revelan que Jesucristo no necesita salvación alguna de las naciones terrestres, sino, más bien, conduce a los ejércitos de los ángeles celestiales contra las naciones que están atacando al “pueblo” de Jehová en Har-Magedón. Este “pueblo” se compone del resto de los discípulos de Jesucristo ungidos con espíritu, y, juntos, estos miembros ungidos del Israel espiritual engendrados por espíritu componen el “ungido” de Jehová en Har-Magedón. Como está escrito en Salmo 28:8, 9, proféticamente, en cuanto al Israel espiritual:
10 “Jehová es una fuerza para su pueblo, y es una plaza fuerte de la magnífica salvación de su ungido. Salva, sí, a tu pueblo, y bendice a tu herencia; y pastoréalos y llévalos hasta tiempo indefinido.”—Vea también 1 Juan 2:20, 27; 2 Corintios 1:21.
11. ¿Quiénes más en la Tierra serán salvados junto con el “ungido” en Har-Magedón?
11 Junto con el “ungido” de Jehová habrá una “grande muchedumbre” de compañeros adoradores que serán salvados en Har-Magedón. Estos también habrán huido del imperio mundial babilónico de religión falsa antes de la destrucción de Babilonia la Grande. Aunque no son de los israelitas espirituales que constituyen el “ungido” de Jehová, se unirán al “ungido” en adorar y servir a Jehová en su templo espiritual. Revelación 7:9-15 nos asegura que sobrevivirán a la “tribulación grande.”
12. ¿Qué, sin embargo, le sucederá entonces a la “casa del inicuo”?
12 En contraste dramático con la salvación del “ungido” y de la “grande muchedumbre” habrá la desolación completa de la “casa del inicuo.” Como una casa que es puesta al descubierto y destruida desde el techo hasta los cimientos, el inicuo sistema de cosas que establecieron bajo la influencia invisible de Satanás el Diablo a golpes será hecho añicos. Los cabezas de esta “casa” internacional serán aplastados, destrozados, y los que componen la parte inferior de la estructura mundial serán demolidos hasta los cimientos, ni siquiera dejándose cubierto el “fundamento” en el suelo como cimientos para un nuevo edificio sobre ellos. El fundamento será puesto al descubierto, expuesto en una condición de ruina. La “casa del inicuo” no será más en la Tierra.
13, 14. (a) Cuando habla de que las naciones se mueven tempestuosamente para “esparcirme,” ¿de quién está hablando Habacuc? (b) ¿Quién es el “afligido” que las naciones esperan devorar jubilosamente en un escondrijo?
13 En el campo de batalla de Har-Magedón los enemigos nacionalistas del “ungido” de Jehová serán puestos en confusión suicida. En una visión profética de esto, el profeta Habacuc dice en su oración a Jehová como Guerrero: “Con sus propias varas traspasaste la cabeza de sus guerreros cuando se movieron tempestuosamente para esparcirme. Su júbilo exaltado era como el de los que están determinados a devorar a un afligido en un escondrijo. A través del mar pisaste con tus caballos, a través del montón de vastas aguas.”—Hab. 3:14, 15.
14 Cuando habla del esfuerzo internacional por “esparcirme” con fuerza tempestuosa, Habacuc está hablando de sí mismo como representando o estando en lugar del “ungido” de Jehová, Su pueblo que necesita salvación de los atacantes. Como merodeadores que asechan en un escondrijo a una víctima, las naciones congregadas en pleno orden de batalla en Har-Magedón saltarán sobre el “ungido” de Jehová y sobre la “grande muchedumbre” de compañeros adoradores para destruir a todos éstos como destruyeron a la religiosa Babilonia la Grande. El “afligido” que esperan devorar con júbilo exaltado en su “escondrijo” es el “ungido” de Jehová, a quien las naciones mundanas siempre han afligido en su odio de los adoradores de Jehová. Pero su escondrijo no está oculto de Jehová Dios.
15. (a) ¿Cómo es que las cabezas de los guerreros del inicuo son traspasadas “con sus propias varas” por Jehová? (b) ¿Cómo completa Jehová la destrucción de las fuerzas enemigas?
15 Jehová no será tomado por sorpresa alguna. No llevará a su “ungido” afligido y a sus compañeros leales a alguna emboscada del enemigo. Cuando las naciones antiDios ataquen tempestuosamente para esparcir a los que practican la religión verdadera y pura, el Dios Todopoderoso volverá las armas de las naciones atacantes contra ellas mismas para que peleen entre y contra ellas mismas. (Zac. 14:13; 2 Cró. 20:22-24) Sin embargo, el Dios Todopoderoso hará más que solo hacer que los enemigos internacionales usen sus propias varas militares para traspasar las cabezas de sus propios guerreros. También usará él mismo fuerzas sobrehumanas a Su mando para completar la destrucción. Con los “caballos” de sus ejércitos celestiales bajo Jesucristo, él avanzará victoriosamente a través del “mar” y el “montón de vastas aguas” de los enemigos embravecidos, rugientes. Así Su propio pueblo no será abrumado en destrucción en Har-Magedón. ¡Serán testigos presenciales de la sublime victoria de Jehová!
ESPERANDO CALLADAMENTE EL “DÍA DE ANGUSTIA”
16. ¿Cómo somos afectados por la expectativa de lo que Har-Magedón significará para la gente, como se indica por los efectos del “informe” sobre Habacuc mismo?
16 Al mirar adelante hoy a la venidera “guerra del gran día de Dios el Todopoderoso” en Har-Magedón, no excluimos de la mente lo que significará en lo que toca a las condiciones físicas de la vida de la gente, especialmente de los que estén bajo ataque de parte de las naciones desesperadas. Por consiguiente, la expectativa segura de penalidades aumenta sobre nosotros cada vez más y nos impresiona con la seriedad del asunto. Considere cómo el profeta Habacuc fue afectado simplemente por la visión profética de aquel tiempo solemne. Dice: “Oí, y mi vientre empezó a agitarse; al sonido mis labios temblaron; podredumbre empezó a entrar en mis huesos; y en mi situación estuve agitado, para esperar calladamente el día de angustia, para su subida al pueblo, para hacer él incursión contra ellos.”—Hab. 3:16.
17. (a) La agitación de Habacuc por el “informe” lo movió a hacer ¿qué, y por qué? (b) ¿Cómo debe reaccionar el resto y la “grande muchedumbre” hoy en cuanto al “informe”?
17 Tan solo al contemplar el informe sobre el venidero “día de angustia” en todo su grave significado, como se manifiesta en Habacuc 3:2-15, el profeta se sintió como si estuviera por desfallecer. Parecía que sus huesos se derretían en podredumbre, no suministrando una estructura fuerte para mantener erecto su cuerpo sobre sus pies; todo su cuerpo sufrió agitación; sus labios no podían expresar una sola palabra, sino simplemente temblaban. Su situación de veras era una de agitación aun antes de la llegada verdadera del aterrador “día de angustia.” Pero, ¿lo empujó su agitación al suicidio como vía de escape, o al uso de drogas para amortiguar sus sentidos a la realidad? ¡No! Dios indujo su agitación por medio del informe inspirado que le dio como profeta. De modo que su agitación lo afectó de la manera correcta, en la dirección correcta, a saber, “para esperar calladamente el día de angustia.” Así es como el resto de israelitas espirituales hoy, y también la “grande muchedumbre” de compañeros fieles, deben reaccionar al ver las evidencias de que el aterrador “día de angustia” está acercándose más dentro de esta generación. Deben mantenerse tranquilos y esperar.
18, 19. (a) ¿Para quién se destina el “día de angustia”? (b) ¿Cómo se personifica este día de angustia, con qué resultado para el “pueblo”?
18 Deben notar que Habacuc no dice que el “día de angustia” es para el pueblo de Jehová, Su “ungido.” Habacuc dijo que él mismo esperaría calladamente que el “día de angustia” viniera de Jehová en “subida al pueblo,” o, literalmente, en “subida a un pueblo.” En las Escrituras Hebreas el término “pueblo” a menudo aplica a un ejército, como en la profecía de Daniel 9:26. De modo que el “pueblo” para quien está preparado el “día de angustia” es el ejército hostil de las naciones que atacan al “ungido” de Jehová en Har-Magedón. Ese “día de angustia” amanecerá para ese “pueblo” o ejército antiDios.
19 Mientras que ese “pueblo” hostil se propone hacer incursión contra el “ungido” de Jehová en Har-Magedón, el “día de angustia” de Jehová será como un invasor que hará incursión contra el “pueblo” armado. Así el “día de angustia” es personificado como un hombre que sube al pueblo o ejército de los enemigos “para hacer él incursión contra ellos.” (Hab. 3:16) Como lo expresa la Versión de la Sociedad de Publicaciones Judías en inglés: “Para que espere el día de dificultad, cuando él suba contra el pueblo que él invade.” Esto significará destrucción para el “pueblo” enemigo.
20. (a) ¿Qué clase de condiciones siempre trae la guerra, y particularmente para quiénes? (b) Por eso, ¿qué condición económica mala describe Habacuc, y es esto como simplemente posible o como probable?
20 La guerra siempre trae condiciones desagradables para los que están envueltos, especialmente para los que están bajo ataque. Se puede esperar que la “guerra del gran día de Dios el Todopoderoso” en Har-Magedón traiga penalidades para los que estén entonces bajo ataque de parte de los enemigos combinados de los adoradores de Jehová. No fue como una simple posibilidad de tales penalidades que el profeta Habacuc habló de tal cosa, diciendo: “Aunque la higuera misma no florezca, y no haya fruto en las vides; la obra del olivo realmente resulte un fracaso, y los terraplenes mismos realmente no produzcan alimento; el rebaño realmente sea cortado del aprisco, y no haya vacada en los cercados; sin embargo, en cuanto a mí, ciertamente me alborozaré en Jehová mismo; ciertamente estaré gozoso en el Dios de mi salvación.” (Hab. 3:17, 18) Habacuc habla de esto como una probabilidad muy verdadera.
21. ¿Para quiénes visualizó Habacuc severas condiciones económicas, y debido a qué?
21 Proféticamente Habacuc visualizó severa penalidad económica para el “ungido” de Jehová debido al esfuerzo internacional que se haría por esparcir a los adoradores de Jehová. Parecería como si no hubiera nada de lo cual vivieran éstos. ¡Su supervivencia era dudosa!
22. (a) Conforme a Sus profecías, ¿con qué obrará Jehová contra sus enemigos durante la “tribulación grande”? (b) ¿Por qué no pueden esperar Sus adoradores trato preferente y exención de la incomodidad mundial?
22 Aun hoy, en este “tiempo del fin,” cuando las hambres, pestes, terremotos y guerra internacional están cobrando su número de víctimas de los habitantes de la Tierra aun antes del estallido de la “tribulación grande,” las condiciones económicas y otras condiciones de vida de todo el género humano están causando penalidad para más y más gente. Aun durante la misma “tribulación grande,” conforme a Sus propias profecías, Jehová Dios obrará contra sus enemigos terrestres con plaga, terremotos y otras fuerzas elementales contra las cuales Sus enemigos no pueden pelear con sus bombas nucleares y programas económicos y médicos. ¿Quién puede escapar de ser afectado hasta cierto grado? Es verdad que el resto ungido con espíritu de israelitas espirituales y la “grande muchedumbre” asociada igual que Jesús, no son “parte del mundo,” sin embargo están “en el mundo” y no pueden menos que sentir los efectos debido a las condiciones mundiales. Además, como “objetos de odio” de parte de todas las naciones y pueblos, no pueden esperar que se les dé trato favorecido y exenciones de la incomodidad mundial.—Juan 15:19; 17:11.
23. De ser ministros de Dios para el bien, ¿qué llegarán a ser las “autoridades superiores,” y cómo afectará esto a los testigos de Jehová?
23 ¿Qué hay, sin embargo, cuando las naciones, habiendo tomado su venganza sobre Babilonia la Grande, se reúnan en masa en guerra total contra los adoradores sobrevivientes de Jehová para esparcirlos y devorarlos? Ya no servirán las “autoridades superiores” gubernamentales de este mundo como ‘ministros de Dios’ para los testigos cristianos de Jehová para su bien. (Rom. 13:1-4) Su medio de servir al público en general se desintegrará o será desbaratado. Además de dejar de cumplir ya como ‘ministros de Dios’ en este sentido, ahora se convertirán en combatientes contra Jehová Dios al atacar unidamente a su pueblo, provocando así la guerra de Har-Magedón. Naturalmente, las condiciones económicas y de vida y las libertades personales de los testigos cristianos de Jehová habrán de ser reducidas a un nivel de subsistencia muy bajo. ¡La exterminación estará a la vista! ¡Oh las penalidades entonces!
24. ¿Qué preguntas surgen en cuanto a la conducta de los testigos de Jehová en ese tiempo, pero cómo las contesta por ellos proféticamente Habacuc?
24 ¿Se llenarán de terror pánico? ¿Cederán a los enemigos atacantes y renunciarán a su fe y cesarán de ser testigos cristianos de Jehová? O, ¿perderán la esperanza y se hundirán en el fangal del desaliento y morirán espiritualmente? ¡No! contesta Habacuc al hablar proféticamente por ellos. A pesar de todas estas penalidades que les son acarreadas por su fidelidad al único Dios vivo y verdadero, los testigos cristianos de Jehová clamarán: “Sin embargo, en cuanto a mí, ciertamente me alborozaré en Jehová mismo; ciertamente estaré gozoso en el Dios de mi salvación.”—Hab. 3:18.
25. ¿Cómo se vindicará entonces Jehová como Salvador, y quiénes en la Tierra serán testigos presenciales de vindicar él su soberanía?
25 Su Dios, Jehová, es un Dios de salvación, y él los salvará. Jehová se vindicará como su Salvador y Libertador. Cuando parezcan estar en su peor necesidad y sean amenazados por la exterminación segura, el “día de angustia” amanecerá de súbito sobre sus perseguidores y atacantes. Los invadirá velozmente como uno que hace incursiones, porque entonces Jehová saldrá con sus ángeles celestiales bajo Jesucristo y salvará a sus testigos fieles en la Tierra. Llegarán a ser testigos de Jehová en aún otro sentido, cuando lo contemplen destruir a todos los enemigos en la Tierra y vindicar su soberanía universal.
26. (a) En vista de las palabras de conclusión de Habacuc, ¿para qué no es éste el tiempo, en lo que toca a los testigos de Jehová? (b) ¿De qué manera obrarán como si tuvieran pies de ciervas de parte de Jehová?
26 Este no es tiempo para que los testigos cristianos de Jehová se debiliten a medida que disciernan que las penalidades incidentales a Har-Magedón están cobrando forma y están acercándose más. En cambio, que sus voces resuenen claramente con las triunfantes palabras de conclusión del profeta Habacuc: “Jehová el Señor Soberano es mi energía vital; y él hará mis pies como los de ciervas, y sobre mis lugares altos me hará pisar.” (Hab. 3:19) Fortalecidos en sus piernas espirituales por su alborozo y gozo en Jehová Dios, se lanzarán velozmente a las alturas seguras de la integridad que no conoce la derrota para con el Señor Soberano Jehová. Allí continuarán pisando con pie firme como seguidores del Rey reinante Jesucristo. Como las ciervas que se mueven a saltos saltarán a las bendiciones del justo nuevo orden de Dios, como sobrevivientes de todas las penalidades de Har-Magedón.
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Inquilinos deseablesLa Atalaya 1974 | 15 de febrero
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Inquilinos deseables
✔ El 24 de noviembre de 1971 una señora telefoneó a la oficina de sucursal de la Sociedad Watch Tower en Wiesbaden, Alemania, diciendo que había comprado una casa de apartamientos en Berlín y quería alquilar apartamientos a los testigos de Jehová. Cuando se le preguntó por qué quería tener a testigos de Jehová como inquilinos, ella contestó que una amiga de ella al sur de Alemania les estaba alquilando apartamientos y había recomendado que ella hiciera lo mismo. También comentó acerca de cuán difícil era conseguir inquilinos confiables. Habiendo quedado impresionada por la conducta de los testigos de Jehová, comentó: “Sé que estas personas temen a Dios, están dispuestas a ayudar y son hacendosas, y me daría mucho gusto si pudieran ayudarme a llevar a cabo mi plan.”
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