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  • El reino de Dios... la única esperanza
    La Atalaya 1979 | 1 de julio
    • mismas cualidades para que gobiernen en el cielo con él. (Luc. 22:28-30; Rev. 5:9, 10; 20:6) Uno de estos hombres escribió a otro que tenía esta misma esperanza: “Si seguimos aguantando, también gobernaremos juntos como reyes.”—2 Tim. 2:12.

      Ciertamente esperaríamos que el reinado de estos reyes fuera un reinado de justicia y paz, que trajera felicidad y salud a toda la humanidad... sus súbditos en la Tierra. Cristo demostró el poder que Dios le había dado para sanar toda forma de enfermedad cuando estuvo en la Tierra; ¡hasta resucitó a muertos! ¡Bajo la gobernación del Reino, él de nuevo ejercerá estos poderes milagrosos para bendecir y beneficiar a toda persona sobre la Tierra! Con el tiempo, toda la Tierra será transformada en un hermoso paraíso.—Luc. 23:43; Rev. 21:4.

      ¡De seguro el reino de Dios es la única esperanza de ver realizadas las bendiciones que con tanta intensidad todos anhelamos!

  • ¿Quiénes, realmente, tienen la verdad?
    La Atalaya 1979 | 1 de julio
    • ¿Quiénes, realmente, tienen la verdad?

      “Hazme andar en tu verdad y enséñame porque tú eres mi Dios de salvación.”—Sal. 25:5

      1. ¿Qué significa la palabra verdad, y por qué se puede decir que Jehová es el fundamento de la verdad?

      LA PALABRA verdad se define como lo que está en armonía con los hechos reales, con la realidad. Significa lo que es correcto y genuino. La fuente, o fundamento, de la verdad es el Creador Todopoderoso del universo, Jehová Dios. Él conoce la verdad acerca de todo aspecto de su creación. Sabe lo que es correcto y lo que es incorrecto, lo que es bueno y lo que es malo. Sabe la verdad acerca de lo que ha sucedido en el pasado y por qué, así como el significado de las condiciones mundiales presentes. También sabe la verdad acerca del futuro, puesto que ya ha determinado lo que será.—Isa. 14:24.

      2. ¿Cómo describe la Biblia la veracidad de Jehová?

      2 Por esas razones el salmista describe al Creador como “Jehová el Dios de verdad.” (Sal. 31:5) Por eso, cuando Dios habla, sus palabras siempre son dignas de confianza: “Tu palabra es la verdad.” (Juan 17:17) Cuando da instrucciones para el comportamiento humano, siempre son correctas: “Todos tus mandamientos son la verdad.” (Sal. 119:151) Cuando promete algo, podemos confiar en ello: “No falló ni una promesa de toda la buena promesa que . . . había hecho Jehová . . . todo se realizó.” (Jos. 21:45) Así, la Biblia declara acerca de Dios: “Justos y verdaderos son tus caminos, Rey de la eternidad.”—Rev. 15:3.

      ANDANDO EN LA VERDAD

      3, 4. (a) ¿Cómo anda uno en la verdad? (b) ¿Por qué desea Jehová que los humanos anden en la verdad?

      3 Sería lógico esperar que el Dios de la verdad quisiera que su creación humana anduviera en la verdad. ¿Cómo se puede hacer esto? Por medio de adquirir conocimiento exacto de quién es Dios y qué propósitos tiene; entonces por medio de aprender lo que él desea que hagamos, y hacerlo. (Juan 17:3; 1 Juan 2:3, 4) Esto realmente significa que el andar en la verdad llega ser un modo de vivir, un camino que se sigue en la vida, el “Camino,” como dice la Biblia.—Hech. 9:2.

      4 Una razón por la cual Dios desea que los humanos anden en la verdad es que cuando su creación humana refleja las excelentes cualidades de él, ello redunda en gloria y gozo para el Creador. (Compare con Génesis 1:26, 27; Proverbios 23:24, 25.) Otra es que, puesto que Dios hizo a los humanos, él sabe lo que les conviene. Por lo tanto, los que siguen sus instrucciones benefician de la mejor manera a su propia persona y a otros, hasta con beneficios eternos. (Isa. 48:17) Una razón adicional es que por medio de andar en la verdad los humanos pueden tener el privilegio de asociarse con el pueblo que Dios utiliza para informar acerca de sus propósitos a la gente que busca la verdad. Es como sucedió en los tiempos bíblicos de los cuales escribió Amós: “El Señor Soberano Jehová no hará ni una cosa a no ser que haya revelado su asunto confidencial a sus siervos los profetas.”—Amós 3:7.

      5. ¿Qué otra razón vital hay para andar en la verdad?

      5 Hay otra razón vital para andar en la verdad. La persona que lo hace demuestra ante otros que sostiene lo apropiado de la gobernación universal de Jehová. Satanás el Diablo, la criatura de la región espiritual que se convirtió en rebelde, ha presentado un desafío contra ello. (Gén. 3:1-4; Rev. 12:9) Entre su desafío estuvo el dicho retador y escarnecedor de que Dios no podría producir personas que permanecieran leales a Dios y sus verdades. (Job 1:6-12) Por eso el que uno permanezca firmemente a favor de la verdad bajo presión de toda clase muestra que hay personas de integridad que no transigen con relación a lo que es correcto. (Pro. 27:11) Por otra parte, la persona que no anda en la verdad hace mucho más que simplemente andar en el error. Con intención o sin intención, ese individuo se permite llegar a estar alineado con Satanás el “padre de la mentira,” “el dios de este sistema de cosas” que ha “cegado la mente de los incrédulos.”—Juan 8:44; 2 Cor. 4:4.

      6. ¿Cómo llegará a estar firmemente establecida la verdad por toda la Tierra? Lea Proverbios 12:19.

      6 Sin embargo, el Dios de la verdad ha fijado un límite de tiempo al permiso que ha dado a la falsedad con la iniquidad que es el resultado de ella. (Pro. 12:19; Ecl. 3:1) Dios se ha propuesto, para cuando se venza el límite de tiempo, triturar este sistema satánico y eliminarlo de la existencia, junto con los que lo promueven y prefieren. (Dan. 2:44; Rev. 19:17-21) “Toda planta que mi Padre celestial no plantó será desarraigada,” predijo Jesús. (Mat. 15:13) Esto preparará el camino para el nuevo sistema de Dios ‘en el cual morará la justicia.’ (2 Ped. 3:13) ¡Eso significará una sociedad terrestre basada en la verdad, una Tierra que solo será habitada por gente que ame la verdad!

      7. Si amamos la verdad, ¿cuál debería ser nuestra actitud?

      7 En vista de eso, si amamos lo que es correcto y deseamos vivir en el nuevo orden de Dios, es muy necesario que andemos en la verdad. Debemos tener la actitud del salmista que oró: “Hazme conocer tus propios caminos, oh Jehová; enséñame tus propias sendas. Hazme andar en tu verdad y enséñame.” (Sal. 25:4, 5) De manera similar, debemos prestar atención al consejo que dio el profeta Samuel al Israel antiguo: “No deben desviarse para seguir las cosas irreales que no son de provecho alguno y que no libran, . . . Solo que teman a Jehová, y tienen que servirle en verdad con todo su corazón.”—1 Sam. 12:21, 24.

      ‘MODELOS’ PARA NUESTRO TIEMPO

      8, 9. (a) En contraste con las naciones de alrededor, ¿cómo se benefició Israel de andar en la verdad? (b) ¿Qué sucedió cuando Israel no continuó andando en la verdad?

      8 Los tratos que Dios tuvo con personas del pasado suministran ‘modelos’ o ‘patrones,’ o ejemplos, para nosotros. De éstos aprendemos cómo Dios realmente trata con las personas que andan en la verdad y con las que no hacen eso. (1 Cor. 10:11; Rom. 15:4) Un modelo del cual podemos aprender es el de la nación del Israel antiguo. A aquella nación se le mostró favor cuando Dios le dio sus leyes. Mientras los israelitas andaban en Sus verdades, recibían abundantes bendiciones. Por ejemplo, no eran presa de naciones enemigas. (Deu. 28:7) Sus siembras y rebaños eran abundantes. (Deu. 11:8-15) Su sistema social era tan ordenado y altamente desarrollado que no se necesitaban prisiones. (Éxo. 22:1-15) Las epidemias que azotaban a las naciones impías no los herían a ellos. (Deu. 7:15) Y si continuaban andando en la verdad... “el más bendito de todos los pueblos llegarás a ser,” les prometió Jehová. (Deu. 7:14) En contraste, note la condición degradada de las naciones cananeas que rodeaban a Israel, como señala el Bible Handbook (Manual bíblico), por Henry H. Halley:

      “Los cananeos adoraban, por satisfacción inmoral, como rito religioso, en la presencia de sus dioses; y entonces, por asesinar a sus hijos primogénitos, como sacrificio a estos mismos dioses.

      “Parece que, en gran medida, el país de Canaán había llegado a ser cierta clase de Sodoma y Gomorra en escala nacional . . . ¿Tenía derecho alguno a seguir existiendo una civilización de tan aborrecible suciedad y brutalidad? . . .

      “Los arqueólogos que excavan en las ruinas de las ciudades cananeas se maravillan de que Dios no las destruyera antes de lo que lo hizo.”

      9 Sin embargo, Israel no siguió andando en la verdad. Como resultado de ello, Dios retiró su apoyo de aquella nación. Por eso Jesús en el templo dijo a Israel: “¡Miren! Su casa se les deja abandonada a ustedes.” (Mat. 23:38) También declaró: “El reino de Dios les será quitado a ustedes y será dado a una nación que produzca sus frutos.” (Mat. 21:43) Ya no serían la nación favorecida de Dios, sus testigos.

      10. ¿Cómo se manifestó una nueva nación espiritual en el primer siglo?

      10 En el primer siglo de nuestra era común, Dios desarrolló una nueva nación espiritual. Esta fue la congregación cristiana, una organización hecha de personas de muchas diferentes nacionalidades. (Hech. 10:34, 35; 13:46) El vocero nombrado de Dios, Jesús, colocó el fundamento para ella, y dijo: “Yo soy el camino y la verdad y la vida.” (Juan 14:6) Por lo que enseñó y logró, probó que realmente tenía la verdad, y tenía el apoyo de Dios. (Mat. 3:16, 17; 15:30, 31; Hech. 2:22) Los cristianos del primer siglo probaron lo mismo, pues quedaron claramente identificados como los testigos cristianos de Dios. (Hech. 1:8; 2:1-4, 43) De las verdades que ahora fluían a través de aquellos cristianos, el apóstol Pablo dijo: “Es a nosotros que Dios las ha revelado por medio de su espíritu.” En contraste, hizo notar lo siguiente: “Esta sabiduría ni uno de los gobernantes de este sistema de cosas la llegó a conocer.” (1 Cor. 2:8, 10) Había sucedido precisamente como Jesús dijo: “[Tú, Dios,] has escondido estas cosas de los sabios e intelectuales y las has revelado a los pequeñuelos”—Mat. 11:25.

      11, 12. (a) ¿Cómo predijo la Biblia la restauración de la adoración verdadera en nuestro tiempo? (b) ¿Qué propósitos tenía esta restauración?

      11 Para fines de aquel primer siglo, Dios había logrado algo más. Había terminado el registro escrito inspirado que más tarde se usaría como base para determinar la verdad. (2 Tim. 3:16, 17) Entre las Escrituras completadas había muchas profecías, historia escrita de antemano. (2 Ped. 1:21) Aquellas profecías mostraban que después de la muerte de los apóstoles se introduciría un período en que se apostataría de la verdad. (Hech. 20:29) Pero también mostraban que después, durante la “parte final de los días” precisamente antes del fin de este sistema, habría una restauración de la adoración verdadera. (Isa. 2:1-4; Miq. 3:12 a 4:5 inclusive) Jesús señaló que la gente sería recogida en dos grupos: a los que hicieran bien a los hermanos de Cristo que andan en la verdad se les recompensaría con “vida eterna”; los que no hicieran eso irían a “cortamiento eterno.”—Mat. 25:31-46; 2 Juan 4; 3 Juan 3, 4.

      12 El recogimiento y reorganización de la congregación cristiana en tiempos modernos tendría varios propósitos. Entre otras cosas, esta congregación recibiría instrucción unificada de Dios: “Él nos instruirá acerca de sus caminos, y ciertamente andaremos en sus sendas,” dice la profecía de Isaías 2:3 (también, Miq. 4:2). Al andar en la verdad, estos siervos de Dios sostendrían lo apropiado y correcto de Su gobernación universal, lo cual traería gloria y placer a él, y muchos beneficios a ellos. (Pro. 12:22) En cambio, Dios los utilizaría como sus testigos del día moderno, y los equiparía para entregar su mensaje a la generación actual.

      13. ¿Ha usado Jehová alguna vez a más de una organización en la Tierra al mismo tiempo?

      13 ¿Usaría Dios más de una organización para dispensar sus verdades en estos “últimos días”? Bueno, ¿ha usado Dios alguna vez más de una durante cualquier otro período de juicio? En el día de Noé, ¿hubo otras embarcaciones con gente en ellas, aparte del arca de Noé, que tuvieran la protección de Dios y sobrevivieran el diluvio? No, sólo el arca y sus ocupantes sobrevivieron. (1 Ped. 3:20) ¿Hubo dos organizaciones cristianas en el primer siglo? No, Dios trató con la única que había. Así, también, en nuestro día todavía hay “un Señor, una fe, un bautismo.” (Efe. 4:5) El hecho de que solamente podría haber una congregación unida se deriva claramente de las palabras de Pablo en el sentido de que “todos hablen de acuerdo, y . . . no haya divisiones entre ustedes.”—1 Cor. 1:10.

      “POR SUS FRUTOS”

      14. ¿Cómo puede uno determinar quién realmente tiene la verdad hoy?

      14 ¿Cómo podemos determinar quién realmente tiene la verdad hoy día, y quiénes así satisfacen los requisitos para que Dios los utilice como sus testigos en la Tierra? Un principio fundamental que sirve para determinar lo que es verdadero y lo que es falso lo estipuló Jesús cuando dijo: “Por sus frutos los reconocerán. . . . Todo árbol bueno produce fruto excelente, pero todo árbol podrido produce fruto inservible.” (Mat. 7:16, 17) Sí, tendría que haber “fruto,” o evidencia de que el poderoso espíritu santo de Dios estuviera realmente apoyando a este pueblo. ¿Y qué clase de fruto produciría ese poder de Dios en sus siervos? Su Palabra responde: “El fruto del espíritu es: amor, gozo, paz, gran paciencia, benignidad, bondad, fe, apacibilidad, gobierno de uno mismo.”—Gál. 5:22, 23.

      15. ¿De qué manera está conectado el amor a Dios con su nombre?

      15 Note, especialmente, el “fruto” que se alista primero, el de amor. Una manera en que los verdaderos siervos de Dios tienen que manifestar esto es como Jesús declaró: “Tienes que amar a Jehová tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma y con toda tu mente.” (Mat. 22:37) El amor a Dios se muestra de varias maneras. Una de estas maneras es amando el nombre de Dios. (Heb. 6:10; Sal. 69:36; 119:132) Ciertamente los cristianos a quienes se saca de este mundo deben llegar a ser “un pueblo para su nombre.” (Hech. 15:14-18) ¿Quiénes son los que ponen en alto el nombre de Dios (Jehová, en español) y lo dan a conocer por toda la Tierra?—Isa. 43:10-12.

      16. ¿Cómo se despliega amor a Dios con relación a los intereses del Reino?

      16 El amor a Dios también significaría creer en su gobierno entrante para toda la Tierra, su Reino celestial, y hablar acerca de él. Jesús nos enseñó a orar: “Venga tu reino. Efectúese tu voluntad, como en el cielo, también sobre la tierra.” (Mat. 6:9, 10) ¿Quiénes entre la humanidad hoy día hacen que el reino de Dios sea la doctrina central de su enseñanza y predicación como lo hizo Jesús? ¿Quiénes visitan a la gente en sus hogares para decirles lo que el reino de Dios logrará en la Tierra? ¿Quiénes cumplen la comisión que Jesús mencionó cuando predijo: “Estas buenas nuevas del reino se predicarán en toda la tierra habitada para testimonio a todas las naciones; y entonces vendrá el fin”?—Mat. 24:14.

      17. ¿De qué otra manera se manifiesta el amor a Dios?

      17 El amor a Dios se manifiesta también de otra manera... por medio de obedecer todas sus leyes. (1 Juan 5:3) Cuando hay un conflicto entre las leyes de Dios y las leyes de los hombres, la regla bíblica para los que verdaderamente tienen la verdad es: “Tenemos que obedecer a Dios como gobernante más bien que a los hombres.” (Hech. 5:29) Solo los que hacen esto consiguen el apoyo del “espíritu santo, el cual Dios ha dado a los que le obedecen como gobernante.” (Hech. 5:32) Por ejemplo, al obedecer las leyes de Dios los cristianos de hoy “no son parte del mundo,” pues son neutrales en los asuntos políticos del mundo, como lo fueron Jesús y los cristianos del primer siglo. (Luc. 4:5-8; Juan 6:15; 15:19; 17:14-16) ¿Quiénes son los que en nuestro día se mantienen separados del mundo y su corrupción política, violencia e inmoralidad, y están dispuestos hasta a experimentar aprisionamiento o muerte por seguir en los pasos de Jesús?—1 Ped. 2:21; vea también el capítulo 13 de Hebreos.

      18. Dé otra clara marca de identificación de los que en realidad tienen la verdad.

      18 Hay otro aspecto de este “fruto” del espíritu, el amor. Jesús dijo: “En esto todos conocerán que ustedes son mis discípulos, si tienen amor entre ustedes mismos.” (Juan 13:35) Muchos otros textos bíblicos muestran también que ese amor sería una marca que identificaría claramente a los siervos verdaderos de Dios. Por ejemplo:

      “Los hijos de Dios y los hijos del Diablo se hacen evidentes por este hecho: Todo el que no obra justicia no se origina de Dios, tampoco el que no ama a su hermano. . . . debemos tener amor los unos para con los otros; no como Caín, que se originó del inicuo y mató atrozmente a su hermano.”—1 Juan 3:10-12.

      “Si alguno hace la declaración: ‘Yo amo a Dios,’ y sin embargo está odiando a su hermano, es mentiroso. Porque el que no ama a su hermano, a quien ha visto, no puede estar amando a Dios, a quien no ha visto.”—1 Juan 4:20, 21.

      ¿Qué grupo internacional de personas demuestra esta clase de amor entre sí, no solo por palabras, sino por obras? Durante el siglo pasado, ¿qué grupo se ha abstenido, en tiempos de guerra, de matar atrozmente a compañeros de creencia de otras naciones, y de permitir que los prejuicios raciales, nacionalistas, culturales o económicos los separen?

      ¿QUIÉNES, REALMENTE, TIENEN LA VERDAD HOY?

      19. ¿Quiénes, realmente, tienen la verdad hoy, y por qué diría usted eso?

      19 ¿Qué muestra la evidencia acerca de este fruto vital del espíritu de Dios, el amor? ¿Quiénes cumplen con este requisito? ¿Dónde ve usted una gran muchedumbre de personas de todas las diferentes nacionalidades y razas que esté unida en el nombre de Jehová para servirle lealmente y hablar a otras personas acerca de su reino? Sí, ¿dónde encontramos una verdadera hermandad mundial enlazada por el amor? (Rev. 7:9, 10; Col. 3:14) La publicación religiosa Interpretation, en un capítulo intitulado “La Biblia y las religiones modernas, los testigos de Jehová,” declara lo siguiente:

      “En su organización y obra de testificar, ellos [los testigos de Jehová] se acercan cuanto pudiera acercarse un grupo a lo que era la comunidad cristiana primitiva.

      “Su separación del mundo, urgencia en testificar, e insensibilidad ante los ataques del mundo son como los que les vienen a los que firmemente creen que están entre los elegidos y los que han dado su lealtad sin reservas a Dios.

      “Pocos grupos aparte de ellos usan tan extensamente la Escritura en sus mensajes, tanto orales como escritos. Pocos grupos aparte de ellos consiguen de lo que llamamos los legos la cantidad de servicio que ellos obtienen con relación a promover y ejecutar la obra de la organización.”

      20. ¿Qué deben hacer todas las personas que aman la verdad?

      20 El investigar imparcialmente la Palabra de Dios y compararla con las enseñanzas y prácticas de los testigos de Jehová suministra la prueba de que el espíritu de Dios ciertamente los está apoyando, y de que Dios los está usando como instrumento suyo para proclamar la verdad hoy día. Sin embargo, a toda persona que ama la verdad se le invita a examinar esta alegación de que los testigos de Jehová realmente tienen la verdad. Al hacer eso, esas personas deben imitar lo que hicieron los individuos del primer siglo que prestaron atención a la predicación de los apóstoles: “Recibieron la palabra con suma prontitud de ánimo, examinando con cuidado las Escrituras diariamente en cuanto a si estas cosas eran así.”—Hech. 17:11.

  • Cómo Jehová guía a su pueblo
    La Atalaya 1979 | 1 de julio
    • Cómo Jehová guía a su pueblo

      “Porque este Dios es nuestro Dios hasta tiempo indefinido, aun para siempre. Él mismo nos guiará hasta que muramos.”—Sal. 48:14

      1. ¿Cómo muestra la Biblia que Jehová guía a los que lo aman?

      A TRAVÉS de los siglos, Jehová ha guiado a los que lo aman y desean servirle. El salmista fue una de estas personas, porque pidió a Dios: “Envía tu luz y tu verdad. Que estas mismas me guíen.” (Sal. 43:3) El profeta Daniel sabía que “existe un Dios en los cielos que es un Revelador de secretos,” y predijo que en nuestro tiempo, este “tiempo del fin,” “el verdadero conocimiento se hará abundante.” (Dan. 2:28; 12:4) Isaías también profetizó que en esta “parte final de los días” la adoración verdadera ‘llegaría a estar firmemente establecida’ y que Jehová guiaría a su pueblo: “Él nos instruirá acerca de sus caminos, y ciertamente andaremos en sus sendas.” Así, la invitación que se extiende a la gente hoy día es: “Vengan y andemos en la luz de Jehová.”—Isa. 2:2-5.

      2. ¿Qué toma en consideración Jehová cuando guía a su pueblo en sus verdades?

      2 ¿Cómo, precisamente, guía Jehová a su pueblo en sus verdades? Entre otras cosas, toma en cuenta que él creó a los humanos con libre albedrío. Por eso, el apóstol Pablo tomó en consideración la “propia voluntad” o libre albedrío de Filemón. (File. 14) Puesto que Dios creó este libre albedrío, esta voluntad propia libre, no va en contra de ella por medio de obligar a las personas a creer sus verdades o a obrar de cierta manera, como autómatas. Por eso, durante esta era cristiana él apela amorosamente a las personas de corazón justo para que vengan y se asocien con su organización aprobada, y entonces las guía gentilmente por medio de espíritu santo, su Palabra inspirada y su organización que dispensa la verdad en la Tierra.

      3. ¿Qué es especialmente importante que tengamos presente en cuanto a la manera en que Jehová guía a su pueblo?

      3 Otro punto que merece consideración respecto a la manera en que Dios guía a su pueblo es que Dios da el entendimiento de sus verdades a su propio tiempo y a su propia manera. (Dan. 12:9) Además, Jehová conduce a su pueblo progresivamente en la verdad. Jehová, quien creó la mente humana, sabe que muy poco “alimento” espiritual no la sostiene debidamente, pero que demasiado de ese alimento en un solo tiempo puede ser más de lo que los humanos pueden absorber. En Juan 16:12 Jesús dijo a sus fieles apóstoles: “Tengo muchas cosas que decirles todavía, pero ustedes no las pueden soportar ahora.” Vamos a ilustrarlo: Cuando alguien sale de una habitación oscura después de un largo período de encerramiento, lo mejor es que se le exponga a la luz gradualmente. El recibir demasiada luz muy de repente puede ser una experiencia sacudidora, quizás hasta perjudicial. Es similar la necesidad de que la iluminación con las verdades de Dios sea progresiva. Esto corresponde con lo que dice el sabio: “La senda de los honrados brilla como la aurora, se va esclareciendo hasta que es de día.”—Pro. 4:18, Nueva Biblia Española.

      4. (a) ¿Qué indicó Jesús en cuanto a que se necesite una clarificación progresiva de la verdad? (b) Debido a que las verdades de Jehová se clarifican gradualmente, ¿qué deben estar dispuestos a hacer sus siervos?

      4 Jesús sabía bien que el camino que Jehová seguía era el de aclarar sus verdades progresivamente. Dijo a sus apóstoles que más tarde el espíritu santo de Dios los guiaría a toda la verdad. (Juan 16:12, 13) Y debido a que habría una clarificación gradual de verdades previamente establecidas, habría la necesidad correspondiente de que los siervos de Dios corrigieran y ajustaran su punto de vista sobre varios asuntos bíblicos con el transcurso del tiempo.

      GUÍA EN CUANTO A VERDADES DEL REINO

      5, 6. Respecto al reino de Dios, ¿qué muestra que los discípulos de Jesús tuvieron puntos de vista incorrectos?

      5 Al guiar a los cristianos del primer siglo, Jehová no les aclaró en un solo momento todas las verdades relacionadas con sus propósitos. Como ejemplo de esto, considere la doctrina central de la Biblia, la del reino de Dios. Jesús enseñó a sus seguidores a orar: “Venga tu reino.” (Mat. 6:10) Instó: “Sigan, pues, buscando primero el reino y Su justicia.” (Mat. 6:33) Pero durante aquellos años en que estuvo en la Tierra, ¿entendieron sus seguidores todos los detalles acerca de la gobernación del Reino? ¿Podían contestar con exactitud preguntas acerca de ella, como: ¿Qué es el reino de Dios? ¿Quiénes gobernarán en él, y cuántos gobernantes habrá? ¿Cuándo vendrá? ¿Qué hará para la Tierra y para los humanos?

      6 El hecho de que los que hablaron con Jesús no tenían todo este conocimiento se manifiesta por la pregunta que le hicieron después de su resurrección: “Señor, ¿estás restaurando el reino a Israel en este tiempo?” (Hech. 1:6) En vez de contestar por medio de hablarles acerca de todo aspecto de la gobernación del Reino, Jesús declaró: “No les pertenece a ustedes adquirir el conocimiento de los tiempos o sazones que el Padre ha colocado en su propia jurisdicción.” (Hech. 1:7) ¿Por qué se encargó Jesús de este asunto así? Porque los discípulos tenían puntos de vista bien arraigados, pero erróneos, acerca del Reino. Creían que el Reino sería una gobernación terrestre que derribaría la dominación romana. Pero la verdad era que el Reino sería celestial, y que los que fueran escogidos para gobernar con Cristo serían llevados de la Tierra al cielo. (Rev. 5:9, 10; 14:3; 20:4) Además, la pregunta de ellos muestra que esperaban que el Reino hubiera de establecerse inmediatamente. Pero no sería así, porque, en vez de eso, pasarían muchos siglos.

      7. (a) A pesar de los puntos de vista incorrectos de aquellos discípulos acerca del Reino, ¿cuál fue la actitud de Jesús para con ellos? (b) ¿Entendemos todo cuanto hay que entender acerca de la gobernación del Reino de Dios?

      7 Aunque sus discípulos tenían puntos de vista incorrectos, Jesús no los condenó ni los rechazó. Sabía que irían adquiriendo entendimiento de las verdades de Dios gradualmente, y que espíritu santo guiaría progresivamente a sus seguidores de modo que tuvieran entendimiento claro al tiempo debido. Al cabo tendrían conocimiento completo acerca de la gobernación del Reino. Pero, mientras tanto, Jesús inculcó en aquellos primeros seguidores un interés y celo profundo en buscar el Reino primero, y la disposición de hacer ajustes en sus puntos de vista acerca del Reino. Así, aunque estaban limitados en conocimiento exacto acerca de las verdades del Reino, lo que sí sabían les permitía, mientras esperaban, ‘tener muy presente la presencia del día de Jehová.’ (2 Ped. 3:12) Hoy, nuestro conocimiento de la gobernación del Reino, lo que es y lo que logrará, es mucho más adelantado, pero todavía no está enteramente completo.

      VERDADES ACERCA DE LOS GENTILES

      8. ¿Qué problema hubo con relación a los gentiles? ¿Se presentó siquiera este problema en el Pentecostés?

      8 Otra cuestión que demuestra que el entendimiento de la verdad de Dios es progresivo tiene que ver con cómo, desde 36 E.C. en adelante, algunos judíos que se habían convertido al cristianismo consideraban a los conversos no judíos, o gentiles. Por ejemplo, ¿debería circuncidárseles, como se circuncidaba a los judíos naturales? ¿Fue siquiera presentado este asunto en 33 E.C. cuando el espíritu santo de Dios fue derramado en el Pentecostés? (Hech. 2:1-4) No, porque aunque ese derramamiento estableció que Dios estaba con aquellos discípulos y desde entonces en adelante los guiaría, no les impartió milagrosamente conocimiento acerca de todo detalle de las verdades de Dios. Esto se puede ver por el hecho de que la cuestión de la circuncisión no fue presentada en decretos sobre los cuales hubieran decidido los apóstoles y ancianos que estaban en Jerusalén sino hasta 16 años después del Pentecostés, en el año 49 E.C.—Hech. 16:4.

      9-11. (a) Después de haber seguido la guía de Jehová por años, ¿por qué estuvieron sus siervos mejor capacitados para encargarse de un programa que tuvo que ver con la circuncisión? (b) ¿Cómo contribuyó la visión que se le dio a Pedro a que éste se ajustara al entendimiento apropiado de la verdad?

      9 Durante todos aquellos años Jehová permitió que su pueblo experimentara la manera en que él de hecho estaba tratando con los gentiles. De esta manera, se profundizó en ellos el aprecio y entendimiento del asunto. Así, cuando surgió una cuestión que exigió acción decisiva, sus siervos habían llegado a estar bien equipados para encargarse de ella con sabiduría y perspicacia. Tome, por ejemplo, el ajuste que tuvo que hacer Pedro en su punto de vista. Más de tres años después del Pentecostés, el apóstol Pedro fue guiado por espíritu santo para corregir su punto de vista sobre los gentiles, a quienes había considerado contaminados, inmundos.

      10 En una visión, a Pedro se le dijo que comiera alimentos que se consideraban inmundos bajo la ley mosaica. Cuando, sorprendido, él respondió que no comía aquellos alimentos, una voz del cielo le dijo que lo que Dios llama limpio ya no puede ser considerado inmundo. Y en aquel mismo momento vinieron mensajeros del gentil Cornelio. Cornelio los había enviado para que le pidieran a Pedro que viniera a su hogar para hablarle acerca de los propósitos de Dios. ¡Pero Pedro acababa de expresar horror con relación a comer alimentos inmundos, y ahora se le estaba pidiendo que entrara en el hogar de un gentil, a quien también consideraba inmundo! ¿Qué debería hacer? Espíritu santo dirigió la respuesta: “Levántate, pues, baja y vete con ellos, no dudando nada, porque yo los he despachado.”—Hech. 10:9-20.

      11 Pedro comprendió. La visión acerca de que Jehová limpiara algo que anteriormente se consideraba inmundo no era solo sobre alimento, sino también, y esto era más importante, sobre la actitud de Pedro para con los gentiles. Pedro, evidenciando que había entendido, más tarde dijo a Cornelio y su casa: “Por lo tanto vine, verdaderamente sin oponerme, cuando se me mandó llamar.” Entonces el espíritu santo fue derramado sobre aquella familia gentil, y fueron bautizados. Espíritu santo había mostrado que Dios ahora favorecería a los gentiles sin que estuvieran circuncisos.—Hech. 10:21-48.

      12. (a) ¿Qué otro problema surgió respecto a los gentiles, y cuándo? (b) ¿Con qué como base podía el cuerpo central dar una respuesta decisiva?

      12 Sin embargo, ¿satisfizo esto a todos los judíos cristianizados respecto a los gentiles? No, porque pasaron otros 13 años, y unos judíos circuncisos que vinieron a Antioquía, Siria, presentaron una cuestión en cuanto a si los gentiles tenían que ser circuncidados o no. (Hech. 15:1, 2) Por eso, en el año 49 E.C. se hicieron arreglos para una reunión con el cuerpo central de los apóstoles y otros ancianos en Jerusalén. En aquella reunión, Pedro, Pablo y Bernabé relataron lo que Dios había logrado entre los gentiles incircuncisos a quienes ellos habían predicado. Después de haber examinado la manera en que Jehová de hecho había tratado con estos gentiles por muchos años, ellos confirmaron unánimemente el testimonio de las Santas Escrituras, y fortalecieron la verdad de que no había que circuncidar a los gentiles.

      13. ¿Cómo mostraron algunos falta de aprecio a la manera en que Jehová guía a su pueblo, y probablemente con qué resultado?

      13 No todos los seguidores de Cristo estaban dispuestos a corregir puntos de vista anticuados. Algunos usaban las clarificaciones como excusa para abandonar la verdad, en vez de verlas como evidencia de que Jehová guiaba progresivamente a su pueblo. Por ejemplo, cuando Jesús introdujo la ilustración acerca de comer simbólicamente su carne y beber su sangre, el registro bíblico declara que, “debido a esto muchos de sus discípulos se fueron a las cosas de atrás y ya no andaban con él.” (Juan 6:53-66) ¡Cuán falto de perspicacia fue hacer aquello! ¡Que falta de aprecio en cuanto a la manera en que Jehová conduce a su pueblo! Es probable que 38 años después esto les costara mucho a algunos de ellos, puesto que no hay duda de que los que no hubieran continuado andando en armonía con el entendimiento progresivo de la verdad probablemente habrían rechazado las instrucciones de Jesús de huir de Jerusalén antes de que fuera destruida. Eso les debe haber costado la vida, mientras que los que continuaron dejando que Jehová los guiara huyeron y se salvaron.—Luc. 21:20-24.

      GUÍA EN NUESTRO DÍA

      14. ¿Hasta qué grado ha sido corregido nuestro punto de vista sobre verdades básicas durante el siglo pasado?

      14 Cuando contemplamos lo que la organización de Jehová ha estado publicando a través de las páginas de La Atalaya y otras publicaciones durante este siglo que acaba de pasar, encontramos una abundancia de alimento espiritual sano. A principios de este período de tiempo, se aclararon verdades bíblicas fundamentales, y permanecen claras hasta este día. Nuestro punto de vista sobre el infierno, la Trinidad, el purgatorio, el alma, dónde están los muertos, el rescate, la resurrección, el destino de la Tierra, el Reino y otras doctrinas claves ha cambiado muy poco durante 100 años. La verdad siempre ha sido la verdad, aunque, a veces, nuestro entendimiento de ella ha exigido ajuste.—Compare con Juan 16:13.

      15. ¿Ha habido necesidad de que los siervos actuales de Jehová hagan ajustes en sus puntos de vista?

      15 Jehová ha seguido guiando a su pueblo paso por paso a un aprecio más pleno de sus verdades, y esto a su propio tiempo y a su propia manera. Debido a esto, los testigos de Jehová desde los tiempos más tempranos en el siglo que acaba de pasar han entendido que deberían estar dispuestos a modificar y corregir sus puntos de vista sobre doctrina, práctica y procedimiento relacionado con organización cuando se hiciera claro que el espíritu de Jehová los dirigía hacia esos ajustes. Como reconoció Bryan Wilson en la revista New Society (Nueva sociedad), los testigos de Jehová “siempre han sostenido que el estudio continuo de la Biblia pudiera llevar a conocimiento más pleno, y en ocasiones anteriores han admitido que han cometido errores en la interpretación de la profecía.”

      16. (a) ¿Por qué es el campo de la profecía bíblica un campo con relación al cual se requiere particularmente tener la disposición de reajustar los puntos de vista? (b) ¿Cómo han respondido los siervos de Jehová a la información acerca de los “últimos días,” y cómo se les ha apoyado?

      16 Quizás el campo en el cual realmente se necesita disposición para el reajuste es el campo de la profecía bíblica. La mayoría de las profecías se dan solamente en bosquejo general. Por lo tanto, se requiere fe para esperar el desenvolvimiento de los detalles. (Heb. 11:1) Un ejemplo de esto tiene que ver con las profecías bíblicas que muestran que el inicuo sistema actual bajo Satanás será destruido y reemplazado por “nuevos cielos y una nueva tierra.” (2 Ped. 3:13) Sin embargo, en la Biblia se dan suficientes aspectos de la “señal” general del fin inminente como para que el tiempo actual quede señalado con claridad como los “últimos días,” “el tiempo del fin.” (2 Tim. 3:1; Dan. 12:4) Esto ha incitado a los siervos de Dios a intensificar la obra de cumplir las palabras de Jesús: “Estas buenas nuevas del Reino se predicarán en toda la tierra habitada para testimonio a todas las naciones; y entonces vendrá el fin.” (Mat. 24:14) Han tenido éxito en hacer esto y en sobrevivir como organización, además de prosperar espiritualmente a pesar de enorme persecución, y lo mismo ha sucedido en cuanto a ponerse y desplegar la nueva personalidad en este mundo degradado. Todo esto es testimonio del hecho de que Jehová ciertamente los ha apoyado.—Isa. 54:17.

      17. ¿Significa el que nuestras propias expectativas prematuras no se cumplan que Jehová ha cambiado sus propósitos?

      17 Sin embargo, durante estos “últimos días,” ¿han tenido de antemano puntos de vista erróneos acerca del fin o telos (griego) de este sistema algunos siervos de Jehová? Sí, los han tenido. Algunos de estos puntos de vista tienen que ver con cuánto tiempo pasaría antes de que llegara el fin. Por celo y entusiasmo por la vindicación del nombre, la Palabra y los propósitos de Jehová, y por el deseo de un nuevo sistema, algunos de sus siervos a veces han esperado ver la realización de ciertas cosas antes del debido tiempo para ellas. Esto se asemeja al punto de vista que tenían los discípulos en cuanto a la inminencia del reino de Dios en el día de ellos. (Hech. 1:6) Pero ¿significa el que a veces las expectativas hayan sido prematuras y, por lo tanto, no se hayan cumplido, que Dios de alguna manera ha cambiado de propósito? De ninguna manera. “Mi propio consejo subsistirá, y todo lo que es mi deleite haré,” dice Jehová. (Isa. 46:10) Por eso, tanto los propósitos como el tiempo que Jehová ha determinado para establecer un nuevo orden justo están firmemente fijados.

      18. ¿Por qué es importante no pasar de “las cosas que están escritas”?

      18 Esto ciertamente graba en nosotros el hecho de que es necesario pesar cuidadosamente todos los factores bíblicos y no dar énfasis a algunos hasta el punto de eclipsar otros. Como Jesús mismo lo declaró tan diáfanamente: “Respecto a aquel día y hora nadie sabe.” (Mat. 24:36) Siempre es necesario prestar atención estricta al consejo del apóstol Pablo de “no ir más allá de las cosas que están escritas.”—1 Cor. 4:6.

      19. Aunque ha habido reajuste de puntos de vista, ¿cómo confirma la evidencia que este sistema terminará pronto?

      19 Aunque muchos testigos de Jehová han tenido que ajustar sus puntos de vista con relación a este asunto, ¿podemos negar que estamos en el “tiempo del fin”? Ciertamente la evidencia del fin inminente de este sistema aumenta día tras día, a medida que vemos la desintegración, cada vez más profunda, de instituciones como el matrimonio, la familia, el gobierno y la religión mundana, así como un incremento en el delito y la violencia, y cada vez mayor falta de respeto a Dios.—2 Tim. 3:1-5.

      20, 21. ¿Cómo se recompensará a los que continúen andando a la luz progresiva que da Jehová?

      20 Aunque a estos “últimos días” todavía les queda un tiempo de duración indeterminada, una cosa es cierta. Los que continúan andando bajo la luz que procede de Jehová, una luz que sigue adelantando, y están dispuestos a ser reajustados, serán parte del resto ungido y de la “grande muchedumbre” que ‘sale de la grande tribulación’ y entra en el justo nuevo orden de Dios. “El Cordero que está en medio del trono, los pastoreará [a la grande muchedumbre], y los guiará a fuentes de aguas de vida. Y Dios limpiará toda lágrima de sus ojos.”—2 Ped. 3:14, 15; Rev. 7:9-17.

      21 Así, los que acudan a Jehová por guía pueden esperar con confianza el establecimiento de un nuevo sistema en el cual “los justos mismos poseerán la tierra, y residirán para siempre sobre ella.” Allí, “el inicuo ya no será.” Pero en su lugar, los mansos y enseñables “hallarán su deleite exquisito en la abundancia de paz.”—Sal. 37:10, 11, 29.

      22. ¿Qué confianza pueden tener los siervos de Jehová ahora y con relación al futuro?

      22 Por eso, como ha sucedido durante los pasados 100 años en el caso de la organización moderna del pueblo de Jehová, nosotros hoy confiamos en que también durante lo que queda de estos últimos días sucederá que ‘Dios será nuestro Dios hasta tiempo indefinido, aun para siempre. Él mismo nos guiará hasta que muramos.’ (Sal. 48:14) Y entonces, en su nuevo orden, podemos con igual confianza esperar que Jehová continúe guiando a sus siervos durante toda la eternidad, sin que ellos tengan que morir en absoluto, porque “el que hace la voluntad de Dios permanece para siempre.”—1 Juan 2:17.

      “[Echen] sobre él toda su inquietud, porque él se interesa por ustedes.”—1 Ped. 5:7.

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