-
Salvados de una “generación inicua”La Atalaya 1995 | 1 de noviembre
-
-
Jehová juzgó al pueblo judío en el siglo primero. Los que se arrepintieron y pusieron fe en la provisión misericordiosa de Jehová mediante Cristo se salvaron de aquella “gran tribulación”. Todas las profecías de Jesús se cumplieron con exactitud, y luego pasaron “el cielo y la tierra” del sistema de cosas judío, es decir, la nación entera, con sus guías religiosos y su sociedad inicua. Jehová había ejecutado su sentencia. (Mateo 24:35; compárese con 2 Pedro 3:7.)
20. ¿Qué exhortación oportuna y apremiante debemos obedecer todos los cristianos?
20 Los judíos que prestaron atención a las palabras proféticas de Jesús se dieron cuenta de que su salvación no dependía de que intentaran calcular la duración de una “generación” ni la fecha de ciertos “tiempos o sazones”, sino de que se mantuvieran separados de la generación inicua de su día e hicieran la voluntad de Dios con celo. Aunque las últimas palabras de la profecía de Jesús se relacionan con el cumplimiento mayor de nuestros días, los cristianos judíos del siglo primero también tuvieron que obedecer esta exhortación: “Manténganse despiertos, pues, en todo tiempo haciendo ruego para que logren escapar de todas estas cosas que están destinadas a suceder, y estar en pie delante del Hijo del hombre”. (Lucas 21:32-36; Hechos 1:6-8.)
21. ¿Qué acontecimiento repentino podemos esperar en el futuro cercano?
21 Actualmente, “el gran día de Jehová [...] está cerca, y hay un apresurarse muchísimo de él”. (Sofonías 1:14-18; Isaías 13:9, 13.) Cuando llegue el “día y hora” que Jehová mismo ha predeterminado, su furia se desatará repentinamente sobre los elementos religiosos, políticos y comerciales del mundo, y sobre la gente rebelde que compone esta “generación inicua y adúltera”.
-
-
Tiempo de mantenernos despiertosLa Atalaya 1995 | 1 de noviembre
-
-
“Manténganse alerta”
5. a) ¿Qué razón válida hay para no tener que saber el “día y hora” de Jehová? b) Según Marcos, ¿con qué buen consejo concluyó Jesús su profecía?
5 Después de profetizar los sucesos que culminarían en una “gran tribulación”, Jesús agregó: “Respecto a aquel día y hora nadie sabe, ni los ángeles de los cielos, ni el Hijo, sino solo el Padre”. (Mateo 24:3-36; Marcos 13:3-32.) No tenemos que saber la fecha exacta en que ocurrirán los sucesos. Debemos concentrarnos en estar alerta, cultivar una fe firme y permanecer ocupados en el servicio de Jehová, no en calcular fechas. Jesús concluyó su gran profecía diciendo: “Sigan mirando, manténganse despiertos, porque no saben cuándo es el tiempo señalado. [...] Manténganse alerta, [...] lo que les digo a ustedes, a todos lo digo: Manténganse alerta”. (Marcos 13:33-37.) En la oscuridad del mundo actual hay peligros que nos amenazan. Tenemos que mantenernos despiertos. (Romanos 13:11-13.)
6. a) ¿En qué debemos anclar nuestra fe? b) ¿Cómo podemos “contar nuestros días”? c) ¿Qué quiere decir Jesús en esencia con el término “generación”?
6 No solo debemos prestar atención a las profecías inspiradas respecto a estos últimos días del inicuo sistema, sino que tenemos que anclar nuestra fe principalmente en el precioso sacrificio de Cristo Jesús y en las maravillosas promesas divinas basadas en ese sacrificio. (Hebreos 6:17-19; 9:14; 1 Pedro 1:18, 19; 2 Pedro 1:16-19.) Debido a su deseo de ver el fin de este inicuo sistema, el pueblo de Jehová a veces ha especulado sobre cuándo estallará la “gran tribulación”, incluso relacionando este suceso con lo que se calculaba que debía durar una generación desde 1914. Sin embargo, ‘hacemos entrar un corazón de sabiduría’ si meditamos en cómo “contar nuestros días” para alabar con gozo a Jehová, y no especulamos sobre cuántos años o días constituyen una generación. (Salmo 90:12.)
-