-
Reuniones para el servicio del campoMinisterio del Reino 1979 | junio
-
-
Reuniones para el servicio del campo
4 AL 10 DE JUNIO
Nuevo tema de conversación
1. Repase brevemente puntos del Salmo 146 que sean útiles para conversar con las personas.
2. Pida a alguien que demuestre la presentación de los párrs. 2 y 3 de “Presentando las buenas nuevas.” (Haga arreglos de antemano.)
3. Considere cuán breve puede ser la presentación, según el párr. 5.
11 AL 17 DE JUNIO
Introducciones
1. ¿Qué introducción piensa usar con el nuevo Tema de Conversación?
2. ¿Cómo se podrían vencer algunas objeciones en nuestras introducciones antes de que el amo de casa las haga surgir?
3. ¿Cómo adapta usted su introducción a personas de diferentes edades?
18 AL 24 DE JUNIO
Escuchando a las personas con quienes hablamos
1. ¿Por qué es necesario escuchar al amo de casa cuando está hablando?
2. ¿Por qué pudiéramos tener la tendencia de no escuchar al amo de casa?
3. ¿Cómo puede usted incorporar los comentarios del amo de casa en su presentación?
25 DE JUNIO AL 1 DE JULIO
Revisitas... usando el Salmo 146
1. ¿Qué apuntes en su registro de casa en casa le ayudarían a hacer una revisita?
2. ¿Qué versículos del Salmo 146 podría usar en una revisita? ¿Por qué?
3. ¿Cómo podría pasar de la consideración de los versículos a la presentación de una de las publicaciones de la Sociedad?
-
-
Tema de conversaciónMinisterio del Reino 1979 | junio
-
-
Tema de conversación
(Vea “Presentando las buenas nuevas.”)
-
-
Predique con perseverancia y gozoMinisterio del Reino 1979 | junio
-
-
Predique con perseverancia y gozo
1 Cuando Jesús estuvo en la Tierra él quiso que sus seguidores participaran con él en hablar las buenas nuevas a otros. Por tanto, Lucas 10:1 dice: “El Señor designó a . . . setenta y los envió de dos en dos delante de sí a toda ciudad y lugar adonde él mismo iba a ir.” En el Luc. 10 versículo 17 nos enteramos de un resultado de esta gira de predicación: “Entonces volvieron los setenta con gozo.”
2 Cada uno de nosotros ha tenido el placer de experimentar esa misma recompensa. Hay verdadera felicidad en ‘declarar buenas nuevas a los pobres, predicar liberación a los cautivos y recobro de vista a los ciegos, despachar a los quebrantados con liberación y predicar el año acepto de Jehová.’ (Luc. 4:18, 19) Esto es especialmente cierto en estos días en los que tantos miles de personas están escuchando y respondiendo a lo que Jehová ha hablado.
3 Sin embargo, la Biblia no le promete al cristiano que ese gozo estará libre de dificultades. No, debemos esperar diversas dificultades, pero éstas resultarán en gozo si perseveramos. Así, cultivamos el pensar del apóstol Pablo, quien dijo: “Cuando se nos injuria, bendecimos; cuando se nos persigue, lo soportamos; cuando se nos infama, suplicamos.” (1 Cor. 4:12, 13) También otros apóstoles demostraron el punto de vista correcto cuando ellos “se fueron de delante del Sanedrín, regocijándose porque se les había considerado dignos de sufrir deshonra a favor de su nombre [el de Jesús].”—Hech. 5:41.
4 Pero quizás el problema al cual usted se encara ahora no sea el de persecución directa. Aun así, ¿se le oponen algunos miembros de su propia familia? (Mat. 10:21, 35, 36) Complace a Jehová el que les demos un buen ejemplo de conducta cristiana, y el que usted se asocie con su numerosa ‘familia’ en la verdad lo ayudará a tener éxito en este empeño. (Mar. 10:29, 30) Si sus parientes rehúsan escuchar, siempre puede dedicar su tiempo de predicación a las personas de su territorio que sí están dispuestas a escuchar. Jehová puede llenar su vida con un servicio útil y productivo de muchas maneras que usted no se ha imaginado.
5 ¿Tiene problemas de salud? ¿Lo han hecho aflojar la marcha de los años? Si así es, sea realista. Lo que la juventud logra de una manera, usted quizás pueda lograr por otros medios. Las cualidades y dones que sus años de experiencia han desarrollado pueden lograr mucho en un campo que no está abierto a otros. ¿Da testimonio por cartas, teléfono, de modo informal? ¿Estudia para participar en las reuniones, para contestar preguntas a otros, y para edificar a otros con alguna palabra al tiempo apropiado? Si no le es posible hacer nada más, ¿apoya por su presencia en las reuniones, sus sonrisas, sus oraciones, a los que pueden servir más activamente que usted? Hay muchas maneras en que usted puede servir con perseverancia y gozo.
6 ¿Ha sido afectado su empleo seglar por el retardo económico? Ahora que trabajan menos horas, muchos hermanos han decidido servir de precursores auxiliares. Si usted halla que puede participar en este privilegio por un mes o más, los ancianos se complacerán en dar atención inmediata a su solicitud. La pérdida del empleo por lo general causa muchas dificultades, pero el participar más cabalmente en el servicio del campo puede traerle mucho gozo.
7 Hoy día el evangelio que declaramos a toda la humanidad habla del establecimiento del Reino. Es un anuncio excitante. Por lo tanto, ¡todos los siervos de Jehová deben tener el espíritu de evangelizar! ¿Se aprovecha usted de las oportunidades que se le presentan para evangelizar? ¿Programa usted tiempo para el servicio del campo? ¿Está usted esforzándose por mejorar su habilidad y efectividad como evangelizador? ¿Realmente cultiva interés y muestra el deseo de tomar la responsabilidad de un estudio bíblico? Si en verdad tenemos el espíritu evangelizador, ciertamente programaremos nuestro tiempo para evangelizar con regularidad y constantemente nos esforzaremos por mejorar nuestra presentación de las buenas nuevas. ¡También aprovecharemos las muchas oportunidades de envolvernos en dar testimonio informal, apreciando el hecho de que somos siervos de Jehová en todo tiempo!
8 Junio debe ser un mes de mucha actividad para el pueblo de Jehová. Hay mucho trabajo que hacer. Publicadores jóvenes y viejos, nuevos y maduros, deben participar sin reserva. En estos días el predicar y enseñar debe ocupar gran parte de nuestro tiempo. Medite en la importancia que Jesús le atribuyó a esta actividad. Él lo enfatizó durante todo su ministerio en la Tierra, aun en sus palabras finales a sus discípulos antes de dejarlos. Dijo: “Serán testigos de mí tanto en Jerusalén como en toda Judea y en Samaria y hasta la parte más lejana de la tierra.” (Hech. 1:8) Luego, al concluir la Revelación a su apóstol Juan, recalcó este mismo trabajo, diciendo: “Y el espíritu y la novia siguen diciendo: ‘¡Ven!’ Y cualquiera que oye diga: ‘¡Ven!’ Y cualquiera que tenga sed venga; cualquiera que desee tome del agua del vida gratis.” (Rev. 22:17) ¡Qué privilegio participar en esa obra! Jehová bendecirá abundantemente a todos los que se esfuerzan por predicar con perseverancia y gozo sin importar las condiciones.
-
-
¿Tiene propósito su testificar?Ministerio del Reino 1979 | junio
-
-
¿Tiene propósito su testificar?
1 ¿Qué significado tienen para usted las palabras de Jesús en Mateo 24:14 y Mt 28:19, 20? Como discípulos del Hijo de Dios, ¿vemos la necesidad urgente de no solo proclamar las “buenas nuevas,” sino de también hacer discípulos de los que responden, enseñándoles a observar los mandatos de Jesús? El llevar a cabo esta comisión da verdadero propósito a la obra que hacemos en el servicio del campo. Abordaremos a las personas no solo para colocar literatura, sino también para considerar la Biblia con ellos. Nuestro objetivo principal será el de tratar de comenzar estudios bíblicos con las personas para ayudarles a ser verdaderos discípulos. Con esto en mente, tomaremos nota de todo el que muestre hasta el menor interés en el mensaje del Reino.
2 Nuestra actitud es importante. ¿En verdad queremos hacer un discípulo para Cristo? ¿Estamos dispuestos a hacer el esfuerzo? En vez de disponer de poco tiempo para el servicio del campo de vez en cuando, ¿estamos dispuestos a apartar tiempo con regularidad para conducir un estudio de la Biblia? Si lo hacemos así, hallaremos que nuestro testificar tendrá más propósito.
3 ¿Incluimos como parte de nuestras oraciones el hallar a personas de cualidad de ovejas y el deseo de tener estudios bíblicos? (1 Juan 5:14) Después de orar, ¿nos desanimamos fácilmente si parece que por cierto tiempo tales oraciones no son contestadas? O, ¿perseveramos en nuestras oraciones y trabajamos en armonía con lo que estamos orando?
4 Por supuesto, sabemos que no todos querrán tener un estudio bíblico de casa. A menudo las personas con quienes hablamos no aprecian el mensaje del Reino. ¿Hará eso que desistamos? Piense en cómo se sintió Jeremías al predicar durante cuarenta años con muy poco resultado. Se desanimó, pero se recuperó y siguió haciendo la obra que Jehová le había asignado. (Jer. 20:9) No tuvo el privilegio de ayudar a un gran número de personas a cambiar su proceder y hacer la voluntad de Jehová, pero sí vio fruto por su labor. Cuando Jerusalén fue destruida no se le dio muerte a Ebed-Melec y a los hijos de Jonadab.
-