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  • La necesidad de que la mujer cristiana se cubra la cabeza—¿cuándo?
    La Atalaya 1964 | 1 de septiembre
    • 18. ¿Qué mantiene la esposa cristiana por su fidelidad en sujeción de esposa, y para quién es esto una bendición especial?

      18 Debido a tal fidelidad la esposa cristiana a todo tiempo mantiene su atractivo espiritual ante Jehová y ante la congregación cristiana. El varón dedicado casado con tal esposa debería apreciar sumamente tal bendición, porque ella verdaderamente es una gloria para él. Si su esposo todavía no ha aceptado la verdad la esposa cristiana mantendrá casta su conducta con profundo respeto, porque quizás esto le abra los ojos a él para que vea qué excelente esposa tiene y esto lo lleve a aceptar la verdad. ¡Qué maravillosa bendición resultará ser eso para él y para ella!

  • El cubrirse ella la cabeza y sus actividades de congregación
    La Atalaya 1964 | 1 de septiembre
    • El cubrirse ella la cabeza y sus actividades de congregación

      1, 2. ¿De qué maneras puede el cubrirse la cabeza realzar el atractivo de la mujer cristiana, y qué asuntos que tienen que ver con cubrirse la cabeza se considerarán ahora?

      UNA bien escogida cubierta para la cabeza puede lograr mucho para realzar la belleza y atractivo naturales de una mujer. Cuando se usa como señal de sujeción cristiana, ésta realza su atractivo espiritual, que es más valioso. Aunque con este último propósito la mujer cristiana no querría cubrirse la cabeza con alguna “creación” frívola y llamativa, no obstante, no hay razón por la que la cubierta de la cabeza no contribuya al mismo tiempo a su apariencia exterior de manera modesta y decorosa.

      2 En el artículo anterior (párrafo 3) se mencionaron tres situaciones básicas que requerirían el que una mujer se cubriera la cabeza como señal de sujeción cristiana. La primera de éstas se ha considerado plenamente, de modo que ahora podemos considerar las otras dos. Estas tienen que ver con las actividades de la mujer en relación con la congregación.

      3. (a) ¿Tiene que cubrirse la cabeza una hermana cuando hace la obra de casa en casa acompañada por un hermano, y por qué no? (b) Pero, ¿qué más es necesario tener presente?

      3 Primero, pudiéramos considerar el asunto desde el punto de vista del ministerio en el campo de los testigos de Jehová: de casa en casa, volviendo a visitar y conduciendo estudios bíblicos de casa. Por ejemplo, ¿sería necesario que una mujer se cubriera la cabeza mientras se encuentra en el ministerio de casa en casa si la acompañara un ministro dedicado varón, y cuando ella da un sermón? No, no parece haber razón bíblica alguna que requiriera esto. Es parte de su asignación de predicar las buenas nuevas. (Mat. 24:14) Ella no está usurpando la posición de un hermano. El solo la está acompañando, quizás como siervo de circuito o como el superintendente de la congregación local, para ayudarla en el ministerio, no para que ella le enseñe. Lo mismo aplicaría al ministerio de revisitas. Sin embargo, tengamos presente el asunto de la conciencia. Quizás algunas hermanas crean que deberían cubrirse la cabeza en estas circunstancias, y ciertamente no hay objeción a que lo hagan, si ésta es la manera que dirige su conciencia.

      4. (a) ¿Puede hacer oración una hermana en presencia de un hermano dedicado? (b) ¿Por qué debería cubrirse la cabeza la hermana que conduce un estudio bíblico estando presente un hermano dedicado?

      4 Sin embargo, cuando se trata de la obra de estudios bíblicos, tenemos una situación algo diferente. Si un hermano dedicado acompaña a una hermana a un estudio bíblico de casa, entonces él debería hacer la oración, puesto que una hermana jamás oraría en presencia de un hermano dedicado, aun si se cubriera la cabeza, a menos que tuviese alguna razón excepcional, tal como que el hermano hubiera perdido la facultad física del habla. Pero, con el propósito de entrenamiento, la hermana puede conducir el estudio, aunque ella debería hacerlo con la cabeza cubierta. ¿Por qué? Esto es más que dar un sermón de casa en casa o en una revisita. Es una sesión arreglada de antemano para estudio bíblico y se inicia formalmente con oración. Quien conduce el estudio realmente está presidiendo en una reunión donde está presente un miembro varón dedicado de la congregación. Normalmente, el hermano dedicado presidiría en tal reunión, lo cual envuelve enseñar de manera organizada. (1 Tim. 2:12) Sin embargo, debido a la circunstancia excepcional, la de proveer entrenamiento para la hermana en el ministerio de estudios bíblicos, la hermana puede conducir el estudio. Pero, por respeto al miembro varón de la congregación que está presente, ella se cubriría la cabeza mientras lo hiciera.

      5. (a) Si un publicador varón no dedicado acompaña a una hermana a un estudio bíblico, ¿quién debería hacer oración? (b) ¿Requerirían las circunstancias que la hermana se cubriera la cabeza, y por qué?

      5 Puede ser que a veces acompañe a una hermana a un estudio bíblico un asociado varón de la congregación que todavía no está bautizado, aunque está informando a la congregación como publicador de las buenas nuevas. ¿Cuál debería ser el procedimiento? Puesto que él no está dedicado, no podría representar apropiadamente a la hermana dedicada en oración a Jehová; por eso, sería correcto que ella hiciera la oración en el estudio. Sin embargo, él podría conducir el estudio. La hermana, sin embargo, cuando orara, y también si ella condujera el estudio, lo haría apropiadamente cubriéndose la cabeza. Aunque todavía él no es en el sentido más completo un miembro de la congregación, no obstante este hombre lo es en perspectiva, y en lo que toca a los que están afuera él se identifica con la congregación debido a su actividad de predicación, y está mostrando un proceder obediente.

      6. ¿Qué procedimiento se observaría cuando una hermana tuviera que conducir un estudio bíblico para provecho de un hermano recién dedicado?

      6 Pudiera surgir la circunstancia en que una hermana condujera realmente un estudio bíblico de casa para provecho de un hermano dedicado. Tal vez ella haya predicado la verdad a este hombre, haya estudiado con él y le haya ayudado hasta la dedicación y el bautismo y a entrar en el servicio. Debido a la falta de un publicador varón ella misma podría haber continuado el estudio bíblico de casa con este nuevo hermano para completar los libros “Sea Dios Veraz” y “Esto significa vida eterna.” Él tiene que aprender estas cosas, y en este caso ella es la única que está para ayudarlo. En tales circunstancias ella se cubriría la cabeza apropiadamente mientras condujera el estudio, aunque el hermano recién dedicado debería encargarse de la oración.

      7. (a) ¿Qué se puede decir acerca de que una hermana ayude a un nuevo hermano en el servicio en el campo? (b) Aunque no aconseja al hermano, ¿cómo puede ayudarle la hermana a mejorar en el ministerio?

      7 Por supuesto, para comenzar, ella también tendría que ayudarle en el ministerio, aunque las circunstancias determinarían a qué grado podría hacerlo y ella tendría que usar discreción. La situación de que un varón vaya solo con una mujer en el ministerio, especialmente si uno o ambos son casados, fácilmente podría tomarse en sentido erróneo y habrá de evitarse, si es posible. En algunos países sería totalmente inconveniente. De modo que debería hacerse algún otro arreglo si es posible, y en la mayoría de las congregaciones hay hermanos disponibles que pueden ayudar a este nuevo. Si no hay disponible ningún hermano en la congregación, quizás una segunda hermana podría ir con ellos también. Si la hermana, en estas circunstancias, llevara al nuevo hermano en el servicio, esto no sería una asignación regular del programa de entrenamiento; la hermana podría ayudar al nuevo hermano al dejar que él observara el propio método de predicar de ella. Ella no ofrecería consejo sobre la presentación de él de la manera que lo haría un hermano, y, puesto que ella no lo haría, no tendría que cubrirse la cabeza, aunque, de nuevo, la conciencia pudiera afectar el asunto. Si el hermano sí pide algunas sugerencias, ella siempre puede hacer referencia a las publicaciones de la Sociedad, o quizás explicar cómo ella se encarga de diversas situaciones, pero evitando el criticar la presentación de él de las buenas nuevas. El tener un sentido apropiado de lo que es correcto y el tener presentes los principios bíblicos de la jefatura ayudarán a una hermana que se halle en estas circunstancias a comportarse de manera que sea tanto útil como todavía respetuosa de la situación.

      EN LAS REUNIONES DE CONGREGACIÓN

      8. (a) ¿Qué principio aplica a las mujeres de las que se requiere que se cubran la cabeza en las reuniones de congregación? (b) ¿Qué situación puede surgir en las reuniones para servicio en el campo, qué procedimiento debería observarse, y por qué?

      8 En cuanto a la necesidad de que las mujeres se cubran la cabeza en las reuniones de los testigos de Jehová, esto no surgiría normalmente en la mayoría de las congregaciones. Como ya se ha observado, el principio que aplica es: Se requiere cubrirse la cabeza cuando, no habiendo un varón capacitado, una hermana tenga que orar o presidir en una reunión de congregación. Esta situación pudiera surgir, por ejemplo, en una reunión para servicio en el campo, quizás a mediados de la semana, y a la que asistieran solo hermanas. En tales ocasiones debería hacerse oración a favor del grupo antes de salir a participar en el servicio de Jehová, y alguien tendría que presidir o conducir la reunión. (Efe. 6:18) Puesto que ésta es una reunión arreglada por la congregación, las hermanas que presiden u oran están encargándose de deberes que por lo general serían desempeñados por hermanos, y por eso deberían cubrirse la cabeza, aunque solo estén presentes hermanas. Una hermana a quien se nombre conductora de estudio de libro también tendría que cubrirse la cabeza mientras condujera el estudio y también mientras orara, si no hubiera ningún hermano dedicado presente para atender a esto.

      9. ¿Cómo deberían considerar las hermanas las partes que tengan en la reunión de servicio y en la escuela del ministerio, y, normalmente, requerirían éstas que se cubrieran la cabeza?

      9 No se requiere que las hermanas se cubran la cabeza cuando participan en demostraciones, relatan experiencias, o cuando se encargan de conferencias estudiantiles como demostraciones en la escuela

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