BIBLIOTECA EN LÍNEA Watchtower
Watchtower
BIBLIOTECA EN LÍNEA
Español
  • BIBLIA
  • PUBLICACIONES
  • REUNIONES
  • La actividad ministerial de los testigos de Jehová
    La Atalaya 1962 | 1 de julio
    • mucha paciencia al efectuar el ministerio.’

      “En C—— hubo una excelente concurrencia al Memorial como resultado del trabajo diligente. Se dio énfasis especial a la necesidad de visitar a la gente de buena voluntad dos veces: primero, algunos días antes, para animarla a concurrir y hacer arreglos definidos; segundo, dos horas antes de la reunión para traerla al Salón. Una hora antes del discurso había más de cien personas presentes. Varios publicadores hicieron dos o más viajes para ayudar a la gente de buena voluntad. El resultado fue una concurrencia de 331 personas en una congregación de sesenta publicadores.

      “En C—— aconteció esta experiencia interesante: ‘Una mañana en la obra de revistas una joven hermana precursora y yo fuimos a la última puerta de un edificio de departamento juntas. Terminé mi presentación y la señora dijo que le agradaría leer las revistas, pero primero nos pidió que pasásemos porque tenía algunas preguntas sumamente importantes que hacernos. Nos dijo que había sido bendecida con un poder especial para comunicarse con los muertos y predecir muchas cosas en las vidas de su familia y amigos, hasta había oído las “voces” de los parientes muertos hablar mediante ella. Había, sin embargo, alguna duda en su mente en cuanto a las voces, pues algunas veces parecía que dos o tres trataban de hablar al mismo tiempo y se contradecían unas a otras. Algunas veces le pedían cigarrillos y ron, cosas que siempre desaparecían. Su esposo e hijo estaban muy nerviosos, y su matrimonio feliz estaba deshaciéndose. A su esposo le desagradaban las sesiones y, de hecho, cuando él estaba presente, ella no tenía ningún poder de comunicación. Esto ponía muy enojados a los espíritus y le dijeron que se divorciara de él. Esto era especialmente lo que la había hecho desear saber por qué poder hacía ella esas cosas.

      “‘Silenciosamente pedí la ayuda de Jehová y que su espíritu nos acompañase al ir a su Palabra por información que abriese aquellos ojos ciegos para que vieran la verdad concerniente al espiritismo. No titubeamos en decirle la verdad franca y claramente acerca del origen de su poder y cómo estaba condenado en la Biblia. Ella quedó maravillada con cada texto. En la segunda visita se colocó el folleto ¿Qué dicen las Escrituras acerca de “supervivencia después de la muerte”? y en la tercera visita estaba emocionada por lo que había aprendido y se hicieron arreglos para un estudio. Después de solo unas pocas semanas era una persona distinta, y no tenía más comunicación con los demonios. Le dijeron a su hermana que estaba “perdida.” Gradualmente la libertad que ha ganado ha traído bendiciones a toda su familia. Su hermano, que practicaba la misma creencia, ahora está bautizado. Ella y su madre pronto lo estarán. Su hijo joven recibe su estudio de otro de su edad y en su inocencia preguntó cuándo iba a estudiar la Biblia su padre. Para su sorpresa éste concordó en que debía hacerlo y lo hace ahora dos veces por semana. La verdad ha traído felicidad y armonía a esta familia.’”

  • Destrucción de Biblias
    La Atalaya 1962 | 1 de julio
    • Destrucción de Biblias

      La destrucción moderna de Biblias por la Iglesia Católica Romana, como la que ocurrió en Colombia en mayo de 1960, tuvo su paralelo en el mundo romano bajo los Césares. En cuanto a un informe policíaco escrito en el siglo cuarto, Time del 19 de mayo de 1961 declaró: “En 346 A.C., en un borrador de la policía en Cirta, un suburbio de Cartago, un capitán de la policía romana registró su informe: ‘Allanamos cinco casas. Descubrimos, confiscamos y destruimos 38 rollos cristianos.’”

Publicaciones en español (1950-2025)
Cerrar sesión
Iniciar sesión
  • Español
  • Compartir
  • Configuración
  • Copyright © 2025 Watch Tower Bible and Tract Society of Pennsylvania
  • Condiciones de uso
  • Política de privacidad
  • Configuración de privacidad
  • JW.ORG
  • Iniciar sesión
Compartir