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  • El pueblo de Jehová hecho firme en la fe
    La Atalaya 1990 | 15 de junio
    • El pueblo de Jehová hecho firme en la fe

      “Las congregaciones continuaron haciéndose firmes en la fe y aumentando en número de día en día.” (HECHOS 16:5.)

      1. ¿Cómo utilizó Dios al apóstol Pablo?

      JEHOVÁ DIOS utilizó a Saulo de Tarso como “un vaso escogido”. Cuando este llegó a ser el apóstol Pablo ‘sufrió muchas cosas’. Pero mediante su obra y la de otros la organización de Jehová disfrutó de unidad y logró una asombrosa expansión. (Hechos 9:15, 16.)

      2. ¿Por qué será provechoso que consideremos Hechos 13:1–16:5?

      2 Más y más gentiles se convertían al cristianismo, y una significativa reunión del cuerpo gobernante contribuyó mucho a fomentar la unidad entre el pueblo de Dios y a hacerlo firme en la fe. Será muy provechoso considerar estos desenvolvimientos, y otros, que se relatan en Hechos 13:1–16:5, pues los testigos de Jehová experimentan ahora crecimiento y bendiciones espirituales similares. (Isaías 60:22.) (Al estudiar en privado los artículos sobre Hechos que aparecen en este número, le sugerimos que lea para sí los pasajes del libro que se indican en letras negritas.)

      Misioneros entran en acción

      3. ¿Qué obra efectuaban los “profetas y maestros” en Antioquía?

      3 Hombres enviados de la congregación de Antioquía, Siria, ayudaron a los creyentes a hacerse firmes en la fe (Hch 13:1-5). En Antioquía estaban estos “profetas y maestros”: Bernabé, Symeón (Niger), Lucio de Cirene, Manaén y Saulo de Tarso. Los profetas explicaban la Palabra de Dios y predecían sucesos, mientras que los maestros instruían en las Escrituras y en el vivir piadoso. (1 Corintios 13:8; 14:4.) Bernabé y Saulo recibieron una asignación especial. Llevaron consigo a Marcos, primo de Bernabé, y partieron hacia Chipre. (Colosenses 4:10.) Predicaron en sinagogas del puerto oriental de Salamina, pero no hay ningún registro de que los judíos respondieran bien. Puesto que aquellos eran gente acomodada en sentido material, ¿para qué necesitaban al Mesías?

      4. ¿Qué sucedió mientras los misioneros seguían predicando en Chipre?

      4 Dios bendijo la testificación que se efectuó en otra parte de Chipre (13:6-12). En Pafos los misioneros encontraron a Bar-Jesús (Elimas), un hechicero y falso profeta judío. Cuando este trató de impedir que el procónsul Sergio Paulo oyera la palabra de Dios, Saulo se llenó de espíritu santo y dijo: ‘Oh hombre lleno de fraude y de villanía, hijo del Diablo, enemigo de todo lo justo, ¿no cesarás de torcer los caminos correctos de Jehová?’. Entonces la mano de castigo de Dios cegó a Elimas por algún tiempo, y Sergio Paulo “se hizo creyente, pues quedó atónito por la enseñanza de Jehová”.

      5, 6. a) ¿Qué dijo Pablo acerca de Jesús en la sinagoga de Antioquía de Pisidia? b) ¿Qué efecto tuvo el discurso de Pablo?

      5 Desde Chipre el grupo se embarcó para la ciudad de Perga, en Asia Menor. Entonces Pablo y Bernabé viajaron hacia el norte por desfiladeros —probablemente ‘en peligros de ríos y por parte de salteadores’— hasta Antioquía, Pisidia. (2 Corintios 11:25, 26.) Allí Pablo habló en la sinagoga (13:13-41). Repasó los tratos de Dios con Israel e identificó a Jesús, descendiente de David, como el Salvador. Aunque los gobernantes judíos habían exigido la muerte de Jesús, la promesa hecha a los antepasados de los judíos se había cumplido cuando Dios lo resucitó. (Salmo 2:7; 16:10; Isaías 55:3.) Pablo advirtió a sus oyentes que no despreciaran el don de la salvación que Dios había provisto mediante Cristo. (Habacuc 1:5, Septuaginta.)

      6 El discurso de Pablo despertó interés entre sus oyentes, tal como lo hacen los discursos públicos que presentan los testigos de Jehová hoy día (13:42-52). El sábado siguiente casi toda la ciudad se reunió para oír la palabra de Jehová, y esto llenó de celos a los judíos. ¡Pues en una sola semana los misioneros aparentemente habían convertido a más gentiles que aquellos judíos durante toda su vida! En vista de que los judíos contradijeron con blasfemias a Pablo, fue tiempo para que la luz espiritual resplandeciera en otro lugar, y por eso se les dijo: ‘Puesto que están echando la palabra de Dios y no se juzgan dignos de vida eterna, nos volvemos a las naciones’. (Isaías 49:6.)

      7. ¿Cómo reaccionaron Pablo y Bernabé a la persecución?

      7 Ahora los gentiles empezaron a regocijarse, y todos los que estaban correctamente dispuestos para la vida eterna se hicieron creyentes. Sin embargo, mientras la palabra de Jehová se llevaba por todo el país, los judíos alborotaron a mujeres estimables (probablemente para que presionaran a sus esposos u otras personas) y a hombres prominentes para que persiguieran a Pablo y Bernabé y los echaran de sus límites. Pero aquello no detuvo a los misioneros. Ellos simplemente “sacudieron el polvo de los pies contra ellos” y se fueron a Iconio (la moderna Konya), una ciudad prominente en la provincia romana de Galacia. (Lucas 9:5; 10:11.) Pues bien, ¿qué hay de los discípulos que quedaron en Antioquía de Pisidia? Porque se les había hecho firmes en la fe, “continuaron llenos de gozo y de espíritu santo”. Esto nos ayuda a comprender que la oposición no tiene que impedir el progreso espiritual.

      Firmes en la fe a pesar de persecución

      8. ¿Qué sucedió como resultado de la próspera testificación en Iconio?

      8 Pablo y Bernabé mismos demostraron firmeza en la fe a pesar de ser perseguidos (14:1-7). En respuesta a su testificación en la sinagoga de Iconio, muchos judíos y griegos se hicieron creyentes. Cuando los judíos incrédulos incitaron a los gentiles contra los nuevos creyentes, aquellos dos trabajadores hablaron con denuedo por la autoridad de Dios, y él mostró su aprobación facultándolos para efectuar señales. Esto dividió a la chusma, pues algunos estaban por los judíos pero otros por los apóstoles (los enviados). Los apóstoles no eran cobardes, pero cuando se enteraron de que existía una conspiración para apedrearlos ejercieron prudencia y partieron de allí para predicar en Licaonia, una región de Asia Menor en el sur de Galacia. Si nosotros obramos con prudencia, muchas veces nosotros también pudiéramos permanecer activos en el ministerio a pesar de oposición. (Mateo 10:23.)

      9, 10. a) ¿Qué hicieron los habitantes de Listra al ver la curación de un cojo? b) Describa la reacción de Pablo y Bernabé en Listra.

      9 La ciudad licaónica de Listra fue la siguiente que recibió testimonio (14:8-18). Allí Pablo sanó a un hombre que había sido cojo de nacimiento. Las muchedumbres, que no se dieron cuenta de que el milagro había venido de Jehová, clamaron: “¡Los dioses se han hecho como humanos y han bajado a nosotros!”. Bernabé y Pablo no sabían lo que sucedía, porque las muchedumbres se habían expresado en la lengua licaónica. Porque Pablo llevaba la delantera al hablar, la gente creía que él era Hermes (el mensajero elocuente de los dioses) y que Bernabé era Zeus, el dios principal de los griegos.

      10 El sacerdote de Zeus hasta trajo toros y guirnaldas para ofrecer sacrificios a Pablo y Bernabé. Los visitantes prontamente explicaron —probablemente en el griego que se entendía comúnmente, o mediante un intérprete— que ellos también eran humanos que tenían sufrimientos y que declaraban las buenas nuevas para que la gente se volviera de “estas cosas vanas” (dioses sin vida, o ídolos) al Dios vivo. (1 Reyes 16:13; Salmo 115:3-9; 146:6.) Sí, antes Dios había permitido que las naciones (pero no los hebreos) fueran por sus propios caminos, aunque no se había dejado a sí mismo sin testimonio acerca de su existencia y bondad ‘al darles lluvias y épocas fructíferas, llenando por completo sus corazones de alimento y de alegría’. (Salmo 147:8.) A pesar de aquel razonamiento, Bernabé y Pablo apenas pudieron lograr que las muchedumbres desistieran de hacerles sacrificios. Sin embargo, los misioneros no aceptaron homenaje como dioses, ni usaron aquella autoridad para fundar el cristianismo en aquella zona. ¡Qué excelente ejemplo para nosotros, especialmente si nos inclinamos a anhelar adulación por lo que Jehová nos permite lograr en su servicio!

      11. ¿Qué podemos aprender de la declaración: “Tenemos que entrar en el reino de Dios a través de muchas tribulaciones”?

      11 De repente surgió horrible persecución (14:19-28). ¿Cómo sucedió esto? Las muchedumbres, persuadidas por los judíos de Antioquía de Pisidia y de Iconio, apedrearon a Pablo y lo arrastraron hasta fuera de la ciudad, creyendo que estaba muerto. (2 Corintios 11:24, 25.) Pero cuando los discípulos lo cercaron él se levantó y entró en Listra sin que lo pudieran reconocer, probablemente al amparo de la oscuridad. Al día siguiente él y Bernabé partieron para Derbe, donde una buena cantidad de personas se hicieron discípulos. Al volver a visitar a Listra, Iconio y Antioquía, los misioneros fortalecieron a los discípulos y los animaron a permanecer en la fe, y dijeron: “Tenemos que entrar en el reino de Dios a través de muchas tribulaciones”. Como cristianos, nosotros también esperamos pasar por tribulaciones y no debemos tratar de evadirlas mediante transigir en cuanto a nuestra fe. (2 Timoteo 3:12.) En aquel tiempo hubo nombramiento de ancianos para congregaciones a las cuales Pablo escribió su carta a los gálatas.

      12. Cuando Pablo terminó su primer viaje misional, ¿qué hicieron los dos misioneros?

      12 Mientras pasaban por Pisidia, Pablo y Bernabé hablaron la palabra en Perga, una ciudad prominente de Panfilia. Con el tiempo regresaron a Antioquía, Siria. Ahora que había terminado el primer viaje de Pablo, los dos misioneros informaron a la congregación “las muchas cosas que Dios había hecho mediante ellos, y que había abierto a las naciones la puerta a la fe”. Pasaron algún tiempo con los discípulos en Antioquía, y sin duda alguna aquello contribuyó mucho a hacer a estos firmes en la fe. Las visitas que hacen los superintendentes viajantes hoy día producen efectos similares en sentido espiritual.

      Se resuelve una cuestión importante

      13. Para que el cristianismo no se dividiera en una facción de hebreos y otra de no judíos, ¿qué se hizo necesario?

      13 La firmeza en la fe exigía unidad de pensamiento. (1 Corintios 1:10.) Para que el cristianismo no se dividiera en una facción de hebreos y otra de no judíos, fue necesario que el cuerpo gobernante decidiera si los gentiles que entraban a raudales en la organización de Dios tenían o no que guardar la Ley de Moisés y circuncidarse (15:1-5). Ciertos hombres de Judea ya habían viajado a Antioquía de Siria y se habían puesto a enseñar a los gentiles creyentes de aquel lugar que a menos que se circuncidaran no podían ser salvos. (Éxodo 12:48.) Por consiguiente, Pablo, Bernabé y otros fueron enviados a los apóstoles y ancianos de Jerusalén. Aun allí, creyentes que habían sido fariseos de mentalidad legalista insistieron en que los gentiles tenían que circuncidarse y observar la Ley.

      14. a) Aunque hubo disputas en la reunión que se celebró en Jerusalén, ¿qué buen ejemplo se dio? b) ¿Cuál fue la esencia del razonamiento de Pedro en aquella ocasión?

      14 Se celebró una reunión para determinar cuál era la voluntad de Dios (15:6-11). Es cierto que hubo disputas, pero no hubo contienda a medida que hombres de convicciones firmes se expresaron... ¡un excelente ejemplo para los ancianos hoy día! Entonces Pedro dijo: ‘Dios hizo la selección de que, por mi boca, gentiles [como Cornelio] oyeran las buenas nuevas y creyeran. Dio testimonio dándoles espíritu santo y no hizo ninguna distinción entre nosotros y ellos. [Hechos 10:44-47.] Entonces, ¿por qué están ustedes poniendo a Dios a prueba, imponiendo sobre el cuello de ellos un yugo [la obligación de guardar la Ley] que ni nosotros ni nuestros antepasados pudieron cargar? Nosotros [los judíos según la carne] confiamos en ser salvados mediante la bondad inmerecida del Señor Jesús tal como esas personas’. El que Dios hubiera aceptado a gentiles incircuncisos mostraba que la circuncisión y el guardar la Ley no se requerían para la salvación. (Gálatas 5:1.)

      15. ¿Qué puntos básicos indicó Santiago, y qué sugirió que se escribiera a los cristianos gentiles?

      15 La congregación quedó callada cuando Pedro concluyó, pero se oiría más (15:12-21). Bernabé y Pablo mencionaron las señales que Dios había ejecutado mediante ellos entre los gentiles. Entonces el presidente de la reunión, Santiago, el medio hermano de Jesús, dijo: ‘Symeón [el nombre hebreo de Pedro] ha contado cómo Dios dirigió su atención a las naciones para sacar de entre ellas un pueblo para su nombre’. Santiago indicó que la predicha reedificación de “la cabaña de David” (el restablecimiento de la gobernación real en el linaje de David) se estaba cumpliendo mediante el recogimiento de los discípulos de Jesús (los herederos del Reino) de entre los judíos y los gentiles. (Amós 9:11, 12, Septuaginta; Romanos 8:17.) Puesto que este era el propósito de Dios, los discípulos deberían aceptarlo. Santiago recomendó que se escribiera a los cristianos gentiles que se abstuvieran de: 1) cosas contaminadas por los ídolos, 2) fornicación, y 3) sangre y lo estrangulado. Estas prohibiciones estaban en los escritos de Moisés que se leían en las sinagogas todos los sábados. (Génesis 9:3, 4; 12:15-17; 35:2, 4.)

      16. ¿Sobre qué tres puntos da dirección hasta nuestros días la carta del cuerpo gobernante del primer siglo?

      16 Ahora el cuerpo gobernante envió una carta a los cristianos gentiles de Antioquía, Siria y Cilicia (15:22-35). El espíritu santo y los escritores de la carta pedían que ellos se abstuvieran de: cosas sacrificadas a ídolos; sangre (algo que algunas personas consumían regularmente); cosas estranguladas y no desangradas (para muchos paganos aquella carne era un manjar exquisito); y fornicación (griego: por·néi·a, que denota relaciones sexuales ilícitas fuera del matrimonio bíblico). Por aquella abstinencia prosperarían espiritualmente, como lo hacen los testigos de Jehová hoy día porque cumplen con “estas cosas necesarias”. Las palabras “¡Buena salud a ustedes!” equivalen a decir: “¡Que les vaya bien!”, y nadie debe llegar a la conclusión de que estos requisitos tenían que ver principalmente con medidas de salud. Cuando la carta se leyó en Antioquía, la congregación se regocijó por el estímulo que suministró. En aquella ocasión el pueblo de Dios en Antioquía también recibió firmeza en la fe por las palabras animadoras de Pablo, Silas, Bernabé y otros. ¡Busquemos nosotros también maneras de animar y edificar a nuestros compañeros de creencia!

      Empieza la segunda gira misional

      17. a) ¿Qué problema surgió cuando se propuso la segunda gira misional? b) ¿Cómo manejaron su disputa Pablo y Bernabé?

      17 Surgió un problema cuando se propuso un segundo viaje misional (15:36-41). Pablo sugirió que él y Bernabé volvieran a visitar a las congregaciones de Chipre y Asia Menor. Bernabé concordó, pero quiso llevar consigo a su primo Marcos. Pablo no estuvo de acuerdo con aquello, porque Marcos los había abandonado en Panfilia. Entonces ocurrió “un agudo estallido de cólera”. Pero ni Pablo ni Bernabé procuraron justificarse personalmente mediante tratar de implicar a otros ancianos ni al cuerpo gobernante en su asunto personal. ¡Qué excelente ejemplo!

      18. ¿Cuál fue el resultado de la separación de Pablo y Bernabé, y cómo podemos beneficiarnos de aquel incidente?

      18 No obstante, aquella disputa causó una separación. Bernabé tomó consigo a Marcos y partió para Chipre. Pablo, con Silas como acompañante, “pasó por Siria y Cilicia, fortaleciendo a las congregaciones”. Puede que los lazos familiares hayan influido en Bernabé, pero él debería haber reconocido el apostolado de Pablo y el hecho de que era “un vaso escogido”. (Hechos 9:15.) ¿Y qué hay de nosotros? ¡Aquel incidente debe inculcar en nosotros lo necesario que es reconocer la autoridad teocrática y cooperar de lleno con “el esclavo fiel y discreto”! (Mateo 24:45-47.)

      Progreso en paz

      19. ¿Qué ejemplo puso Timoteo para los jóvenes cristianos de hoy?

      19 No se permitió que aquella disputa afectara la paz de la congregación. El pueblo de Dios siguió haciéndose firme en la fe (16:1-5). Pablo y Silas fueron a Derbe y luego a Listra. Allí vivía Timoteo, hijo de la judía creyente Eunice y su esposo griego, quien era incrédulo. Timoteo era joven, pues hasta 12 o 15 años después todavía se le dijo: “Que nadie jamás menosprecie tu juventud”. (1 Timoteo 4:12.) Puesto que “los hermanos de Listra y de Iconio [a unos 29 kilómetros (18 millas) de distancia] daban buenos informes acerca de él”, Timoteo era bien conocido por su excelente ministerio y sus cualidades piadosas. Los jóvenes cristianos de hoy deben buscar la ayuda de Jehová para ganarse una reputación similar. Pablo circuncidó a Timoteo porque visitarían los hogares y las sinagogas de judíos que sabían que el padre de Timoteo era gentil, y el apóstol no quería que nada sirviera de obstáculo a hombres y mujeres judíos que necesitaban aprender acerca del Mesías. Sin violar principios bíblicos, los testigos de Jehová hoy también hacen lo que pueden para que las buenas nuevas sean atrayentes a gente de toda clase. (1 Corintios 9:19-23.)

      20. ¿Qué efecto tuvo el haber obrado en armonía con la carta del cuerpo gobernante del primer siglo, y cómo cree usted que debería afectarnos esto a nosotros?

      20 Con Timoteo como acompañante, Pablo y Silas entregaron a los discípulos, para que los observaran, los decretos del cuerpo gobernante. ¿Y cuál fue el resultado? Aparentemente refiriéndose a Siria, Cilicia y Galacia, Lucas escribió: “Las congregaciones continuaron haciéndose firmes en la fe y aumentando en número de día en día”. Sí, el haber obrado en armonía con la carta del cuerpo gobernante redundó en unidad y prosperidad espiritual. ¡Qué excelente ejemplo para nuestros tiempos críticos, cuando el pueblo de Jehová necesita permanecer unido y firme en la fe!

  • ¡La palabra de Jehová prevalece!
    La Atalaya 1990 | 15 de junio
    • ¡La palabra de Jehová prevalece!

      “De una manera poderosa, la palabra de Jehová siguió creciendo y prevaleciendo.” (HECHOS 19:20.)

      1. ¿Qué abarcará este estudio del libro bíblico de Hechos de Apóstoles?

      JEHOVÁ estaba abriendo una puerta que llevaba a actividad. El que particularmente encabezaría aquella obra sería Pablo, el “apóstol a las naciones”. (Romanos 11:13.) Sí, mientras continuamos nuestro estudio de Hechos de Apóstoles lo hallamos ocupado en emocionantes viajes misionales. (Hechos 16:6–19:41.)

      2. a) ¿Cómo manejó el apóstol Pablo la pluma de escritor bajo inspiración divina desde alrededor de 50 E.C. hasta 56 E.C.? b) ¿Qué sucedió a medida que Dios bendijo el ministerio de Pablo y el de otros?

      2 Pablo también manejó la pluma de escritor bajo inspiración divina. Desde cerca de 50 E.C. hasta 56 E.C., escribió 1 y 2 Tesalonicenses desde Corinto; Gálatas, desde aquella misma ciudad o desde Antioquía de Siria; 1 Corintios, desde Éfeso; 2 Corintios, desde Macedonia; y Romanos, desde Corinto. Y a medida que Dios bendijo el ministerio de Pablo y el de otros, “de una manera poderosa, la palabra de Jehová siguió creciendo y prevaleciendo”. (Hechos 19:20.)

      De Asia a Europa

      3. ¿Cómo dieron un buen ejemplo Pablo y sus acompañantes tocante a dirección mediante espíritu santo?

      3 Pablo y sus acompañantes dieron un ejemplo excelente de aceptar dirección mediante espíritu santo (Hch 16:6-10). Quizás por revelaciones audibles, sueños o visiones, el espíritu impidió que predicaran en el distrito de Asia y la provincia de Bitinia, aunque después se proclamaron allí las buenas nuevas. (Hechos 18:18-21; 1 Pedro 1:1, 2.) ¿Por qué impidió que se testificara allí el espíritu? Había pocos trabajadores, y el espíritu los estaba guiando a campos más productivos en Europa. Por eso hoy día, si está obstaculizado el camino a cierto territorio, los testigos de Jehová predican en otro lugar, seguros de que el espíritu de Dios los dirigirá a los que son mansos como ovejas.

      4. ¿Qué respuesta hubo a la visión de Pablo de un macedonio que suplicaba ayuda?

      4 Pablo y sus acompañantes “pasaron por alto” como campo misional a Misia, una región de Asia Menor. Sin embargo, en una visión Pablo vio a un macedonio que suplicaba ayuda. De modo que los misioneros fueron prontamente a Macedonia, una región de la península balcánica. Igualmente, por espíritu santo muchos Testigos reciben dirección para servir ahora donde hay gran necesidad de proclamadores del Reino.

      5. a) ¿Por qué se puede decir que la palabra de Jehová prevaleció en Filipos? b) ¿En qué sentido son como Lidia muchas Testigos de la actualidad?

      5 La palabra de Jehová prevaleció en Macedonia (16:11-15). Parece que en Filipos, colonia donde principalmente vivían ciudadanos romanos, había pocos judíos y no había sinagoga. Así que los hermanos fueron a “un lugar de oración” junto a un río fuera de la ciudad. Entre los presentes allí estaba Lidia, posiblemente una prosélita judía de Tiatira, ciudad de Asia Menor conocida por su industria del tinte. Ella vendía tinte púrpura o telas y ropa teñida con aquel tinte. Después que Lidia y su casa se bautizaron, ella extendió hospitalidad con tanta solicitud que Lucas escribió: “Sencillamente nos obligó a aceptar”. Agradecemos el tener hermanas como esas hoy día.

      Un carcelero se hace creyente

      6. ¿Cómo culminó la actividad de los demonios en que Pablo y Silas fueran encarcelados en Filipos?

      6 Satanás tiene que haberse enfurecido por lo que estaba sucediendo con relación a lo espiritual en Filipos, pues la actividad demoníaca que se efectuaba allí culminó en que Pablo y Silas fueran encarcelados (16:16-24). Por varios días los siguió una joven que tenía “un demonio de adivinación” (literalmente: “un espíritu de pitón”). El demonio tal vez se hacía pasar por el Apolo pítico, un dios que supuestamente había matado a una serpiente llamada Pitón. La joven producía mucha ganancia a sus amos practicando el arte de la predicción. ¡Quizás decía a los agricultores cuándo sembrar, a las solteras cuándo casarse y a los mineros dónde buscar oro! Ella seguía tras los hermanos y gritaba: “Estos hombres son esclavos del Dios Altísimo, los cuales les están publicando el camino de la salvación”. Puede que el demonio haya hecho que ella dijera aquello para que pareciera que las predicciones que ella hacía eran inspiradas por Dios, pero los demonios no tienen derecho a hacer proclamaciones sobre Jehová y lo que él provee para la salvación. Cuando Pablo se cansó de aquella molestia, expulsó al demonio en el nombre de Jesús. Los amos de la joven, al ver arruinado su negocio, arrastraron a la plaza de mercado a Pablo y Silas, y allí se les golpeó con varas. (2 Corintios 11:25.) Después los llevaron a la cárcel, donde fueron retenidos con los pies en el cepo. Este aparato se podía ajustar para separar por fuerza las piernas, lo cual causaba mucho dolor.

      7. ¿A quiénes y cómo trajo bendiciones el encarcelamiento de Pablo y Silas en Filipos?

      7 Aquel encarcelamiento trajo bendiciones al carcelero y su familia (16:25-40). Como a medianoche Pablo y Silas estaban orando y alabando a Dios con canción, seguros de que él estaba con ellos. (Salmo 42:8.) De repente, un terremoto abrió las puertas de par en par y soltó todas las cadenas cuando los grilletes se despegaron de las vigas o las paredes. El carcelero tenía miedo de sufrir la pena de muerte porque sus prisioneros hubieran escapado. Estaba a punto de cometer suicidio cuando Pablo clamó: “¡No te hagas ningún daño, porque todos estamos aquí!”. Después de sacar a Pablo y Silas, el carcelero les preguntó cómo podía salvarse. “Cree en el Señor Jesús”, contestaron. Al oír la palabra de Jehová “él y los suyos, fueron bautizados sin demora”. ¡Cuánto gozo causó eso!

      8. ¿Qué hicieron los magistrados civiles de Filipos, y qué pudiera lograrse si reconocían públicamente su error?

      8 Al día siguiente los magistrados civiles avisaron que se pusiera en libertad a Pablo y Silas. Pero Pablo dijo: ‘Nos fustigaron sin ser condenados, a nosotros que somos hombres romanos, y nos echaron en la prisión. ¿Ahora nos echan fuera secretamente? Que vengan ellos y nos saquen’. Si los magistrados reconocían públicamente su error, aquello podría hacer que se retrajeran de golpear y encarcelar a otros cristianos. Puesto que no podían expulsar de la ciudad a ciudadanos romanos, los magistrados fueron y pidieron a los hermanos que se marcharan, pero ellos solo hicieron esto después de haber animado a sus compañeros de creencia. Un interés de ese tipo mueve ahora a los miembros del Cuerpo Gobernante y a otros representantes viajeros a visitar y animar al pueblo de Dios por toda la Tierra.

      La palabra de Jehová prevalece en Tesalónica y Berea

      9. ¿Qué método, que los testigos de Jehová todavía usan, empleó Pablo para ‘explicar y probar’ que el Mesías tenía que sufrir y levantarse de entre los muertos?

      9 Después la palabra de Dios prevaleció en Tesalónica, capital y puerto principal de Macedonia (17:1-9). Allí Pablo razonó con los judíos, “explicando y probando” que el Mesías tenía que sufrir y levantarse de entre los muertos. (Pablo lo hizo comparando las profecías con los sucesos que las cumplían, como lo hacen los testigos de Jehová.) Así, algunos judíos, muchos prosélitos y otras personas se hicieron creyentes. Cuando algunos judíos celosos formaron una chusma, pero no pudieron hallar a Pablo y a Silas, llevaron a Jasón y a otros hermanos ante los gobernantes de la ciudad y los acusaron de sedición, una acusación falsa que todavía algunos lanzan contra el pueblo de Jehová. No obstante, los hermanos fueron puestos en libertad después de dar “suficiente fianza”.

      10. ¿En qué sentido ‘examinaron con cuidado’ las Escrituras los judíos de Berea?

      10 Luego Pablo y Silas fueron a la ciudad de Berea (17:10-15). Allí los judíos ‘examinaron con cuidado’ las Escrituras, algo que los testigos de Jehová animan a la gente a hacer hoy. Aquellos bereanos no dudaron lo que Pablo dijo, sino que investigaron para obtener prueba de que Jesús era el Mesías. ¿Con qué resultado? Muchos judíos y algunos griegos (quizás prosélitos) se hicieron creyentes. Cuando los judíos de Tesalónica agitaron a la gente, los hermanos escoltaron a Pablo hasta la costa, donde quizás algunos de su grupo abordaron un barco hacia el Pireo (griego: Peiraieus o Piréas), ciudad portuaria de Atenas.

      La palabra de Jehová prevalece en Atenas

      11. a) ¿Cómo testificó Pablo denodadamente en Atenas, pero quiénes entraron en una polémica con él? b) ¿Qué insinuaron algunos cuando tildaron a Pablo de “charlatán”?

      11 Se dio un testimonio denodado en Atenas (17:16-21). Debido a las palabras de Pablo acerca de Jesús y la resurrección, unos filósofos entraron en una polémica con él. Algunos eran epicúreos, personas que daban mucha importancia al placer. Otros eran estoicos, y recalcaban la autodisciplina. ‘¿Qué quisiera decir este charlatán?’, preguntaron algunos. La palabra “charlatán” (literalmente: “recogedor de semillas”) daba a entender que Pablo era como un pájaro que recogía semillas, y que repartía pequeñas porciones de conocimiento, pero que no tenía sabiduría. Otros dijeron: “Parece que es publicador de deidades extranjeras”. Esto era grave, pues Sócrates había perdido la vida por una acusación como aquella. Pronto Pablo fue llevado al Areópago (la colina de Marte), que puede que haya sido donde el tribunal supremo se reunía al aire libre cerca de la Acrópolis.

      12. a) ¿Qué aspectos de la buena oratoria se manifiestan en el discurso de Pablo en el Areópago? b) ¿Qué observaciones respecto a Dios hizo Pablo, y qué resultado tuvieron?

      12 Las palabras de Pablo en el Areópago fueron un ejemplo excelente de un discurso con introducción eficaz, desarrollo lógico y argumento convincente... como se enseña en la Escuela del Ministerio Teocrático de los testigos de Jehová (17:22-34). Pablo dijo que los atenienses eran más religiosos que otras personas. ¡Pues hasta tenían un altar “A un Dios Desconocido”, quizás para evitar pasar por alto a alguna deidad! Pablo habló del Creador que “hizo de un solo hombre toda nación de hombres” y “decretó los tiempos señalados y los límites fijos de la morada de los hombres”, tal como cuándo desarraigar a los cananeos. (Génesis 15:13-21; Daniel 2:21; 7:12.) Es posible hallar a este Dios, “porque también somos linaje de él”, dijo Pablo, aludiendo a la creación del hombre por Jehová y citando a los poetas griegos Arato y Cleantes. Siendo linaje de Dios, no deberíamos pensar que el Creador, quien es perfecto, sea como algún ídolo hecho por el hombre imperfecto. Hubo un tiempo en que Dios había pasado por alto aquella ignorancia, pero ahora decía a la humanidad que se arrepintiera, porque había fijado un día para juzgar a la gente mediante Aquel a quien había nombrado. Puesto que Pablo había estado ‘declarando las buenas nuevas de Jesús’, su auditorio sabía que él quería decir que Cristo sería ese Juez. (Hechos 17:18; Juan 5:22, 30.) Lo que dijo sobre el arrepentimiento molestó a los epicúreos, y los filósofos griegos podían aceptar comentarios acerca de la inmortalidad, pero no sobre la muerte y la resurrección. Parece que, como muchos de hoy día que menosprecian las buenas nuevas, algunos dijeron: ‘Te oiremos en otra ocasión’. Pero el juez Dionisio y otros se hicieron creyentes.

      La palabra de Dios prevalece en Corinto

      13. ¿Cómo se ganaba el sustento Pablo mientras efectuaba su ministerio, y qué paralelo de eso hallamos hoy?

      13 Pablo pasó a Corinto, capital de la provincia de Acaya (18:1-11). Allí halló a Áquila y Priscila, que habían llegado a aquella ciudad cuando Claudio César ordenó que los judíos que no fueran ciudadanos romanos salieran de Roma. Para ganarse el sustento mientras efectuaba su ministerio, Pablo hacía tiendas de campaña con aquella pareja cristiana. (1 Corintios 16:19; 2 Corintios 11:9.) El cortar y coser tela de duro pelo de cabra era una labor ardua. De igual manera, los testigos de Jehová consiguen sus necesidades materiales mediante trabajo seglar, pero su vocación es el ministerio.

      14. a) ¿Qué hizo Pablo al encararse con la oposición continua de los judíos de Corinto? b) ¿Cómo se le confirmó a Pablo que debía quedarse en Corinto, pero cómo recibe dirección hoy día el pueblo de Jehová?

      14 Los judíos de Corinto siguieron expresándose injuriosamente mientras Pablo proclamaba que Jesús era el Mesías. Por eso, él se sacudió las prendas de vestir para indicar que desistía de su responsabilidad para con ellos, y empezó a celebrar reuniones en la casa de Ticio Justo, quien probablemente era romano. Muchos (entre ellos Crispo, ex presidente de la sinagoga, y su casa) llegaron a ser creyentes bautizados. Si el antagonismo judío hacía que Pablo se preguntara si debía quedarse en Corinto o no, la duda desapareció cuando el Señor le dijo en una visión: ‘No temas. Sigue hablando, porque yo estoy contigo y nadie te hará daño. Tengo mucha gente en esta ciudad’. Por eso Pablo siguió enseñando la palabra de Dios allí por un total de un año y seis meses. Aunque ahora el pueblo de Jehová no recibe visiones, tanto la oración como la dirección que recibe mediante espíritu santo lo ayudan a tomar decisiones igualmente sabias que tienen efecto en los intereses del Reino.

      15. ¿Qué sucedió cuando Pablo fue llevado ante el procónsul Galión?

      15 Los judíos llevaron a Pablo al procónsul Junio Galión (18:12-17). Insinuaron que Pablo estaba haciendo prosélitos ilegalmente... una acusación falsa que los clérigos griegos ahora hacen contra los testigos de Jehová. Galión se dio cuenta de que Pablo no era culpable de villanía y que a los judíos les importaba poco el bienestar de Roma y su ley, de modo que los echó. Cuando unos espectadores golpearon a Sóstenes, el nuevo presidente de la sinagoga, Galión no intervino, quizás porque pensaba que el que aparentemente había encabezado la chusma contra Pablo estaba recibiendo su merecido.

      16. ¿Por qué fue aceptable el que Pablo se hubiera hecho cortar al rape el pelo con relación a un voto?

      16 Pablo se embarcó desde el puerto egeo de Cencreas rumbo a Éfeso, ciudad de Asia Menor (18:18-22). Antes de aquel viaje, “se había hecho cortar al rape el pelo de la cabeza, porque tenía un voto”. No se dice si Pablo había hecho aquel voto antes de hacerse seguidor de Jesús ni si esto era el principio o el fin del período del voto. Los cristianos no están bajo la Ley, pero esta había provenido de Dios y era santa, y no había nada pecaminoso en cuanto a aquel voto. (Romanos 6:14; 7:6, 12; Gálatas 5:18.) En Éfeso, Pablo razonó con los judíos y les prometió que regresaría si aquello era la voluntad de Dios. (Cumplió con esta promesa más tarde.) Con su regreso a Antioquía de Siria terminó su segunda gira misional.

      La palabra de Jehová prevalece en Éfeso

      17. Respecto al bautismo, ¿qué instrucciones necesitaron Apolos y otros?

      17 Poco después Pablo emprendió su tercer viaje misional (c. 52-56 E.C.) (18:23–19:7). Mientras tanto, en Éfeso, Apolos enseñaba acerca de Jesús, pero solo sabía del bautismo de Juan en símbolo de arrepentimiento por los pecados cometidos contra el pacto de la Ley. Priscila y Áquila “le expusieron con mayor exactitud el camino de Dios”, y probablemente le explicaron que el bautizarse como Jesús incluía el que uno fuera sumergido en agua y que recibiera el espíritu santo derramado. Después del bautismo con espíritu santo en el Pentecostés de 33 E.C., todo el que se hubiera bautizado con el bautismo de Juan tenía que volver a bautizarse, esta vez en el nombre de Jesús. (Mateo 3:11, 16; Hechos 2:38.) Más tarde, en Éfeso, unos 12 judíos que se habían bautizado con el bautismo de Juan “se bautizaron en el nombre del Señor Jesús”, la única ocasión que se registra en las Escrituras en que creyentes se bautizaron nuevamente. Cuando Pablo les impuso las manos, recibieron el espíritu santo y dos indicaciones milagrosas de aceptación celestial: hablar en lenguas y profetizar.

      18. ¿Dónde testificó Pablo mientras estuvo en Éfeso, y qué resultado tuvo su testimonio?

      18 No hay duda de que Pablo se mantuvo ocupado en Éfeso, ciudad de unos 300.000 habitantes (19:8-10). El templo de la diosa Ártemis en aquella ciudad era una de las siete maravillas del mundo antiguo, y el teatro tenía cabida para 25.000 personas. En la sinagoga Pablo ‘usó persuasión’ presentando argumentos convincentes, pero se retiró cuando algunos se expresaron injuriosamente sobre el Camino o modo de vida basado en la fe en Cristo. Por dos años Pablo habló diariamente en la sala de conferencias de la escuela de Tirano, y “la palabra” se esparció por todo el distrito de Asia.

      19. ¿Qué sucedió en Éfeso que hizo que ‘la palabra de Jehová siguiera creciendo y prevaleciendo’ allí?

      19 Dios mostró que aprobaba la actividad de Pablo al hacerle posible ejecutar curaciones y expulsar demonios (19:11-20). Pero los siete hijos del sacerdote principal Esceva no pudieron expulsar a un demonio usando el nombre de Jesús porque no representaban a Dios ni a Cristo. ¡Hasta fueron heridos por el endemoniado! Esto infundió temor en la gente, y “el nombre del Señor Jesús siguió siendo engrandecido”. Los que se hicieron creyentes confesaron sus prácticas de ocultismo y quemaron públicamente sus libros, que probablemente contenían conjuros y fórmulas mágicas. “Así —escribió Lucas—, de una manera poderosa, la palabra de Jehová siguió creciendo y prevaleciendo.” Hoy también los siervos de Dios ayudan a la gente a librarse del demonismo. (Deuteronomio 18:10-12.)

      La intolerancia religiosa no tiene éxito

      20. ¿Por qué fomentaron un disturbio los plateros de Éfeso, y cómo terminó?

      20 Los testigos de Jehová han afrontado muchas veces chusmas encolerizadas, como lo hicieron los cristianos de Éfeso (19:21-41). A medida que crecía la cantidad de creyentes, Demetrio y otros plateros perdían dinero porque menos personas compraban sus templetes de plata de Ártemis, diosa de la fertilidad representada con muchos pechos. Una chusma, incitada por Demetrio, llevó al teatro a Gayo y a Aristarco, acompañantes de Pablo, pero los discípulos no dejaron que Pablo entrara. Hasta algunos comisionados de fiestas y juegos le suplicaron que no se arriesgara. Por unas dos horas la chusma estuvo gritando: “¡Grande es Ártemis de los efesios!”. Finalmente el registrador de la ciudad (que encabezaba el gobierno municipal) dijo que los artífices podían presentar sus cargos a un procónsul, quien estaba autorizado para emitir fallos judiciales, o que su caso pudiera decidirse en “una asamblea formal” de ciudadanos. De otro modo, Roma podía acusar de amotinarse a los que componían aquella asamblea informal. Sin más que decir, despidió a la gente.

      21. ¿De qué manera bendijo Dios la obra de Pablo, y cómo bendice la obra de los testigos de Jehová hoy?

      21 Dios ayudó a Pablo a encararse con diversas pruebas y bendijo sus esfuerzos por ayudar a la gente a rechazar el error religioso y abrazar la verdad. (Compárese con Jeremías 1:9, 10.) ¡Qué agradecidos estamos de que nuestro Padre celestial bendice de igual manera nuestra obra! Por consiguiente, ahora, como en el primer siglo, ‘la palabra de Jehová está creciendo y prevaleciendo’.

  • ¡Proclamen con denuedo el Reino de Jehová!
    La Atalaya 1990 | 15 de junio
    • ¡Proclamen con denuedo el Reino de Jehová!

      “Recibía amablemente a todos los que venían a él, predicándoles el reino de Dios.” (HECHOS 28:30, 31.)

      1, 2. ¿Qué pruebas de apoyo divino tuvo el apóstol Pablo, y qué ejemplo dio?

      JEHOVÁ siempre apoya a los proclamadores del Reino. ¡Cuán cierto fue eso en el caso del apóstol Pablo! Con el apoyo divino, él compareció ante gobernantes, aguantó ataques de chusmas y proclamó con denuedo el Reino de Jehová.

      2 Aun como prisionero en Roma, Pablo “recibía amablemente a todos los que venían a él, predicándoles el reino de Dios”. (Hechos 28:30, 31.) ¡Qué ejemplo excelente fue para los testigos de Jehová de hoy día! Podemos aprender mucho del ministerio de Pablo, del cual informa Lucas en los últimos capítulos del libro bíblico de Hechos (20:1–28:31).

      Edificó a compañeros de creencia

      3. ¿Qué sucedió en Troas, y qué paralelo se puede trazar entre aquello y nuestros días?

      3 Después de calmarse el disturbio en Éfeso, Pablo continuó su tercera gira misional (Hch 20:1-12). Sin embargo, cuando estaba a punto de embarcarse para Siria se enteró de que los judíos tramaban un complot contra él. Puesto que era posible que ellos hubieran planeado subir a bordo del mismo barco y matar a Pablo, el apóstol se fue por Macedonia. En Troas pasó una semana edificando a sus compañeros de creencia como lo hacen ahora los superintendentes viajantes entre los testigos de Jehová. La noche antes de su partida, Pablo prolongó su discurso hasta la medianoche. Parece que Eutico, sentado a la ventana, estaba agotado debido a las faenas del día. Sumido en sueño, cayó desde el tercer piso y murió, ¡pero Pablo le devolvió la vida! ¡Cuánto gozo debe haber causado aquello! Entonces piense en el gozo que habrá cuando muchos millones de personas sean resucitadas en el nuevo mundo venidero. (Juan 5:28, 29.)

      4. Respecto al ministerio, ¿qué enseñó Pablo a los ancianos efesios?

      4 En camino a Jerusalén, Pablo se reunió en Mileto con los ancianos de Éfeso (20:13-21). Les recordó que les había enseñado “de casa en casa” y que ‘había dado testimonio cabalmente, tanto a judíos como a griegos, acerca del arrepentimiento para con Dios y de la fe en nuestro Señor Jesús’. Los que al fin habían llegado a ser ancianos se habían arrepentido, y tenían fe. El apóstol también los había estado adiestrando para que proclamaran con denuedo el Reino a incrédulos en un ministerio de casa en casa como el que efectúan los testigos de Jehová hoy día.

      5. a) ¿Cómo fue Pablo ejemplar respecto a aceptar la dirección del espíritu santo? b) ¿Por qué necesitaban los ancianos consejo para ‘prestar atención a todo el rebaño’?

      5 Pablo fue ejemplar en aceptar dirección mediante el espíritu santo de Dios (20:22-30). “Atado en el espíritu”, o sintiéndose obligado a seguir la guía del espíritu, el apóstol iría a Jerusalén aunque allí le esperaban cadenas y tribulaciones. Apreciaba la vida, pero lo más importante para él era ser íntegro ante Dios, y eso debe ser lo más importante para nosotros. Pablo exhortó a los ancianos a ‘prestar atención a todo el rebaño, entre el cual el espíritu santo los había nombrado superintendentes’. Después de su “partida” (aparentemente al morir), ‘lobos opresivos no tratarían al rebaño con ternura’. Hombres de aquella índole se levantarían de entre los ancianos mismos, y discípulos poco discernidores aceptarían sus enseñanzas aviesas. (2 Tesalonicenses 2:6.)

      6. a) ¿Por qué podía Pablo con confianza encomendar los ancianos a Dios? b) ¿Cómo siguió Pablo el principio de Hechos 20:35?

      6 Los ancianos tenían que permanecer alerta en sentido espiritual para protegerse de la apostasía (20:31-38). El apóstol les había enseñado acerca de las Escrituras Hebreas y las enseñanzas de Jesús, las cuales tienen poder santificador que podría ayudarles a recibir el Reino celestial, “la herencia entre todos los santificados”. Por trabajar para su propio sustento y el de sus acompañantes, Pablo también animó a los ancianos a ser buenos trabajadores. (Hechos 18:1-3; 1 Tesalonicenses 2:9.) Si seguimos un derrotero similar a ese y ayudamos a otros a alcanzar la vida eterna, comprenderemos estas palabras de Jesús: “Hay más felicidad en dar que en recibir”. El sentido de esa declaración se halla en los Evangelios, pero el único que la cita es Pablo, quien tal vez la recibió verbalmente o por inspiración. Podemos disfrutar de gran felicidad si somos tan abnegados como lo fue Pablo. ¡Él había dado tanto de sí que su partida entristeció muchísimo a los ancianos efesios!

      Que se efectúe la voluntad de Jehová

      7. ¿Cómo fue Pablo ejemplar al someterse a la voluntad de Dios?

      7 Hacia el fin de su tercer viaje misional (c. 56 E.C.), Pablo dio un ejemplo excelente al someterse a la voluntad de Dios (21:1-14). En Cesarea, él y sus acompañantes se alojaron con Felipe, cuyas cuatro hijas vírgenes “profetizaban” mediante predecir sucesos por espíritu santo. Allí el profeta cristiano Ágabo se ató las manos y los pies con el cinturón de Pablo, y el espíritu lo impelió a decir que los judíos atarían al dueño de aquel cinturón en Jerusalén y lo entregarían en manos de gentiles. “Estoy listo no solo para ser atado, sino también para morir en Jerusalén por el nombre del Señor Jesús”, dijo Pablo. Los discípulos asintieron diciendo: “Efectúese la voluntad de Jehová”.

      8. Si a veces se nos hace difícil aceptar buen consejo, ¿qué pudiéramos recordar?

      8 Pablo relató a los ancianos de Jerusalén lo que había hecho Dios entre los gentiles mediante su ministerio (21:15-26). Si alguna vez se nos hace difícil aceptar buen consejo, podemos recordar cómo lo aceptó Pablo. Para probar que no estaba enseñando a los judíos en tierras de gentiles “una apostasía contra Moisés”, prestó atención al consejo de los ancianos respecto a someterse a limpieza ceremonial y pagar sus propios gastos y los de otros cuatro hombres. Aunque la muerte de Jesús quitó del camino la Ley, Pablo no hizo nada malo al cumplir con los rasgos de esta relacionados con los votos. (Romanos 7:12-14.)

      Atacado por chusmas, pero impávido

      9. Sobre la violencia de chusmas, ¿qué paralelo hay entre las experiencias de Pablo y las de los testigos de Jehová hoy día?

      9 A menudo los testigos de Jehová se han mantenido íntegros a Dios a pesar de la violencia de chusmas. (Por ejemplo, véase el Anuario de los testigos de Jehová para 1975, páginas 180-191.) Así sucedió en el pasado, cuando los judíos de Asia Menor fomentaron ataques de chusmas contra Pablo (21:27-40). Cuando vieron a Trófimo el efesio con él, acusaron falsamente al apóstol de contaminar el templo mediante introducir a griegos en él. ¡Pablo estaba a punto de ser muerto cuando el tribuno romano Claudio Lisias y sus hombres aplacaron el disturbio! Tal como se había predicho (pero a causa de los judíos), Lisias mandó que se encadenara a Pablo. (Hechos 21:11.) El apóstol estaba a punto de ser encerrado en el cuartel de los soldados contiguo al patio del templo cuando Lisias se enteró de que Pablo no era un sedicioso, sino un judío al que se permitía entrar en la zona del templo. Pablo, después de recibir permiso para hablar, habló a la gente en hebreo.

      10. ¿Cómo recibieron el discurso de Pablo los judíos de Jerusalén, y por qué no se azotó al apóstol?

      10 Pablo dio un testimonio denodado (22:1-30). Se identificó como judío instruido por el muy estimado Gamaliel. El apóstol explicó que, yendo rumbo a Damasco para perseguir a los seguidores del Camino, había quedado ciego cuando vio al glorificado Jesucristo, pero que Ananías le había restaurado la vista. Más tarde el Señor había dicho a Pablo: “Ponte en camino, porque yo te enviaré a naciones lejanas”. Aquellas palabras cayeron como una chispa en un bosque. La muchedumbre, a la vez que decía a gritos que Pablo nunca debió haber vivido, arrojaba sus prendas de vestir exteriores y lanzaba polvo al aire llevada por la cólera. De modo que Lisias mandó que se llevara a Pablo al cuartel de los soldados para ser sometido a interrogatorio mediante azotes, con el fin de saber por qué estaban contra él los judíos. Los azotes (que se infligían con un instrumento de tiras de cuero con nudos o con pedazos de metal o hueso adheridos) se evitaron cuando Pablo preguntó: ‘¿Es lícito azotar a un romano a quien no se ha condenado?’. Al enterarse de que Pablo era ciudadano romano, Lisias se atemorizó y lo llevó ante el Sanedrín para saber por qué lo acusaban los judíos.

      11. ¿En qué sentido era fariseo Pablo?

      11 Cuando Pablo empezó su defensa ante el Sanedrín diciendo que se había “portado delante de Dios con conciencia perfectamente limpia”, el sumo sacerdote Ananías ordenó que lo golpearan (23:1-10). Pablo dijo: “Dios te va a herir a ti, pared blanqueada”. ‘¿Al sumo sacerdote injurias?’, preguntaron algunos. Puede que Pablo no haya reconocido a Ananías debido a que no podía ver bien. Pero al notar que el consejo estaba compuesto de fariseos y saduceos, Pablo dijo: ‘Soy fariseo y se me está juzgando respecto a la esperanza de la resurrección’. Esto dividió al Sanedrín, pues los fariseos creían en la resurrección, pero los saduceos no. Se suscitó tanta disensión que Lisias tuvo que rescatar al apóstol.

      12. ¿Cómo escapó Pablo de un complot contra su vida en Jerusalén?

      12 Luego Pablo escapó de un complot contra su vida (23:11-35). Cuarenta judíos habían jurado que ni comerían ni beberían hasta que lo hubieran matado. El sobrino de Pablo dio aviso de esto a él y a Lisias. Bajo protección militar, el apóstol fue llevado al gobernador Antonio Félix en Cesarea, la capital administrativa romana de Judea. Félix, después de prometer a Pablo una audiencia, lo tuvo bajo guardia en el palacio pretoriano de Herodes el Grande, el cuartel general del gobernador.

      Denuedo ante gobernantes

      13. ¿Acerca de qué testificó Pablo a Félix, y qué efecto tuvo esto en él?

      13 Pronto el apóstol se defendió de las falsas acusaciones y testificó con denuedo a Félix (24:1-27). Ante sus acusadores judíos, Pablo mostró que no había instigado una chusma. Dijo que creía las cosas expuestas en la Ley y los Profetas, y que abrigaba esperanzas de una “resurrección así de justos como de injustos”. Pablo había ido a Jerusalén con “dádivas de misericordia” (contribuciones para los seguidores de Jesús que tal vez habían empobrecido debido a la persecución) y se había limpiado ceremonialmente. Aunque Félix pospuso el fallo, Pablo después les predicó a él y a Drusila su esposa (hija de Herodes Agripa I) acerca de Cristo, la justicia, el autodominio y el juicio venidero. Félix, atemorizado por lo que escuchó, despidió a Pablo. Con todo, más tarde envió a llamar muchas veces al apóstol, pues esperaba en vano un soborno. Félix sabía que Pablo era inocente, pero lo dejó en cadenas con la esperanza de ganarse el favor de los judíos. Dos años después, Félix tuvo por sucesor a Porcio Festo.

      14. ¿De qué disposición jurídica se valió Pablo cuando compareció ante Festo, y qué paralelo ve usted en cuanto a esto?

      14 Pablo también se defendió denodadamente ante Festo (25:1-12). Si el apóstol merecía la muerte, no rogaría que se le eximiera, pero nadie podía entregarlo a los judíos como favor. “¡Apelo a César!”, dijo Pablo, valiéndose del derecho del ciudadano romano de ser juzgado en Roma (en aquel tiempo ante Nerón). Una vez concedida la apelación, Pablo ‘daría testimonio en Roma’, como se había predicho. (Hechos 23:11.) También los testigos de Jehová se valen de las disposiciones jurídicas que les permiten “defender y establecer legalmente las buenas nuevas”. (Filipenses 1:7.)

      15. a) ¿Qué profecía se cumplió cuando Pablo compareció ante el rey Agripa y César? b) ¿Cómo ‘dio coces contra los aguijones Saulo’?

      15 El rey Herodes Agripa II, del norte de Judea, y Berenice su hermana (con quien él llevaba una relación incestuosa) oyeron a Pablo mientras visitaban a Festo en Cesarea (25:13–26:23). Al testificar a Agripa y a César, Pablo cumplió la profecía de que llevaría el nombre del Señor a reyes. (Hechos 9:15.) Después de contarle a Agripa lo que había pasado en el camino a Damasco, Pablo mencionó que Jesús había dicho: “Te resulta duro seguir dando coces contra los aguijones”. Como un toro terco que se lastimaba al resistir las punzadas de un aguijón, Saulo se había lastimado al luchar contra los seguidores de Jesús, que tenían el apoyo de Dios.

      16. ¿Cómo reaccionaron Festo y Agripa al testimonio de Pablo?

      16 ¿Cómo reaccionaron Festo y Agripa (26:24-32)? Sin poder entender la resurrección, y asombrado ante la convicción de Pablo, Festo dijo: “¡El gran saber te está impulsando a la locura!”. De igual manera, hoy algunas personas acusan a los testigos de Jehová de estar locos, aunque ellos en realidad son como Pablo al ‘expresar dichos de verdad y de buen juicio’. “En poco tiempo me persuadirías a hacerme cristiano”, dijo Agripa, quien concluyó la audiencia, pero reconoció que Pablo podría haber sido puesto en libertad si no hubiera apelado a César.

      Peligros en el mar

      17. ¿Cómo describiría usted los peligros que se presentaron en el mar durante el viaje de Pablo a Roma?

      17 El viaje a Roma expuso a Pablo a “peligros en el mar”. (2 Corintios 11:24-27.) Un oficial del ejército llamado Julio estuvo a cargo de los prisioneros que navegaban de Cesarea a Roma (27:1-26). Cuando su nave arribó a Sidón, a Pablo se le permitió visitar a otros creyentes, quienes lo refrescaron espiritualmente. (Compárese con 3 Juan 14.) En Mira, Asia Menor, Julio hizo que los prisioneros subieran a bordo de una embarcación en la que se transportaban granos con destino a Italia. A pesar de fuertes vientos en contra, llegaron a la bahía de Bellos Puertos, cerca de la ciudad cretense de Lasea. Después de partir de allí con rumbo a Fenice, un viento tempestuoso que venía del nordeste se apoderó de la nave. Los marineros, temerosos de encallar en la Sirte (arenas movedizas) cerca de la costa de África del norte, “arriaron los aparejos”, quizás las velas y los mástiles. Se habían pasado cuerdas alrededor del casco para que las partes de la nave no se separaran. Todavía sacudidos por la tempestad al día siguiente, alijaron la nave arrojando carga por la borda. Al tercer día arrojaron las jarcias (velas o aparejo de repuesto). Cuando parecía desvanecerse la esperanza, un ángel se le apareció a Pablo y le dijo que no temiera, porque estaría de pie ante César. ¡Qué alivio hubo cuando el apóstol dijo que todos los viajeros serían echados en cierta isla!

      18. ¿Qué les pasó finalmente a Pablo y sus compañeros de viaje?

      18 Los viajeros sobrevivieron (27:27-44). A la medianoche del día 14 los marineros percibieron que había tierra cerca. Los sondeos confirmaron esto, y se echaron varias anclas para evitar algún desastre sobre los escollos. A instancias de Pablo, los 276 hombres tomaron alimento. Luego la nave fue alijada echando el trigo por la borda. Al amanecer los marineros cortaron las cuerdas de las anclas, desataron los remos e izaron el trinquete al viento. La embarcación descansó sobre un bajío, y la popa empezó a hacerse pedazos. Pero todos llegaron a tierra.

      19. ¿Qué le ocurrió a Pablo en Malta, y qué hizo él por otros allí?

      19 Empapados y cansados, los náufragos se hallaron en Malta, donde los isleños les mostraron “extraordinaria bondad humana” (28:1-16). Sin embargo, mientras Pablo ponía leña menuda en un fuego, el calor reanimó a una víbora letárgica que se le prendió en la mano. (Aunque ahora no hay serpientes venenosas en Malta, aquella era una “criatura venenosa”.) Los malteses creyeron que Pablo era un asesino a quien “la justicia vindicativa” no le permitiría vivir, pero cuando él no cayó muerto ni se hinchó de inflamación, dijeron que era un dios. Más tarde Pablo curó a muchos, entre ellos al padre de Publio, el oficial principal de Malta. Tres meses después, Pablo, Lucas y Aristarco partieron en una nave que llevaba el mascarón de proa “Hijos de Zeus” (Cástor y Pólux, deidades gemelas que supuestamente favorecían a los marineros). Al desembarcar en Puteoli, Julio siguió adelante con su custodia. Pablo dio gracias a Dios y cobró ánimo cuando cristianos de la capital romana se encontraron con ellos en el Mercado de Apio y las Tres Tabernas, junto a la Vía Apia. Finalmente, en Roma a Pablo se le permitió alojarse a solas, aunque un soldado lo guardaba.

      !Sigan proclamando el Reino de Jehová!

      20. ¿En qué actividad se mantuvo ocupado Pablo en su domicilio en Roma?

      20 En su domicilio en Roma, Pablo proclamó con denuedo el Reino de Jehová (28:17-31). Dijo a judíos prominentes: “Porque a causa de la esperanza de Israel estoy rodeado de esta cadena”. Aquella esperanza requería aceptar al Mesías, algo por lo cual nosotros también tenemos que estar dispuestos a sufrir. (Filipenses 1:29.) Aunque la mayoría de aquellos judíos no creyeron, muchos gentiles y un resto judío tuvieron la condición de corazón correcta. (Isaías 6:9, 10.) Por dos años (c. 59-61 E.C.) Pablo recibió a todos los que venían a él, “predicándoles el reino de Dios y enseñando las cosas respecto al Señor Jesucristo con la mayor franqueza de expresión, sin estorbo”.

      21. Hasta el fin de su vida terrestre, ¿qué ejemplo dio Pablo?

      21 Evidentemente Nerón declaró inocente a Pablo y lo puso en libertad. Luego el apóstol reanudó su obra en compañía de Timoteo y Tito. No obstante, fue encarcelado de nuevo en Roma (c. 65 E.C.) y probablemente murió como mártir por mandato de Nerón. (2 Timoteo 4:6-8.) Pero hasta el fin Pablo dio un ejemplo excelente como valeroso proclamador del Reino. Con un espíritu similar en estos últimos días, ¡que todos los que están dedicados a Dios proclamen con denuedo el Reino de Jehová!

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