Ponderando las noticias
‘Esperanza principal para la paz’
● ¿En qué están dirigiendo los líderes religiosos del mundo a la humanidad a cifrar su esperanza? ¿En el reino de Dios? La respuesta llegó en el aniversario 25 de la Declaración Universal de Derechos Humanos. Una comunicación emitida por iglesias que se expresaron unidamente declaró: “El Concilio Mundial de Iglesias y la Iglesia Católica Romana a menudo han declarado que la Organización de las Naciones Unidas es la principal esperanza temporal para la paz mundial.”—“L’Osservatore Romano.”
Es obvio que no habían aprendido de los errores pasados. El 12 de diciembre de 1918 la predecesora de las N.U., la Liga o Sociedad de Naciones, recibió un respaldo religioso similar a ése. En aquel tiempo el Concilio Federal de Iglesias de Cristo en los Estados Unidos la llamó “la expresión política del Reino de Dios en la Tierra.” Pero, ¿en realidad resultó ser la Sociedad de Naciones la provisión de Dios para salvaguardar la paz?
A los que no supieron la respuesta antes, la II Guerra Mundial les aclaró los hechos. Dios no tuvo nada que ver con aquella Liga o Sociedad; tampoco es suya las Naciones Unidas.
Las iglesias católica y protestantes afirman que enseñan la Palabra de Dios, ¿no es verdad? Entonces, en vez de “jugar a la política,” ¿no deberían abogar por el reino por el cual el Hijo de Dios, Jesucristo, enseñó a sus seguidores a orar como ‘la principal esperanza para la paz’? (Mat. 6:9, 10) ¿No es responsabilidad de ellas mostrarle a la gente con la Biblia que el reino de Dios “no será pasado a ningún otro pueblo,” incluso a los miembros de las N.U.? (Dan. 2:44) Con toda honradez, ¿no es hora de que toda la humanidad se enfrente al hecho de que los gobernantes humanos jamás pueden traer paz duradera? Solo el Creador de la humanidad puede efectuar eso.
‘Clima para el juego de azar’
● Aclamando el juego de azar como el modo de echar del negocio a los criminales, el estado de Nueva York legalizó y se apoderó del juego de azar relacionado con las carreras de caballos que se efectuaba ilegalmente. ¿Produjo esto buenos resultados? El juego de azar ilegal y el envolvimiento criminal en éste aumentó rápidamente por casi dos terceras partes en un solo año! ¿Por qué? Dice un funcionario de la policía: “Se ha producido un clima para el juego de azar. . . . miles de personas que por nada del mundo hubieran pensado en apostar en [otros eventos deportivos] ahora acuden a los corredores de apuestas para apostar [ilegalmente].”
¿Quiénes están envueltos en esto? El estudio revela que los estudiantes están apostando la ayuda pecuniaria que reciben y las amas de casa están usando el dinero de los comestibles. Algunas se convierten en rameras para cubrir las pérdidas. Hay comerciantes que suben los precios, desfalcan o hurtan valores para obtener dinero para el juego. Otros fomentan sus propias empresas de juego para apoyar la “caridad” o mantener sus iglesias y sinagogas. La revista “Physician’s World” dice: “El jugador de azar compulsivo está en casi toda ocupación y profesión, incluso el clero.”
Este ‘clima para el juego de azar’ ha producido una cosecha de intemperancia, corrupción y vidas arruinadas. Pero “no te engañes,” advierte la Biblia. Si alguien “siembra en el campo de la intemperancia saca de ello una cosecha de corrupción.” Además, los que sirven al “dios de la Buena Suerte” con el tiempo lo pierden todo, porque a ellos dice Jehová: “Ciertamente los destinaré a la espada.”—Gál. 6:7, 8, JB; Isa. 65:11, 12.