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  • ¿Qué quiso decir el sabio?
    La Atalaya 1978 | 1 de febrero
    • descubrir una regla precisa de esa índole por medio de la cual determinar exactamente qué esperar en cada caso. Salomón comentó: “De acuerdo con esto apliqué mi corazón a conocer la sabiduría y a ver la ocupación que se lleva a cabo en la tierra, porque hay uno que no ve sueño con sus ojos, ni de día ni de noche. Y vi toda la obra del Dios verdadero, cómo la humanidad no puede descubrir la obra que se ha hecho bajo el sol; por mucho y duro que siga trabajando el hombre en buscar, no obstante no descubre. Y aunque dijere que es bastante sabio para saberlo, no podría descubrirlo.”—Ecl. 8:16, 17.

      Note que Salomón aludió a las cosas que acontecen entre la humanidad como la “obra del Dios verdadero.” Se puede decir esto porque todo sucede por Su permiso o toleración, pero no porque Dios inicie, respalde o apruebe todo lo que se hace. Aunque uno sacrifique el sueño, simplemente no podrá sondear la plenitud de lo que Dios hace y tolera en el desenvolvimiento final de su magnífico propósito. Este es el pensamiento que transmite la traducción de Moffatt de las palabras de Salomón: “Cuando entregué mi mente al estudio de la sabiduría, para estudiar toda la vida llena de actividad del mundo, hallé que el hombre no puede entender la verdad de todo lo que Dios está efectuando en este mundo; puede trabajar en sus esfuerzos por alcanzarlo, en una búsqueda con desvelo de ello de día y de noche, pero jamás lo averiguará; un sabio quizás crea que está avanzando en el secreto, pero ni siquiera él lo averiguará jamás.”—Ecl. 8:16, 17.

  • Ponderando las noticias
    La Atalaya 1978 | 1 de febrero
    • Ponderando las noticias

      Ironías de ejecución

      ● Varios grupos pelearon vigorosamente contra la primera ejecución de un criminal norteamericano en diez años, aunque el reo convicto mismo la exigía. Declaró un grupo: “Lo sentimos, pero no vamos a dejar que usted nos convierta en asesinos.” Sin embargo, el reo convicto, Gary Gilmore, los acusó de ya tener sangre en las manos. Le escribió a un vocero del grupo que con frecuencia las mismísimas personas que se oponían a la pena capital aprobaban el “aborto, que realmente es ejecución; todos ustedes están en pro de eso.” Por eso preguntó: “¿Dónde están sus verdaderas convicciones?”

      Por lo tanto, hasta un asesino convicto podía ver la contradicción moral. ¡De seguro es inconsistente protestar contra la ejecución de unos cuantos asesinos culpables mientras se aboga por la matanza de millones de inocentes en abortos! Parece que estas personas que se oponen a la pena capital sustentan el parecer de que la vida merece protección fundándose, no en que se rinda o no servicio a la justicia, sino solo en si esa vida está situada dentro o fuera de una matriz.

      Los que condenan el castigo autorizado por Dios para el asesinato, mientras que están conformes con el asesinato legalizado mediante el aborto, ¿no están obrando de la misma manera que los líderes religiosos farisaicos de quienes Jesús comentó: “Cuelan el mosquito pero engullen el camello”?—Mat. 23:24; Gén. 9:6.

      Restauración de sitio atómico

      ● Recientemente la gente del atolón de Enewetak, sitio de pruebas de bombas nucleares de los EE. UU. desde 1948 hasta 1958, empezó a volver a sus islas natales. Agencias gubernamentales de los EE. UU. están quitando la tierra y los escombros radiactivos para ayudar a restaurar el ambiente para los isleños. Sin embargo, ya los científicos se están maravillando ante la asombrosa capacidad de la tierra para recuperarse después de veinte años sin bombas. “Hoy medran los peces y los corales en los cráteres [atómicos], lo cual testifica de la capacidad que tiene la naturaleza para recuperarse de casi cualquier clase de perturbación,” escribe un biólogo que estudia las formas de vida marinas.

      Un oficial del gobierno expresa así su maravilla: “No vemos mutaciones de la vida marina ni de la vegetación. Sencillamente no vemos ninguno de los monstruos de dos cabezas que la fantasía científica sugiere que se producirían después de radiación prolongada.”

      Ciertamente, pues, prescindiendo de lo que hagan los seres humanos para arruinar nuestro ambiente antes de que Dios produzca su prometida “nueva tierra,” el daño no será permanente. Con el tiempo, la asombrosa capacidad de recuperarse de Su creación, junto con Su bendición, restaurará la Tierra a la condición semejante a jardín que él originalmente se propuso para ella.—Rev. 11:18; 21:1-4.

  • ¿Recuerda usted?
    La Atalaya 1978 | 1 de febrero
    • ¿Recuerda usted?

      ¿Ha leído usted cuidadosamente los números recientes de La Atalaya? En tal caso, sin duda recordará los siguientes puntos:

      ● ¿Cuándo es verdaderamente remuneradora la soltería por selección?

      La soltería es remuneradora cuando la razón para ella es espiritual, el deseo de tener más tiempo para dedicarlo a servir a otros y ayudarlos a asirse del magnífico galardón de la vida eterna.—Pág. 553.

      ● En Ezequiel 31:4, ¿qué se representa por ‘las aguas que hacen que el cedro simbólico en el Líbano crezca y se haga grande’?

      En las Escrituras, las aguas representan ‘pueblos, muchedumbres y naciones.’ (Rev. 17:1, 15) Por lo tanto, las aguas representan a los pueblos o recursos humanos de los cuales el cedro simbólico saca lo que lo sostiene.—Págs. 593, 598.

      ● ¿Por qué dijo el profeta Habacuc que estaba para ser censurado por Jehová? (Hab. 2:1)

      A Habacuc le pareció difícil entender cómo Jehová Dios podría usar a los caldeos despiadados e idólatras para ejecutar Su juicio contra el reino de Judá. Puesto que estaba poniendo en tela de juicio el que el Altísimo fuera a utilizar a los caldeos, que consideraban a los hombres como simples peces y cosas que se arrastran que ellos podían capturar, y subyugar, el profeta reconoció que tenía que recibir ayuda para poder ver este asunto de la manera correcta. Por lo tanto, esperó una revelación adicional de Jehová a fin de quedar plenamente informado.—Pág. 637.

      ● ¿Cómo debe afectarnos de modo que resulte en bien para nosotros el hecho de que los ojos de Dios siempre están sobre nosotros? (Pro. 15:3)

      Eso debe movernos a comportarnos a todo tiempo de una manera que le sea agradable, al reconocer nosotros que estamos en su presencia.—Págs. 643, 644.

      ● ¿Qué lecciones amonestadoras podemos aprender de la actitud y los actos de los fariseos en el primer siglo E.C.?

      Tenemos que vigilar que no nos hagamos justos a nuestros propios ojos de modo que dejemos de mostrar consideración como la de Dios a las necesidades y sentimientos humanos. La persona que porfía a favor de reglas hechas por el hombre puede pasar por alto las cosas verdaderamente importantes... la justicia, la fidelidad, la misericordia y el amor. El tener demasiada confianza en la propia justicia de uno puede resultar en que uno desprecie a sus compañeros de creencia y no los trate como hermanos y hermanas amados.—Págs. 669, 670.

      ● ¿En qué respectos difieren las profecías de la Biblia de las predicciones que hacen los adivinos?

      A menudo las predicciones que hacen los adivinos son vagas, o incorrectas, o tienen que ver con asuntos de poca importancia. Pero las profecías bíblicas han sido específicas y, como han demostrado los hechos de la historia, se han cumplido hasta el detalle más pequeño. Han tratado de asuntos vitales que afectan el futuro de pueblos y naciones enteras.—Págs. 675, 676.

      ● Como se desprende de Lamentaciones 3:19, 20, ¿cuál fue una de las maneras en que Jehová Dios demostró su gran humildad?

      En Lamentaciones 3:19, 20, el profeta Jeremías expresa confianza en que con el tiempo el Altísimo recordaría a los arrepentidos de la nación de Israel, que había sido derribada en derrota. Él ‘se inclinaría’ o se agacharía para darles atención favorable.—Pág. 732.

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