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¿Hay vida más allá de la Tierra?¡Despertad! 1973 | 22 de agosto
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la Santa Biblia: “Yo soy Jehová. Ese es mi nombre.” (Isa. 42:8) “¡Oh Señor Jehová! Mira que tú mismo has hecho los cielos y la tierra por tu gran poder y por tu brazo extendido. El asunto entero no es demasiado maravilloso para ti mismo.” (Jer. 32:17) En vez de buscar vida evolucionada en el espacio sideral, los científicos evolucionistas harían bien en aprender acerca del Creador y obtener conocimiento de su propósito para la Tierra. Pero tal como fue en los días en que Jesucristo estuvo en la Tierra, así es en la actualidad. En oración Jesús dijo: “Padre justo, el mundo, por cierto, no ha llegado a conocerte.”—Juan 17:25.
¡Hay vida en el espacio sideral!
Sin embargo, sencillamente porque las sondas interplanetarias no hayan revelado ninguna señal de vida inteligente, no debemos concluir que no hay vida inteligente en el espacio sideral. ¡Positivamente la hay!
A pesar del hecho de que no hay formas de vida “evolucionadas,” ¡existen espléndidas personas inteligentes en la región que los hombres llaman el “espacio sideral”! ¡Lo que es más, se ha establecido comunicación con ellas!
Las personas inteligentes que existen más allá de la Tierra fueron creadas por Jehová Dios. Esta creación se llevó a cabo aun antes que el planeta Tierra fuera preparado para la habitación humana. La Palabra de Dios habla del tiempo cuando Jehová fundó la Tierra. En ese tiempo, explica él, “las estrellas de la mañana gozosamente clamaron a una, y todos los hijos de Dios empezaron a gritar en aplauso.” (Job 38:4-7) Estos “hijos de Dios” son poderosas personas angélicas quienes ciertamente tienen mucha más destreza e inteligencia que nosotros. En el pasado Dios los usó frecuentemente para comunicarse con los humanos.
Por ejemplo, cuando llegó el tiempo para que Jesús naciera como humano, Dios envió un mensajero superhumano, o ángel, al cual la Biblia se refiere con el nombre de “Gabriel.” Gabriel primero anunció el nacimiento del precursor de Jesús, Juan el Bautista, y entonces el propio nacimiento de Jesús. Al padre de Juan, Zacarías, el materializado ángel Gabriel le dijo: “Yo soy Gabriel, que estoy de pie cerca y delante de Dios, y fui enviado para hablar contigo y declararte las buenas nuevas de estas cosas.” Entonces, unos seis meses más tarde, Gabriel se apareció a la virgen judía María y declaró: “¡Mira! concebirás en tu matriz y darás a luz un hijo, y has de ponerle por nombre Jesús.”—Luc. 1:19, 31.
Otras visitas desde el espacio exterior
Sin embargo, no todas las visitas a la Tierra han sido hechas por personas angélicas enviadas por Dios con comunicaciones importantes de Él. De hecho, varios hijos angélicos de Dios rebeldemente dejaron sus posiciones celestiales, vinieron a la Tierra en la forma de hombres, y “se pusieron a tomar esposas para sí, a saber, todas las que escogieron.” La Biblia dice que a estos “ángeles que no guardaron su posición original, sino que abandonaron su propio y debido lugar de habitación, [Dios] los ha reservado . . . para el juicio del gran día,” tiempo en el que se pondrá fin a su perturbar a la humanidad. ¡Qué alivio será eso!—Gén. 6:1, 2; Jud. 6.
Por lo tanto, ciertamente hay sustancia para las leyendas que algunos científicos han interpretado como posibles indicaciones de visitas desde el espacio sideral. En realidad la Tierra fue visitada por personas inteligentes no humanas de inmenso poder. No, éstas no eran organismos procedentes de otros planetas que habían evolucionado mayor inteligencia que el hombre, como algunos científicos quizás supongan, sino que fueron desobedientes creaciones angélicas de Dios.—1 Ped. 3:19, 20.
Cuando vino el gran diluvio de los días de Noé, estas criaturas superiores pudieron escapar por medio de restringirse otra vez a la forma espiritual. Aunque desde entonces Dios los ha restringido de materializarse como humanos, estas desaforadas criaturas espirituales ahora operan desde su base en la región invisible en la vecindad de la Tierra con el fin de arruinar a la familia humana.—Rev. 12:7-10, 12; 16:13-16.
Por lo tanto, en el espacio invisible sí existen personas inteligentes, y algunas de ellas son inicuas. (Efe. 6:11, 12) Durante su ministerio terrenal, Jesucristo frecuentemente se encontró con estas inicuas fuerzas invisibles. A veces se apoderaban de las mentes y cuerpos de víctimas desprevenidas, y Jesús misericordiosamente liberó a personas de su influencia.—Mat. 4:24; 15:22.
La Tierra tiene un grandioso futuro; ¿lo tendrá usted?
Dios mismo promete que pronto llegará el tiempo en que esta Tierra será arropada con justicia. La tierra simbólica, la sociedad humana inicua, será destruida. (2 Ped. 3:7, 12) Pero este planeta Tierra permanecerá para siempre.—Sal. 104:5.
El futuro de la Tierra es grandioso. El mismo Hijo de Dios, Jesucristo, predijo que la Tierra sería hecha un paraíso global. (Mat. 6:10; Luc. 23:42, 43) Los hombres obedientes podrán vivir para siempre en esta hermosa Tierra, después que el reino de Dios haya restaurado el Paraíso.
Pero, ¿qué hay acerca de los otros planetas? ¿Fueron puestos en el espacio y en órbita sin ninguna razón? No, no podemos llegar a esa conclusión. Todo lo que Dios hace tiene significado y propósito. Obviamente el Creador Jehová Dios tiene un propósito para estos planetas, incluso para los planetas en nuestro propio sistema solar. Con el tiempo, es posible que él revele ese propósito a la humanidad obediente. No debemos ser tan faltos de perspicacia como para creer que la Tierra es el centro del universo.
La gran pregunta que nos debe concernir en la actualidad no es si hay vida en algún planeta de los otros sistemas solares, sino si obtendremos la vida eterna aquí en la Tierra. El tiempo que le queda a este mundano sistema de cosas es muy corto. Después del fin de este sistema la Tierra tendrá el más maravilloso futuro. Pero esta sociedad mundana no tiene futuro. Como dice la Biblia: “El mundo va pasando y también su deseo, pero el que hace la voluntad de Dios permanece para siempre.”—1 Juan 2:17.
Así es que, ¿por qué ir tras lo que está pasando? ¿Por qué no permanecer para siempre con esta Tierra por medio de aprender y hacer la voluntad de Dios ahora? Para hacer eso, estudie la Biblia, la cual contiene en forma escrita las comunicaciones de Dios mismo. Estudie cuidadosamente estos mensajes divinos, y sea obediente a ellos. Entonces cuando este mundano sistema de cosas desaparezca en destrucción, es posible que usted sea preservado y pase con vida al nuevo orden de Dios, para disfrutar de la vida eterna en esta hermosa astronave Tierra, la cual para siempre será un paraíso.
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¿Es verdad?¡Despertad! 1973 | 22 de agosto
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¿Es verdad?
● Algunas personas insisten en que no dicen mentiras, sin embargo se las idean para presentar la verdad de tal manera que nadie la reconoce.
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