-
Dando con el motivo correctoLa Atalaya 1954 | 1 de julio
-
-
Dios por medio de Cristo Jesús. [firmado]” Sería bueno que guardara una copia de su tarjeta postal o carta como recordatorio para usted mismo. En la página 386 hay una lista de las direcciones de otras sucursales, y hay una lista completa en la última página del Yearbook (Anuario) y otras publicaciones recientes de la Sociedad.
Apreciando que todo depende de Jehová Dios, todos sus siervos se unirán en orar que él bendiga la obra que están desempeñando para que ésta produzca aumento en alabanza a él.—1 Cor. 3:6.
-
-
Progreso de la sociedad del Nuevo Mundo en América del SurLa Atalaya 1954 | 1 de julio
-
-
Progreso de la sociedad del Nuevo Mundo en América del Sur
ALLÁ en el año 1942 sólo había ocho países en América del Sur donde los testigos de Jehová estaban predicando las buenas nuevas del Reino, y su número total llegaba a 807. En 1943 la Escuela Bíblica de Galaad de la Wátchtower se inauguró en los Estados Unidos con el propósito de adiestrar a ministros ordenados para darle ímpetu a la obra misionera en otros países del mundo.
Para fines del año de servicio de 1953, 301 estudiantes de Galaad especialmente adiestrados se hallaban diseminados a través de la América del Sur, con la perspectiva de que más entraran, y hubo un total de 13,174 representantes de la sociedad del Nuevo Mundo proclamando las buenas nuevas en todas partes de este gran continente.
En el estadio Yanqui en el verano de 1953 se anunció que N. H. Knorr, el presidente de la Sociedad Watch Tówer Bible and Tract, y M. G. Hénschel, uno de los directores, esperaban recorrer la América del Sur y visitar todas las sucursales y misioneros. La visita había de comenzar a fines de noviembre de 1953.
La primera parada de la ruta para los dos visitantes sería Caracas, Venezuela. Todos los testigos de Jehová del interior del país fueron invitados a venir a la asamblea nacional que se verificaría allí.
Durante la semana antes de la asamblea los testigos de Jehová de Venezuela estuvieron llegando del oriente y del occidente, todos entusiasmados. Se efectuó distribución de volantes y durante la semana se dieron noticias por radio y en los diarios, y todos los convencionistas estuvieron ansiosos de ver cómo esta convención compararía con la de tres años antes cuando el presidente de la Sociedad habló a 146 personas en un discurso público.
En la entrada principal del lugar de reunión se colocaron fotografías de la convención que se celebró en 1953 en el estadio Yanqui, ya que esta asamblea venezolana era en cierto modo una continuación de esa magnífica asamblea. El nuevo Libro de cánticos que había sido presentado en el estadio Yanqui se presentó en el primer día de esta asamblea y todos estuvieron ansiosos de aprender los nuevos cánticos. Nuevos tratados se exhibieron en el foyer.
La convención principió el viernes 13 de noviembre, con 324 hermanos gozosamente reunidos, equipados para el servicio del campo. La tarde fué apartada para un servicio bautismal para todos los que deseaban simbolizar la dedicación de su vida a Jehová. Una piscina natatoria muy hermosa había sido alquilada con este propósito. Debido a ser una reunión religiosa, el dueño de la piscina redujo el precio del alquiler de mil bolívares a cien; pero al observar la inmersión de 81 personas de toda edad se impresionó tanto que absolutamente rehusó aceptar algún dinero y dijo que era un honor el haber servido a dicha gente cristiana.
Para el viernes por la noche había 468 concurrentes adquiriendo la información presentada en un programa bien arreglado. A esa hora los hermanos Knorr y Hénschel debían salir del aeropuerto Idlewild en Nueva York, pero debido a avería de motor no se pusieron en camino hasta las 11:20 horas del día siguiente. Aunque esto hizo imposible que llegaran a tiempo para alguna sesión del sábado, el programa en Caracas siguió adelante, haciéndose substituciones en las partes asignadas a ellos. Los discursos principales de la asamblea del estadio Yánqui fueron traducidos al español y pronunciados y se exhibieron películas en colores de dicha asamblea.
Después de terminar el programa del sábado por la noche, nuestros viajeros de la oficina principal en Brooklyn llegaron a la sucursal. Su viaje de Nueva York al aeropuerto de Maiquetia se había efectuado sin incidente alguno.
Las sesiones del domingo principiaron bien con un discurso pronunciado por el hermano Hénschel el cual debió pronunciar la noche anterior. Al auditorio le causó una sorpresa deleitosa el oírlo pronunciar todo su discurso, “Las mentiras resultan en perder la vida,” en español. Hizo claro que los testigos de Jehová tienen que hablar la verdad en público, en sus hogares y en las congregaciones.
¿Cuál sería la reacción a las invitaciones al discurso público de la tarde, “Después del Armagedón—el nuevo inundo de Dios”? A las tres de la tarde el hermano Knorr empezó a hablar mediante un intérprete y la gente continuó entrando. El salón principal se llenó y muchos se sentaron en el patio adyacente, llegándose a un total de 942 personas, la reunión más concurrida en cualquier asamblea teocrática celebrada en Venezuela.
Después que se sirvió alimento hubo más cánticos y otros discursos por los dos hermanos visitantes, para lo cual 733 de los concurrentes se quedaron. El siervo de sucursal de la Sociedad en Venezuela presentó a la asamblea la Resolución que había sido presentada y aceptada por la asamblea del estadio Yanqui el 20 de julio, y los hermanos de Venezuela tuvieron gusto en aceptarla también. El hermano Knorr concluyó la convención recalcando la necesidad de adherirse firmemente a la organización, manteniéndola limpia y cumpliendo fielmente con la dedicación de uno a Jehová. Las expresiones gozosas de estos hermanos humildes, celosos y felices manifestaron su aprecio por esta magnífica asamblea.
Ahora hay muchas congregaciones bien establecidas y treinta y un misioneros diseminados a través de Venezuela, con varios hermanos locales ocupados en el ministerio de tiempo cabal. Se hicieron arreglos para más aumentos y mayor expansión del testimonio del Reino. Fué un gozo poder reunirse con los misioneros y hablar de sus problemas con ellos; y los días que siguieron a la asamblea se usaron bien, el martes siendo empleado con el grupo en Valencia, el miércoles con el grupo en Barquisimeto y el jueves con el grupo en Maracaibo. En cada lugar se celebró una reunión para las personas de buena voluntad, y cada una fué muy bien concurrida.
COLOMBIA
Para el mediodía del 20 de noviembre nuestros viajeros estuvieron volando sobre el golfo de Venezuela, al norte de Maracaibo, con rumbo a Barranquilla, donde la convención de Colombia empezó con el hermano Knorr hablando en el Salón del Reino local.
Al día siguiente ciertas partes del programa se dedicaron al ministerio de
-