-
¿Cumplimos con nuestra dedicación?La Atalaya 2001 | 1 de febrero
-
-
Uno de ellos fue Ernest E. Beavor, de Inglaterra. Se hizo Testigo en 1939, cuando se iniciaba la II Guerra Mundial, y renunció a un próspero negocio de fotografía de prensa a fin de emprender el ministerio de tiempo completo. Pasó dos años en la cárcel por mantener neutralidad cristiana. Su familia lo apoyó, y en 1950 sus tres hijos asistieron en Nueva York a la Escuela Bíblica de Galaad de la Watchtower para recibir preparación misional. El hermano Beavor era tan celoso en la predicación, que sus amigos le llamaban Ernie el Armagedón. Fue leal y cumplió con su dedicación, y proclamó la inminencia de la guerra de Dios del Armagedón hasta su misma muerte, acaecida en 1986. No consideró que su dedicación fuera un contrato con Dios por tiempo limitado (1 Corintios 15:58).b
-
-
¿Cumplimos con nuestra dedicación?La Atalaya 2001 | 1 de febrero
-
-
[Ilustración de la página 16]
Ernest Beavor dio un ejemplo de celo cristiano a sus hijos
-