La Biblia, la guía de Dios para todo el mundo
1 Se han impreso unos cuatro mil millones de Biblias en más de dos mil cien lenguas y dialectos, lo que significa que la Palabra de Dios está a disposición de más del 90% de los habitantes de la Tierra; con todo y con eso, el mundo tiene hambre “de oír las palabras de Jehová”. (Amós 8:11.) Muchos que tienen la Biblia no la leen o no entienden su contenido. ¿Cómo podemos motivarlos para que la usen como una guía práctica en su vida?
2 En diciembre presentaremos el libro La Biblia... ¿la Palabra de Dios, o palabra del hombre? A quienes se interesen podemos ofrecer asimismo la versión de las Escrituras que nos ha beneficiado en los pasados treinta y cuatro años, a saber, la Traducción del Nuevo Mundo, ilustrando con ejemplos el lenguaje moderno y claro que emplea. (Véase el libro “Toda Escritura”, página 328, párrafo 6.) Demostraremos el gran aprecio que sentimos por esta dádiva de Jehová ayudando entusiásticamente a otros a que acepten la Biblia como la guía de Dios para todo el mundo.
3 Puede comenzar una presentación con el tratado “Por qué puede usted confiar en la Biblia”, diciendo:
◼ “A pesar de que la Biblia está al alcance del 90% de los habitantes de la Tierra, pocos tienen el hábito de leerla. ¿A qué cree que se deba esto?” Lea los dos primeros párrafos del tratado, así como 2 Timoteo 3:16. Ofrezca el libro La Palabra de Dios. Si el amo de casa lo acepta, mencione el sistema de donativos; si no, exhórtelo a continuar con la lectura del tratado. Destaque el último subtítulo: “Sus predicciones sobre el futuro”.
4 Al volver a visitar a quienes aceptaron el tratado “Por qué puede usted confiar en la Biblia”, puede intentar lo siguiente:
◼ Después de volver a presentarse, lea los últimos dos párrafos del tratado. Pregunte al amo de casa si alguna vez ha considerado la posibilidad de vivir eternamente en la Tierra. Cuando él responda, diga: “Los testigos de Jehová estamos seguros de que todas las profecías de la Biblia se cumplirán, entre ellas las que predicen un futuro espléndido para todos los que cumplan los requisitos de Dios”. Muestre la lámina de la página 13 del folleto Exige, remítase a la lección 5 y sugiera analizar las respuestas a las preguntas que se plantean, comenzando así un estudio.
5 En territorios donde la gente es religiosa, puede tratar la siguiente introducción:
◼ “Estamos fomentando el aprecio por la Biblia. ¿Ha notado que aunque muchas familias tienen una Biblia, rara vez la consultan cuando tienen graves problemas? [Deje que responda.] Quizás piensen que está pasada de moda. Este libro, titulado La Biblia... ¿la Palabra de Dios, o palabra del hombre?, suministra prueba convincente de que la Biblia es científicamente exacta y ofrece soluciones prácticas a los problemas acuciantes de hoy día.” Resalte algunos puntos del capítulo 8 o del 12, y entonces ofrézcalo.
6 Al volver a visitar a alguien que haya aceptado el libro “La Palabra de Dios”, puede decir:
◼ “La vez pasada hablamos de que la Biblia ayuda a resolver los problemas complejos de la actualidad. A las personas que la han aceptado como la Palabra de Dios, también les ha ayudado a gozar de mayor felicidad y satisfacción en la vida. Me gustaría mostrarle uno de los prácticos principios bíblicos que se explica en el libro que le dejé.” Analice uno de los principios bíblicos que se encuentran en los párrafos 3 a 6 del capítulo 12, y concluya leyendo el párrafo 7. Si hay interés, ofrezca un estudio ya sea con el libro Conocimiento o con el folleto Exige.
7 La siguiente presentación puede interesar a las personas mayores:
◼ “En tiempos pasados se leía la Biblia en casi todos los hogares y las familias vivían de acuerdo con sus principios. ¿Fue así en su familia? [Deje que responda.] Hoy día parece que muchas familias están demasiado ocupadas para dedicar tiempo a la lectura de la Biblia o les parece que sus principios morales son anticuados. El capítulo 13 de este libro, titulado La Biblia... ¿la Palabra de Dios, o palabra del hombre?, refiere tres experiencias reales de personas cuyas vidas mejoraron después de estudiar la Biblia. Si desea saber cómo les ayudó el poder de la Palabra de Dios, tendré mucho gusto en dejárselo.”
8 En la siguiente visita, pudiera decir:
◼ “Cuando hablamos la vez pasada, estuvimos de acuerdo en que la sociedad actual hace caso omiso de los principios morales de la Biblia. ¿Debería preocuparnos esa indiferencia? [Deje que responda.] Jesucristo valoró mucho la adquisición del conocimiento bíblico.” Lea Juan 17:3 y luego el párrafo 5 del capítulo 1 del libro Conocimiento. Explique nuestro programa de estudios bíblicos gratuitos y ofrezca una demostración.
9 Pida a Jehová que bendiga todos sus esfuerzos por dirigir la atención de sus vecinos a la Biblia, la guía divina para todo el mundo.