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Halle gozo en el don del matrimonioLa Atalaya 1985 | 1 de noviembre
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Halle gozo en el don del matrimonio
“Lo que Dios ha unido bajo un yugo, no lo separe ningún hombre.” (MATEO 19:6.)
1. ¿Con qué palabras conocidas de Jesús está bien familiarizada la cristiandad?, pero ¿qué preguntas se plantean con relación a estas?
¿LE SON conocidas estas palabras? No hay duda de que millones de personas que pertenecen a la cristiandad, las cuales componen una gran parte de la población del mundo, las conocen, pues las pronunció el Señor Jesús mientras hablaba con los fariseos religiosos de su día. Aunque las palabras quizás sean conocidas, ¿qué hay del significado de esta declaración de Jesús? ¿Sigue la humanidad en general el sentido de dicho consejo? Veamos.
2-4. a) ¿Qué situación existe hoy día en muchos países con relación a prestar atención a las palabras de Jesús que se encuentran en Mateo 19:6? b) ¿Qué actitud revelan los que pasan por alto el consejo de la Biblia sobre la permanencia del matrimonio?
2 Hoy día, en muchos países las personas tienen en muy poca estima el arreglo matrimonial y la conservación de lo que Dios ha unido bajo un yugo. En un país tras otro el divorcio ha alcanzado proporciones que pudieran considerarse epidémicas. En los países donde el gobierno no ha legalizado el divorcio no se presenta un cuadro más alentador, porque en tales países las personas a menudo abandonan a su cónyuge y se ponen a vivir con otra persona. Así que millones de personas, tanto en la cristiandad como fuera de ella, no están prestando atención al valioso consejo de Jesús registrado en Mateo 19:6. ¿Se debe esto a que el consejo de Jesús sea malo, o a que las personas no escuchan cuando Jesús habla y les interesa muy poco el consejo de Jesús sobre este asunto?
3 Es patente que gran parte de la gente no considera el matrimonio como un contrato para toda la vida si interfiere con su propio modo de vivir y sus deseos. Para tales personas basta con que el matrimonio sea un arreglo provisional si choca con sus intereses, sus gustos o sus aversiones. De modo que casi parece que con la misma facilidad con la que uno se quita un abrigo o un sombrero, otras personas se deshacen de su cónyuge, sin pensar por un momento en el consejo que Jesús dio a los que participan en la relación matrimonial.
4 Puesto que es tan común la actitud de que “todos lo hacen”, los que desean seguir el consejo seguro de la Biblia pueden ceder a influencias que los alejen de la buena enseñanza de la Palabra de Dios. Se dan buenos consejos por medio de la página impresa y oralmente, pero el no prestar atención al consejo de la Biblia puede resultar en problemas maritales. (Compárese con Salmo 19:7-11.) Si adoptamos la actitud de que cualquier cosa en el matrimonio que interfiera con nuestro modo de vivir, con nuestros placeres y deseos, puede cambiarse con solo desacatar las instrucciones de Dios con relación al matrimonio, entonces estamos en peligro. El tener semejante actitud nos pone frente a frente con uno de los problemas más graves de la humanidad, el egoísmo. Porque el egoísmo generalmente es la raíz de los problemas matrimoniales. ¿Por qué decimos esto?
El papel del pecado
5. ¿Cómo delinea el apóstol Pablo en Romanos 7:15-20 el problema que tenemos como resultado de haber nacido en pecado?
5 Los hombres y las mujeres, la descendencia de Adán y Eva, nacen en pecado e imperfección. Esto significa que a causa de la herencia del pecado, el hombre yerra el blanco y practica el desafuero a grado mayor o menor. (1 Juan 3:4.) El apóstol Pablo habló acerca de la tremenda carga que el pecado impone sobre la humanidad, porque él mismo halló que hacía lo que no quería hacer y no hacía lo que debía hacer. (Romanos 7:15-20.) Cualquiera que deliberadamente viole la ley de Dios es egoísta. En el caso de algunas personas quizás se trate de egoísmo en pequeña escala, pero en el caso de otras se convierte en su modo de vida, y su egoísmo llega a ser craso.
6, 7. ¿Qué dos problemas causa el egoísmo en el matrimonio?, los cuales nos llevan a plantear ¿qué pregunta lógica?
6 En el arreglo marital instituido por Dios el egoísmo a menudo es la raíz de algún problema entre cónyuges. Es básicamente egoísta la mujer que quiere que se le sirva como a una reina, según dice la expresión, al igual que quizás lo hacía su madre o su padre al mimarla. El hombre que quiere continuar un modo de vida de soltero, estando siempre con los “muchachos” después de casarse, es básicamente egoísta. Considere todas las formas de desacuerdos que tienen el esposo y la esposa, y verá que el egoísmo es la raíz de muchos de los problemas.
7 Al esforzarse por hacer frente a los problemas que surgen en el matrimonio, ¿cómo puede uno vencer esta tendencia innata al egoísmo? Hay varias cosas que se pueden hacer, las cuales, cuando se ponen en práctica, pueden ayudar a un matrimonio que esté a punto de fracasar. Pero cada cónyuge en el arreglo matrimonial tiene que estar dispuesto a hacer lo que le corresponda. No se trata de un arreglo unilateral. Examinemos algunos factores relacionados con el asunto.
El altruismo en el matrimonio
8. ¿En qué sentido tiene el matrimonio que ver con el compartir?
8 El matrimonio consiste en compartir, lo cual significa que ninguno de los cónyuges puede dar al otro por sentado ni pensar que todo irá bien con tal que uno de los consortes dé y el otro reciba. Eso no resultará en bendiciones para ninguno de los dos. Por ejemplo, se tiene que tomar en cuenta a los parientes de ambos lados. No se debe permitir que esto llegue a ser un asunto espinoso en el arreglo matrimonial, de modo que se tome en consideración a los padres y familiares de uno, y no a los del cónyuge. Las decisiones referentes a dónde la familia pasará las vacaciones u otros períodos de esparcimiento no deberían favorecer siempre un mismo lado. El mostrar consideración en tales asuntos contribuirá a que el matrimonio tenga éxito. Nunca dé por sentado a su cónyuge, sino que manifieste altruismo. (Filipenses 2:4.)
El factor de la edad
9. ¿Cuáles son los tristes resultados del tener un punto de vista poco serio del matrimonio?
9 Debido a que es común entre muchas personas de esta generación el punto de vista de que si el matrimonio no resulta bien se puede finalizar con el divorcio, muchos jóvenes empiezan con este punto de vista poco serio del arreglo marital. Esto puede causar, y de hecho causa, el quebrantamiento de muchos matrimonios entre adolescentes. También resulta en que se traigan al mundo muchos hijos no deseados. Estos niñitos a menudo crecen sin saber lo que es tener un padre y una madre que los amen profundamente y que los cuiden.
10. ¿De qué maneras puede Gálatas 5:22, 23 ayudar a los que están considerando contraer matrimonio?
10 ¿Qué edad debería tener una persona antes de pensar en casarse? Respecto a esto, no sería sabio establecer reglas. Sin embargo, las Escrituras dan buen consejo en cuanto a lo que constituye la madurez mental y espiritual... la clase de madurez que necesitan los que emprenden la vida matrimonial. Sírvase leer Gálatas 5:22, 23, donde hallará que se enumeran los frutos del espíritu. Examine cuidadosamente cada uno de los frutos que ahí se mencionan. Esas son las cualidades que uno tiene que cultivar en la vida. No es después de haberse casado que la persona debería comenzar a manifestar dichas cualidades, sino mucho antes, en su vida diaria de cristiano.
11. ¿Qué examen de conciencia pueden hacerse los que estén contemplando el matrimonio?
11 Por ejemplo, ¿es usted una persona que disfruta de la vida, que está feliz de estar viva, sirviendo los intereses del Reino de Cristo? ¿Existe la paz entre usted y otras personas, y promueve relaciones pacíficas con ellas? ¿O es usted una persona belicosa, dada a arrebatos de cólera y habla injuriosa? ¿Es una persona longánima, capaz de soportar las debilidades de su hermano o hermana, madre o padre? ¿O es de mal genio y tiende a encolerizarse si otros no acceden inmediatamente a lo que usted quiere? ¿Halla usted que muestra bondad a otras personas en sus tratos con ellas, siendo apacible y haciéndoles el bien? ¿O es egoísta, egotista, sin dominio de sí mismo, y propenso a desfogarse con otras personas a la menor provocación? ¿Ama a otros verdaderamente, desea ayudarles, y no escatima esfuerzos para dar de sí mismo y de sus recursos a fin de hacer felices a otros? ¿O quiere que otros le muestren amor a usted, y que otros siempre estén dándole de los recursos de ellos?
12. ¿Qué ventaja tiene el hombre o la mujer cuya vida ha sido moldeada antes del matrimonio?
12 Es cierto que ninguno de nosotros manifiesta dichas cualidades a perfección. Sin embargo, el hombre o la mujer que haya sido moldeado por algunos años de vida, y que haya tenido la oportunidad de cultivar dichas cualidades espirituales, se halla en una posición excelente para hacer un éxito del matrimonio... en mejor posición que la persona que no comienza a tratar de cultivar dichos frutos sino hasta después de haber hecho los votos matrimoniales. (Compárese con 2 Pedro 1:5-8.)
13, 14. a) ¿Qué oportunidad proporciona el paso del tiempo en lo relacionado con el cultivar valores espirituales? b) ¿Qué pueden hacer los padres para ayudar a sus hijos?
13 ¿Por qué no se examina honradamente y examina también sus gustos y aversiones? ¿No nota usted que su aprecio por la vida ha aumentado con el paso del tiempo? ¿Valoraba usted las cosas de la misma manera cuando tenía 13 años de edad como cuando tenía 5 años, o valoraba usted las cosas a los 20 años de edad como lo hacía a los 13? ¿Ha aumentado o ha disminuido su aprecio por la vida a medida que ha adquirido más experiencia en el transcurso de los años? Ahora, como adulto, ¿busca usted en las personas las mismas cualidades que buscaba cuando era niño? ¿No es cierto que el que era el “único” chico en la vida de una muchacha a los 16 ó 17 años de edad a menudo queda en el olvido a medida que ella se hace mujer y da más importancia a las cualidades piadosas y a la personalidad del hombre? El punto de vista de ella a los 22 ó 23 años de edad probablemente se concentre más en los aspectos espirituales, mentales y emocionales del hombre que en sus características físicas. Lo mismo se puede decir del jovencito cuando va haciéndose hombre. Sus esperanzas y aspiraciones en lo que respecta a una esposa maduran a medida que él también madura. En los años posteriores, a medida que sus valores cambien, lo que él buscará en una compañera será que sea una persona comprensiva y bondadosa, que tenga la capacidad de ser ama de casa y madre, y que tenga en el corazón el deseo profundo de agradar en primer lugar a su Creador, Jehová, y de hacer la voluntad de Él. (Proverbios 31:10, 26, 27.)
14 El asunto es que con el tiempo cambia el punto de vista de la persona en lo que se refiere a sus valores. Por consiguiente, el apresurarse a contraer matrimonio a temprana edad encierra muchos peligros. Quizás no sea posible convencer a dos personas demasiado jóvenes que esperen que pase algún tiempo antes de contraer matrimonio. Pero los padres, especialmente durante los años juveniles de la vida de sus hijos, pueden animarles a pensar en serio acerca de la vida, acerca del estar preparados en sentido espiritual, emocional y mental para el matrimonio antes de hacer un contrato para toda la vida con otra persona para bien o para mal.
15. Puesto que el casarse más tarde en la vida no siempre es la solución a todos los problemas, ¿qué consejo se da acerca de mantener el punto de vista correcto?
15 No es que se quiera decir que el casarse cuando uno es mayor sea la solución a todos los problemas. Aun entonces pueden surgir problemas, especialmente si se permite que la actitud del egoísmo entre sigilosamente y rompa los lazos entre dos personas. Es preciso tomar en cuenta las necesidades mentales, emocionales y espirituales de cada uno de los que componen la unión matrimonial. Algunos cristianos han llegado a estar tan envueltos en su trabajo seglar que han excluido de su vida las actividades de congregación, incluso el asistir a las reuniones y el participar en la obra de predicar y hacer discípulos. Entonces, les parece que algo les hace falta en la vida y tratan de compensarlo por medio de entregarse al disfrute de muchísimo recreo. Parecen creer que con tal que estén ocupados, los problemas se resolverán provisionalmente de alguna manera, y que entonces en el nuevo orden de cosas llegarán a atender las necesidades emocionales, mentales y espirituales el uno del otro. Pero la vida no es así. Pablo aconsejó al hombre que cuidara de su esposa tal como cuida de su propio cuerpo. (Efesios 5:28.) Eso significa que tiene que dar atención ahora a las necesidades de su consorte, tal como a diario da atención a sus propias necesidades. Lo mismo aplica en el caso de la mujer.
Un enfoque equilibrado de la vida matrimonial
16-18. a) ¿Por qué es necesario enfocar la vida y el matrimonio de manera equilibrada, y qué advertencias se nos dan respecto a nuestros deseos y a las necesidades de otras personas? b) ¿Por qué es provechoso reflexionar sobre estos asuntos antes de contraer nupcias?
16 Un enfoque equilibrado de la vida contribuye a un enfoque equilibrado del matrimonio. La persona equilibrada se dará cuenta de que, debido a las tendencias egoístas que ha heredado, tiene que esforzarse en todo momento por vencer tales defectos. Es muy fácil nunca pensar en anteponer las necesidades de otras personas a nuestros propios deseos personales. Un pequeñuelo quiere tener todos los juguetes para sí y, por lo general, si los padres no lo instruyen correctamente, no los comparte con otros niños. En años posteriores su egoísmo se extenderá a otros campos. Por eso a menudo hallamos a adolescentes y adultos jóvenes que quieren las cosas exclusivamente a su manera, y, en su esfuerzo por satisfacer sus propios deseos no les importa que puedan herir a otras personas o hacerles sufrir. En los años posteriores, como adultos, tales personas siempre están deseando ardientemente conseguir lo que a ellas les gusta, sin preocuparse en lo mínimo por las necesidades de otras personas.
17 La persona equilibrada no se priva totalmente de las cosas, sino que conduce su propia vida de modo que pueda tomar en consideración a otras personas también. Pregunta qué puede hacer para ayudar a otros, para dar de sí y de lo que posee a fin de beneficiar a otros. No insiste en salirse con la suya en toda ocasión. El libro de Proverbios dice: “El alma generosa será engordada ella misma, y el que liberalmente riega a otros también él mismo será liberalmente regado”. (Proverbios 11:25.)
18 El que una persona soltera siga tal proceder le será sumamente beneficioso más tarde en su vida matrimonial. Siempre tomará en cuenta a su cónyuge al tomar cualquier decisión. Dicha persona, en lugar de ver el matrimonio como un experimento o un arreglo provisional, verá el matrimonio como el arreglo permanente que Jehová tuvo presente al unir a la primera pareja humana en el Edén. (Génesis 2:22-24.) A cada paso hará esfuerzos para mantener la unión matrimonial, para ayudar a su cónyuge, a medida que ambos vayan aumentando su aprecio por Dios y el uno por el otro.
En resumen
19-21. a) ¿Cómo podemos asegurarnos de no considerar el matrimonio sencillamente como un arreglo experimental? b) ¿Qué deben tener presentes todas las personas, jóvenes o mayores, que quieren alcanzar verdadera felicidad en el matrimonio?
19 “Lo que Dios ha unido bajo un yugo, no lo separe ningún hombre.” Sí, esas palabras de consejo que pronunció Jesús están llenas de significado para el cristiano verdadero. El matrimonio no es un arreglo experimental que uno pueda abandonar si encuentra que el camino se le está haciendo difícil. Tenemos que luchar constantemente contra la carne imperfecta para contener la tendencia humana al egoísmo y así ganar la aprobación de Dios. (Compárese con Romanos 7:21-25.) Para lograr éxito en el contrato matrimonial, ambos cónyuges tienen que aprender a dar y a recibir, a proveer y a ser aquel a quien se le provee, y a nunca dar por sentado al otro. (Efesios 5:21-23, 28, 33.)
20 Además, aunque no se puede insistir en establecer cierta regla que dicte la edad mínima para los que quieran casarse, más allá de la que el gobierno establece como la mayoría de edad, ciertamente cada uno puede tener presente que tiene que crecer en sentido espiritual en armonía con lo que dice Gálatas 5:22, 23, para llegar a ser un cónyuge capacitado. El tiempo verdaderamente cambia el punto de vista de las personas. Por consiguiente, nadie debería apresurarse a contraer matrimonio. Primero, que cada cual cultive la personalidad cristiana para estar debidamente preparado para aceptar el yugo marital. Y nunca olvide que nadie debe separar lo que Dios ha unido bajo un yugo. (Mateo 19:4-6.)
21 Al enfocar la vida, y luego el matrimonio, de manera equilibrada, uno puede obtener verdadero gozo y felicidad en el arreglo que Jehová Dios mismo ordenó para el hombre y la mujer, como se ve por el primer matrimonio de Edén. (Proverbios 5:18.) Pero precisamente, ¿qué más puede hacer cada uno en la vida para que resulte estar preparado o preparada para asumir el papel de esposo o esposa? Sírvase leer la información que sigue al respecto con relación a la personalidad del hombre y la mujer cristianos.
A manera de repaso, ¿cómo contestaría usted las siguientes preguntas?
◻ ¿Qué actitudes hacia el matrimonio deben evitarse?
◻ ¿Cómo pueden los cónyuges enfrentarse a las tendencias innatas al pecado?
◻ ¿Por qué no deberían apresurarse a contraer nupcias los jóvenes cristianos?
◻ ¿Qué enfoque equilibrado de la vida matrimonial se recomienda?
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La hermosura de la personalidad cristianaLa Atalaya 1985 | 1 de noviembre
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La hermosura de la personalidad cristiana
“[Vístanse] de la nueva personalidad que fue creada conforme a la voluntad de Dios en verdadera justicia y lealtad.” (EFESIOS 4:24.)
1. ¿Qué belleza o hermosura deseamos describir aquí?
HAY un refrán inglés que dice: ‘La belleza depende de quién la admire’, lo cual significa que la belleza o hermosura es relativa. ¿En qué consiste la belleza o hermosura de un cristiano o una cristiana? Eso es lo que queremos considerar ahora.
Definición de la hermosura en el cristiano
2. ¿Por qué no componen los atributos físicos por sí solos el hombre o siervo de Dios?
2 Comencemos por considerar las cualidades que dan al cristiano la apariencia agradable que contribuye a que a otras personas les agrade estar en compañía de él. Las cualidades físicas por sí solas no componen el “hombre de Dios”. (1 Timoteo 6:11.) La apariencia exterior del hombre, por muy favorecedora que sea, no significa mucho si él es atolondrado en su razonamiento. Si es orgulloso, mal educado, grosero e ignorante, no atrae a la gente... la aleja. Si sus modales manifiestan que es desagradecido, sin duda puede ser una causa de tropiezo para otras personas. Si solo le interesa su propia persona y cómo se ve o qué impresión causa en otros, no es la clase de persona con quien otras personas quieran asociarse.
3, 4. a) ¿Cuáles son algunas de las cualidades del siervo de Dios, según sirvió de ejemplo Jesucristo como hombre? b) ¿Cómo explicaría usted algunas de las características del siervo de Dios?
3 Más bien, el hombre o siervo de Dios ha cultivado las cualidades de justicia, misericordia, amor y bondad. A Jesucristo no se le conoció por su cuerpo perfecto, sino por su lealtad a los principios y a la verdad. Su modo de enseñar lo identificó como alguien que hablaba con autoridad procedente de Dios. (Mateo 7:28, 29; Juan 7:46.) Al siervo de Dios no lo corrompe el deseo de adquirir poder o importancia. Las ventajas de cierta posición no pueden sobornarlo. Es un hombre que tiene fuerza de voluntad. Ama la humildad y no miente. Manifiesta un temor saludable a Jehová. (Proverbios 22:4.) Estas son algunas de las cualidades del hombre o siervo de Dios.
4 El siervo de Dios tiene conciencia, buen corazón y motivos correctos. (1 Timoteo 1:5; Proverbios 4:23.) No hace cosas que violan los dictados de su conciencia, al pasar por alto principios justos. Por tener buen corazón y motivos correctos, no emplea métodos poco honrados en sus tratos con otras personas. (Hebreos 13:18.) No permite que la conducta ni las acciones inmundas socaven sus buenos motivos. (Oseas 4:11.) Se disciplina a sí mismo de modo consecuente para guardar su corazón de hacerse traicionero. Se destaca por palabra y por acción como un hombre de principios. (Salmo 15:1, 2.)
5. ¿Qué papel desempeña la compasión en la vida del siervo de Dios?
5 El siervo de Dios siente compasión por otras personas, es perdonador y bondadoso. El hombre compasivo es un hombre comprensivo. Puede manifestar empatía y comprensión cuando otras personas tienen problemas que son difíciles de resolver y causan inquietud. Más que eso, puede perdonar cuando alguien lo perjudica. Puede sobreponerse al deseo instintivo de devolver daño por daño e injuria por injuria. En verdad, corresponde a las palabras de 1 Pedro 3:8, 9. Al conferir una bendición en vez de una maldición, demuestra que es bondadoso y que domina los deseos degradantes que caracterizan al hombre mezquino, el hombre sin la aptitud de ser compasivo, perdonador ni bondadoso para con otras personas. (Efesios 4:31, 32.)
6. a) ¿Qué otras cualidades sobresalientes del siervo de Dios hay, y qué implican? b) ¿Qué punto de vista tienen de él su esposa y sus hijos?
6 Otra cualidad sobresaliente que caracteriza al siervo de Dios es la generosidad. Y si está casado, es como debe ser un esposo y es un padre honrado. Como persona casada, el siervo de Dios tiene una oportunidad extraordinaria de ejercer buena influencia en su esposa y sus hijos, y de ser un buen ejemplo para ellos. (Colosenses 3:19, 21.) En cuanto a generosidad, esa clase de hombre sigue el consejo excelente del Señor Jesucristo, quien dijo: “Practiquen el dar y se les dará. Derramarán en sus regazos una medida excelente, apretada, remecida y rebosante. Porque con la medida con que ustedes miden, se les medirá a ustedes en cambio”. (Lucas 6:38.) En sus relaciones de familia, el hombre de ese tipo verdaderamente cuida de los de su casa. Pero también sigue la exhortación excelente de Efesios 4:28, de hacer “lo que es buen trabajo, para que tenga algo que distribuir a alguien que tenga necesidad”. Por ser como debe ser un esposo, el siervo de Dios mantiene fidelidad en el arreglo matrimonial. Su esposa puede tener completa fe y confianza en él como hombre que verdaderamente está en unidad con ella en el vínculo matrimonial. (Proverbios 5:18, 19.) Además, si tiene hijos, demuestra que es un padre honrado, no un estafador ni alguien fraudulento en sus tratos con otros. Por tanto, inculca los principios de la honradez en sus hijos. (Proverbios 4:1-5.) ¡Qué ejemplo excelente es tal hombre para la mente impresionable de sus hijos! Ellos pueden mirarlo como hombre leal, mantenedor de integridad. (Proverbios 11:3, 4.)
7. ¿Qué punto de vista equilibrado sobre las deudas adopta el siervo de Dios?
7 En cuanto a eso también, el siervo de Dios vigila sobre sí y su familia para no acumular deudas gravosas, pues sabe que estas pueden llevar a problemas penosos. Por supuesto, esto significa que no permite que ni él ni su familia gasten más de lo que tienen. Es una persona que considera los riesgos antes de emprender cierto derrotero. (Lucas 14:28-30.) Puede privarse de algo en la actualidad a fin de alcanzar un futuro mejor y puede renunciar a lo que ve por lo que no ve, por decirlo así. (Compárese con Hebreos 11:8-10.) El vivir de este modo ayuda al siervo de Dios a conservar su escrupulosidad cristiana en su vida diaria.
8. ¿Cómo afronta dicho hombre circunstancias desagradables en su vida?
8 En la vida de todo ser humano, debido al pecado y la imperfección, a veces es necesario soportar circunstancias desagradables. Pero el siervo de Dios es un hombre animoso y de principios en tales situaciones, a imitación del ejemplo de Jesús. (Juan 16:33.) Con la fortaleza que le imparte su Dios, Jehová, se encara con ánimo a los problemas difíciles, mientras confía en que Jehová le suministre ayuda y guía. (Proverbios 18:10.)
9. ¿Cómo describiría usted la vida moral de un hombre que procura agradar a Jehová?
9 El verdadero siervo de Dios es amo de su cuerpo. Es decir, mantiene bajo control sus deseos y pasiones; está consciente de que su cuerpo es un siervo apropiado pero un amo pésimo. Recuerda constantemente las palabras inspiradas del apóstol Pablo: “Aporreo mi cuerpo y lo conduzco como a esclavo”. (1 Corintios 9:27.) Por consiguiente, siempre procura cultivar ese fruto “del espíritu [...] gobierno de uno mismo”, a la vez que evita las cosas que a él lo corromperían. (Gálatas 5:22, 23.) Es sabio al reconocer que el ceder ante el pensar inmoral puede llevar a la acción inmoral. De nuevo, cifra su confianza en su Dios, Jehová, y en la fortaleza que Él da. (Filipenses 4:13.)
10, 11. a) ¿Qué cualidad compensatoria despliega el siervo de Dios cuando comete errores de apreciación? b) ¿Qué ejemplo siguen los cabezas de familias con relación al estudio de familia?
10 Y finalmente, el siervo de Dios puede admitir sus errores, manifestar su pesar y expresar tal pena a su cónyuge y a otros que haya ofendido o herido de una manera u otra debido a sus imperfecciones. Puede acudir a Jehová y, con el corazón limpio, pedir perdón por sus pecados porque ya ha pedido a su esposa, su semejante y sus hijos que lo perdonen. El poder decir: “Lo siento, estaba equivocado”, es en realidad la señal de un verdadero hombre, especialmente del siervo de Dios. (Mateo 18:21, 22; Marcos 11:25.)
11 ¿No diría usted que un hombre, esposo y padre de esa clase tendría la ayuda de Jehová? (Salmo 54:4.) ¡Claro que sí!, él estaría equipado para hacer frente a los problemas que este mundo moderno nos ocasiona a todos debido a los designios y el propósito de Satanás de estropear todo lo bueno, incluso el matrimonio y la feliz unidad familiar. Se ocuparía de la espiritualidad de los miembros de la familia al dirigirlos en el estudio regular de la Palabra de Dios y en la oración, a imitación del ejemplo de siervos fieles de Dios de tiempos bíblicos. (Deuteronomio 11:18-21; Proverbios 7:1-3.)
12. ¿Qué papel importante consideraremos a continuación?
12 Pero hay algo más que se tiene que considerar. También está el papel de la esposa al hacer frente a problemas en la familia. Dirijamos ahora nuestra atención a las cualidades que ella querrá cultivar en su vida. (Proverbios 19:14.)
Definición de la hermosura en la cristiana
13, 14. ¿Qué pasos puede dar una mujer para ganar la aprobación de Jehová y, si está casada, de su familia? ¿Qué consejo dio el apóstol Pedro a las mujeres en 1 Pedro 3:1-5?
13 El libro de Proverbios nos dice algo acerca de la mujer devota, sierva de Dios: “El encanto puede ser falso, y la belleza puede ser vana; pero la mujer que teme a Jehová es la que se procura alabanza”. (Proverbios 31:30.) Entonces, ¿cómo adquiere la mujer esas cualidades que ganan para ella el cariño de su esposo e hijos, o el de otras personas si ella es soltera, y hacen de ella una persona con quien otros disfrutan asociarse? En primer lugar, la sierva de Dios es una persona de gran corazón, lo cual significa que es generosa, que está deseosa de ayudar a otros de cualquier manera que pueda, sea en sentido material o espiritual. Si hay alguien necesitado, ella está entre los primeros que quieren ayudar y se interesa genuinamente en las necesidades de los demás. Pero, por supuesto, mantiene un equilibrio entre dicho interés y el cuidado y la atención que tiene que dar, si está casada, a su propia familia. (Tito 2:3-5.)
14 Además, una mujer de esa clase es humilde, no altanera; bondadosa, no malhumorada; nítida, no descuidada; comprensiva, no belicosa. Y si está casada, se esfuerza por seguir el consejo que da el apóstol en 1 Pedro 3:1-5.
15. a) ¿Qué meta debe tener la sierva de Dios, y cómo puede alcanzarla? b) ¿Cómo apoya a su esposo? c) ¿Por qué continúa siendo amada en el círculo familiar?
15 También, la sierva de Dios no se concentra en la sabiduría mundana, sino que se esfuerza por cultivar espiritualidad. Es una lectora asidua de la Biblia y se interesa en aplicar los principios de esta en su vida. (Salmo 119:66.) Esto no lo hace simplemente por interés propio, o por querer conocimiento solo para sí, sino, más bien, ella piensa en compartir las cosas buenas que aprende, tanto en el ministerio cristiano como en las conversaciones diarias que tiene con vecinos, parientes y amistades. El esposo cristiano se complace en una esposa con quien puede conversar sobre asuntos espirituales, como complemento suyo, alguien que también aprecia las cosas espirituales y quiere participar con él en llegar a conocer mejor a Jehová. (Proverbios 9:9, 10.) Así que la sierva de Dios es discernidora y comprensiva. Si está casada, está consciente de su papel como complemento de su esposo. Apoya a su esposo en dar instrucción espiritual a los hijos, especialmente cuando él no está en el hogar. (Compárese con 2 Timoteo 1:2, 5; 2 Juan 1, 2.) Continuará siendo amorosa y siendo amada en el círculo familiar mucho después que la hermosura de la juventud se haya desvanecido. Su esposo puede contar con ella para recibir observaciones buenas y justas, opiniones bien fundadas y estímulo sincero, ya que ella es amable y sensata. (Proverbios 25:11.) Cuando Abigaíl obró con discernimiento y presteza, David dijo: “Bendita sea tu sensatez”. (1 Samuel 25:32, 33.)
16. ¿Qué clase de palabras y acciones identifican a la sierva de Dios?
16 La modesta influencia hacia el bien que una esposa ejerce al apoyar a su esposo no consiste en palabras ásperas, amargas o sarcásticas. El favor se gana mediante una apariencia agradable, palabras apropiadas, tiernos actos amorosos, laboriosidad, bondad afable y profunda comprensión. (Compárese con Proverbios 25:11; 31:10-28; 1 Tesalonicenses 2:7.) Mansedumbre, fe, modestia, estas son las cualidades que ganan para la sierva de Dios cariño duradero. (Salmo 37:11; Hebreos 11:11, 31, 35; Proverbios 11:2.)
17. ¿De qué valor es la cualidad del amor para la sierva de Dios?
17 Otra de las cualidades sobresalientes de la sierva de Dios es su aptitud para manifestar compasión y afecto. (Romanos 12:10.) Su adorno más hermoso es el amor, el cual evita que ella sea desagradable en cosas de poca importancia. ¡Qué hermosa descripción de ese amor se da en 1 Corintios 13:4-7! Según la Nueva Biblia Española (edición latinoamericana), dice: “El amor es paciente, es afable; el amor no tiene envidia, no se jacta ni se engríe, no es grosero ni busca lo suyo, no se exaspera ni lleva cuentas del mal, no simpatiza con la injusticia, simpatiza con la verdad. Disculpa siempre, confía siempre, espera siempre, aguanta siempre”.
¿Cómo somos?
18. ¿A qué preguntas personales nos encaramos cada uno de nosotros ahora, y cuáles serán los resultados de un autoexamen?
18 La pregunta importante ahora es: ¿Se nos puede identificar como personas cristianas, sea que estemos casados o seamos solteros? ¿Hay zonas en que podemos ver que tenemos que hacer ajustes adicionales mientras procuramos ser agradables a Jehová y a nuestro semejante? Es muy probable que cualquier autoexamen que hagamos ponga de manifiesto varios aspectos en que podamos mejorar. Pero ¡qué gozoso es observar dicha mejora en nosotros mismos y, más que eso, que otros la noten y comenten sobre los cambios que hacemos por seguir estrechamente la Palabra de Dios y sus enseñanzas! (2 Corintios 13:5; 1 Timoteo 4:15, 16.)
19. ¿Cómo debemos resolver los problemas que afrontamos mientras buscamos una vida tranquila y piadosa?
19 Al llevar una vida de soltera, la persona puede esforzarse por cultivar esas cualidades. (1 Corintios 7:32.) Y cuando llegue el día en que decida casarse, dichas cualidades sin duda le serán útiles si las ha cultivado. Entre las personas casadas, el continuar cultivando virtudes cristianas resultará en gran felicidad y gozo. (Filipenses 4:8, 9.) Para resolver problemas se requiere el esfuerzo de ambas partes en el arreglo matrimonial. La buena disposición de reconocer y cambiar los hábitos desagradables de uno puede contribuir grandemente a que uno se vista de la agradable personalidad cristiana. (Colosenses 3:8-10.) Recuerde, también, que la señal identificadora de un cristiano o una cristiana es la habilidad de decir: “Lo siento, perdóneme por favor”. Todos cometemos errores. Cuando los reconocemos, damos prueba de que cultivamos las magníficas cualidades de modestia y humildad. (Miqueas 6:8; Santiago 3:2.)
20. ¿Qué palabras apropiadas del apóstol Pablo en Colosenses 3:12-17 son útiles y oportunas para todos?
20 Las siguientes palabras de Pablo a la congregación de Colosas son muy apropiadas: “Pónganse entonces el vestido nuevo, como conviene a los elegidos de Dios, por ser sus santos muy queridos. Revístanse de sentimientos de tierna compasión, de bondad, de humildad, de mansedumbre, de paciencia. Sopórtense y perdónense unos a otros, si uno tiene motivo de queja contra otro. Como el Señor los perdonó, a su vez, hagan lo mismo. Pero, por encima de todo, tengan el amor, que reúne todo y todo lo hace perfecto. Que la paz de Cristo reine en sus corazones, ya que fueron unidos en un mismo cuerpo para encontrarla. Finalmente sean agradecidos. Que la palabra de Cristo habite en ustedes con todas sus riquezas. Que sepan aconsejarse unos a otros y enseñarse mutuamente con palabras y consejos sabios. Con el corazón agradecido, canten a Dios salmos, himnos y cánticos inspirados. Y todo lo que puedan decir o hacer, háganlo en nombre del Señor Jesús, dando gracias a Dios Padre por medio de él”. (Colosenses 3:12-17, La Nueva Biblia, Latinoamérica.)
21. ¿Cómo puede animar a otros nuestra conducta y actividad?
21 Los ejemplos excelentes de la Biblia, y también de la congregación cristiana de este siglo XX, deben servir de estímulo a cada uno de nosotros para continuar vistiéndonos de la nueva personalidad. (Efesios 4:22-24.) Si hacemos esto, llegaremos a ser una bendición para todos aquellos con quienes nos asociemos. Además, a muchas otras personas a quienes llevemos el mensaje del Reino les impresionarán y animarán no solo nuestras palabras, sino también el celo y la buena conducta que ven en la familia mundial de los testigos de Jehová. (Juan 13:34, 35.)
En resumen, ¿qué diría usted?
◻ ¿Qué cualidades ha de cultivar el siervo de Dios?
◻ ¿Cómo cuida de su esposa y familia el cristiano?
◻ ¿Qué virtudes distinguen a la cristiana?
◻ ¿Cómo pueden edificar sabiamente para el futuro las personas solteras?
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