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Se revelan más detalles sobre el ReinoEl Reino de Dios ya está gobernando
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La siega se centra en los ungidos
10. ¿Qué comprendía el pueblo de Dios sobre los 144.000 desde hace mucho tiempo?
10 Décadas antes de 1914, los Estudiantes de la Biblia ya comprendían que 144.000 seguidores fieles de Cristo gobernarían con él en el cielo.c También entendían que no se trataba de una cifra simbólica y que en el siglo primero se había empezado a escoger a los integrantes de ese grupo.
11. ¿Qué llegaron a entender los futuros miembros de la novia de Cristo sobre la obra que debían realizar?
11 Entonces, ¿qué debían hacer los futuros miembros de la novia de Cristo mientras aún estaban en la Tierra? Notaron que Jesús había dado importancia especial a la predicación y la había relacionado con un período de siega (Mat. 9:37; Juan 4:35). Como vimos en el capítulo 2, por un tiempo creyeron que este período duraría cuarenta años y terminaría cuando subieran al cielo los ungidos. Pero como la predicación siguió después de esos cuarenta años, era obvio que necesitaban comprender mejor ese asunto. Ahora sabemos que en 1914 comenzó la temporada de la siega (el período en que se separaría el trigo de la mala hierba, es decir, los fieles cristianos ungidos de los cristianos falsos). Por lo tanto, había que concentrarse en recoger a los que tenían la esperanza celestial.
El año 1914 marcó el comienzo de la temporada de la siega (Vea el párrafo 11)
12, 13. ¿De qué forma se han cumplido en los últimos días las parábolas de Jesús sobre las 10 vírgenes y los talentos?
12 Desde 1919 en adelante, Cristo ha guiado al esclavo fiel y discreto para que se enfocara en la predicación. En el siglo primero, él ya había encargado que se llevara a cabo esa comisión (Mat. 28:19, 20). También indicó qué cualidades debían tener sus seguidores ungidos para realizarla. Por ejemplo, en su parábola de las 10 vírgenes, Jesús mostró que si querían alcanzar su meta de participar en el gran banquete de bodas en el cielo, los ungidos debían mantenerse alertas. A estos 144.000 fieles ungidos se les presenta de otra forma una vez que están en el cielo: como la novia celestial de Cristo (Rev. 21:2). Además, en la parábola de los talentos, Jesús enseñó que sus discípulos ungidos serían diligentes en la predicación (Mat. 25:1-30).
13 En los últimos cien años, los cristianos ungidos se han mantenido alertas y han sido diligentes en su labor. Sin duda, gracias a su actitud vigilante, recibirán su recompensa. Ahora bien, ¿se limitaría la gran obra de la cosecha a recoger al resto de los 144.000?
El Reino reúne a sus súbditos en la Tierra
14, 15. ¿Qué cuatro grupos diferentes se pensaba que existían?
14 Por largo tiempo, muchos hombres y mujeres fieles sintieron una enorme curiosidad respecto a la identidad del grupo al que llamaban la “grande muchedumbre”, mencionado en Revelación 7:9-14 (Versión Moderna). Pero como aún no había llegado el momento de que Cristo revelara quiénes formarían este grupo, no sorprende que mucho de lo que se dijo sobre el tema estuviera muy alejado de las verdades sencillas y claras que hoy día conocemos y atesoramos.
15 En 1917, el libro The Finished Mystery (El misterio terminado) dijo que había “dos grados o tipos de salvación celestial, y dos grados o tipos de salvación terrestre”. ¿Quiénes integraban estos cuatro grupos? Los primeros dos estarían en el cielo. El primer grupo eran los 144.000 que gobernarían con Cristo. Y el segundo estaba compuesto por la gran muchedumbre, que, según se pensaba, estaba formada por personas que afirmaban creer en Jesús, pero que aún no habían abandonado las iglesias de la cristiandad. Se creía que, aunque tenían cierto grado de fe, no era tan sólida como para adoptar una firme postura de lealtad a Dios, por lo que recibirían puestos inferiores en el cielo. Con respecto a la Tierra, se pensaba que había un tercer grupo: los llamados “beneméritos de la antigüedad” (hombres fieles como Abrahán, Moisés y otros). Ellos tendrían puestos de autoridad sobre el cuarto grupo: el resto de la humanidad.
16. ¿Qué destellos de luz espiritual ocurrieron en los años 1923 y 1932?
16 ¿Cómo guió el espíritu santo a los cristianos al conocimiento que hoy tenemos sobre la gran muchedumbre? Ocurrió progresivamente, mediante una serie de destellos de luz espiritual. En 1923, la revista Watch Tower se refirió a un grupo que no tenía la esperanza celestial, sino que viviría en la Tierra bajo el Reino de Cristo. En 1932, la revista La Torre del Vigía habló de Jonadab (Jehonadab), quien se unió a Jehú —el rey israelita elegido por Dios— en la guerra contra la adoración falsa (2 Rey. 10:15-17). Y señaló que en tiempos modernos había un grupo que era como Jonadab. A ellos Jehová los protegería “durante la tribulación del Armagedón” para vivir aquí en la Tierra.
17. a) ¿Qué brillante destello de iluminación espiritual se produjo en 1935? b) ¿Cómo influyó en los cristianos fieles la aclaración respecto a la identidad de la gran muchedumbre? (Vea el recuadro “Sintieron un gran alivio”.)
17 En 1935 se produjo un brillante destello de luz espiritual. En la asamblea celebrada en la ciudad de Washington (Estados Unidos) se explicó que la gran muchedumbre viviría en la Tierra. Se trataba del mismo grupo representado por las ovejas, mencionadas por Jesús en su parábola de las ovejas y las cabras (Mat. 25:33-40). La gran muchedumbre estaría entre las “otras ovejas” de las que Jesús dijo: “A esas también tengo que traer” (Juan 10:16). Cuando el orador, el hermano Rutherford, preguntó: “¿Quisieran, por favor, ponerse de pie todos los que tienen la esperanza de vivir para siempre en la Tierra?”, más de la mitad del auditorio lo hizo. Entonces, él exclamó: “¡He aquí la grande muchedumbre!”. Muchos se sintieron profundamente emocionados cuando por fin comprendieron cuál era su esperanza para el futuro.
18. ¿En qué han centrado sus esfuerzos los seguidores de Cristo, y con qué resultado?
18 Desde entonces, Cristo ha guiado a sus seguidores para que se concentren en reunir a los futuros miembros de esta gran muchedumbre que saldrán sanos y salvos de la gran tribulación. Al principio parecía que no iban a ser muchos. De hecho, el hermano Rutherford dijo en una ocasión: “Parece que, después de todo, la ‘grande muchedumbre’ no va a ser tan grande”. Pero ahora vemos cuánto ha bendecido Jehová la cosecha desde entonces. Bajo la dirección de Jesús y del espíritu santo, tanto los ungidos como sus compañeros de las “otras ovejas” han llegado a ser justo lo que Jesucristo había predicho: “un solo rebaño” que sirve unido bajo “un solo pastor”.
El hermano Rutherford no se imaginaba lo numerosa que sería la gran muchedumbre (De izquierda a derecha: Nathan Knorr, Joseph Rutherford y Hayden Covington)
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