pero sin muchas esperanzas de tener un estudio. Al llegar la semana siguiente la destilería y todos los ‘santos’ habían desaparecido. Desde el primer momento mostraron su deseo de conformarse a las normas de Dios. Ahora dos de la familia han simbolizado su dedicación para hacer la voluntad de Jehová, y otros esperan hacerlo pronto.

“Un siervo de circuito relata que estaba trabajando un territorio distante con un grupo de doce publicadores. Estaban visitando los hogares en el valle de un río y tuvieron que vadear el río treinta y siete veces en su trabajo del día. En la última casa en el territorio hallaron a un grupo de evangélicos celebrando una reunión. Cuando esta gente se enteró de que sus visitantes eran ministros cristianos, los invitaron a hablarles sobre la Biblia. Puesto que no había lugar para todos en la casa, se transportaron los bancos afuera para una reunión al aire libre. El siervo de circuito dio un discurso de noventa minutos sobre las doctrinas bíblicas básicas, tales como la trinidad, la inmortalidad, el infierno y cómo identificar a los verdaderos ministros de Jehová hoy día. Al fin del discurso presentó La Atalaya, y cada uno de los presentes obtuvo un ejemplar. Luego se condujo un estudio de una hora con La Atalaya. El ‘pastor,’ el ‘diácono’ y otro miembro del grupo obtuvieron suscripciones y siete obtuvieron ejemplares del libro De paraíso perdido a paraíso recobrado. Se hicieron arreglos para un estudio semanal de La Atalaya, asignándose a dos publicadores para que regresen y ayuden al grupo.

“La mayoría de las escuelas de Costa Rica continúa excluyendo a los hijos fieles de los testigos de Jehová. Al comienzo del nuevo año escolar la mayoría de las escuelas requiere que el estudiante o sus padres firmen un formulario indicando que el estudiante saludará la bandera y cantará el himno nacional. Puesto que los testigos de Jehová no dan su adoración a ningún hombre ni objeto hecho por hombres, no se les permitió entrar en las escuelas. Sin embargo algunas escuelas reconocieron su derecho de adorar al Creador, Jehová Dios, y les permitieron matricularse. En otros lugares los Testigos mismos condujeron clases y enseñaron a sus hijos.”

CUBA

Número máximo de Población: 6,466,000

publicadores: 14,011 Proporción: 1 a 461

Los publicadores del Reino fueron grandemente bendecidos porque se apegaron a su asignación dada por Dios de predicar las buenas nuevas en Cuba durante el año pasado. Se requirió verdadera fe en Jehová Dios y valor, y un texto como éste es sumamente confortador en tiempos de angustia: “Es necesario que pongamos más que la acostumbrada atención a las cosas que nosotros escuchamos, para que nunca nos deslicemos.” (Heb. 2:1) Parece que en Cuba los hermanos están poniendo atención, y ciertamente estuvieron ansiosos de congregarse en una grandiosa asamblea en La Habana, Cuba. El siervo de sucursal allí nos da un informe y algunas experiencias.

“Al aproximarse la visita del hermano Henschel en febrero para servir a la sucursal y estar presente en nuestra asamblea nacional, parecía imposible obtener un permiso de inmigración para su entrada. Sin embargo, lo ‘imposible’ sucedió y se le dio una visa especial de cortesía, lo que resultó en mucha fuerza agregada para el pueblo de Jehová aquí y muchos buenos consejos. ¡Y qué asamblea! Se nos concedió un descuento de 50 por ciento en las tarifas de ida y vuelta en los ómnibus, trenes y barcos para el sitio de la asamblea en La Habana. Hasta entonces los números máximos de concurrencia a nuestras asambleas grandes eran de alrededor de los 5,500 el domingo. ‘¿Tendremos tantos?’ nos preguntábamos. También, en un estadio al aire libre, ¿llovería o sería demasiado caluroso o frío de noche? Cualquiera de estas condiciones podía presentarse. Más o menos una hora antes del discurso público se nubló el cielo—una sombra natural para el estadio íntegro, pero sin lluvia. Todos los asientos del estadio estaban colmados, todas las sillas alquiladas ante la plataforma adornada de flores estaban llenas y todavía más concurrentes empujaban. Al aproximarse a su fin la conferencia pública sobre el tema del amor, ¡se entregó al presidente una nota mostrando que la cuenta indicaba que había 16,600 personas presentes! ¡Más de tres veces cualquier cosa que Cuba presenciara anteriormente en sentido teocrático! ¡Qué alabanza a Jehová!

“Pronto, siguiendo a esta gozosa ocasión, que dio énfasis a la magna cosecha que se está realizando en este país, vino el Memorial. El año pasado, es decir, en el año de servicio de 1960, tuvimos más de 24,000 presentes en el Memorial. Ahora, ¿qué sería de 196l? ¿Produciría la intranquilidad de estar afuera por la noche una merma en la concurrencia de este año a esta fiesta de vindicación? ¡Qué sorpresa tan grata cuando la cuenta total mostró que más de 33,000 personas habían estado presentes en Cuba en el Memorial!

“Sí, este año ha sido señalado por acción rápida. En una congregación de Matanzas, el siervo de congregación, un precursor especial, estaba considerando una carta de la Sociedad sobre el servicio de precursor en la reunión de servicio de la noche. Un joven con quien estaba estudiando el libro Paraíso escuchaba. Después de la reunión de servicio el joven se acercó al siervo de congregación y le preguntó: ‘¿Puedo ser precursor?’ El siervo creyó que no había entendido lo que significaba el precursorado, de modo que le explicó sobre el bautismo, el estudio y la predicación durante largas horas. Entonces el joven preguntó: ‘¿Me puedo bautizar? Quiero ser precursor como Jesús. Jesús fue precursor.’ El día siguiente este joven salió en la obra de revistas. En la tercera casa le preguntó al siervo de congregación si podía tratar de colocar las revistas. ¡Éxito! Se fijó una meta de 120 para ese mes. Pronto será precursor.

“Los estudios bíblicos resultan en buena medicina en más de un sentido. Un precursor especial comenzó un estudio con un señor que padecía de una afección cardíaca. Podría caminar muy poco y siempre tomaba píldoras. Después de algunos meses de estudio quiso acompañar al precursor especial en la predicación. Durante una caminata de unos tres kilómetros tuvo que sentarse a descansar varias veces y tomar bastantes píldoras. El precursor estaba bajo la impresión de que era demasiado para él, pero este señor insistió en continuar, y hasta más lejos cada vez. Pronto estaba caminando sin descansar tanto y tomaba muy pocas píldoras, saliendo por la mañana y regresando por la tarde. Su familia, ansiosa por su vida, insistió en que viera a su médico de cabecera que le suministraba la medicina. El médico se asombró de su vigor y mejoría e insistió mucho en que continuara tomando ‘la misma medicina.’ Posteriormente, al examinar a su paciente y enterarse de su actividad de predicación, el médico le dijo: ‘Está completamente bien. Continúe predicando. Esto lo ha curado.’”

Peligro tradicional

“El seguir tradiciones imperfectas, inseguras, o corruptas, para evitar cometer errores en nuestro propio juicio, es solo cambiar un peligro por otro.”—Ricardo Whately, arzobispo de Dublín.

“Estoy bien seguro de que si uno deja pasar aunque sea un dedillo de la tradición, tendrá adentro el monstruo entero—cuernos y cola y todo.”—Tomás Arnold, educador del siglo diecinueve.