Dios siente dolor. ¿Qué podemos hacer para que se sienta feliz?

¿Alguna vez has llorado porque tienes mucho dolor?...a A la mayoría nos ha pasado. Pero a veces el dolor no es en un brazo o una pierna. Por ejemplo, alguien podría decir mentiras de nosotros, y eso puede doler, ¿no crees?... A Dios también le duele que digan mentiras de él. Hablemos sobre eso y sobre qué podemos hacer para que se sienta feliz.

La Biblia habla de algunas personas que decían que querían mucho a Dios pero a la vez “lo hacían sentirse herido”, o triste. Imagínate, le “causaban dolor” a Dios. Pero ¿cómo es posible? Veamos por qué se siente herido Dios cuando lo desobedecemos.

Las primeras dos personas que Jehová creó en la Tierra lo hicieron sentir muy, pero que muy triste. Él las había puesto en un paraíso llamado “el jardín de Edén”. ¿Cómo se llamaban?... Sí, Adán y Eva. Veamos qué fue lo que hicieron.

Después de darles el jardín a Adán y Eva, Jehová les dijo que lo cuidaran. También les dijo que podían tener hijos y vivir para siempre allí. Pero antes de que tuvieran hijos pasó algo terrible. ¿Sabes qué fue?... Un ángel convenció a Eva de que desobedeciera a Dios. Luego Adán también lo desobedeció. Veamos cómo pasó.

El ángel habló con Eva, pero le hizo creer que era una serpiente la que le hablaba. A Eva le gustó lo que estaba escuchando: que podía llegar a “ser como Dios”. Luego, la serpiente le dijo lo que tenía que hacer y ella lo hizo. ¿Sabes qué fue?...

Comió del árbol del que Jehová les había prohibido comer. Antes de crear a Eva, Dios le había dicho a Adán: “De todo árbol del jardín puedes comer hasta quedar satisfecho. Pero en cuanto al árbol del conocimiento de lo bueno y lo malo, no debes comer de él, porque en el día que comas de él, positivamente morirás”.

Eva conocía esa regla, pero se quedó mirando el árbol y vio que “era bueno para alimento, y que a los ojos era algo que anhelar [...]. De modo que empezó a tomar de su fruto y a comerlo”. Después le dio a Adán “y él empezó a comerlo”. ¿Por qué crees que lo hizo?... Porque amaba más a Eva que a Jehová, y decidió hacer lo que ella quería. Pero es más importante obedecer a Dios que a cualquier otra persona, ¿no es cierto?

¿Recuerdas la serpiente que le habló a Eva? Parecía que era su voz, pero en realidad no lo era. Alguien la utilizó como si fuera una marioneta. ¿De quién era entonces la voz que salía de la serpiente?... De “la serpiente original, el que es llamado Diablo y Satanás”.

¿Sabes cómo puedes hacer feliz a Dios?... Tratando de obedecerlo siempre. Satanás dice que él puede conseguir que todas las personas lo obedezcan a él y no a Dios. Por eso, Jehová nos da este consejo: “Sé sabio, hijo mío [o hija mía], y regocija mi corazón, para que pueda responder al que me está desafiando con escarnio”. Satanás está “desafiando con escarnio” a Jehová, es decir, se está burlando de él. Dice que puede lograr que todo el mundo deje de servir a Dios. Si obedeces a Jehová y le sirves, él se sentirá feliz. ¿Te esforzarás por hacerlo?...