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El paro... brillante bandido de las bandadas¡Despertad! 1972 | 8 de julio
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a los paros azules a buscar su alimento en algún otro lugar.
A causa de su bandolerismo, algunos han llamado “locos” a los paros azules. Pero un lector escribió lo siguiente al director de un periódico en defensa de los pájaros bandidos: “Con el crecimiento de las zonas urbanas y la reducción de las zonas fértiles —a menudo tratadas químicamente— ¿sería demasiado sugerir que somos nosotros, con nuestro loco proceder, los que hemos perjudicado a los paros?”
Solucionar el problema para poder disfrutar del pájaro
Pero, ¿qué se puede hacer para controlar el hábito del paro azul de robar leche? Apoderarse de la leche antes que él sería una solución. El problema es que las incursiones aéreas se producen con sorprendente rapidez. Pocos segundos después de la entrega, los bandidos plumados descienden precipitadamente, como lo hicieron cuando abrieron más de 50 botellas del total de 300 de la consignación de leche a una escuela de Merstham, Surrey, antes de que el encargado de la escuela pudiera recogerlas.
Sabiamente recuerde que para un pájaro... la comida está donde la encuentra. De modo que, con la amable cooperación de su lechero, esconda la leche en una caja sólida con una tapa pesada.
El paro azul no es más que una de las casi infinitas variedades de maravillas vivientes, la obra de las manos de un Creador sapientísimo. De un amante de los pájaros proviene este excelente tributo al pequeño paro y a su Hacedor: “Lo hace sentir a uno muy humilde el contemplar a estas pequeñas criaturas tan diestras, ocupadas, felices, tan exquisitas en forma, línea y color, tan perfectas en movimiento, tan decididas, tan seguras en todos sus caminos. ¿Qué es la obra del hombre, comparada con esto?”
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No se olvide de sus pies¡Despertad! 1972 | 8 de julio
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No se olvide de sus pies
CUANDO uno está acostumbrado a viajar siempre en auto, caminar puede ser un placer renovado. Las ruedas pueden llevarlo a su destino más rápidamente, pero, en lo que toca al mero placer de viajar, ¿qué puede reemplazar a sus pies... cuando éstos están en buenas condiciones? Solamente andando a pie puede uno gozar plenamente de la Tierra. La belleza de las majestuosas colinas, la fragancia del bosque deleitoso y el canto de los pájaros se disfrutan más cuando uno camina.
No obstante, sus pies hacen más que permitirle moverse por sí mismo. Responden automáticamente a sus sentidos y a sus emociones internas. Golpean en el suelo con furia, saltan de gozo y se pasean inquietos durante momentos de ansiedad.
Los más ancianos que todavía están capacitados para salir y caminar, dan a su corazón, sus pulmones y sus músculos el ejercicio que necesitan, lo que redunda en una circulación sanguínea más intensa, mejor apetito y la posibilidad de dormir bien.
¡Qué regocijo puede uno experimentar al correr, bailar, patinar o simplemente dar una caminata casual! Indudablemente nuestros pies fueron diseñados para cooperar con todos los otros miembros para el bienestar de todo el cuerpo. ¿No debería tratárseles como algo de gran valor?
Diseñados maravillosamente
La evaluación que usted hace de sus pies aumentará cuando usted los vea desde el punto de vista de un especialista de pies o aun de un ingeniero. A pesar de ser simples en estructura, son poderosos en fuerza. Probablemente caminen cerca de 120.000 kilómetros en una vida promedio de setenta u ochenta años. Para amortiguar la presión que esto representa, cada pie está compuesto por un arreglo intrincado de 26 huesos y 214 ligamentos.
Todas estas partes están hermosamente adaptadas para formar un arco o bóveda desde el talón hasta la parte anterior del pie. Al caminar, el talón es el primero en recibir el peso del cuerpo. Luego éste se desplaza a lo largo de los huesos de forma irregular del tarso o del tobillo, los cinco largos metatarsos o huesos del empeine y luego a los catorce huesos de los dedos, los cuales proporcionan el empuje hacia adelante.
Cuidado de los pies y calzado adecuado
Al igual que otras partes importantes de su cuerpo, sus pies necesitan cuidado apropiado. Un poco de atención paga sus dividendos a modo de mejor salud y felicidad; porque, como se ha dicho a menudo: “Cuando los pies duelen, todo el cuerpo duele.” Y esto puede ser cierto. Sus pies pueden hacer que usted se sienta nervioso e irritado. Pueden producirle dolores de cabeza, hacer que le duelan las piernas y la espalda, provocarle náuseas, estropear su apetito y, por lo general, hacer que todo su cuerpo se sienta indispuesto. Ciertamente, éstas son buenas razones para cuidarlos bien.
Probablemente lo primero que se debe tomar en cuenta al considerar el cuidado de sus pies es la selección de zapatos. El Dr. Simon Wikler, en su libro Take Off Your Shoes and Walk, dice: “Creo ahora sin la menor duda de que la principal causa de los problemas de los pies yace en la clase de zapatos que usamos.”
He aquí unas cuantas cosas que debemos tener presentes al escoger zapatos: Los zapatos hechos enteramente de cuero dan a la transpiración una mejor oportunidad de evaporarse. (Si la transpiración es un problema en el tiempo caluroso, las sandalias serán útiles.) Se recomiendan los tacones de goma para los zapatos porque hacen más suave el andar. La hora más apropiada para probarse zapatos es al caer la tarde porque los pies tienden a hincharse a medida que transcurre el día. Mídase ambos pies porque a menudo uno es más largo que el otro, y pruébese el pie más largo. Permita que quede un espacio de más o menos un centímetro y medio de amplitud para que sus dedos puedan moverse con libertad. No es prudente tratar de “forzar el pie” dentro de zapatos incómodos.
La moda no respeta la comodidad del pie ni la salud, y esto es particularmente cierto en el calzado para mujeres. Los tacones altos, las puntas estrechas y afiladas, son contrarios a la estructura de los pies, y son factores importantes que determinan el que las mujeres tengan cuatro veces más problemas en los pies que los hombres.
Por el bien de los niños es sabio no tratar de ahorrar comprando zapatos que duren demasiado tiempo. Quizás necesiten zapatos nuevos tan a menudo como cada cuatro u ocho semanas entre los dos y seis años de edad.
Tratándose de niños pequeños, los calcetines ajustados pueden causar deformidades, por lo tanto, se debe dar atención a esto. En el caso de los muy pequeñitos debe ejercerse cuidado para no remeter demasiado las sábanas de la cuna alrededor de los huesos tiernos de sus pies.
Desórdenes comunes
Si usted se olvida de sus pies, ellos pueden hacer que los recuerde de muchas maneras. Callos, uñeros, o uña encarnada, aplanamiento del arco, juanetes, mala circulación y pie de atleta son algunos de los recordatorios más comunes.
Los callos se forman por la presión de sus zapatos en los dedos. Se forma un crecimiento grueso de tejido. Este, a su vez, presiona sobre la capa más profunda de la piel, haciendo que se torne tierna.
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