-
‘Prosiga hacia la meta’La Atalaya 1984 | 15 de diciembre
-
-
‘Prosiga hacia la meta’
“Olvidando las cosas que quedan atrás y extendiéndome hacia adelante a las cosas más allá, estoy prosiguiendo hacia la meta.” (FILIPENSES 3:13, 14.)
1, 2. a) ¿Cómo recibió Saulo de Tarso una asignación en el ministerio, y en qué consistía ésta? b) ¿Cómo respondió él a aquella asignación?
CUANDO Saulo de Tarso iba en camino de Damasco con la intención de perseguir a los cristianos, una luz celestial fulguró alrededor de él, y él oyó una voz que le decía: “‘Saulo, Saulo, ¿por qué me estás persiguiendo?’ Dijo: ‘¿Quién eres, Señor?’ Dijo él: ‘Soy Jesús, a quien tú estás persiguiendo. Sin embargo, levántate y entra en la ciudad, y se te dirá lo que tienes que hacer’”. (Hechos 9:3-6.)
2 ¿Por qué hizo Jesús que Saulo de Tarso pasara por aquella experiencia? Jesús se lo explicó al discípulo Ananías: “Este hombre [Saulo] me es un vaso escogido para llevar mi nombre a las naciones así como a reyes y a los hijos de Israel”. Ananías obedeció, fue adonde estaba Saulo, le impuso las manos, y le dijo: “Jesús que se te apareció en el camino por el cual venías, me ha enviado, para que recobres la vista y seas lleno de espíritu santo” (Hechos 9:15, 17). Tan pronto como recobró la vista, Saulo se bautizó, y comenzó a asociarse con la congregación cristiana de Damasco. Ahora, como ministro cristiano bautizado, enseguida se ocupó en predicar celosamente las buenas nuevas acerca de Jesús, el Hijo de Dios, entre los judíos. (Hechos 9:20-22.)
3, 4. a) ¿Cuánto estimaba Pablo su ministerio? b) ¿En qué sentido difería la actitud de Pablo de la que mostró la congregación de Éfeso?
3 Este celoso ministro es mejor conocido como el apóstol Pablo. Siempre habló muy bien de su ministerio y de la bondad inmerecida que se le mostró. “Estoy agradecido a Cristo Jesús nuestro Señor, que me impartió poder, porque me consideró fiel, asignándome a un ministerio, aunque antes era blasfemo y perseguidor y hombre insolente. No obstante, se me mostró misericordia, porque era ignorante y obré con falta de fe.” (1 Timoteo 1:12-14.) Sí, apreciaba muchísimo el ministerio. (Romanos 11:13; 2 Corintios 4:7.)
4 Dichas expresiones de Pablo ilustran la evaluación del ministerio que él mantuvo durante toda su carrera. No cayó en la condición que una vez existió en la congregación de Éfeso, a la que Jesús dijo: “Tengo esto contra ti: que has dejado el amor que tenías al principio” (Revelación 2:4). Más bien, Pablo mantuvo ante sí su meta y se mantuvo con el mismo celo y entusiasmo que había tenido por el ministerio en los primeros días en Damasco.
5. Después de haber servido a Jehová por algunos años, ¿cómo podemos animar a otras personas?
5 Después de haber sido un fiel ministro cristiano por décadas, Pablo usó sus propios antecedentes y experiencias para animar a sus compañeros ministros de la congregación de Filipos para que éstos no se rindieran. ¿No es cierto que por lo general es muy interesante oír cómo cierta persona ha aprendido la verdad y llegado a ser ministro? En armonía con esto, ¿se vale usted de su mismísima historia personal y de sus años de fiel servicio como ministro cristiano dedicado para animar a otras personas?
6. ¿Qué antecedentes tenía Pablo como judío?
6 En su carta a los filipenses, Pablo podía referirse a su vida de judío practicante. Dijo: “Si algún otro cree que tiene base para confianza en la carne, yo con más razón: circuncidado al octavo día, del linaje familiar de Israel, de la tribu de Benjamín, hebreo nacido de hebreos; respecto a la ley, fariseo; respecto a celo, persiguiendo a la congregación; respecto a la justicia que es por medio de ley, uno que se probó intachable”. (Filipenses 3:4-6.)
7. ¿Por qué dejó atrás Pablo aquellas cosas, y qué ganó al hacerlo?
7 Con tales antecedentes, Pablo pudo haber tenido muchas ventajas materiales en asociación con los judíos. Sin embargo, pasó a decir: “Cuantas cosas eran para mí ganancias, éstas las he considerado pérdida a causa del Cristo. Pues, en cuanto a eso, de veras sí considero también que todas las cosas son pérdida a causa del sobresaliente valor del conocimiento de Cristo Jesús mi Señor. Por motivo de él he sufrido la pérdida de todas las cosas y las considero como un montón de basura, [...] a fin de conocerle a él y el poder de su resurrección y una participación en sus sufrimientos, sometiéndome a una muerte como la de él, para ver si de algún modo puedo lograr alcanzar la resurrección más temprana de entre los muertos” (Filipenses 3:7-11). Estas palabras demuestran completa fe en Cristo Jesús y en las provisiones que Jehová ha hecho. ¿Es usted como Pablo al no dejar que el deseo de tener prominencia o ganancias materiales dominen su vida?
La actitud mental correcta
8. a) Después de haber efectuado su ministerio por largo tiempo, ¿qué dijo Pablo acerca de su meta? b) ¿En qué sentido podría aplicar en nuestro caso lo que Pablo dijo en 1 Corintios 9:24-27?
8 Después que Pablo había servido a Dios por varias décadas, ¿podía él aflojar el paso en la carrera hacia su meta? Escribió a los filipenses: “Hermanos, todavía no me considero como si lo hubiese asido; pero hay una cosa en cuanto a ello: Olvidando las cosas que quedan atrás y extendiéndome hacia adelante a las cosas más allá, estoy prosiguiendo hacia la meta para el premio de la llamada hacia arriba, llamada de Dios por medio de Cristo Jesús” (Filipenses 3:13, 14). Pablo ya se había hecho un buen registro en el ministerio cristiano y había aguantado muchas cosas, y fue mientras estuvo encarcelado en Roma cuando escribió estas palabras a los filipenses; sin embargo, su ministerio no había terminado. Si había de recibir el premio que estaba disponible a los que servían en la congregación cristiana del primer siglo, a saber, la “llamada hacia arriba, llamada de Dios por medio de Cristo Jesús”, entonces tenía que proseguir hacia su meta. Éste es el punto de vista correcto que sostienen todos los cristianos maduros, sea que tengan la esperanza de vida futura en el cielo o en la Tierra. Es provechoso que cada uno de nosotros examine su mismísima posición y manera de pensar para ver si realmente aprecia el ministerio que se nos ha encomendado bajo el arreglo de Jehová.
9. ¿Qué actitud mental madura debemos tener?
9 Pablo identifica el parecer maduro del cristiano, al decir: “Nosotros, pues, cuantos somos maduros, seamos de esta actitud mental; y si mentalmente se inclinan ustedes de otro modo en sentido alguno, Dios les revelará la actitud mencionada” (Filipenses 3:15). La actitud cristiana madura lleva al éxito. Ésta envuelve el seguir en los pasos de Cristo Jesús, quien completó con éxito el ministerio terrestre que se le asignó. Jesús pudo orar a su Padre: “Yo te he glorificado sobre la tierra, habiendo terminado la obra que me has dado que hiciese. Así es que ahora, Padre, glorifícame al lado de ti mismo con la gloria que tenía al lado de ti antes que el mundo fuese”. (Juan 17:4, 5.)
10. ¿Qué más se puede decir en cuanto a la actitud mental ejemplar de Cristo para con el servicio de Jehová?
10 Si queremos agradar a Jehová Dios, y así recibir el premio de la vida eterna, tenemos que tener la misma actitud que Cristo Jesús desplegó. Porque sabía esto, Pablo hizo el siguiente llamamiento: “Retengan en ustedes esta actitud mental que también hubo en Cristo Jesús, quien, aunque existía en la forma de Dios, no dio consideración a un arrebatamiento, a saber, que debiera ser igual a Dios. No, antes bien se despojó a sí mismo y tomó la forma de esclavo y vino a estar en la semejanza de los hombres. Más que eso, hallándose en estilo de hombre, se humilló a sí mismo y se hizo obediente hasta la muerte, sí, muerte en un madero de tormento. Por esta misma razón también Dios lo ensalzó a un puesto superior y bondadosamente le dio el nombre que está por encima de todo otro nombre” (Filipenses 2:5-9). ¡Qué actitud excelente tenía Jesús! ¿Podemos imitarlo? El esforzarnos humildemente por hacer la voluntad de Dios resulta en bendiciones siempre. El que cumplamos con lo que se nos asigne resulta en bien.
11. ¿Qué deben hacer los que son fuertes y maduros en sentido espiritual?
11 En vista de lo que Pablo escribió, es patente que algunos cristianos de la congregación filipense todavía tenían que esforzarse por alcanzar la actitud cristiana madura. Pablo tomó la iniciativa para animarlos y ayudarlos. En la mayoría de las congregaciones de hoy hay quienes están más fuertes en la fe, y los que tienen alguna debilidad. Como Pablo, los más fuertes deben animar a los demás. Cristo Jesús efectuó mucho para fortalecer a los que tenían necesidades espirituales, dando así el ejemplo que los cristianos deben seguir. “Nosotros, pues, que somos fuertes debemos soportar las debilidades de los que no son fuertes, y no estar agradándonos a nosotros mismos. Cada uno de nosotros agrade a su prójimo en lo que es bueno para su edificación. Ahora que el Dios que suministra perseverancia y consuelo les conceda tener entre ustedes la misma actitud mental que Cristo Jesús tuvo, para que, de común acuerdo, con una sola boca glorifiquen al Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo.” (Romanos 15:1, 2, 5, 6.)
12. ¿Qué punto de vista debemos tener respecto al premio que Dios dará?
12 Al fortalecer la fe de los romanos, Pablo señaló que “el don que Dios da es vida eterna por Cristo Jesús nuestro Señor” (Romanos 6:23). Durante su ministerio, Jesús también dio mucha información sobre la vida eterna. Es una maravillosa recompensa que Dios ofrece a sus siervos. Dios quiere que sus siervos mantengan la vista fija en el premio, pues esto los mueve a ser fieles. Cuando mantenemos nuestra vista fija en el premio, mostramos fe firme en Sus promesas. En nuestras reuniones cristianas tenemos la oportunidad de hablar a menudo acerca de la recompensa que Jehová da a los que son fieles.
Nuestro ministerio a pesar de las dificultades
13. ¿Qué papel desempeñan las Escrituras en el que tengamos la actitud mental correcta?
13 El que mantengamos el punto de vista correcto, o la actitud mental correcta, resultará de gran valor a medida que efectuamos nuestro ministerio en estos últimos días. Aunque algunos tal vez pierdan el amor que tenían al principio, resolvámonos nosotros a que no nos ocurra eso. Las Escrituras mismas nos ayudan al respecto (Romanos 15:4). Mediante el estudio de ellas desarrollamos esperanza. ¿Está usted profundamente agradecido a Jehová por las Escrituras, con las muchas cosas que éstas contienen acerca de siervos fieles de Jehová como el apóstol Pablo?
14. ¿Cómo pudo Pablo mantener una actitud positiva ante experiencias difíciles?
14 ¿Qué haríamos si tuviéramos las experiencias personales que Pablo menciona en 2 Corintios 11:23-28? ¿Por qué no se rindió Pablo? Porque tenía presente su meta. Nosotros podríamos pasar por experiencias similares. No obstante, tenemos que seguir tras nuestra meta para alcanzar el premio que Dios nos ofrece. Cuando Pablo escribió a los filipenses, mostró que pensaba de la manera correcta al mencionar que estaba en cadenas de prisión para defensa de las buenas nuevas (Filipenses 1:7, 16). El comprendía por qué estaba allí. Eso es importante si llegamos a experimentar una prueba como ésa. Además, sabemos que Jehová puede valerse de nosotros para dar un testimonio que lo glorifique.
15. a) ¿Por qué necesitaban estímulo los de la congregación filipense, y qué les dijo Pablo para edificarlos? b) ¿Cómo había respondido la congregación de Roma al encarcelamiento de Pablo?
15 Los filipenses estaban experimentando pruebas similares a las que Pablo estaba experimentando en Roma. Él escribió: “Porque ustedes tienen la misma lucha que vieron en mi caso y de que ahora oyen en mi caso” (Filipenses 1:30). En tales circunstancias, Pablo podía escribirles para impartirles ánimo. Dijo que las buenas nuevas se habían dado a conocer entre la guardia pretoriana. Es patente que hasta algunos de la mismísima casa del emperador habían escuchado el mensaje cristiano, pues habían llegado a ser cristianos dedicados. La congregación de Roma estaba respondiendo bien a la situación al no descorazonarse, desanimarse ni dejarse sobrecoger de temor por el hecho de que Pablo estuviera detenido en prisión. En vez de eso, estaban ocupados en la obra que Jehová quería que se hiciera, desplegando tanto más ánimo en cuanto a hablar la palabra de Dios sin temor. (Filipenses 1:12-14; 4:22.)
16. ¿Qué cosa en particular tenemos que hacer cuando surge oposición?
16 Cuando surge oposición, resulta en grandes beneficios el que se mantenga la unidad de la congregación cristiana. Pablo dio énfasis a dicha unidad (Filipenses 1:27–2:4). En tales ocasiones es necesario que unos a otros nos expresemos palabras de fe, a fin de que no nos rindamos mientras proseguimos hacia la meta. Es el tiempo de mantener una actitud amorosa y humilde, y hacer el bien unos a otros y dar atención cada uno a los intereses del otro. (Compárese con Filipenses 2:19-21.)
Venciendo los obstáculos
17. ¿Por qué no debemos rendirnos respecto a proseguir hacia nuestra meta cuando surgen problemas de salud?
17 Epafrodito fue un asociado íntimo del apóstol Pablo. Llegó a estar casi al borde de la muerte debido a la obra del Señor, pero no hay prueba de que el problema de salud resultara en que él perdiera de vista la meta que tenía ante sí (Filipenses 2:25-30). En 2 Corintios 12:7, Pablo menciona su propia experiencia con relación a “una espina en la carne”, lo cual probablemente se refería a alguna dificultad con relación a sus ojos. Pidió en oración que tal dificultad se apartara de él, pero su petición no fue concedida. No obstante, el que Pablo mantuviera presente su meta le ayudó a seguir tras ella a pesar de cualesquiera enfermedades físicas que tuviera. Aunque tenía debilidades, halló una salida de escape con la ayuda de Cristo Jesús. (2 Corintios 12:9.)
18. ¿Cómo mostró Pablo buen equilibrio tocante a las cosas materiales?
18 La carta a los filipenses (Flp 4:11-13) hace mención también de las cosas necesarias de la vida. El experimentar escaseces puede poner a prueba al cristiano en cuanto a si va a dejar de ir en pos de su meta. ¿O desplegará la actitud madura mediante hacer frente al problema y todavía participar en el ministerio? (Compárese con Hechos 18:1-4.) Fuera que Pablo tuviera pocas provisiones o abundancia de ellas, su ministerio venía primero. Cuando tenía en abundancia, no se aprovechaba de la ocasión para dedicar mucho tiempo a la búsqueda de placeres, sino que seguía adelante hacia la meta del premio.
19. ¿Qué nos aconseja hacer Filipenses 4:6, 7 cuando necesitamos ayuda? ¿Qué resultados obtendremos?
19 Pablo no mencionó toda clase de experiencia que el cristiano podría tener en la vida. Sin embargo, cuando surgen situaciones que podrían ser impedimentos al ministerio, como cristianos maduros debemos acudir a Jehová en oración, el proceder que se recomienda en Filipenses 4:6, 7. Entonces Jehová nos dará tranquilidad de ánimo, lo cual nos ayudará a pensar claramente y a sobreponernos a los problemas a medida que continuamos siendo Sus ministros fieles. La oración nos ayuda a mantener nuestra fe y a proseguir hacia nuestra meta.
20. a) ¿Cómo nos anima el ejemplo que han puesto los fieles que llevan mucho tiempo en la verdad? b) ¿Qué debemos hacer? ¿Por qué?
20 Hoy día, muchas de las personas que están asociadas con las congregaciones han servido a Jehová durante décadas. Todas ellas han experimentado pruebas al efectuar su ministerio. Pero Jehová las ha ayudado, de modo que prosiguen hacia la meta para alcanzar el premio. Estamos agradecidos a Jehová de que en tiempos modernos, al igual que en el primer siglo, haya hermanos y hermanas que son ejemplos de perseverar, son fieles en su servicio del Reino y mantienen la vista fija en el premio. Los que son jóvenes o más nuevos en “El Camino” se benefician al examinar el registro de actividad del apóstol Pablo o de los siervos fieles de la congregación del día moderno, al notar cómo éstos se han encarado a sus problemas (Hechos 9:2; Hebreos 13:7). Aprovechemos, cada uno, toda oportunidad para animarnos unos a otros para que podamos aguantar y perseverar fielmente en el servicio que hemos emprendido y prosigamos unidamente hacia la meta que Jehová ha puesto ante nosotros. Si hacemos eso, tendremos la perspectiva de servir a Jehová Dios para siempre en asociación feliz con los fieles. (Filipenses 3:13-16.)
Puntos para recordar
◻ ¿Cuáles eran los antecedentes personales de Pablo, y cómo se valió de éstos para animar a sus hermanos?
◻ ¿Cuál debe ser la actitud cristiana madura, según aprendemos del ejemplo que dieron Cristo Jesús y Pablo?
◻ ¿Cómo podemos desplegar nuestra unidad cuando surge oposición?
◻ ¿Por qué tenemos que proseguir hacia nuestra meta?
-
-
“Efectúa tu ministerio plenamente”La Atalaya 1984 | 15 de diciembre
-
-
“Efectúa tu ministerio plenamente”
“Solemnemente te encargo delante de Dios y de Cristo Jesús, que está destinado a juzgar a los vivos y a los muertos, [...] efectúa tu ministerio plenamente.” (2 TIMOTEO 4:1, 5.)
1. ¿Qué relación existía entre Pablo y Timoteo?
CUANDO escribió su segunda carta a Timoteo, el apóstol Pablo había estado prosiguiendo hacia su meta como ministro de Dios por aproximadamente 30 años. Había recibido muchas bendiciones de Jehová (2 Timoteo 1:2). Pablo había escogido a Timoteo para que trabajara en estrecha colaboración con él sirviendo a las congregaciones en la obra de ministros viajantes. Juntos disfrutaron de muchos años de experiencias fructíferas. (Hechos 16:1-5.)
2. ¿Qué significan las palabras de Pablo en 2 Timoteo 4:6-8?
2 Ahora se había acercado el tiempo para el fin del ministerio de Pablo. Él escribió: “Yo ya estoy siendo derramado como libación, y el debido tiempo de mi liberación es inminente. He peleado la excelente pelea, he corrido la carrera hasta terminarla, he observado la fe. De este tiempo en adelante me está reservada la corona de la justicia, que el Señor, el justo juez, me dará como galardón en aquel día, sin embargo no solo a mí, sino también a todos los que han amado su manifestación” (2 Timoteo 4:6-8). Esto daba a entender que la muerte de Pablo era inminente. Se cree que Pablo murió en 66 E.C. a consecuencia de la persecución que desató Nerón. Cuando se encaró con la muerte, ¿qué pensamientos habrían pasado por la mente de Pablo? Tal vez éstos: ¿Habré efectuado bien mi servicio? ¿Habré completado con éxito mi ministerio? Sí, ¡Pablo pudo expresar su convicción de que había hecho tales cosas! Su fe era muy firme, y él confiaba en que adquiriría el premio de la llamada hacia arriba. ¡Qué satisfacción debe haber sentido por no haberse desviado de su asignación!
3. Antes de morir, ¿qué bien podría hacer Pablo a favor de Timoteo?
3 A Pablo le restaba aún un poco de tiempo para hacer algún bien. Antes de dormir en la muerte, ¿qué bien podría hacer él a favor de Timoteo? Bajo inspiración dio consejo importante. Leemos sus ideas y palabras en el libro de Segunda a Timoteo. Esto fue lo último que escribió en las Escrituras para provecho nuestro también.
4. ¿Qué exhortación dio Pablo a Timoteo?
4 Timoteo no había terminado todavía su asignación ministerial, y por eso Pablo le escribió: “Solemnemente te encargo delante de Dios y de Cristo Jesús, que está destinado a juzgar a los vivos y a los muertos, y por su manifestación y su reino, predica la palabra, ocúpate en ello urgentemente en tiempo favorable, en tiempo dificultoso, censura, corrige, exhorta, con toda gran paciencia y arte de enseñar. Porque habrá un período de tiempo en que no soportarán la enseñanza sana, sino que, de acuerdo con sus propios deseos, acumularán para sí mismos maestros para que les regalen los oídos; y apartarán sus oídos de la verdad, siendo que serán desviados a cuentos falsos. Tú, sin embargo, mantén tu juicio en todas las cosas, sufre el mal, haz la obra de evangelizador, efectúa tu ministerio plenamente”. (2 Timoteo 4:1-5.)
5. ¿Por qué es el consejo de Pablo de especial interés para nosotros?
5 Ese excelente consejo tiene que haber beneficiado considerablemente a Timoteo, pero ¿podemos nosotros, también, beneficiarnos de él? Vivimos en “los últimos días” acerca de los cuales Pablo escribió. Hoy día muchas personas tienen ‘una forma de devoción piadosa, mas resultan falsas al poder de ella’ (2 Timoteo 3:1-5). Se sienten inclinadas a escuchar solo a “maestros” que les regalen los oídos. Sin embargo, además de predicar la palabra en el ámbito de la congregación, los cristianos verdaderos tienen la obligación de predicar públicamente a toda persona, y de buscar a los que respondan favorablemente a “la palabra”. Así que este consejo es pertinente hoy para los testigos cristianos de Jehová.
Cómo efectuar plenamente el ministerio
6. a) ¿Por qué debemos ‘predicar la palabra’? b) ¿Qué beneficios se derivan de que prestemos atención a cómo efectuamos nuestro ministerio?
6 El ministerio tiene diferentes facetas; hay muchas cosas que el ministro tiene que hacer. En primer lugar, Pablo menciona ‘predicar la palabra’. Ésta es la palabra que Jehová ha escogido revelar a sus siervos. Es la palabra de verdad acerca de la cual Jesús habló. Jehová da a conocer cuál es su mensaje para la humanidad en determinado tiempo, y tiene sus testigos sobre la tierra para que expongan el lado de él en el punto en cuestión. El modo de obrar de Jehová es dar el mensaje de advertencia antes de tomar acción (2 Crónicas 36:15, 16; Isaías 42:9; 43:12; Jonás 3:2-4). Su mensaje resulta en bien para los que lo escuchan; pueden conseguir un lugar de seguridad. Los que no prestan atención tienen que sufrir las consecuencias cuando Jehová entre en acción para ejecutar su juicio. Tendrán que cargar con su propia responsabilidad (Hechos 20:20, 21, 26, 27). No obstante, el derrotero sabio que debe seguir el ministro de Dios es: “Presta constante atención a ti mismo y a tu enseñanza. Persiste en estas cosas, pues haciendo esto te salvarás a ti mismo y también a los que te escuchan”. (1 Timoteo 4:16.)
7. ¿Por qué es urgente esta obra aunque las condiciones parezcan desfavorables?
7 La obra de predicar se efectúa en medio de diversas condiciones, pero tiene que adelantar. “Ocúpate en ello urgentemente en tiempo favorable, en tiempo dificultoso”, escribió Pablo. El mensaje puede significar vida para la gente. Por consiguiente, sean cuales sean las circunstancias en que se halle el ministro fiel, ve la urgencia del mensaje y busca las maneras de que se escuche la palabra, aunque se presente alguna oposición a la obra de predicar. Podemos ver esto claramente en el ejemplo de Jesús y en el registro que se halla en el libro bíblico de los Hechos.
8. a) ¿Qué puede ayudar al ministro a predicar la palabra? b) ¿Por qué podría ser parte del ministerio el censurar?
8 Para predicar la palabra, sea dentro de la congregación o fuera de ella, el ministro debe estar familiarizado con la Palabra de Dios, por ser estudiante de ella. Debe dedicar tiempo a estudiar, reflexionar y meditar, procurando entenderla bien. La predicación debe basarse en el hecho de que se está bien familiarizado con las enseñanzas de la verdad. Pablo dijo a Tito que el superintendente debe ser alguien que “se adhiera firmemente a la fiel palabra en lo que toca a su arte de enseñar, para que pueda exhortar por la enseñanza que es sana y también censurar a los que contradicen” (Tito 1:9). La Palabra de Dios sirve como medio de censurar a los que están fuera de armonía con lo que Jehová requiere, y de corregir al ofensor para su propio bien. Todo esto es parte integrante de efectuar el ministerio plenamente.
Se necesita la exhortación
9. ¿Por qué se necesita la exhortación cristiana?
9 A veces los que no están haciendo todo cuanto deberían, o los que no tienen aprecio ni celo por la adoración de Jehová, necesitan ciertos recordatorios. Los que aman a Jehová aprecian muchísimo la exhortación cristiana. Se alegran de oír lo que Jehová dice, y lo consideran rico alimento espiritual (Isaías 55:3; Hebreos 12:5, 6). Así que les prestamos un gran servicio a nuestros colaboradores —y también a las personas que se inclinan a la adoración de Jehová— cuando los exhortamos con la Palabra de Dios. Pablo mismo dio mucha exhortación. (Romanos 15:30; 16:17; 1 Corintios 1:10, 11; 1 Timoteo 4:13; 6:11, 12; Hebreos 10:24.)
10. ¿Por qué se necesita gran paciencia en conexión con exhortar?
10 Es preciso que el ministro dedicado sepa también cultivar los frutos del espíritu de Dios. Puede que el tratar de exhortar a los que no responden prontamente requiera mucha paciencia y perseverancia. Algunos hasta pudieran mostrar falta de aprecio por los esfuerzos que se hacen para exhortarlos y animarlos. Sin embargo, es preciso hacerlo, y en especial deben hacerlo todos los ancianos cristianos. El arte de enseñar entra en juego. Mientras más uno use la Palabra de Jehová, más experto se hace en su uso. Cuando un maestro llega a conocer al estudiante, debe poder impartirle información. Pablo describe bien el método correcto en 1 Tesalonicenses 5:14: “Les exhortamos, hermanos, amonesten a los desordenados, hablen confortadoramente a las almas abatidas, den su apoyo a los débiles, sean sufridos para con todos”.
Apártense de los apóstatas
11. ¿Qué debemos hacer con relación a los apóstatas?
11 Pablo quería que Timoteo conservara el equilibrio, o mantuviera su juicio, en todas las cosas. No debía permitirse llegar a ser como los que no soportan la enseñanza sana y apartan sus oídos de la verdad. El verdadero ministro de Dios hoy no llega a estar excesivamente inquieto ni perturbado en sus actividades cuando halla que algunos se apartan de la Palabra de Dios y de su enseñanza sana. Se nos ha advertido de antemano que habrá apóstatas y personas que solo quieren que se les regalen los oídos. Consejo como el que se registra en 2 Juan 9-11,; 1 Corintios 5:11-13 y 2 Timoteo 3:5 no da margen para que nos asociemos con los que se apartan de la verdad. Tampoco compramos sus escritos ni los leemos. Hay muchísimas personas más a quienes les encanta escuchar la verdad, y es con ellas con quienes tenemos asociación cristiana. (1 Timoteo 6:20, 21.)
12. ¿Por qué adopta tal posición firme el ministro cristiano?
12 Pablo advirtió: “Los hombres inicuos e impostores avanzarán de mal en peor, extraviando y siendo extraviados” (2 Timoteo 3:13). A la luz de esta advertencia dada de antemano, el ministro cristiano no está de acuerdo con estas personas. Hace caso del buen consejo del apóstol: “Tú, sin embargo, continúa en las cosas que aprendiste y fuiste persuadido a creer, sabiendo de qué personas las aprendiste y que desde la infancia has conocido los santos escritos, que pueden hacerte sabio para la salvación por medio de la fe relacionada con Cristo Jesús. Toda Escritura es inspirada de Dios y provechosa para enseñar, para censurar, para rectificar las cosas, para disciplinar en justicia, para que el hombre de Dios sea enteramente competente, estando completamente equipado para toda buena obra” (2 Timoteo 3:14-17). El estudio regular de la Palabra de Dios es una bendición para los que están esforzándose por efectuar su ministerio.
Bendiciones que se obtienen de la asociación cristiana
13. ¿De qué manera fue beneficioso para Timoteo trabajar en el ministerio con Pablo, y cómo podemos beneficiarnos nosotros del relato de ello?
13 Resultó ser una verdadera bendición para Timoteo haber tenido años de asociación con Pablo, pues pudo observar cómo se comporta un ministro de Dios fiel y maduro. Pablo hizo uso de las experiencias que habían tenido como recordatorio útil para Timoteo: “Tú has seguido con sumo cuidado y atención mi enseñanza, el derrotero de mi vida, mi propósito, mi fe, mi gran paciencia, mi amor, mi perseverancia, mis persecuciones, mis sufrimientos, la clase de cosas que me sucedieron en Antioquía, en Iconio, en Listra, la clase de persecuciones que he soportado; y no obstante de todas ellas el Señor me libró. De hecho, todos los que desean vivir con devoción piadosa en asociación con Cristo Jesús también serán perseguidos” (2 Timoteo 3:10-12). Aunque hoy día nosotros no estamos en contacto directo con Pablo, el extenso registro de sus maneras de actuar, que se halla en la Biblia, puede ayudarnos a nosotros también.
14. ¿Por qué debemos estar preparados para sufrir el mal?
14 Pablo mencionó sus persecuciones y sufrimientos, y su consejo al ministro cristiano es que esté dispuesto a sufrir el mal (2 Timoteo 4:5). A menudo, al efectuar plenamente nuestro ministerio, es necesario que pasemos por alguna clase de persecución. Es un privilegio el que, mientras experimentamos pruebas, mantengamos integridad y alegremos el corazón de Jehová (Proverbios 27:11). ¡De ello puede resultar un testimonio, para la alabanza de Jehová!
La obra del evangelizador
15. ¿Por qué debemos participar en la obra de evangelizar a medida que efectuamos nuestro ministerio plenamente?
15 La evangelización ocupa gran parte del tiempo del ministro cristiano fiel. Jesús dijo: “En todas las naciones primero tienen que predicarse las buenas nuevas” (Marcos 13:10). Hizo claro que el fin no vendrá sino hasta que se hayan predicado suficientemente las buenas nuevas. Pablo tuvo el privilegio de compartir las buenas nuevas con muchos creyentes por todo el Imperio Romano. Esto resultó en que se formaran nuevas congregaciones y se nombraran superintendentes. Ellos, a su vez, participaron con sus hermanos y hermanas cristianos en la obra de evangelizar, y así extendieron por todas partes la obra de predicar. Gran parte de la obra se hace como lo describió Pablo: ‘enseñando públicamente y de casa en casa’ (Hechos 20:20). Se obtuvieron buenos resultados entonces, y se obtienen excelentes resultados hoy día cuando por todo el mundo se efectúa la predicación cristiana. (Juan 14:12.)
16. ¿Qué prueba hay de que muchas personas están aplicando el consejo de Pablo en 2 Timoteo 4:5?
16 Con fe, muchas personas están asiéndose de las oportunidades de aumentar su actividad en la obra de evangelizar. Miles de personas han entrado en el campo misional, y centenares de miles participan en alguna forma del servicio de precursor. En 205 países hay actualmente más de 2.650.000 personas que sirven de evangelizadores en más de 46.000 congregaciones, y las cantidades continúan aumentando. Estas cosas maravillosas son prueba de que los siervos dedicados de Jehová toman a pecho el mandato divino que se les ha dado, y ‘efectúan plenamente’ su ministerio.
Efectuación de la obra
17. ¿Qué quiere Jehová ver que sus siervos hagan con relación a la obra que les ha asignado hoy?
17 Jehová ha asignado a un ministerio a sus ungidos, y los de la “grande muchedumbre” trabajan lado a lado con ellos. En sentido profético, en el capítulo 9 de Ezequiel, se asemeja esta obra a marcar en la frente a los que suspiran y gimen. De esa profecía aprendemos que vendrá el tiempo en que el hombre con el tintero de secretario dirá: “He hecho tal como me has mandado”. Jehová se complace en sus siervos cuando ellos hacen tal como él les manda. (Ezequiel 9:4, 11; Génesis 6:22; 1 Corintios 4:2.)
18, 19. ¿Cuáles son algunas de las formas en las que usted puede poner en práctica la exhortación de Pablo en 2 Timoteo 4:1-5?
18 Mientras observamos las condiciones del mundo desarrollarse en conformidad con las profecías relacionadas con estos últimos días, inevitablemente sentimos la urgencia de la obra de predicar que se nos ha asignado. Hay vidas en juego. La siega se está llevando a cabo y Jehová la está acelerando a su propio tiempo (Isaías 60:22). Por consiguiente, sea cual sea su responsabilidad como siervo dedicado de Jehová, trabaje en ello para agradarle completamente (Colosenses 1:10; 3:23, 24). Tenga presente la obra que se le ha encomendado hacer y procure efectuarla plenamente. Si usted está atendiendo algunos deberes en el Salón del Reino, haga su trabajo concienzudamente. Si está asignado a efectuar algunas actividades en uno de los grupos del Estudio de Libro de Congregación, trabaje en estrecha cooperación con éste, y exhórtense y anímense unos a otros. Si usted es precursor o misionero, asegúrese de trabajar arduamente para alcanzar sus metas de servicio. (Romanos 12:6-9.)
19 También puede preguntarse: ¿Puedo hacer algo adicional para ayudar a otros cristianos, especialmente a los nuevos en la congregación, para ser edificante para ellos? Si parte de su ministerio es servir de anciano en la congregación, conozca la apariencia ‘del rebaño’ y cuide bien de todos los que se asocian. Preste atención para que nadie se haga inactivo ni infructífero respecto al conocimiento exacto de nuestro Señor Jesucristo (2 Pedro 1:5-8). Sobre todo, manténgase alerta a lo que está realizando en la obra de evangelizar a fin de que ‘efectúe su ministerio plenamente’.
¿Recuerda usted?
◻ ¿En qué situación se hallaba Pablo cuando escribió Segunda a Timoteo?
◻ ¿Por qué es vital predicar la palabra?
◻ ¿Por qué es importante la exhortación?
◻ ¿Cómo se debe tratar con los maestros falsos?
◻ ¿Por qué es tan importante hoy día la obra de evangelizar?
-