-
Evite las preguntas infructuosasLa Atalaya 1962 | 1 de diciembre
-
-
en vez de seguir a Cristo. (Col. 2:8) Y éstos no son los únicos peligros asociados con las preguntas infructuosas.
El cristiano a quien le gusta especular desde la plataforma o en el estudio bíblico de grupo propende a atraer atención indebida a él mismo. Las teorías personales pueden causar división de pensamiento y hasta resultar en disputas con respecto a pequeñeces. A las personas recién asociadas con la congregación de Jehová se les pudiera causar tropiezo por lo que parecería ser falta de amor y de unidad. Al establecer situaciones hipotéticas y luego especular sobre las respuestas a problemas planteados así, ¿no estamos en realidad añadiendo a las palabras de Jehová? En asuntos que envuelven nuestra vida eterna no es prudente juzgar o concluir a causa de indicaciones leves o bases simplemente probables. No podemos adorar a Jehová en espíritu y en verdad si nuestra adoración se basa en especulación. La verdad y la teoría no son sinónimos. Sabiamente, el consejo inspirado de Pablo es: “Si cualquier hombre enseña otra doctrina y no se aviene a palabras saludables, las de nuestro Señor Jesucristo, ni a la enseñanza que armoniza con la devoción piadosa, está hinchado de orgullo, no entendiendo nada, sino estando mentalmente enfermo sobre preguntas y debates acerca de palabras. De estas cosas brotan envidia, contienda, discursos ofensivos, sospechas inicuas, disputas violentas acerca de insignificancias por parte de hombres corrompidos de mente y despojados de la verdad.”—1 Tim. 6:3-5.
OBTENGA CONOCIMIENTO ACERTADO
Exactamente, ¿qué es “la enseñanza que armoniza con la devoción piadosa”? Pablo la identifica en su saludo a Tito: “Pablo, un esclavo de Dios y un apóstol de Jesucristo de acuerdo con la fe de los escogidos de Dios y el conocimiento acertado de la verdad que armoniza con la devoción piadosa sobre la base de una esperanza de la vida eterna que Dios, quien no puede mentir, prometió antes de tiempos de larga duración.” (Tito 1:1, 2) Sí, es el obtener conocimiento acertado de la Palabra de verdad de Jehová y el distribuirla a otros lo que debería ser nuestro interés en estos días antes del Armagedón, en armonía con la carta de Pablo a los cristianos en Filipos, junto con los superintendentes y los siervos ministeriales: “Esto es lo que sigo orando: que el amor de ustedes abunde aun más y más con conocimiento acertado y pleno discernimiento, para que se aseguren de las cosas más importantes, para que no tengan tacha y no estén haciendo tropezar a otros hasta el día de Cristo, y estén llenos de fruto justo que es por medio de Jesucristo, para la gloria y la alabanza de Dios.”—Fili. 1:9-11.
El conocimiento acertado y el pleno discernimiento de los asuntos importantes que son vitales a su salvación son traídos a su atención constantemente por “el esclavo fiel y discreto [de Jehová], a quien su amo asignó sobre sus domésticos, para darles el alimento al debido tiempo.” (Mat. 24:45) Cada número de las revistas La Atalaya y ¡Despertad! contiene rico alimento para su edificación en fe y amor. Además, hay los grupos de estudio bíblico de vecindarios patrocinados por las congregaciones locales de testigos de Jehová, donde se consigue entendimiento del propósito de Dios usando ayudas para el estudio como el libro “Hágase tu voluntad en la Tierra.”
Un uso provechoso del tiempo es la lectura diaria de la Biblia misma, con la mira de leerla de cubierta a cubierta con el tiempo. A medida que surgen preguntas de tal lectura u otro estudio bíblico, usted puede examinar los índices de las publicaciones de la Sociedad para localizar material interpretativo y fundamental en las ayudas para estudio bíblico de la Sociedad. En la parte de atrás de las publicaciones se halla una sección intitulada “Índice de textos.” Al examinar las fuentes alistadas después de los textos citados allí se puede obtener información útil. Para los que saben inglés el Watch Tower Publications Index con su “Subject Index” también es una llave para un sinfín de horas de provechoso estudio bíblico usando las publicaciones de la Watch Tower que se tengan a la mano o en la biblioteca del Salón del Reino local.
Al mantenerse usted al día con la luz en avance de la verdad bíblica, recuerde que su propósito al estudiar es aprender cómo las Escrituras aplican a usted y a su relación personal con Jehová Dios y su reino bajo Cristo. Pregúntese durante los períodos de estudio: “¿He entendido todo lo que se halla en este texto o párrafo? ¿Cómo encaja este versículo o pensamiento en el patrón de la enseñanza sana que ya he aprendido? ¿Entiendo los principios que se enseñan en este texto? ¿He observado su contenido profético? ¿Qué doctrina cristiana enseña? ¿Afecta esta instrucción mis tratos con otros? ¿Cómo?” Observe cualesquier hechos básicos interesantes que se provean. Concentre su atención sobre “digerir” tanto como pueda del “alimento sólido” necesario para su madurez cristiana y victoria en la lucha de la fe.—Heb. 5:14.
Asegurándose de las cosas importantes y edificando su fe en el conocimiento acertado de la Palabra de Dios podrá predicar y enseñar con autoridad, como Jesús lo hizo. (Mat. 7:28, 29) Sus palabras llevarán peso y convicción, habilitándolo a usted a cumplir su deber cristiano de edificar a otros con la verdad y el amor. (Efe. 4:15) El que usted evite especular y las preguntas infructuosas demostrará su mansedumbre y anuencia a esperar el debido tiempo de Jehová para que provea más información sobre cualquier asunto, si es su voluntad. Esto él fácilmente puede hacerlo por medio de esclarecer más nuestro entendimiento de la Biblia, por medio de realizar acontecimientos predichos en ella, o aun por medio de resucitar a los muertos con su conocimiento detallado de los acontecimientos pasados. Al esperarlo a Él y a su organización todos los siervos de Jehová hablarán de acuerdo, estando “aptamente unidos con la misma mente y con la misma forma de pensar,” para alabanza de él y para nuestro bienestar eterno.—1 Cor. 1:10.
Hagamos el uso más sabio de nuestro tiempo, entonces, evitando las preguntas infructuosas y siempre recordando el consejo de Pablo: “Aprendan la regla: ‘No vayas más allá de las cosas que están escritas.’”—1 Cor. 4:6.
-
-
Preguntas de los lectoresLa Atalaya 1962 | 1 de diciembre
-
-
Preguntas de los lectores
● Algunos han expresado la opinión de que la venida del Armagedón puede apresurarse si el pueblo de Jehová participa más celosamente en la obra de testificación, puesto que todas las “otras ovejas” habrán de ser recogidas antes de que comience. ¿Es éste el entendimiento correcto?—W. S., EE. UU.
Con referencia al principio del Armagedón Jesús dijo: “Concerniente a ese día y hora nadie sabe, ni los ángeles de los cielos ni el Hijo, sino únicamente el Padre. Porque así como eran los días de Noé, así será la presencia del Hijo del hombre.” De eso podemos deducir que Jehová tiene un tiempo definido para que comience el Armagedón y que éste no espera que termine actividad humana alguna.—Mat. 24:36, 37.
Hoy el pueblo de Jehová se encuentra en una posición semejante a la que ocupó Ezequiel. Así como Jehová advirtió a Ezequiel que a él se le haría responsable por la destrucción de los inicuos si no les daba la advertencia, así el pueblo de Jehová hoy no estará libre de la sangre de todos los hombres si no da la advertencia a los inicuos. Mas si el Armagedón fuese a esperar hasta que a todos se les hubiese dado la advertencia, entonces el dejar de asumir la responsabilidad el pueblo de Jehová meramente haría necesario que se aplazara el Armagedón.—Eze. 3:16-21.
En tiempos pasados algunos han interpretado las palabras de 2 Pedro 3:12 (Mod): “Esperando y apresurando el advenimiento del día de Dios,” como dando a entender que el día de Dios, refiriéndose aquí al Armagedón, podría
-