Un informe alentador desde el norte lejano
FINLANDIA está situada en el norte lejano de Europa, y sus tierras norteñas se extienden muy dentro del círculo polar ártico. Es famosa por la belleza del paisaje de sus bosques, lagos, costas e islas cercanas a la costa. También es conocida por los contrastes estacionales, las largas noches invernales y el Sol de medianoche en el verano.
Más de 90 por 100 de los cinco millones de finlandeses son miembros nominales de la Iglesia Luterana Evangélica, religión estatal de Finlandia. Pero a medida que va aumentando constantemente el nivel de vida, el interés en lo espiritual ha perdido generalmente su lugar en la vida de ellos. Sin embargo, otro tipo de crecimiento espiritual se está realizando en este país. El resultado es que actualmente hay más de 15.000 testigos de Jehová en Finlandia, es decir, que de cada 320 habitantes del país, uno es testigo de Jehová. En palabras del profeta Isaías, llegó el tiempo para que los testigos de Jehová de Finlandia ‘extendieran las telas para tienda’ e ‘hicieran más espacioso el lugar de su tienda’... una vez más. (Isaías 54:2.)
“¿Realmente van a volver a construir?” Ésta fue la reacción de algunos miembros de mayor edad de la familia de Betel, o las oficinas principales, de Finlandia cuando se enteraron de los planes para volver a ensanchar las instalaciones de la sucursal. Pero, a pesar de los inconvenientes que hubo durante el período de construcción, se alegraron de estar presentes el 5 de mayo de 1984 para la dedicación del nuevo anexo, a la cual asistió M. G. Henschel, miembro del Cuerpo Gobernante de los Testigos de Jehová, como invitado especial.
Primeros destellos de la verdad
“En el pasado, el rey de Suecia ordenó la conversión de los finlandeses a la fuerza —dijo Erkki Kankaanpää, el coordinador del comité de la sucursal finlandesa, en su discurso de apertura del programa de dedicación. Él se refería al fuerte control que el clero ejercía sobre la gente cuando Finlandia estaba bajo la dominación de Suecia—. Pero aquello no fue el destello de la verdad en Finlandia.”
Aquel “destello” llegó en 1909, cuando algunos repartidores, o predicadores de tiempo completo, llegaron a Finlandia y distribuyeron libros de C. T. Russell. Como resultado de esto, el señor Österman, hombre de negocios, y el señor Harteva, ingeniero, se interesaron en el mensaje bíblico. Obtuvieron más libros de la sucursal de Suecia y empezaron a traducirlos al finlandés y publicarlos en este idioma. En 1912 se publicó la revista La Atalaya en finlandés.
Los dos hermanos fueron sumamente valientes e ingeniosos en la obra de predicar las buenas nuevas. En cierta ocasión el hermano Harteva estaba hablando a un ex condiscípulo acerca de la verdad que acababa de hallar.
“Y ¿cuántos de ustedes hay en Finlandia?”, preguntó el condiscípulo.
“Somos dos —contestó él sin titubear—. Pero, si tú te unes a nosotros, seremos tres.”
En otra ocasión, el hermano Österman estaba ofreciendo a los transeúntes en un mercado un folleto titulado ¿Qué dicen las Escrituras acerca del infierno? por la contribución de dos marcos finlandeses. Ciertamente captó la atención de ellos al gritar: “¡Un billete para ir al infierno... un marco para entrar, y otro para salir!”.
El hermano Russell visitó Finlandia en 1912. El número del 1 de octubre de 1912 de The Watch Tower informó: “La reunión pública llenó la sala hasta su capacidad —1.000 personas—, muchas de pie; algunas a punto de echarse a llorar porque no pudieron entrar”. Aunque la obra todavía estaba en sus comienzos, dijo el informe, “parece que está progresando de manera excelente. La cantidad de repartidores que están participando en la obra, y el hecho de que tienen que mantenerse a sí mismos, dice mucho en favor del interés profundo que tienen”.
Las visitas subsiguientes de otros miembros de la central de Brooklyn, incluso del hermano J. F. Rutherford, el segundo presidente de la Sociedad, resultaron ser muy fortalecedoras para los hermanos. De hecho, en diciembre de 1945, cuando el hermano N. H. Knorr y el hermano Henschel visitaron Finlandia por primera vez, había unos 1.800 Testigos.
Hoy los testigos de Jehová disfrutan de completa libertad de culto en Finlandia, y están utilizando tal libertad plenamente. En abril del año pasado, un máximo sin precedente de 15.263 personas participaron en la predicación de las buenas nuevas del Reino por todo el país. Más de 900 personas han emprendido la obra de predicar de tiempo completo como precursores o precursores especiales, o han llegado a ser miembros de la familia Betel de la sucursal.
Desenvolvimientos en la sucursal
El primer edificio de la sucursal de Finlandia se construyó en 1933 en Helsinki, capital del país. Consistía en una fábrica y un hogar Betel, y estaba bien situado para desempeñar su propósito. Pero después de muchos años de servicio, llegó a ser demasiado pequeño. Así que en 1957 se obtuvo un terreno para establecer una nueva sucursal en la ciudad de Vantaa, a unos 17 kilómetros (10 millas) al norte de Helsinki.
En enero de 1962 la sucursal fue transferida a las nuevas instalaciones. Todos creían en aquel entonces que este nuevo hogar sería todo lo que se necesitaría alguna vez para apoyar la predicación en Finlandia. Éste no había de ser el caso. Desde entonces, se han ampliado el comedor, la residencia, las oficinas, el departamento de encuadernación y, de hecho, casi todas las instalaciones a fin de atender las necesidades de la aumentante cantidad de publicadores y de los miembros de la familia Betel, cuyo número también ha ido aumentando consecuentemente.
El Betel de Finlandia queda en una localidad ideal en el sentido de que hay la conveniencia del transporte y se disfruta de la paz y tranquilidad del campo. Está situado en una pequeña colina y en el patio hay un hermoso jardín. Hasta las autoridades, que han sido sumamente serviciales, reconocen que la sucursal es una ventaja para la comunidad. Por ejemplo, hace algún tiempo, cuando los planos originales de una carretera habrían resultado en que ésta pasara por nuestra propiedad, las autoridades concordaron en cambiar los planos después que les hicimos una petición al respecto. Y, aunque la zona había sido designada como parque, se nos dio el permiso de ampliar nuestras instalaciones. Naturalmente, estamos agradecidos de que se nos haya mostrado tal consideración especial.
Esta vez la ampliación consiste en una nueva ala que tiene 3.400 metros cuadrados (36.500 pies2) de espacio útil del piso. Incluso hay un nivel subterráneo para estacionamiento y almacenamiento. En la planta baja están el taller de construcción y reparación de máquinas, el de carpintería, y el garaje. En la planta de arriba está el departamento de encuadernación, junto con un espacio adecuado para vestuarios con casilleros y algunas instalaciones de recreo. El diseño de la estructura hace juego con el edificio ya existente... pues consiste en ladrillos rojos con vigas de madera expuestas, de un color rubio atractivo.
Voluntarios se encaran al desafío
Cuando se anunció el proyecto de construcción, muchos Testigos ofrecieron sus servicios. A 45 de ellos se les invitó a que trabajaran por aproximadamente un año. ¿Quién supervisaría este proyecto desafiante? Entre los voluntarios hubo un hermano que es arquitecto y precursor, que en un tiempo tenía su propio negocio de construcción. La excavación para el sótano la efectuó un hermano que es dueño de una compañía de excavación. Otro hermano que es experto en explosivos se encargó de los cantos pelados. Aún otro hermano tomó un curso de dos meses para aprender a manejar la grúa grande, de modo que no hubo que contratar a alguien de afuera para efectuar este trabajo.
Debido a la buena voluntad de los hermanos, cuando se completó el proyecto se había gastado aproximadamente solo una tercera parte de lo que un contratista comercial habría cobrado. Pero ¿qué hay de la calidad? “No se podría conseguir esta calidad de trabajo aun si se gastara mucho dinero en contratistas comerciales”, comentó uno de los inspectores al ver el edificio terminado. ¡Qué testimonio acerca del servicio que los hermanos prestaron de todo corazón!
La labor que hay adelante
“Sin embargo, lo que es significativo a la vista de Jehová no es la arquitectura ni los materiales de construcción —dijo el hermano Henschel en su discurso de dedicación—. Lo que importa es cómo se utiliza el edificio.” Él se refirió al templo de Jerusalén que construyó el rey Salomón. Aquel edificio fue indudablemente el más glorioso de aquel entonces, o quizás de cualquier tiempo. No obstante, Jehová lo rechazó cuando los israelitas dejaron de rendirle adoración pura en Su casa.
Por eso el nuevo edificio está dedicado al adelanto de los intereses del Reino de Dios en Finlandia. Jehová ciertamente ha bendecido la obra en esta parte del campo. Durante el año de servicio de 1984 se produjeron 127.625 libros y 128.083 folletos en Finlandia. Se han publicado más de 562.531 ejemplares del libro La verdad que lleva a vida eterna. ¡Esto basta para proporcionar un ejemplar del libro a uno de cada dos hogares finlandeses! Además, cada mes se producen más de 350.000 ejemplares de las revistas ¡Despertad! y La Atalaya.
Todo esto presenta un enorme desafío a la familia Betel de Finlandia, que ahora consiste en 73 miembros. Pero esto no es nada nuevo. Hace dos años, la familia Betel aceptó el desafío de la conversión de la impresión tipográfica a la impresión “offset”. Los hermanos de todo el país proporcionaron los fondos, y los miembros de Betel trabajaron arduamente para adquirir nuevas habilidades. El resultado ha sido satisfactorio. La fábrica de la sucursal de Finlandia tiene la capacidad de producir revistas y libros en varios colores.
Para la labor que hay adelante, se proyecta mayor expansión. Ya se ha emprendido el trabajo de añadir al hogar Betel un nuevo y espacioso Salón del Reino. Después se construirán 28 habitaciones nuevas, junto con una nueva cocina y un comedor para acomodar a miembros adicionales de la familia. Jehová ha proporcionado los medios y la fortaleza para hacer frente a labores similares en el pasado, y los Testigos de Finlandia están mirando con confianza a bendiciones futuras. Ellos hacen eco del parecer de un Testigo que asistió al programa de dedicación y dijo: “¡Es maravilloso ser testigo de Jehová en estos tiempos!”.
[Fotografía en la página 28]
En 1913, J. F. Rutherford (con el sombrero a los pies) se reunió con un grupo grande de hermanos finlandeses
[Mapas en la página 27]
(Para ver el texto en su formato original, consulte la publicación)
NORUEGA
SUECIA
FINLANDIA
Helsinki
Vantaa
U.R.S.S.
CÍRULO ÁRTICO