“La máquina más extraordinaria”
“Una máquina que funciona con una extensa variedad de combustibles, que emite solo materiales recirculables o biodegradables, que acepta una amplia gama de información, que ejecuta sorprendentes hazañas de procesamiento de información y que produce una extensa variedad de funciones probablemente sea la máquina más extraordinaria”, dice Compressed Air Magazine. Esta revista atribuye la declaración a George Piotrowski, de la Universidad de Florida (E.U.A.), y pasa a decir: “Esta máquina es el cuerpo humano”.
Piotrowski sugiere que “los ingenieros apliquen a sus estrategias de diseño los principios y los aparatos biológicos del cuerpo humano”. Se pueden aprender buenas lecciones en cuanto a diseño para sostener peso al estudiar el cuerpo humano, el cual está “construido de eslabones diseñados de manera óptima y hechos de material compuesto que es resistente a la fatiga”. Todas las partes —los huesos, músculos, tendones y cartílagos— trabajan juntas para fortalecer todo el cuerpo.
Los diseñadores de cojinetes pueden aprender al estudiar las coyunturas humanas, las cuales normalmente no se desgastan, aunque sostienen una carga que es entre tres y diez veces más pesada que el cuerpo. Se pierde poca energía debido a fricción, la cual en algunas coyunturas es menor que la fricción producida al usar teflón. El tubo “hueco” del hueso humano es también un excelente ejemplo de diseño para sostener peso. Los extremos de los huesos más largos del cuerpo están hechos de hueso esponjoso y más flexible, lo cual ayuda a que el hueso resista golpes fuertes. Y la tensión que normalmente se produce cuando se unen dos partes desiguales es contrarrestada en el cuerpo mediante el cambio gradual de hueso a tendones donde éstas se unen.