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  • Una “cosa repugnante” no trae la paz
    La Atalaya 1985 | 1 de octubre
    • Una “cosa repugnante” no trae la paz

      “Cuando vean a Jerusalén cercada de ejércitos acampados [...] entonces los que estén en Judea echen a huir a las montañas.” (LUCAS 21:20, 21.)

      1, 2. a) ¿Por qué nunca traerá la paz el hombre mediante organizaciones como las Naciones Unidas? b) ¿Cómo traerá Dios la paz a la Tierra?

      POR más que los hombres traten de traer paz y seguridad mediante instituciones como las Naciones Unidas, nunca lo lograrán. ¿Por qué? Porque la humanidad hoy día no está en paz con Dios, y la seguridad duradera solo se puede basar en que el hombre esté en paz con su Creador. (Salmo 46:1-9; 127:1; Isaías 11:9; 57:21.) ¿Cómo se puede resolver este problema? Felizmente, Jehová ya está encargándose del asunto. La Tierra finalmente tendrá paz y seguridad mediante el Reino de Dios por medio de su Hijo Jesús, en cuyo nacimiento los ángeles cantaron: “Gloria en las supremas alturas a Dios, y sobre la tierra paz entre los hombres de buena voluntad”. (Lucas 2:14; Salmo 72:7.)

      2 En el primer siglo, Jesús anunció el Reino de Dios y ofreció a las personas pacíficas la oportunidad de llegar a ser hijos de Dios y cogobernantes con él en dicho Reino. (Mateo 4:23; 5:9; Lucas 12:32.) Los sucesos que siguieron a esto fueron muy parecidos a los sucesos de nuestro propio siglo. El examinarlos nos enseñará mucho acerca del derrotero futuro de la organización humana para “paz y seguridad”, las Naciones Unidas.

      Los judíos escogen

      3. ¿Quién estaba tratando de mantener la paz y seguridad internacional en los días de Jesús, y por qué no podía esto tener éxito por completo?

      3 En los días de Jesús, el Imperio Romano regía gran parte de la Tierra y tenía sus propias ideas en cuanto a la paz y la seguridad. Mediante sus legiones, había puesto en vigor la Pax Romana (paz romana) por todo el mundo que se conocía entonces. Pero la Pax Romana nunca hubiera podido ser una paz permanente, porque la Roma pagana y sus legiones jamás hubieran podido efectuar una reconciliación entre el hombre y Dios. Por eso, el Reino que Jesús anunció era muy superior.

      4. ¿Cómo reaccionó la mayor parte de los judíos a la predicación de Jesús? Sin embargo, ¿qué se desarrolló gradualmente en el primer siglo?

      4 No obstante, la mayor parte de los coterráneos de Jesús rechazaron el Reino de Dios. (Juan 1:11; 7:47, 48; 9:22.) Sus gobernantes, quienes consideraban a Jesús como una amenaza a la seguridad nacional, lo entregaron para que fuera ejecutado, y dijeron con insistencia: “No tenemos más rey que César”. (Juan 11:48; 19:14, 15.) Sin embargo, algunos judíos, y luego muchos gentiles, reconocieron con gozo a Jesús como el Rey escogido por Dios. (Colosenses 1:13-20.) Predicaron acerca de él en muchas tierras, y Jerusalén llegó a ser el centro de una asociación internacional de cristianos. (Hechos 15:2; 1 Pedro 5:9.)

      5, 6. a) ¿Cómo se desenvolvió la relación entre los judíos y Roma? b) ¿Qué advertencia dio Jesús, y cómo salvó esta la vida de los cristianos en 70 E.C.?

      5 A pesar del hecho de que los judíos habían escogido a César más bien que a Cristo, las relaciones entre Jerusalén y Roma pronto se deterioraron. Zelotes judíos llevaron a cabo campañas de guerrillas contra el imperio hasta que finalmente, en 66 E.C., estalló la guerra de lleno. Las tropas romanas procuraron restaurar la Pax Romana, y dentro de poco Jerusalén estuvo bajo estado de sitio. Para los cristianos esto fue algo significativo. Muchos años antes, Jesús había advertido: “Cuando vean a Jerusalén cercada de ejércitos acampados, entonces sepan que la desolación de ella se ha acercado. Entonces los que estén en Judea echen a huir a las montañas, y los que estén en medio de Jerusalén retírense”. (Lucas 21:20, 21.) Jerusalén ahora estaba rodeada, y los cristianos esperaron la oportunidad para huir.

      6 Aquella oportunidad llegó pronto. Los romanos estaban socavando el muro del templo y muchos judíos estaban listos para rendirse cuando el comandante romano, Cestio Galo, inesperadamente retiró sus tropas y se fue. Los zelotes aprovecharon la oportunidad para reorganizar sus defensas, pero los cristianos abandonaron la ciudad condenada a destrucción. En 70 E.C. las legiones romanas regresaron y acamparon alrededor de los muros de Jerusalén, y esta vez la ciudad sucumbió. ¿Cómo nos afecta a nosotros aquella tragedia histórica? De la siguiente manera: la advertencia de Jesús que salvó la vida de sus seguidores tiene significado para nosotros hoy día también.

      Más de un cumplimiento

      7-9. a) ¿Cómo sabemos que la profecía de Jesús acerca de los ejércitos que rodearían a Jerusalén tendría más de un cumplimiento? b) ¿Cómo apoya esto el leer el libro de Daniel con entendimiento?

      7 Aquella advertencia fue parte de una larga profecía pronunciada por Jesús en respuesta a una pregunta importante. Sus seguidores le habían preguntado: “¿Cuándo [será la destrucción del templo judío], y qué será la señal de tu presencia y de la conclusión del sistema de cosas?”. En respuesta, Jesús dio una señal compuesta de muchos rasgos, incluso el sitio de Jerusalén. (Mateo 24; Marcos 13; Lucas 21.) En los años que siguieron a la muerte de Jesús, se cumplieron muchos de los rasgos de esa profecía, que culminó en la destrucción de Jerusalén y el sistema de cosas judío en 70 E.C. (Mateo 24:7, 14; Hechos 11:28; Colosenses 1:23.)

      8 No obstante, los discípulos también habían preguntado a Jesús acerca de su “presencia”, que la Biblia asocia con el fin del entero sistema de cosas mundial. (Daniel 2:44; Mateo 24:3, 21.) Puesto que la presencia espiritual de Jesús y el fin del sistema de cosas mundial no acontecieron en el primer siglo, se podía esperar un cumplimiento mayor de la profecía de Jesús en el futuro, de modo que los sucesos del primer siglo proporcionarían un patrón para el cumplimiento en una escala mayor. Esto incluiría un cumplimiento mayor de la advertencia de Jesús acerca de la destrucción de Jerusalén.

      9 Esto se hace más evidente si examinamos cómo se registra esta advertencia en los otros dos libros de la Biblia donde aparece. En Mateo se describe a las tropas que efectúan el sitio como “la cosa repugnante que causa desolación, como se habló de ella por medio de Daniel el profeta, de pie en un lugar santo”. (Mateo 24:15.) En el relato de Marcos “la cosa repugnante” está de pie “donde no debe”. (Marcos 13:14.) El relato de Mateo dice que “la cosa repugnante” también se menciona en el libro de Daniel. De hecho, la expresión “cosa repugnante” aparece tres veces en este libro: una vez (en el plural) en Daniel 9:27, donde forma parte de una profecía que se cumplió cuando Jerusalén fue destruida en 70 E.C., y después, en Daniel 11:31 y Daniel 12:11. De acuerdo con estos últimos dos textos bíblicos, una “cosa repugnante” había de ser puesta en su lugar durante el “tiempo señalado” o “el tiempo del fin”. (Daniel 11:29; 12:9.) Hemos estado viviendo en “el tiempo del fin” desde 1914; por eso la advertencia de Jesús aplica hoy día también. (Mateo 24:15.)

      Lo que la cristiandad ha escogido

      10, 11. ¿Cómo se asemejan los sucesos actuales a los del primer siglo?

      10 En nuestro siglo, los sucesos han seguido un patrón parecido al del primer siglo. Hoy, como entonces, hay un imperio que domina la escena mundial. El imperio moderno es la potencia mundial angloamericana, que se esfuerza arduamente por imponer en la humanidad sus propias ideas sobre la paz y la seguridad. En el primer siglo, el Israel carnal rechazó a Jesús como el Rey ungido de Dios. En 1914 empezó la “presencia” de Jesús como Rey entronizado de Jehová. (Salmo 2:6; Revelación 11:15-18.) Pero las naciones, incluso las de la cristiandad, rehusaron reconocerlo. (Salmo 2:2, 3, 10, 11.) De hecho, se vieron envueltas en una horrible guerra mundial por la soberanía internacional. Los líderes religiosos de la cristiandad —al igual que los líderes judíos— han tomado la delantera en rechazar a Jesús. Desde 1914, de manera consecuente, han estado activos en la arena política y se han opuesto a la predicación de las buenas nuevas del Reino. (Marcos 13:9.)

      11 Sin embargo, como en el día de Jesús, muchas personas hoy gustosamente han reconocido al Rey de Jehová y han esparcido las buenas nuevas de su Reino alrededor del mundo. (Mateo 24:14.) Más de dos millones y medio de testigos de Jehová expresan ahora lealtad para con el Reino de Dios. (Revelación 7:9, 10.) Se mantienen neutrales respecto a la política del mundo y tienen plena fe en los arreglos de Jehová para traer paz y seguridad. (Juan 17:15, 16; Efesios 1:10.)

      “La cosa repugnante” hoy

      12. ¿Qué es la “cosa repugnante” del día actual?

      12 ¿Qué, entonces, es la “cosa repugnante que causa desolación” en tiempos modernos? En el primer siglo se trataba de las tropas romanas que habían sido enviadas para volver a imponer la Pax Romana en Jerusalén. Pero en tiempos modernos las naciones que lucharon en la I Guerra Mundial llegaron a sentirse desilusionadas respecto a la utilidad de una guerra general para imponer la paz y experimentaron con algo nuevo: una organización internacional para preservar la paz mundial. Esta empezó a funcionar en 1919 como la Sociedad de Naciones, y aún existe como las Naciones Unidas. He aquí la “cosa repugnante que causa desolación” del día actual.

      13, 14. a) ¿Qué declaraciones halagüeñas ha hecho la cristiandad acerca de “la cosa repugnante”? b) ¿Por qué es esto idolatría, y dónde coloca esto a “la cosa repugnante”?

      13 Es interesante que la palabra hebrea que se traduce “cosa repugnante” en Daniel es shiq·qutsʹ. En la Biblia, esta palabra se usa principalmente con relación a ídolos y a la idolatría. (1 Reyes 11:5, 7.) Teniendo esto presente, lea algunos comentarios que han hecho ciertos líderes religiosos respecto a la Sociedad de Naciones:

      “¿Qué es esta visión de una federación mundial de la humanidad [...] si no es el Reino de Dios?” “La Sociedad de Naciones tiene sus raíces en el Evangelio” (Concilio Federal de las Iglesias de Cristo de América). “Puede afirmarse que cada uno de los objetivos [de la Sociedad de Naciones] y cada una de sus actividades cumplen la voluntad de Dios que se revela en la enseñanza de Jesucristo” (Obispos de la Iglesia de Inglaterra). “La reunión, por lo tanto, recomienda que todo cristiano apoye a la Sociedad de Naciones y ore por esta como el único instrumento disponible para alcanzar [la paz en la Tierra]” (Cuerpo general de bautistas, congregacionalistas y presbiterianos de Gran Bretaña). “[La Sociedad de Naciones] es el único esfuerzo organizado que se ha hecho para llevar a cabo los repetidos deseos de la Santa Sede.” (Cardenal Bourne, arzobispo de Westminster.)

      14 Cuando las naciones no solo rechazaron el Reino de Dios, sino que también establecieron su propia organización para traer paz, ese fue un acto de rebelión. Cuando los líderes religiosos de la cristiandad identificaron a esa organización con el Reino de Dios y el Evangelio, proclamando que era “el único instrumento disponible” para traer paz, ese fue un acto de idolatría. Estaban poniendo a dicha organización en la posición del Reino de Dios, “en un lugar santo”. Ciertamente estaba ‘de pie donde no debía’. (Mateo 24:15; Marcos 13:14.) Además, los líderes religiosos siguen apoyando a la sucesora de la Sociedad de Naciones, las Naciones Unidas, en vez de dirigir a la humanidad al Reino establecido de Dios.

      El peligro para la cristiandad

      15, 16. ¿Cómo están desarrollándose las relaciones entre la cristiandad y las naciones que apoyan a “la cosa repugnante”?

      15 Aunque las religiones de la cristiandad escogieron a la Sociedad de Naciones y a su sucesora en vez del Reino de Dios, sus relaciones con las naciones miembros de estas organizaciones se han deteriorado. Esto se asemeja a lo que sucedió entre los judíos y Roma. Desde 1945 las Naciones Unidas han incluido entre sus miembros a cada vez más países que o no son cristianos o son anticristianos, y esto no augura nada bueno para la cristiandad.

      16 Además, en muchos países hay fricción entre las religiones de la cristiandad y el Estado. En Polonia la Iglesia Católica se considera como opositora del régimen local. En el norte de Irlanda y en el Líbano, las religiones de la cristiandad han empeorado los problemas relacionados con la paz y la seguridad. Además, las religiones de la cristiandad han producido algunas personas que, al igual que los zelotes judíos, fomentan la violencia. Por eso, el Concilio Mundial de Iglesias Protestantes ha hecho donaciones a organizaciones terroristas, mientras que sacerdotes católicos luchan en las selvas como guerrilleros y sirven en gobiernos revolucionarios.

      17. a) ¿Qué es la Jerusalén del día moderno? b) ¿Qué le sucederá finalmente?

      17 Solo el tiempo revelará hasta qué punto se deteriorarán las relaciones entre las religiones de la cristiandad y las naciones, pero los sucesos del primer siglo ya han prefigurado en qué irá a parar todo esto. Como previó Jesús, en el primer siglo los ejércitos romanos finalmente destruyeron a Jerusalén y causaron mucha tribulación. En conformidad con el patrón profético, las naciones junto con las Naciones Unidas atacarán y destruirán a “Jerusalén”, es decir, a la estructura religiosa de la cristiandad. (Lucas 21:20, 23.)

      Huyan a las montañas

      18. ¿Qué deberían hacer las personas de corazón humilde al discernir que “la cosa repugnante” está en su lugar?

      18 En el primer siglo, después que apareció “la cosa repugnante”, los cristianos tuvieron la oportunidad de huir. Jesús les aconsejó que lo hicieran inmediatamente porque no sabían cuánto tiempo duraría dicha oportunidad. (Marcos 13:15, 16.) De la misma manera, cuando las personas de corazón humilde hoy disciernen que existe “la cosa repugnante”, deberían huir inmediatamente del dominio religioso de la cristiandad. Cada segundo que permanecen allí está en peligro su vida en sentido espiritual, y ¿quién sabe por cuánto tiempo estará disponible la oportunidad de huir?

      19, 20. a) ¿Qué hicieron los cristianos del primer siglo cuando vieron que Jerusalén estaba rodeada de los ejércitos romanos? b) ¿Qué representan hoy día “las montañas”, y qué debería impulsar a las personas de corazón humilde a huir allí?

      19 El evangelio de Lucas advirtió a los cristianos de aquel día que huyeran al ver a “Jerusalén rodeada de ejércitos acampados”. Como ya se ha notado, aquellos ejércitos llegaron en 66 E.C., y la oportunidad de huir surgió ese mismo año cuando Cestio Galo retiró sus tropas. Después que los cristianos huyeron, la guerra entre los judíos y los romanos continuó... aunque no en los alrededores de Jerusalén. El emperador Nerón envió a Vespasiano a Palestina y se llevaron a cabo campañas de éxito en 67 y 68. Entonces Nerón murió y Vespasiano se vio envuelto en la sucesión imperial. Pero después que él fue hecho emperador en 69 E.C., él envió a su hijo Tito para que terminara la guerra judía. En 70 E.C. Jerusalén fue destruida.

      20 Pero los cristianos no esperaron en Jerusalén para ver todo aquello. Tan pronto como vieron los ejércitos sitiadores, comprendieron que la ciudad estaba en peligro de destrucción. De igual manera hoy, ya ha aparecido el instrumento que destruirá a la cristiandad. Por eso, tan pronto como discernamos el peligro en el cual se encuentra la cristiandad, debemos ‘huir a las montañas’, el lugar de refugio de Jehová junto con su organización teocrática. Otras profecías no dan base alguna para creer que haya un lapso entre el ataque inicial y la desolación final de la cristiandad. En realidad, no habrá necesidad de tal pausa en las hostilidades. Las personas de corazón humilde muestran sabiduría al huir de la cristiandad ahora.

      Jerusalén y la cristiandad

      21. ¿Por qué apareció “la cosa repugnante” a fines del tiempo del fin de Jerusalén, mientras que en este siglo apareció a principios del fin de este sistema?

      21 ¿Deberíamos sorprendernos de que en el primer siglo “la cosa repugnante” haya aparecido justamente antes de la destrucción de Jerusalén, mientras que hoy haya aparecido al mismísimo principio del tiempo del fin de este mundo? No. En cada caso, “la cosa repugnante” apareció al momento en que Jehová quería que su pueblo huyera. En el primer siglo, los cristianos tuvieron que permanecer por algún tiempo en Jerusalén a fin de predicar allí. (Hechos 1:8.) Solo en 66 E.C., cuando la destrucción era inminente, apareció una “cosa repugnante” que les sirvió de advertencia para que huyeran. Pero el estar “en” la Jerusalén del día moderno significa ser parte del dominio religioso de la cristiandada. Es imposible servir a Jehová de modo aceptable en un ambiente tan corrupto y apóstata. Por eso, a principios del tiempo del fin de este mundo “la cosa repugnante” apareció para advertir a los cristianos que huyeran. El huir de la cristiandad está llevándose a cabo, y cada persona recibe la advertencia de huir tan pronto como discierne que “la cosa repugnante” está en su lugar.

      22. ¿Qué preguntas tienen que contestarse aún?

      22 Pero podemos preguntar: ¿Qué conduce a este hecho sumamente inesperado, a saber, la destrucción de la cristiandad a manos de elementos militarizados que forman parte de las Naciones Unidas? ¿Cuándo ocurrirá esto? Y ¿cómo puede esto contribuir a la paz y la seguridad en la Tierra? Consideraremos estas preguntas en el próximo artículo.

  • La paz, la seguridad y la ‘imagen de la bestia’
    La Atalaya 1985 | 1 de octubre
    • La paz, la seguridad y la ‘imagen de la bestia’

      “Y me llevó en el poder del espíritu a un desierto. Y alcancé a ver a una mujer sentada sobre una bestia salvaje de color escarlata que estaba llena de nombres blasfemos y que tenía siete cabezas y diez cuernos.” (REVELACIÓN 17:3.)

      1. ¿Por qué nos interesa la visión de Juan acerca de una bestia de siete cabezas y diez cuernos?

      EL APÓSTOL Juan vio esta espantosa bestia en una visión inspirada por Dios. Pero Juan no es el único que la ha visto. Con toda probabilidad, usted, también, la ha visto, o por lo menos ha leído acerca de ella en los diarios. ¿La reconoció usted?

      2, 3. ¿Qué serie de criaturas vio Juan en su visión?

      2 Por supuesto, cuando vemos esta bestia hoy día, no tiene la apariencia que Juan describió. Lo que Juan vio fue simbólico de algo que existiría en la Tierra “en el día del Señor”. (Revelación 1:10.) Hoy día vemos el cumplimiento de esta. La forma repulsiva de la bestia que Juan vio refleja el punto de vista de Jehová sobre lo que ella representa... ¡que es repugnante a la vista de Él! Juan ya había presenciado en su visión el arrojamiento de Satanás a la Tierra y que este ‘tiene gran cólera, sabiendo que tiene un corto período de tiempo’. (Revelación 12:12.) Había visto también los sistemas políticos del mundo de Satanás, representados como una bestia monstruosa que tiene siete cabezas y diez cuernos, ascender del “mar” de la humanidad. (Revelación 13:2; 17:15; Isaías 57:20; Lucas 4:5, 6.) Esta bestia tenía autoridad sobre toda la humanidad, y a las personas se les obligó a someterse a la ‘marca de la bestia’ en su mano derecha o sobre su frente, indicando así que la apoyaban. (Revelación 13:7, 16, 17.)

      3 Juan había observado mientras los hombres hacían una imagen de esta bestia. (Revelación 13:14, 15.) Esta es la imagen que él vio en la visión que mencionamos antes y que se describe en el capítulo 17 de Revelación. Esta “imagen” de siete cabezas y diez cuernos desempeñará un papel importante en los acontecimientos futuros; por lo tanto, es vital que la identifiquemos. ¿Cómo podemos hacerlo?

      La “imagen” de la bestia hoy día

      4, 5. ¿Qué representaban las cabezas de la bestia que se vio en visión?

      4 Un ángel dio a Juan cierta información que nos puede ayudar. Le dijo: “Las siete cabezas significan siete montañas, sobre las cuales se sienta la mujer. Y hay siete reyes: cinco han caído, uno es, el otro todavía no ha llegado, pero cuando sí llegue tiene que permanecer un corto tiempo”. (Revelación 17:9, 10.) La mención de “reyes” y “montañas” —que en la Biblia a menudo pueden representar poderes políticos— indica que las cabezas de la bestia representan gobiernos. (Jeremías 51:25.) ¿Qué siete gobiernos están implicados?

      5 Pues bien, cinco ya habían caído para los días de Juan, uno todavía existía, y uno estaba por llegar a existir. Según la historia bíblica, cinco imperios principales habían florecido, oprimido al pueblo de Dios, y habían caído antes de los días de Juan: Egipto, Asiria, Babilonia, Medo Persia y Grecia. Durante la vida de Juan, el imperio romano estaba en el poder. Siglos después de la muerte de Juan, el imperio romano pasó de la escena como la potencia mundial dominante y con el tiempo fue reemplazado por el imperio británico. Pronto las colonias occidentales de este imperio obtuvieron la independencia y comenzaron a obrar en estrecha colaboración con Gran Bretaña para formar la potencia mundial angloamericana. Este es el “rey” que ‘todavía no había llegado’ en los días de Juan. ¿Qué relación existía entre la bestia que Juan vio y los siete imperios representados por las cabezas de esta? “También ella misma es un octavo rey, pero proviene de los siete.” (Revelación 17:11.)

      6. a) ¿Qué significaban los cuernos de la bestia? b) ¿En qué sentido ‘todavía no habían recibido un reino’?

      6 Además, recuerde que la bestia salvaje tenía diez cuernos. Con relación a estos, el ángel dijo: “Los diez cuernos que viste significan diez reyes, que todavía no han recibido un reino, pero sí reciben autoridad como reyes por una hora con la bestia salvaje”. (Revelación 17:12.) En la Biblia, el número diez representa lo que es completo en cuanto a los asuntos de la Tierra. Por lo tanto, estos cuernos simbolizan todas las potencias gubernamentales alrededor de la Tierra que apoyan a la bestia salvaje por un corto período (“una hora”) durante “el día del Señor”. Incluyen a la séptima potencia mundial, así como a los gobiernos modernos que han descendido de las otras seis ‘cabezas de la bestia’, aunque estas seis ya no son potencias mundiales. Estos “reyes” no existían en los días de Juana. Ahora que han adquirido autoridad “dan su poder y autoridad a la bestia salvaje”. (Revelación 17:13.)

      7, 8. a) Según se describe en el capítulo 17 de Revelación, ¿qué es la bestia que Juan vio? b) ¿Qué relación tiene esta con las cabezas y los cuernos?

      7 ¿Reconoce usted ahora a la bestia? Sí, es lo mismo que “la cosa repugnante que causa desolación” que comenzó como la Liga o Sociedad de Naciones y que ahora existe como las Naciones Unidas. (Mateo 24:15; Daniel 12:11.) ¿De qué manera ‘proviene de las siete potencias mundiales’ esta organización? En el sentido de que la entera organización semejante a bestia, como una octava potencia, es creada por los gobiernos ya existentes y tiene a la potencia mundial angloamericana como su principal patrocinadora y apoyadora.

      8 Además, como el ángel dijo a Juan, todos los “diez cuernos” dan “poder y autoridad a la bestia salvaje”. (Revelación 17:13.) De hecho, sin el apoyo que le prestan los gobiernos representados por las cabezas y los cuernos, la bestia carecería de poder. ¿Por qué? Porque es tan solo una imagen. (Revelación 13:14.) Como todas las imágenes, no tiene poder en sí misma. (Isaías 44:14-17.) Cualquier vida que tenga proviene de sus apoyadores. (Revelación 13:15.) A veces algunos de ellos han tomado acción decisiva mediante las Naciones Unidas, como por ejemplo durante la guerra de Corea.

      9. ¿Cómo se confirma nuestra identificación de la bestia?

      9 Algunos detalles adicionales que el ángel dio confirman nuestra identificación de la bestia: “La bestia salvaje que viste era, pero no es, y no obstante está para ascender del abismo, y ha de irse a la destrucción”. (Revelación 17:8.) Esto ya se ha cumplido en parte. La segunda guerra mundial, en efecto, mató a la Sociedad de Naciones. En 1942, cuando los testigos de Jehová llegaron a entender claramente esta profecía, se podía decir de la Sociedad-bestia: “No es”b. Pero en 1945 ‘ascendió del abismo’ como la Organización de las Naciones Unidas. ¿Tendrá éxito en su misión de traer paz y seguridad? La profecía dice que no. En lugar de eso, “ha de irse a la destrucción”.

      La que cabalga sobre la bestia

      10, 11. a) En la visión de Juan, ¿quién cabalgaba sobre la bestia? b) ¿Cómo se ha cumplido este rasgo de la visión en tiempos modernos?

      10 ¿Notó usted algo más acerca de la bestia? Había una “mujer” cabalgando sobre ella. Se la identifica como el imperio mundial de la religión falsa, “Babilonia la Grande, la madre de las rameras y de las cosas repugnantes de la tierra”. (Revelación 17:3-5, 15.) ¿Han montado las religiones del mundo sobre ambas organizaciones y han tratado de dirigir el curso de estas? Sí, en particular las religiones de la cristiandad.

      11 Por ejemplo, el corresponsal holandés Pierre van Paassen describió el “algo rayano en entusiasmo religioso” que manifestaron los representantes de las iglesias protestantes de los Estados Unidos, Gran Bretaña y los países escandinavos que asistieron a las sesiones de la Sociedad de Naciones. En 1945 el Concilio Federal de las Iglesias de Cristo de América declaró: “Estamos resueltos a trabajar por el desarrollo continuo de las funciones curativas y creativas de la Organización de las Naciones Unidas”. En 1965 el papa Paulo VI declaró que veía en la organización “el reflejo del designio amoroso y trascendente de Dios para el progreso de la familia humana en la Tierra... reflejo en el que vemos el mensaje del Evangelio, que es celestial, hacerse terrestre”. Ciertamente, los líderes religiosos han hecho que esa organización llegue a estar “llena de nombres blasfemos”. (Revelación 17:3; compárese con Mateo 24:15; Marcos 13:14.)

      No puede traer la paz

      12. ¿Qué relación ha habido entre los apoyadores de la Organización de las Naciones Unidas y el Reino de Dios?

      12 Las Naciones Unidas no disfrutan de buenas relaciones con el Reino de Dios. De hecho, los apoyadores de ella se oponen a ese Reino. El ángel dijo a Juan: “[Los diez cuernos] combatirán con el Cordero, pero, porque es Señor de señores y Rey de reyes, el Cordero los vencerá. También, los llamados y escogidos y fieles que con él están lo harán”. (Revelación 17:14.) Tal como dice la profecía, las naciones han ‘combatido con el Cordero’ continuamente durante este tiempo del fin al oponerse y perseguir a los que actúan como embajadores del Reino de él. El Cordero, sin embargo, es invencible, y también lo son sus siervos en la Tierra que continúan predicando las buenas nuevas del Reino de Dios a pesar de proscripciones, encarcelamientos y hasta la muerte. (Mateo 10:16-18; Juan 16:33; 1 Juan 5:4.)

      13. ¿Por qué nunca podrían las Naciones Unidas ser un cuerpo que traiga la paz verdadera?

      13 En verdad, las Naciones Unidas nunca podrían ser un cuerpo que traiga la paz verdadera. Su jinete, “Babilonia la Grande”, es una de las más inicuas promotoras de guerras en la historia, y está “borracha con la sangre de los santos y con la sangre de los testigos de Jesús”. (Revelación 17:6.) Las guerras de las naciones que apoyan dicha organización han empapado de sangre la Tierra. (Mateo 24:6, 7.) Y el poder detrás de ellas, Satanás el Diablo, “el gran dragón”, no es pacificador. (Revelación 12:9, 17; 13:2.) La humanidad nunca disfrutará de seguridad mientras existan estas entidades. Tienen que ser quitadas.

      Los pasos que se tienen que dar para lograr la paz

      14. a) En la visión de Juan, ¿qué le sucede a la jinete de la bestia? b) ¿Cómo se cumplirá esto?

      14 Lo primero que se eliminará será la religión falsa; y sucederá de manera sumamente inesperada. He aquí cómo: “Los diez cuernos que viste, y la bestia salvaje, éstos odiarán a la ramera y harán que quede devastada y desnuda, y se comerán sus carnes y la quemarán por completo con fuego”. ¡Qué sorpresa aterradora para la humanidad! (Revelación 17:16; 18:9-19.) Son los destructivos “cuernos” nacionalistas, prominentes en la Organización de las Naciones Unidas, quienes la devastarán. ¡Qué manera tan extraordinaria de recordarnos la profecía de Jesús que dice que “la cosa repugnante” desolaría a “Jerusalén”! (Marcos 13:14-20; Lucas 21:20.) Sin embargo, aunque las naciones efectúan esta ejecución, en realidad estarán llevando a cabo el juicio de Dios sobre “la gran ramera”, en la que se incluye la cristiandad. ¿Cuál será el resultado? La religión falsa “nunca volverá a ser hallada”. (Revelación 17:1; 18:21.)

      15, 16. a) ¿Qué es la “grande tribulación”? b) ¿En qué resultará? c) ¿Cómo se evitará que Satanás arruine las perspectivas de paz de la humanidad?

      15 Jesucristo dijo que la destrucción de la cristiandad sería el comienzo de una “grande tribulación como la cual no ha sucedido una desde el principio del mundo hasta ahora, no, ni volverá a suceder”. (Mateo 24:15, 21.) A medida que continúe la tribulación, el Reino de Dios ejecutará juicio sobre todas las partes políticas y comerciales de la organización de Satanás. (Daniel 2:44.) Juan ve ahora al Rey en acción: “Vi el cielo abierto, y, ¡miren! un caballo blanco. Y el que iba sentado sobre él se llama Fiel y Verdadero, y juzga y lleva a cabo guerra en justicia”. En oposición a él se hallan las naciones políticas de la Tierra junto con la ‘imagen de la bestia’. ¿Cuál será el resultado de la guerra? Nuevamente, ¡destrucción para los destructores de la paz! (Revelación 19:11, 19-21.)

      16 Eso dejará solo un gran obstáculo para la paz: a Satanás el Diablo mismo. Juan pasa a describir cómo se incapacita a este gran enemigo de la humanidad: “Vi a un ángel que descendía del cielo con la llave del abismo y una gran cadena en su mano. Y prendió al dragón, la serpiente original, que es el Diablo y Satanás, y lo ató por mil años”. (Revelación 20:1-3.)

      Un tiempo para escoger

      17. ¿Qué pasos deben dar ahora las personas que deseen ver realizada la paz verdadera?

      17 ¡Qué tiempo de cambios para la humanidad! Pero mientras que a las organizaciones y los gobiernos se les remueve, lo que sucede a las personas individualmente es, en su mayor parte, el resultado de lo que ellas mismas han escogido. En expresión de su amor, Jehová decretó: “En todas las naciones primero tienen que predicarse las buenas nuevas”, antes de la gran tribulación. (Marcos 13:10.) A los amadores de la paz se les insta a ‘salir de’ Babilonia la Grande. (Revelación 18:4.) A los que se hallan en la cristiandad se les insta a “huir a las montañas”. (Lucas 21:21.) Los que se someten al Reino de Dios deben evitar tener ‘la marca de la bestia’. (Revelación 14:9-12; Juan 17:15, 16.) Una gran muchedumbre de estos cuyo corazón es recto ‘saldrá de la grande tribulación’. (Revelación 7:9-14.) De hecho, nadie tiene necesariamente que perecer junto con el sistema de Satanás. (Proverbios 2:21, 22.)

      18, 19. a) ¿Qué se puede decir acerca de cuándo estallará la gran tribulación? b) ¿Cómo se preparan ahora los cristianos para ese tiempo?

      18 ¿Cuándo tendrán lugar estos acontecimientos que causarán conmoción en la Tierra? Bueno, por todo el mundo hoy día se están oyendo las “buenas nuevas”. “La cosa repugnante” se ha colocado en su lugar. (Mateo 24:14-16.) De hecho, la ‘imagen de la bestia’, la cual ya está en la segunda etapa de su existencia, está a punto de “irse a la destrucción”. (Revelación 17:8.) El cumplimiento de la “señal” indica que hemos estado viviendo en el tiempo de la presencia de Jesús por 71 años, desde 1914. (Mateo 24:3.) Jesús dijo: “Cuando vean todas estas cosas, conozcan que él está cerca, a las puertas. En verdad les digo que de ningún modo pasará esta generación hasta que sucedan todas estas cosas”. (Mateo 24:33, 34.) Por lo tanto, la “grande tribulación” debe estar muy cerca. ¿Podemos ser más específicos? No en estos momentos.

      19 El apóstol Pablo predijo: “Cuando sea que ellos estén diciendo: ‘¡Paz y seguridad!’, entonces destrucción repentina ha de sobrevenirles instantáneamente”. (1 Tesalonicenses 5:3.) Así que la gran tribulación será una sorpresa aterradora para la humanidad en general. Sin embargo, no será una experiencia que tomará por sorpresa a los cristianos. Saben que viene y siguen el consejo de Jesús: “Manténganse despiertos, pues, en todo tiempo haciendo ruego para que logren escapar de todas estas cosas que están destinadas a suceder”. (Lucas 21:36.)

      20. ¿Por qué no pueden los cristianos decir en estos momentos cuándo vendrá la gran tribulación?

      20 No obstante, los cristianos no pueden decir de antemano, ni con exactitud, cuándo estallará la gran tribulación. Jehová Dios no ha revelado “aquel día o la hora”. (Marcos 13:32; Mateo 24:42.) Así que cuando, por ejemplo, las Naciones Unidas declaran el año 1986 un “Año Internacional de la Paz”, los cristianos observan con interés el acontecimiento. Pero no pueden decir de antemano si este resultará ser el cumplimiento de las palabras de Pablo citadas arriba. No obstante, están agradecidos de que Jehová les haya permitido discernir el significado de ‘la imagen de la bestia’ y de “la cosa repugnante que causa desolación”. Así ven esta organización como la ve Jehová, y no se dejan extraviar por los esfuerzos de ella por traer la paz.

      21. a) ¿De qué paz disfrutan los cristianos aun ahora? b) ¿Qué pueden ellos esperar con confianza?

      21 Los que se ‘mantienen despiertos’ y se someten al Reino de Dios disfrutan de paz aun ahora. Jehová, “el Dios de paz”, está con ellos y les da “la paz de Dios que supera todo pensamiento”. (Filipenses 4:7, 9.) Por otra parte, esperan con anhelo el tiempo no muy lejano en que por toda la Tierra se experimentará el cumplimiento de la hermosa profecía de Isaías que dice: “La obra de la justicia verdadera tiene que llegar a ser paz; y el servicio de la justicia verdadera, tranquilidad y seguridad hasta tiempo indefinido. Y mi pueblo tiene que morar en un lugar de habitación pacífico y en residencias de plena confianza y en lugares de descanso sosegados”. (Isaías 32:16-18.) Esto significa que habrá seguridad en escala mundial. (Isaías 11:9.) Y será paz verdadera porque Jehová Dios mismo será el autor de ella.

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