El servicio de tiempo cabal—un glorioso tesoro

“Porque donde su tesoro está, también estará su corazón.”—Mat. 6:21, NM.

1. ¿Qué debemos considerar cuando examinamos un tesoro? ¿Por qué?

¿ES DE más valor un puñado de granos que un puñado de diamantes? ¿Ha de desearse más un vaso de agua que un vaso de perlas? ¿Ha de estimarse más una botella de oxígeno que una botella de rubíes? No podemos decir ni sí ni no a estas preguntas, porque las circunstancias en que se encuentra la persona determinan su justipreciación de las cosas. Para un hombre hambriento, aislado en alguna parte remota de la tierra, un puñado de granos significaría más que un puñado de diamantes. Un hombre sediento en un desierto abrasado despreciaría un vaso de perlas para aceptar un vaso de agua. Y un hombre que estuviera sofocándose a causa de una pulmonía estimaría más una botella de oxígeno que una botella de rubíes. En cada caso la justipreciación es diferente a la que normalmente se haría, porque hay peligro de perder la vida. La vida significa más que las piedras preciosas; porque sin la vida no se puede disfrutar de tales cosas. Por lo tanto, cuando examinamos un tesoro debemos considerar a qué se debe su valor y por qué debemos poner nuestro corazón en él.

2, 3. (a) ¿Por qué no pondría el hombre sabio su corazón en tesoros materiales? (b) ¿En qué pone su corazón, y por qué debe ser justipreciado esto apropiadamente?

² Las piedras preciosas de la tierra fueron colocadas allí por el Creador para disfrute del hombre, y no cabe duda de que son tesoros deseables. Pero también lo son el alimento, el agua y el aire—cosas esenciales para sustentar la vida. Estos también son tesoros que el Creador amoroso ha dado al hombre. Pero ¿debemos poner nuestro corazón en obtener tesoros materiales, ya que la oportunidad de disfrutarlos sólo es temporal? ¿Deben justipreciarse tan elevadamente las necesidades, los deseos, y los placeres de la carne de modo que uno haga de éstos las razones del vivir, la meta en la vida? ¿No sería una meta mucho más práctica el medio por el cual una persona pudiera obtener vida eterna?

SIRVIENDO AL DADOR DE VIDA

³ Dado que Jehová Dios es el Creador de los muchos tesoros de la tierra y es el Dador de la vida eterna, el hombre sabio pondrá su corazón en servirle. Reciben gozo duradero y satisfacción verdadera los que sirven de tiempo cabal a este gran y amoroso Dador de todo don bueno y perfecto. Aquí está un glorioso tesoro muy superior a los muchos otros tesoros en los cuales una persona pudiera poner su corazón. Es un tesoro que puede traer vida eterna. Por lo tanto, es de suma importancia el que la persona lo justiprecie apropiadamente. Debe verlo en la perspectiva correcta. Debe entender las razones por las cuales es inapreciable. Por medio de conseguir conocimiento acerca de él dicha persona desarrollará la actitud mental que Jehová se propuso que sus criaturas tuvieran tocante a su servicio.

4. ¿Cuál fué el propósito de Dios al crear criaturas vivas, inteligentes?

⁴ Jehová tuvo ideados propósitos definidos cuando comenzó a crear criaturas vivas, inteligentes, hace un número incalculable de siglos. Él no las creó simplemente para tener compañerismo, porque él no se sentía solo. Él es autosuficiente y no depende de nadie más. Entonces, ¿por qué creó? Lo hizo porque tuvo gusto en crear y dejar que otros disfrutaran de la bondad, compañerismo y sabiduría de él. Él deseó compartir altruístamente la vida con otros. Y por eso se rodeó de cientos de millones de poderosas criaturas espirituales que podían disfrutar directamente de su gloria radiante. Su propósito era que ellas le sirvieran continuamente, ejecutando fielmente las tareas que él les asignó. De esa manera recibieron el glorioso tesoro de servicio de tiempo cabal. Él quería que dedicaran su tiempo a traer honor y gloria al nombre de él, a disfrutar de su bondad y amor y a embeber sabiduría procedente de él. Porque él es la fuente de la sabiduría, sus pensamientos son preciosos y del más grande valor para sus criaturas. “¡Y a mí cuán preciosos me son tus pensamientos, oh Dios! ¡cuán grande es la suma de ellos!” “¡Oh la profundidad de las riquezas y de la sabiduría y del conocimiento de Dios! ¡Qué insondables son sus juicios e inexplorables son sus caminos!”—Sal. 139:17; Rom. 11:33, NM.

5. ¿Desde qué punto de vista veían los ángeles el servicio de tiempo cabal que rendían al Creador?

⁵ En sus diversos deberes los ángeles gozosamente servían los intereses de su Creador amoroso. No ponían estos deberes a un lado como secundarios a los intereses personales. No, ellos daban su atención indivisa y todas sus energías y habilidades al servicio que le rendían al gran Soberano del universo. Nada era de mayor importancia para ellos. Los ángeles a quienes se enviaba como mensajeros iban sin titubear un solo instante. No se detenían ni había la menor señal de renuencia a aceptar una asignación. Se deleitaban en hacer la voluntad de Jehová porque en eso estaba su corazón. Hallaban gozo en servirle de tiempo cabal.

6. ¿Cuáles fueron algunos de los deberes especiales asignados a la primera creación de Jehová?

⁶ A la primera de estas creaciones espirituales se le dieron muchos deberes especiales, entre los cuales estuvo la creación de las huestes celestiales. Este poderoso Hijo de Dios gozosamente dedicó sus energías a esta tarea, hallando placer en el servicio de tiempo cabal que le rendía a su Dios y Padre. Dado que fué nombrado como vocero especial de Jehová, se le llamó “La Palabra.” Concerniente a él Juan 1:1-3 (NM) dice: “Originalmente la Palabra era, y la Palabra estaba con Dios, y la Palabra era un dios. Este estaba originalmente con Dios. Todas las cosas vinieron a la existencia por medio de él, y sin él ni siquiera una cosa vino a la existencia.” Y luego el apóstol Pablo nos dice: “Él es la imagen del Dios invisible, el primogénito de toda la creación, porque por medio de él todas las otras cosas fueron creadas en los cielos y sobre la tierra, las cosas visibles y las cosas invisibles.”—Col. 1:15, 16, NM.

7, 8. (a) ¿Cuál fué la actitud de él tocante al servicio de tiempo cabal? (b) ¿Lo desanimó un largo período de servicio en una sola asignación?

⁷ Él gozosamente aceptó cualquier asignación que Dios le dió. Él no consideró el servicio de tiempo cabal un glorioso tesoro en una sección del universo pero indeseable en otra. No le importó adonde se le asignaba a servir con tal que pudiera ser útil y servirle a su Dios y Padre. Su actitud fué bien expresada en el Salmo 40:8: “Me complazco en hacer tu voluntad, oh Dios mío, y tu ley está en medio de mi corazón.” Él ha mostrado esta misma actitud humilde y anuencia para servir a través de su larga carrera de servicio de tiempo cabal. Él dijo en una ocasión: “Yo busco, no mi propia voluntad, sino la voluntad de aquel que me envió.” (Juan 5:30, NM) Esta ha sido su actitud mental desde el mismo principio. Por lo tanto, él es un ejemplo que todas las demás criaturas harían bien en seguir.

⁸ Cuando Jehová se propuso producir el universo material y hacer de uno de los cuerpos materiales el hogar paradisíaco para criaturas inteligentes y carnales, fué a la Palabra a quien se le asignó el llevar a cabo este propósito. Y por eso, con el modelo y poder que Jehová Dios le suministró, él procedió con el trabajo de la creación material. Aunque la formación de la tierra y la preparación de ella para que se pudiera vivir en ella fueron tareas que requirieron un gran período de tiempo, la Palabra no perdió interés en su trabajo. Él no dejó que miles de millones de años en la misma asignación lo desanimaran y lo hicieran desistir. Él perseveró en su tarea y fielmente trabajó en ella hasta que quedó terminada.

9. ¿Qué probó él por medio de perseverar en su asignación, y en qué resultó esto para él?

⁹ Por tal servicio fiel él probó su confiabilidad y por lo tanto recibió otras asignaciones. Parece que hay fuerte razón para creer que una de éstas fué la liberación de los israelitas de la esclavitud en que estaban en Egipto. Él tuvo la responsabilidad de conducirlos por medio de una columna de nube durante el día y una columna de fuego durante la noche. Y luego cuando el pueblo llegó al pie del monte Horeb, evidentemente fué este amado Hijo del Altísimo quien transmitió la Ley divina a los israelitas por medio de Moisés. Concerniente a este poderoso Hijo espiritual, que se llama Miguel, Daniel 12:1 dice que él es “el gran príncipe que está de parte de los hijos de tu pueblo.” Seguramente el ángel que los había guiado y que fielmente les había comunicado las instrucciones de Dios, y que también los había castigado por desobedecer la Ley divina, sería el que estaría sobre el pueblo de Dios como príncipe.a

10. ¿Cuál fué la asignación más difícil que se le dio al Hijo unigénito, y cómo respondió a ella?

¹⁰ La asignación más difícil se le dió a la Palabra cuando Jehová hizo que dejara la vida en la región celestial como una gloriosa criatura espiritual y emprendiera el servicio de tiempo cabal en la tierra como hombre. Aunque esta asignación requería que él fuera hecho inferior a los ángeles y entrañaba una muerte sacrificatoria mientras estuviera en la tierra, no hizo que el Hijo rechazara la asignación. Humildemente convino en hacer cualquier cosa que decretara el gran Soberano. Y por eso está escrito en Filipenses 2:5-8 (NM): “Retengan en sí mismos esta actitud mental que también estaba en Cristo Jesús, quien, aunque estaba existiendo en forma de Dios, no dió consideración a un arrebatamiento, a saber, que debía ser igual a Dios. No, sino que se despojó a sí mismo y tomó la forma de un esclavo y vino a estar en la semejanza de los hombres. Más que eso, cuando se halló en forma de hombre, se humilló y se hizo obediente hasta la muerte, sí, muerte en un madero de tormento.” A pesar de las pruebas y penalidades que vinieron sobre el Hijo unigénito de Dios en esta asignación en particular, él en ningún instante pensó en desistir y retirarse del servicio de tiempo cabal que le rendía a su Padre celestial. Él justipreció que eso importaba más que sus sentimientos personales, su comodidad personal y aun su vida.

11, 12. (a) ¿Tuvo Cristo la apropiada justipreciación del tesoro del servicio de tiempo cabal? (b) ¿Qué ha demostrado por sus acciones?

¹¹ Prescindiendo de las circunstancias en que se encontró Cristo, él siempre tuvo la justipreciación apropiada del glorioso tesoro de servicio de tiempo cabal. Su justipreciación no cambió cuando las circunstancias cambiaron, como cambian las justipreciaciones de los que ponen su corazón en posesiones materiales. Él sabía que no había ninguna necesidad de siquiera considerar el comparar el valor del servicio de su Padre con los lujos y comodidades, cualesquiera que fueran, de este mundo, ni aun con los artículos de primera necesidad de la vida. Una vez él dijo: “Mi alimento es hacer la voluntad de aquel que me envió y terminar su obra.” (Juan 4:34, NM) Él rechazó las riquezas, honor y poder de todo este mundo por preferir el servicio de Jehová. (Mat. 4:8-10, NM) El cumplir esta asignación, como él había cumplido otras asignaciones, era todo lo que le interesaba. Este servicio piadoso fué de mucho mayor valor para él, porque significó la aprobación de Jehová y vida eterna.

¹² El ejemplo de servicio piadoso que puso este Hijo amado es fuera de toda duda el más excelente que criatura alguna pudiera seguir. Sus miles de millones de años de servicio fiel de tiempo cabal y anuencia humilde para aceptar y desempeñar cualquier asignación que se le diera, así como su aguante bajo prueba, claramente prueban el intenso amor que le tiene al Padre. Aquí está un ejemplo espléndido de tenerle aprecio al tesoro del servicio de tiempo cabal, e ilustra bien la justipreciación apropiada de ese tesoro.

EL SERVICIO HA VARIADO

13. (a) ¿Ha estado limitado este tesoro a una sola forma de servicio? (b) ¿Cómo sirvió Noé?

¹³ La manera en que las criaturas han tenido el privilegio de rendirle a Jehová Dios servicio de tiempo cabal ha variado. Como hemos visto, el Hijo unigénito sirvió en más de una manera. Y cuando examinamos los registros de los fieles siervos de tiempo cabal sobre la tierra, hallamos que esto también fué cierto concerniente a ellos. No todos sirvieron de la misma manera. Noé, por ejemplo, recibió una asignación de hacer una obra de testimonio. Había de predicar una amonestación del fin violento que estaba por venir al mundo antediluviano, y, además de eso, había de construir un arca para la preservación de las criaturas, hombres y bestias, que Dios designara. Esta era la manera en que Noé había de rendir servicio a Jehová. Era un servicio de la mayor importancia. Por lo tanto, no podía colocarlo en lugar secundario con relación a las empresas e intereses personales. Dado que su corazón estaba en el servicio de tiempo cabal que rendía al Creador, él perseveró en su asignación hasta que ésta quedó terminada.

14. ¿Cómo tuvo Moisés razón para desanimarse?

¹⁴ Lo mismo fué cierto en cuanto a Moisés, que renunció a ser pastor con el fin de servir a Jehová de tiempo cabal. Él también fué constante en ese servicio. Sin embargo, su manera de servir fué diferente a la de Noé, ya que la asignación de él fué que se encargara de los intereses de Jehová con respecto a la nación de Israel. Resultó ser una asignación muy difícil, a causa de la disposición quejumbrosa, obstinada y rebelde del pueblo. Aunque eso hizo que se desanimara mucho en varias ocasiones, él no huyó de sus responsabilidades de dirigente, dejando dichos problemas para que otro luchara con ellos. El desistir y huir hubiera significado el renunciar al tesoro del servicio de tiempo cabal, y Moisés prefirió llevar la carga antes que hacer tal cosa. De modo que perseveró en la tarea que Dios le había asignado a pesar de sentirse desanimado de vez en cuando. Su corazón estaba en el servicio de su Dios.—Heb. 3:2, 5.

15. (a) ¿Qué herencia recibieron los levitas? (b) ¿Cómo fué diferente su asignación de servicio?

¹⁵ Otra forma de servicio de tiempo cabal fué el que desempeñó la tribu de Leví. Fué apartada de las doce tribus de Israel para servicio del templo. Los levitas fueron asignados a dedicar toda su atención a desempeñar los diferentes deberes que tenían que efectuarse en conexión con la adoración de la nación. Por lo tanto su servicio continuo había de ser en el tabernáculo o en conexión con él. Este tesoro de servicio de tiempo cabal a Dios había de ser su herencia, como se indica en Deuteronomio 10:9 (NM): “Por eso Leví no ha llegado a tener participación ni herencia con sus hermanos. Jehová es su herencia, así como Jehová tu Dios se lo había dicho.” Ciertamente la herencia de ellos fué mucho más grande que la tierra que recibieron las doce tribus.

16, 17. (a) ¿Tuvieron razón los profetas para desanimarse? (b) ¿Qué ejemplos puede dar usted de algunos que no renunciaron al servicio de tiempo cabal porque se sintieran desalentados?

¹⁶ Más tarde, cuando se levantaron profetas entre los israelitas, hallamos todavía otra forma diferente del servicio de tiempo cabal. Jehová los usó para dar amonestaciones a la descarriada nación de Israel. Esto lo hicieron fielmente a pesar del abuso que se amontonó sobre ellos. “Hermanos, tomen como dechado de sufrir el mal y ejercer la paciencia a los profetas, que hablaron en el nombre de Jehová. ¡Miren! nosotros pronunciamos felices a los que han manifestado aguante.” (Sant. 5:10, 11, NM; 2 Cró. 36:16) Por eso, aunque no fueron bien recibidos y tuvieron buena razón para desanimarse, no desistieron. ¿Qué podría ser más desalentador que el saber, antes de que uno hablara, que la gente no escucharía? Jeremías tuvo que hacerle frente a eso. Dios le dijo: “Tú también les hablarás todas estas palabras; pero no te escucharán; y les llamarás, mas no te responderán.” (Jer. 7:27) ¿Qué haría usted si se enfrentara a una situación semejante hoy en día? Si supiera aun antes de comenzar a hablar que sus esfuerzos serían infructuosos, ¿desistiría? ¿Desistiría del servicio de tiempo cabal de Jehová porque a usted le pareciera que su trabajo era en vano? O ¿perseveraría usted en ese tesoro y cumpliría su comisión como lo hizo Jeremías? La Biblia indica que ésta fué más o menos la situación a que tuvieron que hacerle frente todos los profetas que fueron enviados a la nación de Israel. “Desde el día en que vuestros padres salieron de Egipto hasta hoy, les he enviado mis siervos, los profetas, día tras día; pero no me escucharon, no me prestaron oído, y endurecieron su cerviz, y obraron peor que sus padres.” (Jer. 7:25, 26, NC) Los profetas tuvieron la apropiada justipreciación del tesoro del servicio piadoso y por eso perseveraron en él a pesar de tales circunstancias desalentadoras. La actitud de la gente no modificó su justipreciación de las cosas.

¹⁷ Aun cuando Elías creyó que él era el único en todo Israel que no había abandonado la adoración de Jehová, él no pensó por un instante que debería renunciar a su asignación como profeta. Él perseveró en ella hasta que Jehová se lo llevó. Igual que otros profetas fieles, él retuvo integridad a Jehová Dios bajo las circunstancias más penosas y desalentadoras. Pero a pesar de sus pruebas y desalientos no perdió el aprecio vehemente que le tenía al inapreciable tesoro del servicio de tiempo cabal.—1 Rey. 19:2, 4, 9, 10.

18. ¿De qué manera sirvió David de tiempo cabal?

¹⁸ El rey David le tuvo este mismo aprecio al servicio de Jehová. Él sirvió de tiempo cabal como rey nombrado divinamente para la nación de Israel. Esa fué su asignación, una asignación que fué claramente diferente a la que se les dió a los profetas. Como rey ungido sobre el pueblo escogido de Dios, él tuvo la distinción de ser un representante del poder soberano del gran Gobernante del universo. Por esa razón puede decirse que se sentó sobre el trono de Jehová. Esta expresión se usa en 1 Crónicas 29:23 concerniente al hijo de David, Salomón, cuando fué coronado rey por segunda vez. En esa ocasión el tesoro del servicio de tiempo cabal como rey teocrático pasó de David a Salomón, pero Salomón dejó de tener la apropiada justipreciación de dicho servicio durante toda su vida, como su Padre David la había tenido.

19. ¿Cómo consideró David el tesoro de servicio de tiempo cabal, y cuál fué su deseo?

¹⁹ Sin embargo, a David nada le ocasionó mayor gozo que el servir los intereses de su Dios. En una ocasión él expresó el deseo de morar en la casa de Jehová todos los días de su vida. (Sal. 27:4) Así claramente reveló dónde estaba su corazón. No tenía el deseo de estar en ningún otro lugar sino en el servicio de Jehová. Sinceramente anheló que se cantaran las alabanzas de Jehová entre las naciones y que se proclamaran las obras maravillosas del Creador por todas partes. Este deseo halló expresión bella en las gracias que él dió a Jehová al tiempo que se trajo el arca a Jerusalén y se colocó en la tienda que él había preparado para ella junto a su palacio. Allí se vió la expresión sincera de una persona que estaba plenamente dedicada al servicio de Dios y que lo consideraba como el más precioso de todos los tesoros. David inició su expresión de gracias diciendo: “¡Den gracias a Jehová, invoquen su nombre, den a conocer sus hazañas entre los pueblos! Cántenle a él, prodúzcanle melodía a él, hablen de todos sus actos maravillosos.” (1 Cró. 16:8, 9, NM) El dar a conocer los actos de Jehová y hablar de sus obras maravillosas es la forma de servicio que el David Mayor introdujo mucho tiempo después.

EL MINISTERIO DEL REINO

20, 21. ¿Qué nueva manera de servir a Jehová de tiempo cabal introdujo Cristo?

²⁰ Hasta ahora hemos visto cómo se ha disfrutado del tesoro del servicio de tiempo cabal de maneras diferentes a través de los siglos. Las personas de fe efectuaron su servicio de diferentes maneras, según la asignación que Dios les había dado. Pero con la llegada del David Mayor, Cristo Jesús, se introdujo una nueva forma de servicio de tiempo cabal. Fué la de hacer la mismísima cosa de la cual habló David—el dar a conocer los actos de Jehová entre la gente del mundo. Era el debido tiempo para declarar las buenas nuevas del reino de Jehová. Este nuevo trabajo fué principiado apropiadamente por Aquel que fué ungido para ser Rey del Reino.

²¹ Esta fué una nueva asignación para el Hijo unigénito de Dios, quien, treinta años antes de ser ungido como Rey, había nacido de María como humano perfecto, su fuerza de vida habiendo sido trasladada desde los cielos al vientre de María. Así que, a la edad de treinta años, como Rey ungido procedió a dar principio a esta nueva manera de servir al Creador. Con el fin de que otros supieran cómo había de hacerse este servicio, Cristo puso el ejemplo yendo de lugar en lugar predicando las buenas nuevas del Reino y los maravillosos actos de Dios. Allí se vió un trabajo educativo que no tenía paralelo. Era un trabajo de recoger a personas que serían dignas de la dádiva de vida eterna. (Juan 17:3) Cristo dedicó todo su tiempo a esta asignación y la llevó a cabo hasta terminarla, así como había hecho con todas las otras asignaciones que su Padre le había dado.

22. (a) ¿Qué cambio efectuó el ministerio del Reino respecto al tesoro del servicio de tiempo cabal? (b) ¿Cómo respondieron algunos a la invitación de hacer suyo este tesoro?

²² Antes de los días de Cristo el tesoro de servicio de tiempo cabal estuvo limitado a nada más unas cuantas personas, pero el ministerio del Reino cambió eso. Finalmente hizo disponible este tesoro a personas de todas las naciones, para que cualquiera pudiera echar mano de él. Juan y su compañero pescador Andrés fueron los primeros de miles que lo abrazaron en esta nueva forma. Cuando Jesús les ofreció este servicio a ellos y después a Pedro, ninguno titubeó en aceptarlo. Lo mismo fué cierto concerniente a Santiago el hermano de Juan. Tocante a esto Mateo 4:18-22 (NM) dice: “Caminando por la orilla del mar de Galilea él vió a dos hermanos, Simón, a quien llaman ‘Pedro,’ y Andrés su hermano, bajando una red de pescar en el mar, porque ellos eran pescadores. Y él les dijo: ‘Vengan en pos de mí, y los haré pescadores de hombres.’ Dejando al instante las redes, le siguieron. Prosiguiendo también desde allí vió a otros dos que eran hermanos, Santiago el hijo de Zebedeo y Juan su hermano, en la barca con Zebedeo su padre, reparando sus redes, y él los llamó. Dejando al instante la barca y a su padre, le siguieron.” Tal como lo había prometido, Cristo los instruyó y los hizo pescadores de hombres. Ahora concentraron su tiempo y energías en el trabajo de proclamar los magníficos propósitos de Jehová Dios.

23. ¿Cómo consideró Pablo el servicio de tiempo cabal?

²³ El apóstol Pablo fué sobresaliente en cuanto a esto. Él dedicó su todo al ministerio. Aunque sufrió muchas pruebas severas, jamás tuvo el más leve pensamiento de renunciar al servicio de tiempo cabal. Concerniente a algunas de sus experiencias 2 Corintios 11:24-27 (NM) dice: “Por los judíos cinco veces recibí cuarenta azotes menos uno, tres veces fuí golpeado con varas, una vez fuí apedreado, tres veces experimenté naufragio, una noche y un día los pasé en lo profundo; en viajes a menudo, en peligros de ríos, en peligros por parte de salteadores de caminos, en peligros por parte de mi propia raza, en peligros por parte de las naciones, en peligros en la ciudad, en peligros en el desierto, en peligros en el mar, en peligros entre falsos hermanos, en trabajo y fatiga, en noches en desvelo a menudo, en hambre y sed, en abstinencia de alimento muchas veces, en frío y desnudez.” A la persona que no tuviera la apropiada justipreciación del tesoro del servicio de tiempo cabal éstas hubieran sido buenas razones para renunciar. Pero tal no fué el caso con Pablo. Él apreció este tesoro tan grandemente que ni siquiera abrigó ese pensamiento. No importaba cuánta dificultad y abuso le sobrevenían, éstos no podían hacer que soltara este tesoro. Tampoco permitió Pablo que la atracción de las comodidades materiales, seguridad financiera o piedras preciosas cambiaran su justipreciación de las cosas. Él consideró como pérdida todo lo que el mundo le ofrecía de manera material al compararlo con el ministerio y sus verdades vivificantes. Concerniente a esto él dijo: “Pues, en cuanto a eso, verdaderamente considero también que todas las cosas son pérdida a causa del valor sobresaliente del conocimiento de Cristo Jesús mi Señor. Por motivo de él he aceptado la pérdida de todas las cosas y las considero un montón de basura.” (Fili. 3:8, NM) Por lo tanto las cosas de este mundo, en las cuales la gente pone su corazón, Pablo las consideró como basura, en comparación con el tesoro que él tenía de rendirle servicio de tiempo cabal a Dios en el ministerio del Reino.

24. ¿Cuál es la manera de proceder prudente que uno debe emprender?

²⁴ ¿No parece insensatez el que uno ponga su corazón en una gran cantidad de basura y haga de eso su meta en la vida? ¿No es temerario el hacer de eso el tesoro de uno? Dado que la manera en que uno justiprecia los diamantes, perlas y rubíes cambia por completo según las circunstancias en que se encuentra uno, ¿no es más prudente el poner el corazón de uno en un tesoro cuyo valor nunca cambia? ¿Un tesoro que puede significar vida eterna? Jesús una vez dijo: “Porque donde su tesoro está, también estará su corazón.” (Mat. 6:21, NM) Ahora, pues, ¿dónde está su corazón? ¿Está donde está el corazón de él, en el glorioso tesoro de servicio de tiempo cabal?

¿Es este tesoro para usted?

“En consecuencia, les ruego por las misericordias de Dios, hermanos, que presenten sus cuerpos en sacrificio vivo, santo, acepto a Dios, en servicio sagrado con su facultad de raciocinio.”—Rom. 12:1, NM.

1, 2. (a) ¿Qué tesoro es de valor incomparable, y para quiénes se halla disponible? (b) ¿Por qué es una decisión seria el esforzarse por poseer este tesoro?

LAS joyas de la corona británica son la más deslumbradora colección de piedras preciosas del mundo. Forman un tesoro inapreciable que multitudes han admirado. Pero aunque muchos han anhelado poseer algunas de estas gemas, no existe la más remota probabilidad de que algún día las posean. Sin embargo, hay un tesoro que ellos pueden poseer el cual es de mucho mayor valor que las joyas de la corona. Dado que este tesoro no posee el valor que tiene a causa de rareza, se halla disponible para todos los que lo quieran. Pero se requieren ciertas cosas de una persona antes de que pueda poseerlo. Por lo tanto la persona tiene que considerar cuidadosamente estos requisitos y luego decidir si este tesoro es o no para ella.

² El tesoro de valor incomparable es el servicio de tiempo cabal que se le rinde a la gran Fuente de la vida, Jehová Dios. Dado que trae vida eterna al que se esfuerza por alcanzarlo y lo mantiene firmemente asido, ¿qué colección de joyas podría compararse a él? ¿Qué es una piedra preciosa o un cuarto entero lleno de dichas piedras en comparación con la vida? ¡Con razón, entonces, el apóstol Pablo consideró tales cosas como basura, en comparación con el conocimiento y servicio de Dios! Esta, por supuesto, es una justipreciación de las cosas enteramente opuesta a la que posee el mundo. Por eso la decisión de esforzarse por alcanzar el tesoro del servicio de tiempo cabal es una decisión seria que requiere cuidadosa consideración. Una persona tiene que saber lo que está haciendo. Tiene que tener entendimiento y aprecio del ministerio del Reino, y ya tiene que estar ocupada en ese ministerio hasta donde su tiempo se lo permita.

ACTITUD MENTAL APROPIADA

3. ¿Cuál debe ser la actitud mental del cristiano?

³ A los que quisieran servir a Dios el apóstol Pablo dice, como se registra en Romanos 12:2 (NM): “Y dejen de amoldarse a este sistema de cosas, mas transfórmense rehaciendo su mente, para que prueben para sí mismos la buena y la aceptable y la completa voluntad de Dios.” Eso significa que una persona tiene que cambiar por completo su justipreciación de las cosas. En vez de considerar las riquezas materiales de la manera que el mundo las considera, tiene que considerarlas de la manera que Pablo las consideró. No les dará la posición predominante en su vida que les daba en otro tiempo. Lo que ella ahora considera de mayor valor es el servicio del gran Dador de vida, Jehová Dios. De esta manera deja de amoldarse a este presente sistema de cosas. Dedica su vida a hacer la voluntad de Dios como la dedicó Jesús, quien dijo: “Que no se efectúe mi voluntad, sino la tuya.” (Luc. 22:42, NM) También adopta la actitud mental que David expresó: “Me complazco en hacer tu voluntad, oh Dios mío, y tu ley está en medio de mi corazón.” (Sal. 40:8) Entonces se ocupa en el ministerio del Reino junto con otros que han hecho la misma dedicación. Estas personas dedicadas ahora forman una sociedad del Nuevo Mundo de testigos fieles que dan testimonio a la supremacía y propósitos de Jehová Dios.

4. ¿Cuál es la actitud que adoptan algunos respecto al servicio de tiempo cabal?

⁴ La mayoría de estos cristianos dedicados tienen obligaciones y responsabilidades que no les dejan dedicar todo su tiempo al ministerio del Reino, pero eso no significa que no deben buscar el tesoro del servicio de tiempo cabal si de alguna manera les es posible hacerlo. Sin embargo, hay algunos que creen que aceptarían sin discusión una invitación que un ángel les entregara para servir en las cortes celestiales de Jehová junto con los poderosos ángeles, pero que se tapan los oídos cuando se hace mención del servicio de tiempo cabal en el ministerio del Reino. Si están dispuestos a servir a Dios de tiempo cabal en un lugar de su universo, ¿por qué no deberían estar interesados en servirle de tiempo cabal en algún otro lugar? ¿Acaso el sitio en que se desempeña el servicio a él o la manera diferente en que se efectúa hace que cambie su valor? ¿Están estas personas dispuestas a dar servicio de tiempo cabal a Jehová sólo cuando no están implicadas las dificultades y persecución? ¿Se olvidan de que cuando hicieron su dedicación a Dios y la simbolizaron por medio del bautismo en agua murieron a su anterior derrotero en la vida? Al entrar y sumergirse en agua ellas indicaron tal cosa. Cuando subieron del agua, iban a vivir de allí en adelante haciendo la voluntad de Dios. Si lo pueden hacer, ¿no piensa usted que Dios espera que ellas dediquen todo su tiempo al logro de Su ministerio?

5. ¿Qué clase de servicio agrada a Jehová?

⁵ Si usted es una persona que ha hecho esta dedicación y se encuentra en posición de dar a Jehová servicio de tiempo cabal, ¿por qué no lo está haciendo? Cuando dedicó su vida a él, ¿no lo hizo de buena fe? ¿Murió a su propio derrotero egoísta en la vida, o todavía tiene éste colocado en el primer lugar? El apóstol Pablo dice: “Presenten sus cuerpos en sacrificio vivo, santo, acepto a Dios, en servicio sagrado.” (Rom. 12:1, NM) Eso no significa considerar el servicio de Jehová como una cosa incidental, algo que debe hacerse siempre que uno tenga tiempo de sobra. No es algo que ha de ocupar el segundo lugar, después de los intereses personales. Debe ser de primera importancia. Los que no lo ponen en primer lugar todavía no han cambiado su justipreciación de las cosas y todavía no han sido transformados de estar amoldados a este presente mundo o sistema de cosas. Todavía no justiprecian el tesoro del servicio de tiempo cabal como superior a las riquezas del mundo. El presentarse usted a Dios significa el entregarse completamente a su servicio. Significa el dedicar su tiempo, sus energías, sus habilidades, sus posesiones a hacer la voluntad de Dios, no a hacer su propia voluntad. Este es un servicio sagrado que le agrada a él y es acepto. Pero para que sea así, tiene que hacerse con la facultad de raciocinio de uno. Uno tiene que entender plenamente lo que está haciendo y por qué lo está haciendo.

NO HA DE TOMARSE A LA LIGERA

6. (a) ¿Debe una persona emprender apresuradamente el servicio de tiempo cabal? (b) ¿Cuáles son algunos requisitos básicos para este servicio, y por qué son esenciales?

⁶ Si usted ha hecho del servicio de tiempo cabal su tesoro y ha puesto su corazón en él, entonces usted querrá estar en ese servicio. Pero recuerde que no es algo que una persona puede emprender apresuradamente sólo porque momentáneamente se siente conmovida. Es un tesoro precioso que no puede tomarse a la ligera o empuñarse sólo temporalmente. Por eso antes de que una persona emprenda el ministerio de tiempo cabal debe darle consideración cuidadosa. Debe recordar que las dificultades que experimenta en el ministerio de tiempo parcial se multiplicarán grandemente en el ministerio de tiempo cabal. Debe examinar los requisitos y decidir si puede o no llenarlos. Debe considerar el costo. ¿Es demasiado alto para ella? ¿Tiene que renunciar a demasiado en lo que respecta a intereses personales, placeres y posesiones materiales? Es una decisión que tiene que hacerse debido al amor que le tiene uno a Dios y su deseo de servirle. Tiene que tenerle amor genuino a Jehová y al servicio de ese Supremo antes de que siquiera considere el esforzarse por alcanzar este tesoro. Uno tiene que estar profundamente interesado en el ministerio del Reino y en la expansión de la organización teocrática. Debe ser maduro en las verdades bíblicas que le llegan a uno por medio de esta organización. Todo esto es esencial porque los que emprenden el servicio de tiempo cabal como lo hicieron los apóstoles llegan a ser representantes especiales de esa organización. Otros acuden a ellos para obtener un entendimiento maduro de las Escrituras y esperan ver en ellos un ejemplo celoso en el ministerio del Reino.

7. ¿Ha de considerarse el servicio de tiempo cabal como un oficio temporal?

⁷ Una vez que usted haya dado este paso hacia adelante, no debe retroceder. El servicio de tiempo cabal que se le rinde a Dios no es un oficio temporal. No es algo que ha de hacerse por unos cuantos meses o unos cuantos años y que luego ha de dejarse cuando usted se canse de él. Las personas fieles que emprendieron este servicio en siglos pasados perseveraron en él a pesar de desaliento y dificultades. Ellas no se dejaron ‘cansar en el bien hacer’ de tiempo cabal. (Gál. 6:9) Una vez que emprendieron el servicio de tiempo cabal persistieron en él. El ministerio del Reino hoy en día no es más fácil que las asignaciones de servicio que esas personas tuvieron. En él hay muchas aflicciones y dificultades. De modo que no lo vaya a emprender con la idea de que es fácil y luego renuncie a él cuando descubra que no lo es.

SIERVOS DE TIEMPO CABAL PUEDEN LOGRAR MUCHO

8. ¿Por qué se necesitan siervos de tiempo cabal?

⁸ En la organización terrestre de Jehová hay muchos lugares para los siervos de tiempo cabal. Ella tiene un trabajo grande que hacer al cumplir el mandato de Dios de proclamar las buenas nuevas del Reino por toda la tierra habitada. Hay muchas personas que tienen que ser alcanzadas e instruídas en la Palabra divina de verdad. Decenas de miles de personas están respondiendo a estas buenas nuevas; sin embargo, como Jesús predijo: “la cosecha es grande, pero los trabajadores son pocos.” (Mat. 9:37, NM) Se necesitan más trabajadores de tiempo cabal para encargarse de la cosecha del Amo. ¿Cómo es posible alcanzar a las personas que se encuentran en áreas aisladas o en tierras lejanas a menos que la organización de Dios tenga personas dedicadas que estén deseosas de dedicar todo su tiempo al ministerio del Reino? En Hechos 16:9 (NM) se registra que el apóstol Pablo tuvo una visión de un hombre de Macedonia que estaba de pie, suplicando: “Pase a Macedonia y ayúdenos.” Dado que Pablo servía a Jehová de tiempo cabal estaba libre para ir a este otro país y allí dirigir a las personas de buena voluntad en el camino a la vida. Él no pensó en sí mismo ni en sus propios intereses. Él tomaba a pecho los intereses de Jehová y estaba dispuesto a ir adondequiera que fuera dirigido.

9. ¿Qué espera Jehová de los que aceptan su tesoro?

⁹ Esta obediencia y disposición lista para servir son lo que Jehová Dios espera de los que aceptan el tesoro del servicio de tiempo cabal. Las personas que son obstinadas y tercas no tienen ningún valor para él. Él desea tener siervos que se deleiten en hacer su voluntad y que gozosamente obedezcan cualesquier instrucciones que se les den por medio de la organización teocrática. Así como Cristo mostró humildad y obediencia, igualmente deben mostrarlas sus seguidores. Por lo tanto, deben estar dispuestos a ir adondequiera que la organización los envíe. Deben mostrar el mismo deseo de servir que mostró el profeta Isaías, quien dijo: “¡Aquí estoy yo; envíame a mí!” (Isa. 6:8) Una persona con esta actitud mental está ansiosa de hacer la voluntad de Jehová, y no titubea en cuanto a aceptar mayores privilegios de servicio cuando se le ofrecen, tales como los de un publicador precursor.

10. ¿Por qué es preciso que tenga organización personal un precursor?

¹⁰ Cuando uno se ocupa en el servicio de tiempo cabal como precursor, tiene poco tiempo para aspiraciones personales. Es un trabajo que requiere un presupuesto cuidadoso del tiempo. El ministro precursor tiene que predicar de casa en casa, hacer revisitas y conducir estudios bíblicos de casa. Tiene que cumplir con la cuota de horas establecida por la organización teocrática. Además de esto tiene que trabajar con la congregación local de siervos dedicados de Jehová por medio de prestar ayuda a los que la necesitan en el ministerio del Reino. A algunos precursores quizás se les den puestos de superintendentes en las congregaciones, lo cual es otro privilegio de servicio adicional para ellos. También tienen que tomar la delantera en mostrar amor, misericordia y entendimiento. Además de mantenerse al día con su estudio personal, que es esencial, tienen que encargarse de sus necesidades personales, lo cual puede incluir un empleo seglar de tiempo parcial. Para cumplir con un horario tan ocupado como éste el ministro precursor debe tener organización personal. Debe tener cada día planeado con anticipación. Resulta pues, que el servicio de tiempo cabal como precursor no es fácil. Es trabajo arduo y por lo tanto requiere personas maduras en conocimiento bíblico, personas que se deleiten en proclamar las alabanzas de Jehová, personas que no le tengan miedo al trabajo.

11. ¿Cuál es la perspectiva que se halla ante un precursor diligente, y cómo puede prepararse para ella?

¹¹ El siervo de tiempo cabal que da pruebas de ser un precursor diligente tiene la perspectiva de ser invitado a asistir a la Escuela Bíblica de Galaad de la Wátchtower, para entrenamiento especial en el ministerio. Aquí recibirá instrucción superior en las Escrituras así como entrenamiento para efectuar el ministerio del Reino en otros países. Así se le prepara para prestar servicio especial a la organización de Jehová de una manera muy parecida a la manera en que el apóstol Pablo lo hizo. En Galaad aprende a tenerle mayor aprecio a la organización, cómo funciona ésta, cuánta falta hace ella, y la relación de él a ella. Dado que la instrucción de Galaad está planeada para ensanchar el conocimiento y entendimiento del ministro tocante a las verdades bíblicas, la mejor manera de prepararse para ella es estudiar diligentemente las publicaciones provistas regularmente por la organización teocrática. Tiene que mantenerse al día con el alimento espiritual más reciente que proviene de la mesa de Jehová.

12. ¿Cómo debe considerar su asignación un graduado de Galaad?

¹² Cuando un estudiante de Galaad se gradúa debería ser mucho más profundo el aprecio que le tiene al tesoro del servicio de tiempo cabal. Aceptará gozosamente cualquier asignación de territorio que se le dé, e irá allí con la intención de permanecer por lo menos tres años. Si regresa a casa para una visita al fin de ese tiempo él querrá regresar a su asignación extranjera y continuar allí rindiéndole servicio de tiempo cabal a Jehová. Hará todo esfuerzo por perseverar en su asignación prescindiendo de cuán desagradable o desalentadora sea. No considerará el desistir, sino que siempre tendrá en cuenta los ejemplos espléndidos de constancia en el servicio de tiempo cabal que dejaron los siervos fieles de Dios de tiempos antiguos. Con el tiempo se acostumbrará al ambiente extraño y las costumbres raras de la gente del lugar de su asignación si se resuelve a hacerlo. Con el tiempo considerará ese lugar como su hogar y hallará a la gente de la sociedad del Nuevo Mundo tan cariñosa allí como en otros países.

SIRVIENDO EN BETEL

13. Explique el propósito de Betel.

¹³ Con el fin de que el ministerio del Reino esté organizado y que los cristianos dedicados sean provistos de Biblias y ayudas para estudio bíblico, ha sido necesario que la organización teocrática tenga las llamadas “casas Betel” por todo el mundo. Los ministros que viven y trabajan en estas casas son personas que han abrazado el tesoro del servicio de tiempo cabal. Emplean su tiempo cabal encargándose de los intereses de Jehová. En cualquier país que está situada una casa Betel, que es como se denominan las sucursales de la Sociedad Watch Tówer, ella es el eje de la actividad teocrática allí. Está dedicada al servicio del Altísimo y verdaderamente es “la casa de Dios,” que es lo que significa el nombre “Betel.”

14, 15. ¿Cómo debe ser considerado Betel?

¹⁴ Cuando un cristiano dedicado da un paso hacia adelante al servicio de tiempo cabal, puede ser que opte por servir en Betel. Si llena los requisitos y se acepta su solicitud, entra en un rasgo maravilloso del servicio de tiempo cabal. Pero para apreciar plenamente a Betel tiene que ver a toda la organización como una unidad y el puesto vital que Betel ocupa en ella. No debe imaginarse a Betel como un monasterio, donde la gente vive en aislamiento, empleando todo su tiempo en meditación y oración. Está lejos de ser cosa semejante a eso. Por lo contrario, es un lugar de gran actividad. Es un lugar donde se espera que la persona sea productiva, no improductiva. Una persona no sólo tiene que encargarse de los deberes que se le asignen allí, sino que también tiene que ser activa en predicar las buenas nuevas del Reino.

¹⁵ Todos los que entran en la sociedad del Nuevo Mundo deben tener un entendimiento apropiado de Betel. Las personas que consideran a Betel como un buen lugar para educar a hijos indiferentes u obstinados deben cambiar su modo de ver el asunto, porque Betel no es tal lugar. Es la casa de Dios, un lugar donde los ministros dedicados de Jehová emplean todo su tiempo en honrar y alabar a Jehová y también en servir los intereses de la organización cristiana. No es una escuela para corregir a hijos que causan dificultad. No tiene como su objeto hacer lo que los padres dejaron de hacer. Las personas que vienen a Betel deben ser ministros que sean una representación de los testigos de Jehová que hay por todo el mundo. Deben ser personas que la organización teocrática se complazca en tener en tal lugar de servicio responsable.

16, 17. (a) ¿Con qué actitud debe emprender una persona el servicio de Betel? (b) ¿Por cuánto tiempo debe permanecer?

¹⁶ El servicio de Betel jamás debe tomarse a la ligera. Nadie debe hacer una solicitud para entrar en Betel con la actitud de sólo probar cómo es. Este es servicio de tiempo cabal y uno debe entrar en él con la intención plena de perseverar en él. Si usted fuera invitado a servir en las cortes celestiales de Jehová, ¿diría: “Bueno, voy a probar cómo es y veré si me gusta”? Quizás haya muchas cosas que a usted le gustaría hacer mejor que servir de tiempo cabal en el ministerio del Reino, dado que éste es trabajo arduo, pero eso no es lo que se debe considerar. El servir a Jehová es su obligación, su responsabilidad, lo que usted ha convenido en hacer si ha hecho una dedicación a él. Por eso los que se han entregado al servicio de tiempo cabal tienen que hacerlo porque aman al gran Soberano y quieren servirle como esclavos. Si usted se entrega a Jehová como esclavo, entonces no se trata de qué cosa le agrada a usted sino de qué le agrada a Él. Así que Betel no es algo que uno simplemente prueba para ver cómo es. Es un privilegio de servicio bendito que debe ser apreciado y tenido en la más alta estimación.

¹⁷ El hecho de que una persona tal vez no encuentre a Betel como lo esperaba no es razón para que renuncie después de sólo trabajar unos cuantos días, unas cuantas semanas o unos cuantos meses. La persona que venga a Betel debe venir con la determinación de permanecer por lo menos tres años, prescindiendo de las pruebas que encuentre. En realidad, la solicitud para entrar en Betel dice específicamente: Si su solicitud se acepta y usted ingresa en el servicio de Betel, ¿permanecerá usted fielmente en tal puesto de servicio asignado durante tres años o más tiempo? Si el solicitante dice que sí, entonces debe querer decir que sí. Recuerde lo que Eclesiastés 5:4 dice: “Cuando hicieres voto a Dios, no dilates en cumplirlo; porque él no se complace en los insensatos: cumple pues lo que has prometido.” Eso significa que la organización teocrática espera que los que solicitan entrar en Betel sean personas de integridad que cumplirán con su acuerdo de servir por lo menos tres años en el servicio de tiempo cabal en Betel. Naturalmente, se espera que permanezcan mucho más tiempo en este campo del servicio de tiempo cabal en particular. El servicio de toda la vida en Betel es la meta verdadera y muchos cristianos fieles la han alcanzado.

MUCHAS PRUEBAS

18. (a) ¿Qué debe esperar el siervo de tiempo cabal? (b) Dé ejemplos de personas que tuvieron razón para desalentarse pero que no desistieron.

¹⁸ Debe tenerse en cuenta que cuando una persona emprende el servicio de tiempo cabal para el Creador no puede menos que enfrentarse a muchas pruebas. Esto fué cierto en cuanto a los hombres fieles de tiempos antiguos que abrazaron este tesoro; de modo que debe ser lo que ha de esperarse hoy en día. Hasta fué predicho por el apóstol Pablo, que dijo: “Todos los que deseen vivir con devoción piadosa en asociación con Cristo Jesús también serán perseguidos.” (2 Tim. 3:12, NM) Pero la persecución por proclamar las buenas nuevas del Reino y retener firmemente la integridad cristiana sólo es una de las pruebas a las cuales el siervo de tiempo cabal tiene que enfrentarse. El desaliento, por ejemplo, es una prueba a la cual los precursores y misioneros tienen que hacerle frente continuamente. El trabajar día tras día con poco o ningún resultado es muy desalentador, y la tendencia natural es decir: “¿De qué sirve?” Eso es precisamente lo que Satanás quiere que usted concluya. Él no quiere que usted le sirva a Jehová ya sea de tiempo cabal o de tiempo parcial. Él quiere que usted desista. Pero piense en cuán desalentador pudo haber sido para Noé, que predicó durante cuarenta o cincuenta años sin tener absolutamente ningún resultado salvo la respuesta de su familia inmediata. ¿Se desalentó al grado de renunciar al servicio de tiempo cabal que le rendía a Jehová? ¿Soltó ese tesoro maravilloso sólo porque la gente de su día no respondió a su predicación? ¿Y qué hay acerca de Jeremías? Dios le dijo aun antes de que comenzara a predicar que la gente no le iba a escuchar. Pero, ¿dijo Jeremías: “¿De qué sirve?” ¿Permitió que el desaliento le callara los labios? ¿Renunció a su asignación y dijo a Dios que era una pérdida de tiempo? Absolutamente no. Él perseveró en ella, así como Noé. Estos dos hombres fieles sabían que estaban haciendo la voluntad de Dios, sirviendo sus intereses, aunque su predicación cayó en oídos sordos. Por medio de continuar en su asignación a pesar de esta indiferencia, probaron su integridad.

19, 20. ¿Qué hay que tener para perseverar en el servicio de tiempo cabal?

¹⁹ Pero ¿qué hay acerca de usted? Si usted es una persona que ha hecho una dedicación para servir al Altísimo y ha abrazado el tesoro de servicio de tiempo cabal, ¿aprecia usted ese tesoro tanto que pudiera predicar durante cuarenta o cincuenta años sin que nadie respondiera a su predicación, y no obstante no dejar de asir ese tesoro? ¿Podría usted ir a una asignación, sabiendo con anticipación que ni una sola persona prestaría atención a su mensaje de amonestación, y no obstante podría usted permanecer en esa asignación durante años sin desistir? Hay que tener valor para hacer eso. Se necesita determinación. Hay que tenerle aprecio al servicio de Jehová. Hay que tenerle verdadero amor a Él. Los siervos de Jehová de tiempos antiguos tuvieron estas cualidades; ¿las tiene usted?

²⁰ No debemos desistir de hacer lo que es correcto, porque “segaremos al tiempo debido si no nos rendimos.” (Gál. 6:9, NM) Para que una persona no se rinda, tiene que estudiar la Palabra de Dios constantemente y meditar en ella. No sólo tiene que meditar en las maravillosas bendiciones que Jehová ha prometido para los que aguantan en el servicio fiel, sino que tiene que reflexionar en los espléndidos ejemplos de constancia que pueden hallarse en la Biblia. Si personas de siglos pasados pudieron aguantar bajo pruebas y circunstancias desalentadoras, entonces usted también puede hacerlo. Ellas fueron humanas igual que usted. En 1 Corintios 15:58 (NM) el apóstol Pablo da este consejo sano: “Por lo cual, amados hermanos míos, estén firmes, inmóviles, siempre con mucho que hacer en la obra del Señor, sabiendo que su trabajo no es en vano en relación al Señor.” Por lo tanto, aun si su predicación pareciera infructuosa, su trabajo nunca es en vano. Su servicio diario es un sacrificio de alabanza a Jehová, y eso en sí mismo es razón suficiente para ser constante en el servicio de tiempo cabal.

21. ¿Qué han dejado algunas personas que suceda, y qué pregunta surge debido a esto?

²¹ Es cosa segura que los siervos de Dios se enfrentarán con muchos obstáculos y tentaciones. Pero ¿permitieron Cristo y otros hombres fieles que tales cosas les quitaran el tesoro de servicio de tiempo cabal? Tenían la mente y corazón puestos en una sola cosa—servir fielmente a Jehová. Ellos no permitieron que cosa alguna estorbara eso. Sin embargo, hoy hay personas que en otro tiempo poseyeron como precursores el tesoro del servicio de tiempo cabal pero que no tuvieron esta actitud mental. Dejaron que su trabajo seglar de tiempo parcial los sedujera y los hiciera poner a un lado el servicio de precursor con el fin de emprender el trabajo seglar de tiempo cabal. Ahora, ¿dónde está su corazón? ¿Está en hacer la voluntad de Dios o en hacer su propia voluntad? ¿Está su tesoro en las riquezas materiales o en el servicio de tiempo cabal? Dado que sabemos que Satanás nos acusa de amarnos a nosotros mismos más que a Dios, nunca queremos darle motivos para hacer esa acusación.

22. ¿Qué preguntas escrutadoras puede uno hacerse a sí mismo?

²² Si sucede que usted es un siervo dedicado a Dios y está libre de obligaciones, o puede estar libre de ellas, ¿por qué no ha hecho usted suyo el tesoro del servicio de tiempo cabal? ¿Sirve usted a Jehová Dios por amor o por razones egoístas, como Satanás acusa? Si le sirve usted por amor, entonces ¿por qué se abstiene de darle servicio de tiempo cabal ya que es posible que usted lo haga? ¿No es este tesoro para usted? ¿Es sólo para otros? ¿Carece de atracción para usted la idea de servir de tiempo cabal al gran Dador de vida? ¿Se abstiene usted porque no halla ningún deleite en hacer la voluntad de Dios todo el tiempo?

23. Cuando una persona consigue el tesoro del servicio de tiempo cabal, ¿qué debe estar resuelto a hacer?

²³ Por otra parte, si usted decide que este tesoro es para usted y se esfuerza por abrazarlo para hacerlo suyo, entonces resuélvase a que usted va a continuar asiéndolo con toda su fuerza. Nunca vaya a soltarlo. No desista del servicio de tiempo cabal cuando le sobrevenga persecución. No desista cuando esté abatido a causa de desaliento. No desista cuando sea tentado por la ganancia financiera. No desista a causa de cansancio por largos años de servicio. En vez de desistir, mantenga firmemente asido ese tesoro de servicio de tiempo cabal. Manténgalo más firmemente asido que lo que mantendría las joyas de la corona británica si ellas fueran suyas. Nunca deje que sus ojos se ofusquen de modo que deje de ver su belleza resplandeciente. Nunca pierda el aprecio que le tiene. Regocíjese por él como los ángeles se han regocijado, como los patriarcas, los profetas y los apóstoles se regocijaron por él y lo estimaron. Nunca olvide que sus recompensas son eternas, y sus bendiciones incomparables.

Líderes eclesiásticos en un dilema

DURANTE la última parte de 1955 el Sínodo Northwest de la Iglesia luterana unida de América celebró tres juicios de herejía en los que estuvieron envueltos los clérigos Crist, Gerberding y Wrigley. Respecto al primero de éstos la prensa pública informó que Crist negaba que Adán fuera culpable de la condición pecaminosa del hombre, decía que Dios no contesta las oraciones, que la oración posee sólo esa fuerza espiritual que anima al solicitante a ayudarse a sí mismo o a rendir servicio activo a otros, negaba que Jesús hubiera nacido de una virgen, negaba la resurrección y ascensión de Cristo, y sacaba explicaciones tan naturalistas para los milagros de Jesucristo como la siguiente, respecto a los milagros de alimentar a las multitudes con unos cuantos panes y pescados: “Tal vez Él persuadió a los que habían traído su almuerzo a compartirlo con los que no habían traído nada.”

Comentando sobre estos juicios, el semanario no sectario The Christian Century, en su número del 23 de noviembre de 1955, mencionó lo siguiente, entre otras cosas: “Lutero fué un cristiano amplio y volátil, que dijo muchas cosas diferentes de muchas maneras diferentes. . . . [Es] difícil imaginarse que alguien pretenda saber precisamente qué es el luteranismo definitivo. . . . Lo que pasó con Crist y Gerberding y Wrigley es que creyeron lo que se les enseñó en los seminarios luteranos. Y esos seminarios están relacionados con toda la iglesia. De modo que tarde o temprano las autoridades sectarias tendrán que decidir qué se ha de hacer con ejecutivos de sínodo y ministros locales que cometen desafuero contra otros ministros por aceptar éstos con seriedad lo que se les ha enseñado en las escuelas sectarias.”

El director entonces comentó que él abrigaba los mismos sentimientos que estos clérigos, diciendo: “Los demás de nosotros nos quejamos de que los resultados asegurados de la mejor erudición aparentemente nunca llegan a las congregaciones. ¡Poco extraña, cuando la proscripción es el destino de los cuantos que hacen el esfuerzo!” Entonces saca consuelo de las palabras que Reinhold Niebuhr, uno de los teólogos más eminentes de los Estados Unidos y vicepresidente del Seminario Teológico Unión, envió a la congregación de uno de estos pastores, a saber: “Voy a consultar con algunos de mis colegas porque yo creo que los líderes cristianos definitivamente deberían apoyar a estos jóvenes, cuyas enseñanzas de ninguna manera son heréticas, sino que están en conformidad con el grupo principal de convicciones cristianas dentro de la iglesia.”

Así que los “resultados asegurados de la mejor erudición [teológica del siglo veinte]” son las opiniones que Cristo expresó, a saber, no tener fe en la Biblia como Palabra de Dios y no dar más crédito a sus relatos que el que se le daría si hubiesen sido escritos por cualquier novelista o historiador de inteligencia o integridad dudosa. Así se expresa el director de uno de los principales semanarios “cristianos” de los Estados Unidos. Y esto está “en conformidad con el grupo principal de convicciones cristianas,” según el vicepresidente del Seminario Teológico Unión. En realidad hoy día los ‘ciegos guían a los ciegos.’—Mat. 15:14.

¿Dios o la casualidad?

“Mientras más aprendemos acerca de nuestro mundo, la probabilidad de que éste haya resultado de procesos casuales se hace más y más remota.”—Arthur H. Compton en The Human Meaning of Science, página 62.