BIBLIOTECA EN LÍNEA Watchtower
Watchtower
BIBLIOTECA EN LÍNEA
español
  • BIBLIA
  • PUBLICACIONES
  • REUNIONES
  • w64 15/12 págs. 758-764
  • Probándose fiel en asuntos pequeños

No hay ningún video disponible para este elemento seleccionado.

Lo sentimos, hubo un error al cargar el video.

  • Probándose fiel en asuntos pequeños
  • La Atalaya. Anunciando el Reino de Jehová 1964
  • Información relacionada
  • Lealtad a la organización de Jehová
    La Atalaya. Anunciando el Reino de Jehová 1964
  • Sálvese usted mismo y también a los que lo escuchan
    La Atalaya. Anunciando el Reino de Jehová 1966
  • Aceptando responsabilidad en la sociedad del nuevo mundo
    La Atalaya. Anunciando el Reino de Jehová 1957
  • Anuario de los testigos de Jehová para 1972
    Anuario de los testigos de Jehová para 1972
Ver más
La Atalaya. Anunciando el Reino de Jehová 1964
w64 15/12 págs. 758-764

Probándose fiel en asuntos pequeños

“¡Bien hecho, buen esclavo! Porque has probado ser fiel en un asunto muy pequeño, ten autoridad sobre diez ciudades.”—Luc. 19:17.

1. ¿A qué nos enfrentamos diariamente en la vida, y cómo reacciona la gente?

CADA día de nuestra vida nos enfrentamos a asuntos pequeños. Quizás sean partes de un problema, un dolor, detalles de un trabajo que hacer, una medida de las responsabilidades que tenemos, quizás algunas de las ocasiones felices de que disfrutamos, o quizás sea un asunto un poco extra que hayamos asumido, para ayudar a otra persona. Nos encargamos de muchas de estas cosas pequeñas, pero también muchas no se atienden. Parece que algunas personas tienen la capacidad de encargarse de mucha responsabilidad, mientras que otras se perturban fácilmente a causa de cuidados limitados. Algunas personas aceptan cada día según viene y cuidan del asunto más apremiante a la mano, sin embargo esperando encargarse de muchas otras responsabilidades y haciéndolo calmadamente, mientras que otros se hallan frustrados si tienen más que el trabajo inmediato que hacer. Se producen mucha preocupación acerca de detalles que todavía están en el futuro. Cruzan puentes antes de que estén construidos, y muchos que jamás tendrán que construirse. Debe haber equilibrio en nuestro modo de pensar. “El cuidado ansioso en el corazón del hombre es lo que lo agobiará, mas la palabra buena es lo que hace que se regocije.”—Pro. 12:25.

2. (a) ¿Qué añade a nosotros el ser miembros de la organización de Dios? (b) ¿Qué cambio produce esto en un individuo?

2 Al ser miembros de la organización de Dios asumimos muchos más asuntos pequeños además de aquellos a los que ya nos enfrentamos cada día. Estos incluyen estudio bíblico, asistir a las reuniones para más alimento espiritual, participar en la predicación de las buenas nuevas del reino de Dios, poner el ejemplo correcto en la vida de familia, y en hábitos limpios de vivir. Luego, siendo fieles en estos privilegios, quizás se nos nombre superintendentes en las congregaciones para ayudar a pastorear el rebaño de Dios. Todo esto introducirá en nuestra vida multitudes de detalles cada día. Estos son los que no muy bien pueden dejarse sin hacer. El servir a Dios en una organización significa hacer que las cosas se efectúen. El encargarse de ellas significa salud espiritual para nosotros mismos así como para otros. (1 Tim. 4:16) Los asuntos espirituales deben ocupar el primer lugar. (Mat. 6:26) Cuando estamos cansados por enfrentarnos a los problemas de cada día, tenemos ayuda de los que se mencionan en Isaías 50:4: “El Señor Jehová mismo me ha dado la lengua de los enseñados, para que sepa responder al cansado con una palabra.” Lucas 19:17 dice: “¡Bien hecho, buen esclavo!” Esto aplica a la manera en que manejan los intereses del Reino los fieles seguidores de Cristo Jesús. (Mat. 25:21) Esta buena manera resulta en que sean nombrados como el “esclavo fiel y discreto” sobre todos los intereses del Reino sobre la Tierra. El principio aplica a todos los siervos; la fidelidad es un requisito.

3. Explique cómo la fidelidad revela la madurez de una persona.

3 De hecho, la persona verdadera a menudo se muestra al encargarse uno de asuntos pequeños. En las cosas grandes por lo general hay alguien que nos admire, que diga “¡Bien hecho!” y que reconozca nuestras habilidades. Hasta una persona perezosa a menudo trabaja para recibir el aplauso de los hombres. (Pro. 13:4) Prepara conferencias para presentarlas ante la congregación y lo hará bien; pero cuando se trata de ayudar a alguna persona anciana de la congregación por medio de transportarla a las reuniones o de conducir un estudio bíblico regularmente cada semana con una persona que muestre interés, aquí quizás revele indiferencia a asuntos pequeños en la organización de Dios. Quizás no sea fiel. De modo que la lealtad a Dios se discierne fácilmente por la manera en que una persona se encarga de los asuntos pequeños de manera apreciativa. La persona anuente aprovecha mucho. “El alma generosa será engordada ella misma, y el que liberalmente riega a otros será él mismo también liberalmente regado.” (Pro. 11:25) Jehová realmente bendice a esta clase de fieles y la usa en su organización para participar en la obra de pastorear. Estas son la clase que se encarga de las “ovejas” y las alimenta con entendimiento. Estos no necesariamente son asuntos pequeños a causa de ser menos importantes. Muy a menudo los detalles pequeños sostienen la entera estructura. Por ejemplo, un puente de piedra arqueado no aguantaría una carga, sino que se desplomaría, si no fuese por la clave del arco. No obstante, la clave del arco es pequeña en comparación con el peso y el tamaño del puente. Sin embargo, se le proporciona gran cuidado a su forma y colocación para garantizar un puente seguro.

4. Dé ilustraciones de asuntos pequeños que afectan la actitud de otros. ¿Cómo afectó esto a los que estuvieron envueltos?

4 Considere algunos ejemplos de la actitud de Jehová y de su pueblo hacia los asuntos pequeños. En la construcción del Tabernáculo había muchísimas cosas que hacer. El pueblo respondió, “trayendo mucho más de lo que necesita el servicio para la obra que Jehová ha mandado que se haga”; el resultado: “¡Mire! lo habían hecho exactamente como Jehová había mandado. Así lo habían hecho. En consecuencia Moisés los bendijo.” (Éxo. 36:5; 39:43) Por otra parte, ¿qué pensó Jehová de la idea de Jonás de ir a Tarsis en vez de su ciudad asignada, Nínive? (Jon. 1:4,10,12) Luego estuvo Judas Iscariote, quien por treinta piezas de plata decidió su entero futuro. (Mat. 27:3-6) No había egoísmo en Pablo. Aunque debe haber tenido muchas cosas que atender, empleó tiempo para escribir una carta especial a Filemón a favor de Onésimo. Luego estuvo José, tan concienzudo en su vida como esclavo que pronto estuvo encargado de la casa de su amo. Aun en prisión desplegó las mismas cualidades, y pronto estuvo atendiendo muchos detalles en el funcionamiento de la prisión. Prosperó en el reino de Faraón también. Jehová lo bendijo y, como se declaró en Génesis 39:23, “lo que hacía Jehová estaba haciendo que tuviera buen éxito” en su mano, y “Jehová estaba con José.”

5. (a) ¿Por qué es necesario que todos los hermanos dedicados asuman responsabilidad? (b) ¿Cómo se obtiene la habilidad?

5 La sociedad del nuevo mundo de testigos de Jehová es una organización trabajadora que está creciendo; tiene que ser así, para efectuar la tremenda obra a la que está asignada, a saber, “estas buenas nuevas del reino se predicarán en toda la tierra habitada.” (Mat. 24:14) Al formarse nuevas congregaciones se necesitarán superintendentes, y varios siervos auxiliares, para encargarse de los detalles envueltos en pastorear parte del rebaño de Dios. Las personas a quienes se usa en tales puestos responsables son las personas que atienden bien los asuntos pequeños, cuidándolos con la misma diligencia que se requiere en las cosas más grandes. Si, por ejemplo, uno que es cabeza de familia, el padre, cuida de los pequeños de su casa, encargándose de que asistan a las reuniones y enseñándoles pacientemente a participar en el servicio de Dios, este mismo hombre cuidará bien de una congregación. La Biblia dicta esto como requisito, declarando: “Hombre que presida su propia casa excelentemente, teniendo hijos en sujeción con toda seriedad.” (1 Tim. 3:4) A medida que a los nuevos se les enseña la verdad de la Biblia, se les alimenta hacia la madurez; aprenden a encargarse de responsabilidades. Por eso, en la sociedad del nuevo mundo de testigos de Jehová siempre hay hermanos que están siendo entrenados para que tomen la delantera en pastorear las “ovejas.”

6. ¿Qué actitud prevalece en el viejo mundo hoy día, y por qué debe evitarse el que influya en uno tal modo de pensar?

6 Por supuesto, estando rodeados de un mundo de personas que se apartan de la responsabilidad y que la consideran como algo que ha de evitarse, fácilmente podemos entender por qué tenemos que cultivar una actitud nueva cuando nos dedicamos a servir a Jehová Dios. En la organización de Jehová uno no afloja el paso debido a que el Armagedón no está aquí hoy, ni debido a que alguien no nos está encomiando cada día. Debemos querer llegar a estar envueltos en los privilegios de servicio que acompañan a la responsabilidad. El cultivar un espíritu de abnegación llevará los beneficios de nuestra madurez a muchos de nuestros hermanos y apartará la atención de nuestro yo sensitivo. Sin embargo, algunos quizás piensen que son mejores seguidores que caudillos. Otros dicen que su salud no aguantaría bajo la carga pesada del trabajo. Luego hay los que ven conectado con el ser superintendente la necesidad de a veces ser firmes y aconsejar a los hermanos, y se retraen por temor de herir el amor propio de alguien. O quizás algunos piensen que no están capacitados, que no tienen bastante conocimiento para responder a todas las preguntas y para manejar todos los problemas que con seguridad surjan. Pero en todas estas actitudes estamos dejándonos atemorizar por lo que nos parece tan grande. Esta responsabilidad grande significa atender asuntos pequeños día tras día, y, a medida que transcurre el tiempo, usted podrá manejar más de ellos. Es verdad, usted pudiera estar limitado, pero no necesariamente anulado, a causa de algún obstáculo. Recuerde, también, que las mismas cualidades que necesitan los superintendentes las necesitan todas las “ovejas” de la congregación.

7. ¿Quién nombra a los superintendentes? ¿Cómo?

7 Pause y medite ahora. ¿Nacen las personas para ser superintendentes en la congregación de Dios hoy día? No. La Palabra de Dios dice: “Si algún hombre está haciendo esfuerzos por obtener un puesto de superintendente, está deseoso de una obra excelente.” (1 Tim. 3:1) “Presten atención a ustedes mismos y a todo el rebaño, entre el cual el espíritu santo los ha nombrado superintendentes, para pastorear la congregación de Dios.” (Hech. 20:28) Jehová Dios y su Hijo Cristo Jesús por medio del “esclavo fiel y discreto” tienen algo que decir en el asunto en cuanto a quiénes son superintendentes que pastorean el rebaño de Dios. Por eso, a los que dan la medida de los requisitos de Dios escritos en su Palabra se les reconoce y usa en pastorear las “ovejas.”

8. ¿De qué edificante punto de vista de responsabilidad se puede disfrutar?

8 En vez de tener un punto de vista escaso, falto de perspicacia, viendo las cargas, los problemas, las horas más largas, las congojas, buscando decisiones que tomar, la necesidad de hacer grandes esfuerzos para ayudar a otros, el constante trabajo arduo que jamás termina, levante la cabeza y vea el aumento de personas que anteriormente se hallaban sin pastores nombrados por Dios y que ahora se encuentran bajo la sombra protectora de siervos dedicados de Dios. Observe los logros de la sociedad del nuevo mundo. Vea a los nuevos crecer a la madurez, verdaderamente uno de los crecimientos más fascinadores. Experimente el gozo del servicio. Luego cuente, si puede, los placeres y privilegios de trabajar para y con sus hermanos en el servicio de Jehová.

9. (a) ¿Cómo pudiera uno probarse confiable en pequeños detalles en la obra de organización? (b) ¿Por qué esforzarse tan vigorosamente?

9 Otro asunto que ha de considerarse ahora, cuando hay muchas personas “teniendo una forma de devoción piadosa mas resultando falsos a su poder,” es el de seguir hasta el fin y ser confiable. (2 Tim. 3:5) Una asignación en la organización de Dios jamás es una pequeñez que haya de ser pasada por alto. Cualquier detalle digno de ser delegado a un siervo de Dios merece su mejor atención durante la fracción de tiempo que se necesita para encargarse de él. Jesús dijo: “Todo el que viene a mí y oye mis palabras y las hace . . . es semejante a un hombre que edificó una casa, el cual cavó y ahondó y puso el fundamento sobre la masa de roca. . . . Por otra parte, el que oye y no hace, es semejante a un hombre que edificó una casa sobre tierra sin fundamento.” (Luc. 6:47-49) Se necesita más que oír, y se necesita más que hablar acerca de ello; se necesita obrar para efectuar las cosas en una congregación que sirve a Dios y alimenta a las “ovejas.” Los confiables, entonces, tienen mucho que esperar, como se promete en Santiago 1:25: “El que mira con cuidado en la ley perfecta que pertenece a la libertad y persiste en ella, éste, por cuanto se ha hecho, no un oidor olvidadizo, sino un hacedor de la obra, será feliz al hacerla él mismo.” Con un fundamento firme y la bendición de Jehová, la persona apreciativa y dispuesta puede efectuar mucho. Puede ayudar a muchas personas a crecer a la madurez y será más útil a la organización de Dios mientras más tiempo sirva. ¿Por qué perder lo que usted tiene a causa de dejar que su conocimiento permanezca ocioso? Proverbios 11:24 lo describe de esta manera: “Existe el que está esparciendo y no obstante se le está aumentando; también el que está deteniéndose de lo que es justo, pero resulta solo en carencia.”

10. (a) ¿Qué beneficios hay para las personas confiables? (b) ¿Es necesario ser fieles en cosas pequeñas?

10 Medite, también, en las bendiciones futuras de los confiables, al leer usted Lucas 8:18: “Por lo tanto, presten atención a cómo escuchan; porque al que tiene, se le dará más, pero al que no tiene, aun lo que se imagina tener le será quitado.” Ponga por caso que un siervo dedicado de Dios no quiera encargarse de algunas cosas pequeñas de la congregación, sino que se sienta demasiado restringido y quiera gozar de libertad de cualesquier responsabilidades. Ahora bien, ¿qué efecto tendrá esto en sus hijos a quienes él dice que quiere entrenar para servir a Dios? Una persona no nace para ser un buen padre o un buen superintendente, sino que, por medio de conocimiento, entrenamiento, experiencia y el aplicarse, con la ayuda de Jehová puede desempeñar bien cualquier puesto. Si desempeña bien uno, con toda probabilidad desempeñará bien el otro. Lucas 16:10 registra esta declaración de Jesús: “La persona fiel en lo mínimo es fiel también en lo mucho, y la persona injusta en lo mínimo es injusta también en lo mucho.” El Commentary de Clarke, tomo V, página 462, hace esta interesante declaración: “Quien tiene los principios genuinos de fidelidad hará un punto de conciencia del atender cuidadosamente aun la cosa más pequeña; y es por medio de habituarse a obrar rectamente en las cosas pequeñas que él adquiere el hábito agradable de obrar con corrección, fidelidad, honor y conciencia, en asuntos del más grande interés. Por el contrario, quien no obra rectamente en asuntos pequeños rara vez se sentirá obligado a prestar mucha atención a los dictados del honor y la conciencia, en casos de elevada importancia. ¿Podemos esperar razonablemente que el hombre que continuamente cae por cosas pequeñas tenga poder para resistir tentaciones a grandes males?”

11, 12. (a) ¿Dónde se encargan los testigos de Jehová de asuntos pequeños que realmente son importantes? (b) ¿Cómo se alimenta e introduce en la organización a las “ovejas”?

11 Centenares de miles de testigos de Jehová se prueban fieles en asuntos pequeños cuando participan en su actividad de predicación de casa en casa. De hecho, 1,040,836 publicadores del reino de Dios informaron haber participado en esta obra. (Vea el Yearbook of Jehovah’s Witnesses para 1964, página 38.) En esta obra ministerial encuentran a personas que quieren saber más acerca de Dios y de sus propósitos. Quieren alguna ayuda para estudiar la Biblia. Bueno, a los testigos de Jehová les da gusto hallar tales personas y a menudo se sienten como el cateador que halla el filón de oro, porque a estos mansos se les describe como ovejas en la Biblia. Observe el valor que Jehová coloca sobre éstos, como se explica en Mateo 18:14: “Así mismo no es cosa deseable a mi Padre que está en el cielo el que uno de estos pequeños perezca.” ¿Olvidarán los testigos de Jehová anotar la dirección de las “ovejas” o anotar las preguntas que habrán de contestarse en la siguiente visita? ¿Cumplirán su promesa y volverán a visitar? ¿Y pronto, en el transcurso de unos cuantos días? Jesús impresionó en Pedro la necesidad de alimentar a las “ovejas” al decirle tres veces: ‘Apacienta mis ovejas.’ (Juan 21:15-17) Los testigos de Jehová han sido instruidos en cuanto a ‘apacentar a las ovejas.’ De modo que regresan. Esto es hacer la obra de Dios, y así uno se prueba fiel en asuntos pequeños.

12 Desde este punto las “ovejas” recién halladas adquieren conocimiento de cosas pequeñas: detalles de doctrinas, partes de profecía bíblica, vistas limitadas de la organización, puntos de principios bíblicos, un poco de las normas del vivir limpio de la sociedad teocrática. ¿Deberíamos considerar esto como migajas y no lo bastante importantes para justificar un programa de alimentación regular? No, sino que fielmente serviremos a estas personas mansas, enseñándoles pacientemente a servir a Jehová. Estos asuntos pequeños llegan a ser algo muy grande—vida, y vida eterna, tratándose de eso.—Juan 17:3.

13, 14. (a) ¿Puede ser nuestra habla tan reveladora como nuestra confiabilidad? (b) ¿Deberíamos pasar por alto las tendencias degradantes en las conversaciones? (c) ¿Cómo se cambia la conversación a consideraciones edificantes?

13 Examinemos nuestra conversación. Partes del habla, sí, palabras y locuciones, es verdad, pero, ¿qué significado se comunica? ¿Qué actitud se revela? Nuestra habla nos descubrirá, nos dará a conocer. “Porque de la abundancia del corazón habla la boca.” (Mat. 12:34) Nuestro lenguaje, entonces, debe venir bajo superintendencia; lo controlamos. Ciertamente hay ocasiones para conversación ligera, para humorismo, y para relatar experiencias y acontecimientos y para consideraciones bíblicas. Pero un siervo de Dios, en todas estas ocasiones no usa el habla para quejarse, para murmurar, para criticar, para esparcir chismes ni para usar lenguaje profano ni para alardear. No es necesario amordazarse ni ahogar la conversación; más bien, haga como se insta en el Salmo 34:13: “Salvaguarda tu lengua de lo que es malo, y tus labios de hablar engaño.”

14 Es cuando grupos de personas se ponen a hablar acerca de alguien que a menudo los inmaturos hacen que la conversación vaya en dirección incorrecta por medio de traer a colación alguna falta de ese individuo. Otros le añaden y luego tenemos un problema. ¿Quién del grupo tendrá el ánimo de dirigir de nuevo la conversación a un nivel edificante? ¿Quién será leal a la organización de Jehová en este asunto pequeño y protegerá a uno de sus miembros? A veces solo se necesita una palabra, un cambio de tema, pero se necesita que alguien lo haga. Si un pequeño timón puede dirigir una nave grande y mantenerla navegando en aguas seguras, una lengua pequeña puede dirigir la conversación. (Sant. 3:4) Realmente es una cosa grande, porque si uno critica a una persona que sirve a Dios pronto estará quejándose acerca del puesto que Dios ha establecido para que se efectúe algo.—Sant. 5:9.

15. (a) Si escuchamos, ¿qué puede hacer para nosotros el habla de otros? (b) ¿Se recomienda el escuchar?

15 El hablar puede ser muy refrescante y muy interesante. Revela las cosas interesantes que han sucedido a otras personas. Da a saber conocimiento de algún tema en el cual quizás estén muy capacitadas. Revela aprecio a la verdad. Nos dice cuán maravilloso proveedor es Jehová al cuidar a todas estas personas al contar ellas sus experiencias. De modo que sacaremos provecho si somos buenos oyentes. Pero algunas personas nunca quieren hacer eso; prefieren seguir hablando hasta que aun los inmaturos desean que se callen. El escuchar es muy importante para un ministro de Dios, y Proverbios 1:5 aclara esto: “La persona sabia oirá y adquirirá más instrucción, y el hombre entendido es el que adquiere dirección diestra.” Si usted quiere ser oído cuando habla, entonces escuche a otros cuando hablan.

16. ¿Cómo ilustra el reloj una manera práctica de considerar el encargarse de muchos asuntos pequeños?

16 El probarse fieles en asuntos pequeños se puede ilustrar muy bien por un reloj. Sea pequeño o grande, muy caro con chapa de oro o solo un reloj sencillo y barato, todos hacen una sola cosa, una cosa muy pequeña. Miden el tiempo en fracciones menudas, segundos. El reloj hace el tremendo trabajo de llevar el tiempo exactamente e informarlo día o noche, todo el año, en pedacitos a la vez. No hay preocupaciones acerca de la semana siguiente o el mes siguiente, solo el segundo inmediato. Cuando ha registrado e informado el segundo, se mueve al siguiente. Quizás no seamos tan mecánicos como un reloj, pero muchas veces cada día tenemos la responsabilidad y privilegio de ser fieles a Jehová y a su organización en asuntos pequeños. Si nos encargamos de cada uno a medida que viene y cada día lo hacemos mejor, usando los principios de la Palabra de Dios como herramientas, estos asuntos pronto se manejan fácilmente y podemos proseguir a asuntos más grandes y a más bendiciones de parte de Jehová Dios.

17. (a) ¿Cómo se exhorta a las familias de testigos de Jehová, particularmente en comunidades pequeñas, a encargarse de estos asuntos pequeños? (b) ¿Cómo puede afectar esto a la obra del Reino?

17 Otro ejemplo es el de la única familia de testigos de Jehová en una comunidad. Predican a los habitantes de la localidad. Trabajan para o con muchas de estas personas. Sus hijos van a la escuela pública con los otros niños. La entera comunidad los observa venir e ir en su actividad cristiana, cómo viven juntos como familia, cómo dan entrenamiento o educación a los hijos, y su posición y actitud sobre puntos en cuestión en el vecindario. Escuchan su habla. Todo movimiento y detalle de su vida parece venir a estar bajo un examen microscópico y suministra material para muchas discusiones por todos lados en la población. Y eso no solo es por unos cuantos días, sino por años. Muchas personas, después de observar a los testigos de Jehová por años, han llegado a la conclusión de que la Biblia es verdadera y que los principios de Dios que se hallan en ella son prácticos y factibles para nuestro día, y como resultado llegan a ser testigos de Jehová. Uno tiene que admirar la fidelidad continua en estos asuntos pequeños día tras día por estas familias que sirven a Jehová en muchas partes de la Tierra. Es como la familia de Noé que construyó la nave semejante a barco bajo la dirección de Dios y fue observada por la entera localidad por todas partes.—Génesis, capítulos 6, 7.

18. ¿Qué seguridad y ayuda obtenemos de la Biblia sobre este asunto?

18 No hay causa para pánico, porque no estamos tratando de agradar al hombre; más bien, agradamos a Dios, como se recalca en Gálatas 1:10: “¿Es, de hecho, a hombres que ahora estoy tratando de persuadir, o a Dios? ¿O estoy procurando agradar a hombres? Si todavía estuviese agradando a hombres, no sería esclavo de Cristo.” Y otra vez, en 1 Tesalonicenses 2:4: “Así como hemos sido probados y reconocidos por Dios como aptos para tener encomendadas a nosotros las buenas nuevas, así hablamos, como agradando, no a los hombres, sino a Dios, que prueba nuestros corazones.” No hay causa para alarma, porque Dios mediante su Palabra, la Biblia, ha suministrado los principios que han de usarse para manejar cada día estos asuntos pequeños. “Toda Escritura es inspirada de Dios y provechosa para enseñar, para censurar, para rectificar las cosas, para disciplinar en justicia, para que el hombre de Dios sea enteramente competente, completamente equipado para toda buena obra.”—2 Tim. 3:16, 17.

19. (a) ¿Qué haría usted para aumentar la felicidad? (b) ¿Son de poca o ninguna importancia los asuntos pequeños? ¿Por qué contesta usted así?

19 Con este punto de vista de nuestro servicio a Dios, tenemos dentro de nuestro alcance la oportunidad de aumentar nuestra felicidad. Si usted asistió a una reunión de congregación por semana durante el año pasado y usted hace arreglos en su vida para asistir a dos reuniones a la semana este año, usted duplicará su felicidad. Si usted tuvo el privilegio de participar seis horas al mes en el servicio y ahora puede dedicar siete horas y media, usted estará agregando 25 por ciento a su felicidad. Ahora bien, si usted se esfuerza por responsabilidad y es nombrado siervo en la congregación, usted estará multiplicando su felicidad muchas veces. Piense en cuántas veces al día usted tiene el privilegio de hacer decisiones a favor de la voluntad de Jehová. Cosas pequeñas, sí, algunas tan pequeñas que pasan inadvertidas o que son fácilmente pasadas por alto; no obstante, se hallan allí. Cultive el hábito de hacer estas decisiones en armonía con la Palabra de Dios; no es posible que calcule usted el aumento de felicidad que está disponible para usted. Y entonces, corónelo con esta promesa: “La bendición de Jehová—eso es lo que enriquece, y él no añade dolor con ella.”—Pro. 10:22.

    Publicaciones en español (1950-2025)
    Cerrar sesión
    Iniciar sesión
    • español
    • Compartir
    • Configuración
    • Copyright © 2025 Watch Tower Bible and Tract Society of Pennsylvania
    • Condiciones de uso
    • Política de privacidad
    • Configuración de privacidad
    • JW.ORG
    • Iniciar sesión
    Compartir