condición del corazón de uno? ¿Se complacería Dios en que una mujer no usara cosméticos ni llevara joyas, pero viviera una vida inmoral? ¿O aprobaría él a mujeres que son modestas y manifiestan juicio sano en su uso de cosméticos y joyas, y cuyo adorno principal son las cualidades piadosas y la conducta cristiana? Jehová dice: “No de la manera que el hombre ve es la manera que Dios ve, porque el simple hombre ve lo que aparece a los ojos; pero en cuanto a Jehová, él ve lo que es el corazón”. (1 Sam. 16:7.)

Pro. 31:30: “El encanto puede ser falso, y la belleza puede ser vana; pero la mujer que teme a Jehová es la que se procura alabanza.”

¿Será destruido por fuego el mundo?

2 Ped. 3:7: “Por la misma palabra [de Dios] los cielos y la tierra actuales están guardados para fuego y quedan reservados para el día de juicio y de la destrucción de los hombres impíos.” (Note que han de ser destruidos “los hombres impíos”, no la humanidad en conjunto. De manera similar, el versículo 6 alude a la destrucción del “mundo” de los días de Noé. La gente inicua fue destruida, pero tanto la Tierra como Noé —hombre temeroso de Dios— y su familia permanecieron. ¿Será literal el “fuego” del venidero día de juicio, o es un símbolo de destrucción completa? ¿Qué efecto tendría el fuego literal en cuerpos celestes literales como el Sol y las estrellas, que ya son intensamente calientes? Para una consideración adicional de este texto, véanse las páginas 391-392, en “Tierra”.)

Pro. 2:21, 22: “Los rectos son los que residirán en la tierra, y los exentos de culpa son los que quedarán en ella. En cuanto a los inicuos, ellos serán cortados de la mismísima tierra; y en cuanto a los traicioneros, ellos serán arrancados de ella.”

¿Quién gobierna a este mundo... Dios, o Satanás?

Dan. 4:35: “[El Dios Altísimo, Jehová] está haciendo conforme a su propia voluntad entre el ejército de los cielos y los habitantes de la tierra. Y no existe nadie que pueda detener su mano o que pueda decirle: ‘¿Qué has estado haciendo?’” (Del mismo modo, Jeremías 10:6, 7 alude a Jehová como “Rey de las naciones” porque es el Rey Superlativo, aquel que puede pedir cuentas a los reyes humanos y las naciones sobre las cuales gobiernan, y lo hará. Como Creador de la Tierra, Jehová es su Gobernante legítimo; nunca ha abdicado esa posición.)

Juan 14:30: “[Jesús dijo:] Viene el gobernante del mundo. Y él no tiene dominio sobre mí.” (Este gobernante, obviamente, no es Jehová Dios, cuya voluntad Jesús siempre efectúa lealmente. Este “gobernante del mundo” tiene que ser “el inicuo”, Satanás el Diablo, en cuyo poder “el mundo entero está yaciendo”, como se declara en 1 Juan 5:19. Aunque la humanidad vive en un planeta que pertenece a Dios, el mundo compuesto de los que no son siervos obedientes de Jehová está bajo el control de Satanás porque esas personas le obedecen. Los que se someten de todo corazón a la gobernación de Jehová no son parte de ese mundo. (Compárese con 2 Corintios 4:4.)

Rev. 13:2: “El dragón [Satanás el Diablo] le dio a la bestia su poder y su trono y grande autoridad.” (Una comparación de la descripción de esta “bestia” con el capítulo 7 de Daniel indica que la bestia representa gobierno humano, no solo un gobierno humano individualmente, sino el sistema global de gobernación política. El hecho de que Satanás sea su gobernante concuerda con Lucas 4:5-7, y también con Revelación 16:14, 16, que dice que expresiones demoníacas conducen a los gobernantes de toda la Tierra a la guerra contra Dios en Armagedón. La gobernación del mundo por Satanás es una que Dios sencillamente tolera hasta cuando llega Su tiempo señalado para resolver la cuestión de la soberanía universal.)

Rev. 11:15: “Ocurrieron voces fuertes en el cielo, diciendo: ‘El reino del mundo sí llegó a ser el reino de nuestro Señor [Jehová] y de su Cristo.’” (Cuando esto sucedió en 1914,