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Capacitados para ser ministrosLa Atalaya 1956 | 15 de marzo
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12. Igual a Pablo, ¿a quién tienen que conocer todos los ministros del nuevo pacto, y por qué?
12 El nuevo pacto del cual Pablo fué un siervo declaraba: “Todos ellos me conocerán, desde el menor de ellos hasta el mayor de ellos, dice Jehová,” y en Hebreos 8:11 el apóstol Pablo citó esas mismas palabras. (Jer. 31:34) Pablo conocía a Jehová Dios y por lo tanto fué un testigo de Jehová. Todos los ministros del nuevo pacto tienen que conocer a Jehová, de otra manera no podrían estar adecuadamente capacitados para estar en el ministerio de su nuevo pacto. Tienen que ser testigos de lo que conocen, por consiguiente tienen que ser testigos de Jehová. Teniendo eso presente Pablo dijo a sus compañeros en el ministerio: “Les ruego, por lo tanto, háganse imitadores de mí.” (1 Cor. 4:16, NM) En imitación de Pablo todos los ministros del nuevo pacto tienen que ser testigos de Aquel a quien ellos conocen como Dios de ese pacto, Jehová, el Perdonador de sus pecados. Como Dios mismo dijo a su pueblo típico en el pacto de la ley: “Vosotros sois mis testigos, dice Jehová, y mi siervo a quien he escogido; para que me conozcáis y me creáis, y entendáis que yo [soy] ÉL.” Estas palabras de ordenación para que sean testigos aplican ahora con más vigor a la clase siervo de Dios que está en el nuevo pacto y de la cual él dijo proféticamente: “He formado a este pueblo para mí mismo: ellos publicarán mi alabanza.” (Isa. 43:10, 21, Darby) Obteniendo la luz de gloria procedente de Jehová conforme se refleja en el rostro de Jesucristo que ha aparecido al género humano, los ministros de hoy del nuevo pacto tienen que, semejante a espejos, reflejar esa luz del conocimiento de la gloria de Dios a otros para que él sea alabado y ellos sean iluminados. En esta época oscura grande es la necesidad de hacer esto.
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Ordenación de los ministros capacitadosLa Atalaya 1956 | 15 de marzo
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Ordenación de los ministros capacitados
1. ¿Cómo se tipificó en el caso de Jeremías la ordenación de los ministros capacitados de Jehová?
PABLO dice: “El estar nosotros adecuadamente capacitados proviene de Dios, quien de hecho nos ha capacitado adecuadamente para ser ministros de un pacto nuevo.” (2 Cor. 3:5, 6, NM) Eso significa que tiene que ser Dios quien ordene o nombre a una persona para que sea ministro suyo. Este hecho se tipificó en el caso de Jeremías, que fué un ministro del viejo pacto de la ley de Israel. Puesto que era de la familia sacerdotal de Aarón, Jeremías estaba automáticamente en línea para ser un sacerdote en el templo en Jerusalén. Pero para ser más que sacerdote, a saber, un profeta que profetizaría concerniente a todas las naciones de la tierra, Jeremías necesitaba algo más que haber nacido como hijo de Helcías el sacerdote. Ningún hombre podía hacerlo tal profeta. Dios, quien inspira la profecía, era por lo tanto el que había de ordenarlo o nombrarlo como profeta, el que había de capacitarlo adecuadamente. Jeremías indica su ordenación o nombramiento de parte de Dios, cuando dice: “La palabra de Jehová llegó hasta mí, diciendo: Antes de formarte en el vientre te conocí; y antes que salieras del seno te santifiqué, te nombré [ordené, VA] profeta a las naciones. . . . tú irás a quienquiera que te envíe, y todo lo que te mande tú
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